Continúo la historia de mi vida pues ya cuento con la aprobación de todos los implicados en ella. Esta historia continúa la saga publicada en amor filial.

Les contaré como era la casa que compramos, pues es uno de nuestros mayores orgullos. Ya saben que es una casa grande, consta de tres plantas cuyos suelos son de mármol de Carrara

En la primera nada más entrar hay un gran recibidor, con dos puertas a la derecha Un comedor grande decorado al estilo neoclásico con una gran mesa central de roble macizo, dos grandes alacenas del mismo material a sus lados, un mueble bar esmaltado en una esquina una gran alfombra persa en la otra rodeada de dos sillones y dos sofás formando un cuadro. y una multitud de detalles más simbólicos que no voy a detallar. El comedor da a una terraza semicubierta con muebles de jardín y la piscina

A  la izquierda del recibidos hay una biblioteca con más de 5000 volúmenes de toda índole, pues somos grandes lectores y la aumentamos día a día. Y la biblioteca para tener más luz, en una de sus esquinas tiene un inmenso ventanal que da al jardín. Un jardín de ensueño, con una glorieta central, de la que salen caminos con bancos de piedra que llevan a estatuas, fuentes y surtidores una delicia para el alma.

En la segunda planta están las habitaciones 10 grandes habitaciones decoradas en diferentes estilos. Cuatro grandes cuartos de aseo con bañera tipo jacuzzi una gran ducha y bueno lo necesario para el aseo personal. Todo el tejado estaba cubierto por placas solares por lo que la luz , la calefacción y el aire acondicionado nos resultaba gratuita

La tercera planta cuenta con la buhardilla, los despachos y el taller de costura. Esta es nuestra casa espero que les guste tanto como a nosotros.

Les seguiré contando la historia. Tras la tremenda pelea con mi madre nos trasladamos a la casa, mis hermanas-novias y yo. Pronto nos dimos cuenta que el trabajo nos absorbía mucho tiempo, y si al acabar de trabajar debíamos ocuparnos de la casa no nos quedaba tiempo para follar; por lo que decidimos contratar a una persona para que se ocupase de ella. Pronto nos dimos cuenta que no podíamos contratar a una persona por horas, ya que para una casa tan grande no daban abasto, así que no nos quedó otro remedio que buscar a alguien interno. No era tan fácil como nosotros nos pensábamos, las mujeres de mediana edad no querían este trabajo porque no querían estar internas, porque querían cuidar también de su familia, cosa totalmente comprensible. Las chicas jóvenes eran un desastre a la hora de limpiar, si en su casa no lo hacían ¿como iban a saber hacerlo en casas ajenas? y la verdad no teníamos ni tiempo ni ganas de enseñarlas. Empezaba a ser desesperante.

Estando en esa búsqueda me llamó mi amigo Sergei, es un amigo de los que hay pocos, sentíamos una amistad mutua totalmente irrompible de las que duran para siempre y eso que provenimos de países y culturas distintas. Quería que quedásemos en un su bar para hablar. Tras las consabidas preguntas de cordialidad empezó a contarme lo que quería.

- Mira Apolo tengo un problema en casa bastante grave.

- Dime camarada. - le contesté yo.

-Pues veras ¿ te acuerdas de mi hermano Vasile?.

- Claro es tu hermano pequeño no?

- Si el pequeño de los cinco. Me confirmó.

- Que le pasa?. Pregunté.

- Pues verás no se como decírtelo. Nos ha confesado que le atraen los hombres.

- Que sea homosexual no es ningún problema. - Le comenté.

- No lo es para ti Apolo que tienes una mente más liberal, pero en mi país eso es una desviación y tanto mis padres como mis hermanos piensan que es un degenerado.

- Vaya pues si que es un problema.

- Peor aún temo por su integridad física ya que mis hermanos lo maltratarán físicamente.

La familia de Sergei son todos armarios con una fuerza impresionante, todos menos Sergei se dedican a la construcción. Pero Vasile no parecía de esa familia era alto pues medía mas o menos como yo 1,80 pero no tenía ni el tipo ni la musculatura de sus hermanos.

- Y en que puedo ayudarte hermano?

- Se que estáis buscando a alguien interno para que se dedique a las labores de la casa.

- Así es Sergei.

- Sabes que somos personas trabajadoras y Vasile no lo es menos, ¿podrías contratarlo?.

