miprimita.com

Cambios 6

en Hetero: Infidelidad

Al siguiente día, como los últimos sábados en la casa ya desde temprano trabajaban los viejos que durante toda la esperaban este día para poder ver la suculenta figura de la mujer más bella de esa casa. No cabían en la espera de verla caminando aunque  sea, verla hacer ejercicio porque solía vestirse tan ligera o compartir la mesa con esa mujer; ya hacía una semana desde que la habían visto y desde ese entonces ni rastros de ella pero sabían que estaba.

Rodrigo muy relajado se ocupaba con su computadora, escuchaba música y bebía un poco de café en el estudio. Eran poco menos de las once de la mañana. Sandra se preparaba para su cita ; desde hace rato que ya se había bañado y secado , ahora solo terminaba de vestirse y darse los pequeños toques de maquillaje y accesorios, así como lo hacía cada mañana antes de ir al consultorio aunque ahora lo hacía con más calma. Se había vestido con unos jeans de mezclilla de un un clasico color azul lo que hacia la diferencia era quien portaba esos ajustados jeans. Marcaba sus delineadas curvas traseras , sus pantorrillas , sus firmes piernas, de frente marcaban ese punto que llevaba a una deseada intimidad. Sus caderas que se meneaban con gran ritmo al andar de esa mujer gracias a las zapatillas blancas que habia decidido portar . Llevaba una blusa blanca que marcaba su vientre plano y dejaba libre la clara piel de su cuello , brazos y por su puesto esa zona superior de sus pechos donde se marcaban ese zurco y las redondas formas de sus amamantables melones .

Perfumada y lista solo agarro su bolso y se despidio de su esposo que ya sabia de la cita de su esposa, se lo habia platicado desde ese dia anterior y no vio ninguna objecion para evitarle que fuera pues veia que era parte del trabajo y no pensaba mucho mas , aunque si se habia ofrecido a acompañarla pero pues como ella le hizo saber que era mera rutina pues no lo vio necesario. Rodrigo no insistio porque tenia todavia tenia trabajo que hacer  y no le apetecia manejar.    

Sandra tomo el auto y se enruto a San Antonio. Sin contratiempos , minutos despues ya estaba alli , busco donde estacionar el auto , cosa que no le costo mucho trabajo , se dirigio al lugar de la cita , en el hotel "San Antonio" que contaba con un restaurante que quizas era el mas comodo y refinado de la ciudad pues la mayoria de los establecimientos de comida eran comedores o fondas, en cambio este era un lugar que aunque pequeño era ameno para un rato agradable. No diviso al doctor y asumio que no llegaba todavia pues al ver su delgado y dorado reloj en su muñeca derecha, notó que aun estaba a tiempo . Se oia musica con volumen un poco alto, enseguida que entro fue recibida por un señor que era el mesero y la llevo a sentarse en una de las mesas, este sin despegar la mirada de su hermosa figura que a proposito le incitaba a que ella tomara la delantera para que este le pudiese ver el trasero. Aprovecho a deleitarse mas cuando le invito a tomar asiento y en su gesto tomo la silla para que ella se acomodara y el de espaldas y mirando hacia abajo podia ver con mas claridad ese par de esferas carnosas y el encaje del brassier que las sujetaba debajo de esa ligera blusa. Incluso se enbobaba queriendole hacer platica preguntando su nombre y a quien esperaba al tiempo que Sansra respondia ese timido interrogatorio hasta que ella misma tuvo que pedir agua para beber. Ya eran casi las doce y media y el doctor no aparecia . En ese tiempo aprovecho para ir al tocador y arreglarse si es que lo necesitaba. Escasos minutos despues alli se hallaba el tipo un poco cansado y se notaba en esas manchas humedas en la parte de las axilas de su camisa pues ese dia si que hacia calor .

 

-Buenas tardes -dijo el hombre con una voz seria y grave y que buscaba saludar a esa mujer con un beso en la mejilla y que impactado la veia sin pudor.       

 

-Buenas tardes doctor -contesto el saludo Sandra con el respectivo beso

 

-Disculpe la tardanza pero el trabajo...usted sabe

 

-No se preocupe, lo entiendo perfectamente doctor

 

-Digame Raymundo o Ray es mas comodo ¿La puedo llamar Sandra verdad?

 

-Si por supuesto , si usted lo desea

 

-Claro que si Sandra... el calor esta terrible pero supongo que ya se acostumbro

 

-Si ya de apoco durante estos meses me he acostumbrado a este impredecible clima , no es como en la ciudad que casi siempre es calido

 

-Si lo se, oiga ¿ya ordeno?

 

-No

 

-Entonces permitame ...hey ! -dijo mientras llamaba la atencion del mesero y este les traia las respectivas cartas

 

Ordenaron, despues ya comian y posteriormente de un rato platicaban un poco mas de esto y de lo otro...

 

-Yo antes trabajaba alla en Las Villas , es de usted alla ¿cierto?