- Lo pondré a prueba quince días y si no sirve le daré asilo en nuestra casa.

- Gracias hermano esta misma tarde te lo mando, esto no lo olvidaré Apolo.

- Entre buenos amigos no se dan las gracias cuando se piden favores.- Le contesté.

Nos dimos un abrazo y nos despedimos hasta el próximo fin de semana que nos iríamos de farra.

Esa tarde llegó Vasile, traía un par de maletas viejas y una bolsa con sus pertenencias. Había cambiado considerablemente, ahora sus ademanes eran mucho más afeminados, curiosamente su voz no había madurado, parecía la de una mujer. Se estaba dejando el pelo largo ya le llegaba a los hombros, lo llevaba muy cuidado y al ser rubio destacaba aún más. A simple vista se notaba que llevaba el cuerpo completamente depilado las manos muy cuidadas al igual que su piel. A pesar de que ya tenía 19 años su cara aún parecía la de un adolescente. La verdad todo el nos llamó poderosamente la atención.

- Vasile te ha dicho tu hermano que estamos buscando?.

- Una chacha. - Contestó con una risa exagerada.

- Pues la verdad es que sí.- Le contestó María.

- Bien Marta te acompañará a tu habitación y cuando te instales baja y hablamos.

A la media hora de haber subido bajó con ropa más cómoda.

- Mira Vasile buscamos a alguien que se ocupe de la casa en conjunto, no solo limpiar, sino tanbien cocinar y cuidar el jardín ¿te ves capaz?.

- Limpiar no es problema lo hacía con mi madre en casa. Sabes que yo estaba en la cocina del bar de Sergei, así que cocinar tampoco y lo del jardín ya aprenderé. - Contestó.

- Nosotros te ofrecemos un contrato fijo, un sueldo de 1000 euros mensuales, comida casa y la ropa que necesites.- Le propuso Marta.

- ¿LA que yo quiera?.- Preguntó Vasile.

- Claro.- Le contesté yo extrañado por la pregunta y la mirada que hizo al formularla.

- Bueno hay un detalle más, somos nudistas y vamos por la casa en pelotas. ¿Tienes problemas con eso?- Le espetó María.

- Pues no y se desnudó delante nuestro, y nosotros hicimos lo mismo

Joder con el niño se gastaba una tranca en reposo de 16cm. Mis hermanas soltaron a la vez un grito de admiración.

- Podemos tocarla dijeron las dos a la vez.

- Claro porque no.- dijo Vasile.

Por mucho que manosearon y tocaron aquel tronco no se inmutó.

- Chicas que esa maravilla de polla no se altera con mujeres.- Les recordé yo.

- De ilusión también se vive no’ - dijo María.

- Ven acá que te voy a dar yo ilusión.

Me la cargué al hombro y la subí a nuestro cuarto. Mientras ella cogió mi polla y me la pajeaba a medida que subía las escaleras.

- Vasile esta es ahora tu casa también así que familiarízate con ella y nos vemos a la hora de cenar.- Le dijo Marta mientras nos seguía tocándome el culo.

Solté a María en la cama, estaba ya totalmente empalmado y le di un beso a Marta, metiéndole la lengua hasta la garganta. María mientras tanto empezó a mamármela muy despacito metiéndosela lentamente y sacándosela igualmente; con las manos me acariciaba los huevos muy despacio para que sintiese como me los sobaba cuando se metía la polla y los apretaba cuando la sacaba. Que placer; en ese momento empecé a apretarle a Marta sus pezones, la ponía a mil que lo hiciese, Soltó un grito de placer animal. Yo seguía besándole el cuello y acariciándole el culo. Su coño empezó a mojarse con ese maná celestial que soltaban los coños de mis hermanas gemelas. Saqué la polla de la boca de María tumbé a Marta en la cama y le lamí todo ese manjar que corría por su coño depilado. No tardó nada en correrse esa inmensa polla las había puesto a mil. Fijé mi atención en María tenía los pómulos de la cara rojos, eso le pasaba cuando la lujuria la poseía.

- No me comas el coño a mi me taladras directamente.- Me dijo con voz ronca por la excitación.