 

-Ajam -dijo mientras la bella mujer bebia un poco de agua -Asi es

 

-Y que hace tan lejos, se me hace tan extraño, se ve muy elegante para este lugar

 

-jeje pues mi marido es de aca de San Marcos y...

 

-Ah que es casada... -interrumpio esa voz grave -Si ya voy entendiendo osea que usted no queria venir o me equivoco

 

-Se equivoca , yo por supuesto que queria venir a vivir aqui, a mi me agradan este tipo de paisajes y climas

 

-¿Ah si? , mire nada mas , interesante...y pues que tiempo lleva casada    

 

-Cerca de cinco años nos casamos jovenes apenas que terminamos la carrera

 

-Casi nada de tiempo 'estan muy verdes' como se dice... ¿le molesta si fumo? -dijo el hombre que ya sacaba una cajetilla del bolsillo de su pantalon

 

-No -dijo no muy convencida pero tolerante

 

-Gusta un cigarillo

 

-No gracias no fumo

 

-Hace bien -dijo el hombre inhalando con intensidad aquel cigarrillo -Esto no es muy bueno

 

-Si no es bueno ¿Por que no lo deja?

 

-Me ocupare de eso despues -contesto con desinteres y continuo -Debo decirle que cuando la vi me sorprendio que fuera usted casada es muy joven no aparenta los años que dicen sus papeles, es usted realmente muy bella Sandra -menciono esto al tiempo que recorria su mirada desde sus ojos hasta sus pechos

 

-Gracias -respondio con una sonrisa nerviosa al sentir esa mirada 

 

-Debe de estar acostumbrada a que lo digan... sabe usted tiene unos aires de europea , de europa del este para ser mas exactos

 

-Jaja ¿en serio? eso honestamente no me lo habian dicho, pero si hay algo de eso con la familia de mi mama... -expreso con cortesia Sandra

 

-No se porque no se lo han dicho, ¿Alguna vez penso en ser modelo o le invitaron a serlo?

 

-No para nada, siempre me dedique de lleno a mis estudios y me apasione por la medi...

 

-¿No?, hubiera triunfado , puede triunfar es muy fotogenica...

 

-Gracias

 

-Aja pero bueno ya que ahora esta casada eso quizas le quite esa libertad de ser lo que usted puede ser    

 

-Ah bueno yo no lo veo asi pues mi espo...

 

-Creame los hombres somos celosos por naturaleza y si no es asi es porque la mujer no nos interesa -volvio a interrumpir el tipo -El matrimonio es un mar de ataduras por naturaleza, no nos permite probar otras cosas, estar con otras personas, al menos no sin romper esas barreras de la moral, de la fidelidad -dijo esto ultimo en un tono sugerente poniendo un poco incomoda a Sandra que empezaba a dudar y recordaba lo que le habia dicho Ofelia

 

-Yo no lo creo asi , creo que hay que alimentar el matrimonio dia a dia y podemos hacer cosas muchas cosas juntos

 

-Si por supuesto , juntos pero -sonrbio de su cigarrillo y agrego -que hay de usted, algo que disfrute para si misma

 

-Pero eso seria egoista

 

-¿Por que egoista? uno es sensible , su marido tiene sus gustos y usted los suyos

 

-Nosotros compartimos mucho de nuestros gustos... ¿usted se ha casado alguna vez? -pregunto la mujer tratando de saber porque pensaba asi          

 

-Tres veces

 

-¿Tres veces?

 

-Si tres y por ende tres divorcios asi que puedo decirle mucho al respecto...me case muy joven asi como usted, estaba entusiasmado y contento y no se que tanto mas... pero todo se lo llevo la fregada y valio un cacahuate... por lo mismo que yo le digo ...pero bueno cada cabeza es un mundo ¿El consejo que podria darle? Evite la maldita rutina , aventurese de vez en cuando, ¡Aventurese! y cuando le digo que se aventure hagalo de verdad, arriesguese...ah y no monotonize su intimidad, la intimidad es el climax de una relacion y una mala intimidad... -volvio a decirlo con esa casi sutil expresion de lujuria, encogiendo los hombros, estaba claro lo que queria expresar aunque no del todo para la mente innacesible a esos temas de la casada.    

 

-Gracias por el consejo doctor -contesto no muy convencida Sandra           

 

-En que quedamos... dime Raymundo, que no le de pena.    

 

-Ok Raymundo, y a todo esto pues me gustaria saber el motivo de la cita, bueno , usted me dijo que hablariamos respecto a los papeles...

 

-Fijese que estuve ocupado toda la mañana y mas tarde con todo esto de que estaba ocupado olvide la carpeta...

 

-Vaya y ¿no hay manera de que pueda ir ahorita por ellos?, yo puedo esperarlo aqui  -decepcionada dijo Sandra

 

-Lo haria con gusto pero en una debo salir a una de estas rancherias... y se me complican los tiempos, usted me comprende

 

-Si lo entiendo, ni modo

 

-Podemos vernos despues ¿no?

 

-Oh puede ir a mi consultorio el lunes y llevarme los papeles

 

-Si claro. Tratare de hacerlo . Paseme su numero en caso de que no pueda ir y asi le comunico que dia              

 

-Eeeh bueno , le paso el numero del consultorio o quizas ya lo tiene...

 

-No, su numero personal es mas comodo para mi asi le puedo llamar a cualquier hora porque usted sabe este trabajo es todo el tiempo, ademas, estamos entre amigos ¿No? Colegas si usted prefiere -dijo el tipo asumiendolo cuando para Sandra era relacion entre colegas

 

-hmmm...Ok -dijo un poco dubitativa -¿Tiene donde anotar? -continuo mientras le dictaba el orden de ese particular numero telefonico

 

-Bien. -dijo mientra guardaba el papel en una cartera -Un dia de estos le llamo.

 

-Ok

 

-Asi que no se preocupe Sandra y por cierto estuvo rica la comida, mas con su compania y no me va a negar que pasamos un rato agradable -dijo dibujando una sonrisa de satisfaccion sin apartar la lujuria que expresaban sus ojos cuando recorrian la piel que mostraban los senos de la joven

 

-Si, creo que asi fue -dijo Sandra que no sabia como ocultar sus pechos de esa insistente mirada -bueno ya debo retirarme ya es tarde y... -dijo ella que ya queria salir de la situacion sabiendo que no habia mucho que hacer en ese momento

 

-Por supuesto ...joven! La cuenta...

 

Dicho esto terminaron de ocupar esa mesa con un agradecimiento al mesero de parte de Sandra no asi de ese hombre que poco le importaban las cortesias. Se dirigieron a sus autos no sin antes el señor apurara ese saludo que lo hacia con mucho gusto no tanto para Sandra pues el hombre lo hacia con rudeza y el contacto con la mejilla de ese hombre le incomodaba por los punsantes bellos de esa gruesa y dispersa mal cortada barba. Quizas no hubiese hecho mucho caso a esto si el tipo no hubiera mostrado esa actitud en aquella comida . La comida, es decir, la cita para Sandra habia sido en general amena pues hace mucho tiempo que no salia asi con alguien, tambien porque se apartaba de casa. Aunque tambien noto rara aquella conversacion y la actitud de aquel doctor pero no lo penso de mas por el momento. Asi despues, tarde, retorno a casa esperando no encontrarse con los trabajadores.

 

Con menos nervios Sandra  paso  aquella semana sin contratiempos ni nada por el estilo. Seguia evitando a esos hombrea ahora con menos premura y sensaciones de culpa . Fue un dia viernes. Rodrigo y su esposa estaban ya en casa descanzando en la sala y de pronto Sandra se levanto para ir por un poco de agua; se lo hubiese pedido a Lulu pero queria hacerlo ella misma. Estaba ahi sirviendose un poco de jugo cuando entro de repente don Fidencio que aun no se retiraba ni el ni sus compañeros aunque ya estaban por hacerlo.

 

-Don!! -asustada dijo Sandra que volteo pues no habia escuchado el ruido al entrar de ese hombre que se habia puesto una camisa mas limpia sobre las ropas muy sucias que traia por debajo

 

-Perdoneme, no fue mi intencion asustarla

 

-No se preocupe jeje -sonrio nerviosa

 

-Ehh bueno queria hablar con su esposo, no se si se podra y este en casa

 

-Ah si...este...si esta , enseguida le digo

 

-Esta bien, gracias seño Sandra, lo espero aca afuera entons

 

Ella entro de inmediato , su corazon latia punzante y acelerado , respiro para tomar calma y decirle a su esposo lo que don Fidencio. Rodrigo con calma salio a ver de que se trataba . De pronto Sandra escucho la fuerte voz de su esposo que le llamaba.

 

-Sandy ! Sandy ! Amor ven!

 

Ella al no saber de que se trataba empezo a pensar de que podria ser algo malo pero como no era alguien que no asumiese sus responsabilidades salio a ver para que la llamaba su esposo. Llego al lugar ; de fondo Martin y Gil acomodaban sus cosas en sus mochilas, don Fidencio y su esposo estaban parados frente a frente, sonrientes al parecer no habia nada de que preocuparse por lo que se acerco aliviada junto a su marido.

-Si dime amor, que sucede -dijo que se acercaba abrazando a su marido

 

-Mira aqui don Fidencio , nos esta invitando a una fiesta   

 

-¿Ah si?