Le puse una almohada en los lumbares, me coloqué sus piernas en mis hombros y se la metí de un golpe muy profunda. Ella soltó un grito salvaje, yo volví a sacársela y a clavársela de la misma forma y volvió a soltar otro grito más fuerte que el anterior. Seguimos así unos diez minutos, Marta mientras le lamia y apretaba sus tetas, ella tuvo dos orgasmos y al tercero cayó rendida en la cama.

Marta se puso a cuatro patas y me dijo

- Corretee en mi coño

Marta era distinta le gustaba el sexo más sensual, a ella se la metí lentamente para que notase cada centímetro de mi polla entrarle. Cuando estaba dentro no se la podías sacar pues le gustaba tenerla dentro hasta que se corría. Y empezamos un mete-saca dulce que nos llevó a los dos a un orgasmo profundo y placentero.

Días después de que viniese Vasile se hizo imprescindible, la casa estaba limpia, como nunca, comíamos como dioses y el jardín lucía muy bien. Más o menos un mes después de esto volví a casa pronto porque nos habíamos dejado unas telas y me encontré a Vasile en el comedor con un vestido de María haciéndose una paja. Esa polla 20cm tenía seguro y que no fuese más además era muy gruesa, era un caballo el tío. Dejé que acabase la paja y al hacerlo descubrí algo asombroso su corrida fue monumental yo creía que estaba meando pero al fijarme bien vi que era blanco lo que le salía, además le salía un chorro continúo no como a los demás que nos sales a latigazos. Me empalmé de inmediato

- Vasile .- Le llamé

. - Perdón Apolo creía que estaba solo. - Dijo dando un salto al saberse descubierto.

- No pasa nada todos tenemos nuestras necesidades. ¿te gusta vestirte de mujer?

- Es más que eso , me siento mujer, querría ser mujer.

- Estás muy guapo con ese vestido.- Le dije.

- Te gusto.- Me dijo con una mirada de lascivia que no había visto en el aún.

- Me encantas.- Le contesté.

Me acerqué a el y le di un beso en los labios que le sorprendió. El segundo ya no le sorprendió tanto y al tercero me lo devolvió con ansia. Yo le subí el vestido y le lamí todo el ano, estaba tan cachondo que solo pensaba en metérsela por ese culo travesti. El empezó a gemir como una loca y cuando lo noté listo, le metí la polla de un solo golpe. Por ese culo ya había entrado algo pues entró muy fácilmente. Era la primera vez que follaba a un hombre, y no me gustan los hombres, pero Vasile era más mujer que hombre. Follamos en esa posición 5 minutos pues estábamos tan calientes que nos corrimos pronto.

- Ahora tengo prisa pero esta tarde hablaremos de este nuevo descubrimiento.

Llegada la noche hablamos los cuatro de lo que había pasado y Vasile nos confirmó que se sentía mujer y quería serlo. Marta tenía un amigo psiquiatra especializado en estos caso y acompañó a Vasile a verlo.

En dos sesiones confirmó que era una mujer en un cuerpo de hombre y le dio un tratamiento hormonal. Esa misma noche hicimos un ritual.

- Vasile estas preparado.- Le dije yo con voz ceremoniosa.

-Si Apolo.

- Sacerdotisa María pásame el agua sagrada.

- Sacerdote Apolo aquí tiene el Cava sagrado

-Con este agua sagrada yo el Sacerdote Apolo limpio tu cuerpo de hombre.- Le dije mientras le vertía encima la botella de cava entera.

- Sacerdotisa Marta pásame el agua convertidora.

- Aquí tienes el Champán Sacerdote Apolo.

- Con este agua sagrada te convierto en mujer a partir cuando te levantes ya no serás Vasile sino Eva.

Y Eva se levantó empalmada como nunca.

- Trae los ungüentos sagrados María

Y María trajo un bote de vaselina que le unté por todo su culo. De un solo empujón le metí mi polla  entera y gritó como la nena que era yo empecé un mete-saca continuo y le indiqué a María que se pusiese bajo Eva y esta le metió su pollón de un empuje Gritó diciendo que la estaba llenando como nunca nadie lo había hecho y al acabar de entrársela se corrió y se desmayó . Le tocó después a Marta que le pasó lo mismo . Y Cuando Marta se desmayó yo me corrí. Al oír mis gemidos de satisfacción se volvieron a despertar justo para sentir la corrida de Eva que las cubrió por completo de semen.

Desde ese momento Eva entró en nuestra manada y no volvió a salir de ella.