 

-Si seño le platicaba aqui a su esposo que si nos haria el favor de acompañarnos , es el bautizo de la pequeña nieta de mi hermano            

 

-Ahh ok ajam

 

-Si pos pa' que se distraigan un rato y vayan conociendo la costumbres de aca

 

-Tu que dices amor -pregunto Sandra a su marido

 

-Animese va a ser un rato namas

 

-Anda podemos pasarla bien corazon, yo si quiero ir hace mucho que no vamos a una fieata -volvio a decirle a su esposo que tenia ese rostro de indesicion pues lo conocia y a el no le gustaban mucho ese tipo de fiestas

 

-Si animese patron , la fiesta aunque sencilla y humilde pero si va pos va a  divertirse

 

-Y no habra algun problema , lo digo porque no nos invitaron personalmente y todo eso.

 

-No se preocupe, ps si van conmigo, ademas toy buen seguro que estaran contentos con su visita

 

-Anda di que si -insistio Sandra

 

-De acuerdo, de acuerdo... iremos miamor

 

-Eso es amor -dandole un beso a su esposo y preguntó -¿Y cuando es la fiesta?

 

-El sabado seño Sandra, por eso le decia aqui al patron que nos diera chance de faltar el sabado porque vamos a ir aca todos y pos no queremos ir todos cansadones

 

-¿Y tu que les has dicho? -pregunto la bella mujer a Rodrigo

 

-Yo ya les di permiso eh

 

-Que bien...y ¿en donde va a ser la fiesta?

 

-Ah mire, va a ser aca delantito aca en Barrio San Jose, esta cerquita como a veinte minutos eso si vamos a pie pero podemos  esperar  una camioneta y ahi nos vamos todos el Gil,  su sobrina , el Martin y yo y ustedes que le parece

 

-No, en ese caso yo los llevo con el auto. Solo vengan para aca y nos vamos -intervino Rodrigo     

 

-¿En serio patron?

 

-Si por supuesto. No me cuesta nada.

 

-Siendo asi ps gracias patron. Ustedes son a todo dar.

 

-De nada de nada...y a que hora es la fiesta

 

-Va a empezar la misa y eso a las tres pero lo mero bueno va a ser en la tardecita patron , nosotros pensabamos lanzarnos alla como a eso de las cinco y media de la tarde

 

-Ah bueno entonces pues venganse cuando sea conveniente aca los esperamos y nos vamos      

 

-Claro que si patron, muchas gracias

 

-Entonces va a ser bautizo?   

 

-Si señito, va a ver como se va a divertir

 

-Entonces debo de comprar un regalo, que edad tiene la futura bautizada jeje -dijo la bella mujer con esos ojos de curiosidad

 

-No se preocupe por el regalo, si nomas queremos que nos acompañen...

 

-Insisto, me sentiria mal si no llevo algo

 

-Bueno, mi sobrina tiene tres añitos apenas

 

-Ahh que peque, gracias     

 

-A ustedes patrones, ps ya nos vamos y otra vez gracias por la chancesita y por acompañarnos       

 

-De nada y hasta mañana señores -dijo Rodrigo para ya despedir a esos hombres

 

-Hasta mañana patrones ...

 

Asi llego entonces el dia sabado, aquel dia de la dichosa fiesta. Este plan de invitar a la pareja habia surgido dias antes , el domingo precisamente cuando estos viejos se reunian. En aquel domingo conversaban de otras cosas y de repente surgio un comentario sobre la casada y porque estaba distante que llevo a otro sobre la casada hasta que el astuto Fidencio intervino.

 

-Miren el sabado hay fiesta con mi hermano el Chencho , ustedes saben que me invito

 

-¿Y eso a mi que? -exclamo Martin

 

-Ps pendejo escucha y luego hablas

 

-Oh pues esta bien , di que pedo

 

-Mira, miren. Pienso invitar a esa fiesta a la mamasita de Sandra

 

-¿Y tu y ella nomas o que? -intervino Gil

 

-No cabron, escucha , ademas ustedes tambien van o no?

 

-No ps eso si

 

-Ahi sta cabron , ahora chequen. Si invito a la mamasita a la fiesta podemos enborracharla de a poquito , con mas yerbitas y ya flojita pues todita pa'nosotros

 

-Cabron, esta de poca madre tu pinche plan -dijo emocionado Vicente

 

-Fide y ...que onda con su marido, no creo que la deje ir solita asi nomas o que -intevino el viejo Gil

 

-Eso mismo ya pense y mira, invitamos a ese tambien y tambien en la fiesta lo apendejamos con chelas y otras yerbitas que conozco y ahi lo dejamos al pendejo mientras nosotros nos llevamos a su puta vieja a un cuartito que tiene mi carnal y nos la chingamos...que les parece

 

-Cabron, tu ya dijiste pinche viejo nomas tu di que hay que hacer -dijo Martin

 

-Nada cabron, yo me encargo de invitarlos y convencerlos, no creo que me digan que no...ustedes nomas guarden energias, vayanse bañaditos porque vamos a tener una rica fiestesita el sabado jajaja

 

-Jajajaja -rieron anunisonos

 

Reian todos con ese gusto maquiavelico , de esperanza y lujuria en el rostro , todos menos Ernesto que escuchaba atento la platica aunque pareciera que ni siquiera estuviese presente,  cosa que a ellos poco les importaba . No veia nada bien la actitud ni los planes hacia ese matrimonio asi que enojado intervino :

 

-Hey hey...shh , ¿No creen que es de mala gente hacer lo que 'tan ustedes haciendo? ¿Eh?!

 

-Oye pendejo ¿Tas enojado porque no te he invitado? ¿Pos si ya dije que tu tambien? -dijo Fidencio que no era del todo cierto pues queria a la casada para el solito y si tenia que compartirla lo haria con el otro par pero de Ernesto ni hablar pues nunca habia simpatizado tan bien con el y iba de a menos desde hace poco tiempo. Asi que conociendolo sabia que no iria a la fiesta pues su mujer no se lo permitiria y pensaba que en dado caso asistiera, buscaria como dejarlo tan borracho que ni supiera en que pais estaba.   

 

-A mi no me importa si me invitas o no a esa fiesta,  pero no se vale que hagan esas pendejadas, no corresponden

 

-A ver a ver, no me salgas con esas pendejadas porque bien que andabas de caliente con ella cuando llego hasta le veias las nalgotas a ver cabron...  

 

-No pos, pos, pos si , pero no es lo mismo    

-Como que no es lo mismo eh

 

-Ps no porque eso que estan queriendo hacer, eso son fregaderas porque ellos han sido rebuenagente con ustedes...

 

-Y eso que pendejo, esa mamita calienta y ademas pues lo que vamos a hacer es ps darle puro cariño a esa damita jajaja a poco no cabrones!

 

-Jajaja si cabron, eso merito vamos a hacer -intervino otro

 

-No Fidencio, estas muy mal, ademas ya estas tan viejo como yo y sabes que ya estas grande para esas pendejadas -volvio a decir de manera seria Ernesto

 

-Ps por eso pendejo, yo que pierdo yo ya estoy viejo y una oportunidad como estas para cuando a ver...hay que vivir pendejo, que tal que me muero mañana

 

-Pos mas para mi jajaja -Dijo Martin

 

-Jajaja -rieron los otros

 

-No cabron -insistia moviendo con negacion la cabeza -Tas bien mal

 

-El que esta mal ha de ser tu pinche pito , ya ni se te ha de parar pendejo jaja -intervino Martin -Por eso ha de decir estas pendejadas este puto jajaja

 

-Jajaja -reian todos

 

-Deja eso cabron, le pega su vieja jajajajaja -dijo burlonamente don Gil

 

-Rianse ,siganse riendo nomas piensen si en lugar de doña Sandra fuera su esposa , sus hijas , su hermana o su madre

 

-Afortunadamente yo no tengo ningna de esas , ni hijas , ni hermana ...no tengo madre jajaja -expreso Martin con burla hacia Ernesto

 

-Jajajaja -reian una vez mas todos ahi contra Ernesto

 

-Saben que, dejemos a este pendejo y sus pinches mamadas de buena gente

 

Terminaron por marchase y seguir platicando en otro sitio con mas calma dejando a Ernesto con ese mar de inquietudes pues el mismo volvia a insistir en lo mal que era todo este asunto y empezaba a pensar en que lo mejor tal vez seria ir a contarle a la mujer, a ese objeto.de deseo, todos estas locas ideas de sus compañeros o bueno tal vez ya ni lo eran.

 

Ahora, volviendo al sabado, desde temprano se preparaban en la casa de los Rivera Lujan para ir a esa fiesta. Buscaban atuendos indicados para la misma asi como ir a comprar el regalo que querian llevar. Todo estaba practicamente listo pero a eso de las doce de la mañana pocomas, Rodrigo recibio una inesperada llamada . La atendio y terminando se dibujo una expresion de disgusto en su rostro.

 

-Que sucede amor ¿quien era? -cuestiono su esposa

 

-Es de la prepa

 

-Y que querian te veo preocupado

 

-Es que tenemos reunion a las seis

 

-Cuando ¿Hoy?

 

-Si -respondio Rodrigo rascandose la nuca

 

-No , no puede ser, ¿Por que hoy? les hubieras dicho que era imposible ir o algo...

 

-Lo hice pero fueron muy insistentes, son los del sindicato, al parecer planean hacer una especie de huelga ...que fastidio  -expreso con cierto enojo Rodrigo que aunque muchas ganas no tenia de asistir a la fiesta , lo que menos queria era ir hasta San Antonio

 

-Entonces lo de la fiesta queda cancelado -dijo Sandra con un ceño de decepcion y disgusto muy tierno

 

-Pues creo, aunque, mira si quieres puedes ir tu amor, yo los voy a dejar como quedamos , creo que me da tiempo

 

-¿A que hora tienes que estar o ir?

 

-A las seis

 

-¿Tan tarde?

 

-Pues si

 

-No quiero ir asi , me sentiria sola

 

-Va a ir Lulu tambien asi no te sentirias sola

 

-Pero no es lo mismo yo quiero ir contigo

 

-Mira te prometo que atiendo lo que deba atender y me voy directo a la fiesta que te parece, te vi muy entusiasmada con esta invitacion y no quiero que heches a perder tus planes por estos inconvenientes amor

 

-Mmm... -con un puchero se mostraba Sandra sentada al lado de su esposo -No se, ¿De verdad que no puedes faltar a esa reunion tuya?

 

-Lo haria pero asi es este sistema, pues ves que ya me habian avisado que pasaria esto pero no me dijeron para cuando....es una lastima que sea justo hoy

 

-Pues que te digo, -rechinaba la boca -ya tendremos otra ocasion ¿verdad? -dijo Sandra mientras se sentaba en las piernas de su marido y abrazaba su cuello

 

-Si amor , eso si, te prometo que te lo compensare . Pero mi propuesta ahi esta eh, tu puedes ir si quieres...

 

-No amor, yo solamente contigo -lo dijo al tiempo que besaba y reia con su esposo

 

De repente, mas tarde Lulu vino por orden de su tio que a su vez era presionado por Fidencio para ver a la pareja y confirmar mas que nada a que hora tenian que venir y eso, fue entonces que le confirmaron eso si que Rodrigo los llevaria pero advirtio que Sandra no lo iba a hacer sin darle muchas razones al respecto. Tan pronto  Lulu  regreso y  dejo el recado a su tio y a Fidencio que se encontraba en la casa del albañil,  este ultimo alertado y de prisa se puso en marcha para saber porque de la razon de la desistencia de Sandra  y  tambien para hacer la luchita de convencerla a como diera lugar y llevarla a la fiesta pero era ahora y no mas tarde, no podian echar aperder su plan, pues obviamente sin ella no habia ningun plan.

Minutos fue los que tardo despues de la aparicion de Lulu, agitado tocaba la puerta y fue la misma Sandra quien le abrio.

-Buenas tardes señito Sandra -dijo calmando su agitacion         

 

-Buenas tardes don Fide que sucede, lo veo alterado -dijo la casada que al verlo ningun sentimiento que le habia generado aquella ocasion cuando habia posado el supuesto vestido de su hija, ahora era como antes.

 

-No, no es nada, es por la subida nomas

 

-Ah bueno, digame entonces que se le ofrece      

 

-Ah pos usted disculpe pero pos...

 

-Quien es amor -interrumpio Rodrigo que se acercaba a la puerta

 

-Es don Fidencio

 

-Que tal don Fidencio como le va

 

-Muy bien patron aqui nomas visitandole un rato pues

 

-Pase entonces...

 

-No, nomas aqui afuerita

 

-Pase y asi platicamos le parece 

 

Y asi entraron para acomodarse en los sillones de la sala.

 

-Si pues, este, es que pos ahorita estaba ahorita en casa de don Gil para preguntar a que hora nos veniamos y todo eso -nervioso explicaba aquel hombre

 

-Aja -expreso Rodrigo      

 

-Y pos ahi nos dijo Lulu pos que siempre no iba su esposa y pos como pos ya habiamos quedado en ir todos  y pos como yo los invite...

 

-No, mire es que sucede que voy a tener una reunion en la tarde justamente a la hora de la fiesta pero respecto a mi ofrecimiento de llevarlos no he cambiado de opinion, al rato los llevare no se preocupen por eso

 

-Gracias señor y su esposa no va ir pos aunque sea con nosotros?

 

-No pues ella no...pues queriamos ir juntos usted sabe

 

-No quiere ir sola pues

 

-Si algo asi  -dijo Rodrigo mientras miraba tiernamente a su mujer asintiendo a aquel comenrario

 

-Si pero pos igual si queda pos va estar sola, y alla la va a pasar en la fiesta con nosotros.. con Lulu y pos ahi se va a divertir uste -animaba el viejo a Sandra mientras la miraba

 

-De hecho eso justo le decia, animate amor ademas como te dije si salgo temprano los alcanzo al cabo que la fiesta acaba en la noche ¿no?

 

-Nooo'mbre... hasta que uno quiera

 

-Ves, seguro podre llegar a tiempo aunque sea para poder bailar un poco, hace mucho que no lo hacemos y todo eso eh que dices miamor -insistia Rodrigo que pareciese se hubiese puesto de acuerdo con don Fidencio para ayudar a convencerla        

 

-Animese seño, esto es de vez en cuando... aunque pos humilde la fiesta pero de corazon y pos se anima bien bonito -apeló al lado de compasion de aquella mujer, un punto debil de ella.

 

-Ok , de acuerdo, me han terminado por convencer, pero me prometes que iras lo mas temprano que puedas ¿ok? -finalmente convencida y animada Sandra

 

-Te lo prometo miamor -le constesto a su esposa al tiempo que le propinaba un beso en sus labios ante la mirada celosa del viejo aunque tambien estaba mas que contento de haberla convencido.

 

-decia para sus adentros y prefirio interrumpir las miraditas que elloa se daban -Que bueno que se animo ya vera que se la va a pasar a todo dar

 

-Gracias eso espero jajaja -bromeo la mujer

 

-Jajaja ya vera... bueno pos yo me paso a retirar y entons como quedamos la vez pasada ¿no patron?

 

-Seguro, aqui los espero ...

 

-Ta bueno pues patron, hasta al rato... hasta al rato patrona

 

-Hasta al rato don...         

 

El viejo salio de aquella casa constrastante a como habia llegado. Ahora una fea sonrisa de satisfaccion se le dibujaba en la cara , se sobaba las manos entendiendo que que plan viento en popa.

 

Pasaron las horas y llego justo el tiempo al que habian acordado . Aquellos , ansiosos y a prisa y puntuales , es mas querian llegar mucho antes y se acercaban a la casa donde los esperaban. Rodrigo se preparaba para ir a dicha reunion, revisaba su vehiculo pero antes iria a dejar a los que les habia prometido hacerlo.

Llegaron ahi, la tarde era de lo mas tranquila y calida; llegaban con lo mejor que podian vestirse pues igual estaban entre parientes y gente conocida, casi nadie se fijaba en esos pobres atuendos. Solo estaban tres hombres, era evidente que no venia Ernesto quizas por esos conflictos. Iban  acompañados por la jovencita, sobrina de uno de estos que los seguia de lejos. 

 

Lulu un vestido que alguna vez le habia regalado Sandra, de aquellos que ya nunca uso porque le quedo chico, era uno de color amarillo muy lindo y colorido. Martin que al parecer era de esos unicos dias en los que solia usar el agua para lavar su desaseado cuerpo, arreaba su escaso cabello hacia un lado de cabeza, usaba un pantalon cafe obscuro remendado brevemente en la rodilla izquierda, con un dobladillo por las bastillas , una ancha camisa de cuadros que le quedaba grande y se la metia por el pantalon, apretando su cintura con un viejo cinturon que tenia una evilla rota y esta repuesta con cinta de aislar. Tambien usaba unos guaraches que dejaban ver una vez mas las uñas gruesas y descuidadas de sus dedos que parecian limpios, unos guaraches bien conservados de piel de cerdo ,que al parecer usaba para eventos especiales.

Fidencio por su parte, usaba un sombrero cafe claro bien conservado, un pantalon negro de vestir que aunque viejo estaba hasta planchado, una guayabera color azul cielo y unas sandalias de cuero.

Don Gil con una camisa blanca bien metida por ese pantalon azul marino que al parecer no lo usaba mucho por lo bien conservado de este y unos zapatos negros con una plataforma alta.

 

-Buenas tardes patron -saludo Fidencio a Rodrigo al tenerlo a la vista pues estaba afuera con su auto

 

-Buenas don, ¿ya?

 

-Pos ya listos listos

 

-Que bueno...buenas tardes -saludo a Martin... buenas don Gil

 

-Buenas tardes -respondian los otros

 

-Buenas tardes Lulu, te ves muy guapa hoy jeje

 

-Gracias don Rodrigo -hablo una muy sonrojada Lulu

 

-¿Y ustedes ya listos patron? -intervino Fidencio

 

-Si ya, bueno, falta que venga Sandra pero se esta arreglando todavia asi que pasen mientras ahora nos vamos

 

-Aqui nomas patron no creo que tarde

 

-Quien sabe, ya ve como son las mujeres jeje -repuso Rodrigo

 

-Jajaja -rieron anunisonos

 

-¿Puedo subir a verla don Rodrigo ? -pregunto Lulu

 

-Si por supuesto pasa -respondio y de inmediato salio Lulu para adentrarse y buscar a Sandra      

 

Se quedaron platicando cosa de unos cinco o diez minutos sentados y esperando en la sala aquellos hombres, Rodrigo salia y entraba , hasta que salio a la vista bajando los escalones una deslumbrante  Sandra, Lulu que la acompañaba pasaba a muy segundo plano ante la preciosura de la casada:  un toqueteo ligero de maquillaje para apenas resaltar sus ya de por si conquistantes facciones de su esplendoroso rostro, resaltando sus alegres ojitos cafes y esos devoradores labios color fuego. Un cabello brillante, sedoso en exacto acomodo, ni un pelo fuera de lugar de ese peinado que se sujetaba de un finisimo accesorio por detras de su pelo, dejando libre su dominable y liso cuello.

Y que decir de su vestuario, un corto vestido para la vista pues aunque este comenzaba muy ligeramente arriba de sus rodillas , lograba terminar por ese escote que discreto se mostraba pero sin duda ahi estaba y era imposible no verlo. Un vestido vintage, algo asi como de diseño un pin up swing, parecido para cóctel con un diseño de lunares blancos en sobre el color azul marino, y un volado de diseño con corazones muy discretos. En la cintura un circuito de pantalon que seguia de largo para amarrarse un muy coqueto moño por la parte de adelante orientado al lado derecho. Tambien se acompañaba con unos zapatos estiletes completamente negros de tacon alto como de unos once centimetros, de revestimiento artesanal , quizas sintetico, estrechos , de punta aun mas estrecha , de hueca hacia fuera al empiene. Estos escondian casi plenamente sus pies pero marcaban unas suaves pantorrillas , y levantaba esa parte trasera de su anatomia. Un insinuante aspecto, uno del que pretendian tomar y provecharlo, acariciarlo y a ver que mas. Sandra no reparaba en razones para ser victima de esos ajenos deseos.

 

-Buenas tardes -saludo la casada a los que sentados esperaban en la sala

 

-Buenas señito -de inmediato y muy atento respondio el saludo quitandose el sombrero don Fidencio que a diferencia de los otros trataba de guardar la cordura

 

-Buenas tardes -respondieron poniendose de pie los otros mas que embobados y mirando lo que podian

 

-¿Han visto a mi esposo? -pregunto Sandra

 

-Creo que esta alla afuera

 

-Gracias, creo que ya nos vamos...voy a buscarlo...con permiso -se retiro ella sin decir mas ni esperar a que le dijeran esos halagos que seguro recibiria

 

-Pase pase -dijo Fidencio mirandole esa suculenta parte trasera de esa mujer que salia muy lentamente haciendo resonar el taconeo de sus zapatos

 

Lulu tambien salio y en la sala los viejos seguian comentando con todos esos adjetivos y palabras soeces refiriendose a lo espectacularmente que se veia su patrona. En fin, pasaron los minutos y Rodrigo avisaba que ya se debian ir. Subieron todos a ese auto, Sandra y Rodrigo obviamente adelante y los demas estaban atras. Y se fueron directo a la casa donde seria la fiesta que durante el trayecto ahi platicaban muy divertidos hasta que llegaron por un camino de terraceria que practicamente llegaba a la ya mencionada casa. Rodrigo se despidio de Sandra a pesar de que Fidencio lo invito a pasar aunque fuera por un rato pero el decia que practicamente lo tenia justo y que no podia perder mas tiempo pero que vendria mas tarde. Al cabo de un rato solamente quedaron ahi el par de mujeres y el trio de señores a la puerta de la casa. Entraron todos juntos, obviamente primero las damas.

El sitio era rustico, pero muy vivaz; estaba enlonado, en un patio grande de tierra estaban dustribuidas las mesas ahi medio alineadas, con manteles blancos, y adornos con flores, servilleteros y canastas. Las sillas  que  eran algunas de metal otras de plastico, estaban frente a las mesas. El lugar estaba adornado por todos lados con tiras, serpentinas y globos de color blanco. Al fondo estaba la mesa principal, por asi decirlo, y frente a esta una pequeña y no muy elevada tarima de madera donde tomaria lugar el grupo musical que tocaria mas tarde y que por lo pronto solo estaban unas grandisimas bocinas que desprendian musica muy tropical y cumbiambera.

Ya habia una buena cantidad de personas aunque seguian arribando, al parecer ya practicamente estaban todos. Los invitados, los padrinos, compadres y esos amigos que nunca faltan los que iban bien vestidos, bien presentados se hallaban sentados frente a las mesas aunque otros solo platicaban y todo lo demas. La mayoria de los señores sobretodo los mayores en edad era praticamente el mismo atuendo de camisa color claro, el sombrero blanco y guaraches y las mujeres de esas edades, con esos coloridos vestidos tipicos de aquellos lugares.

Los niños que traen ya sucias las ropas se correteaban de un lado a otro entre risas y jugueteos. Hasta el fondo del lugar se veia salir el humo que generaban los fogones donde se preparaba la comida. Ahi estaban muchas mujeres con sus mandiles de tela ocupadas, atareadas aunque tambien riendo. En fin entre platicas, carcajadas, gritos, la musica, todo era el bullicio tipico de una fiesta de pueblo.

Al ingresar Sandra todos se le quedaron viendo con total curiosidad y asombro. Las mujeres un tanto celosas de su belleza o quizas admiradas de la misma elegancia con la que se portaba. Pero particularmente los hombres y con total razon, la miraban con asombro pero con pizcas de lujuria, de deseo, de atraccion instantanea y mas cuando ella mostraba esa fina sonrisa. Ella admiraba ese espacioso lugar, pero los demas a ella.

 

-Buenas tardes, buenas tardes -saludaron directamente a la mujer

 

Era don Ricardo, el padre del anfitrion de la fiesta y hermano de don Fidencio, muy parecido a el salvo que era poco mas bajito de estatura, poco mas joven, tambien un poco mas moreno, poco mas gordo y bonachon. El estaba en eso de recibir a algunos invitados pero apenas habia visto a Sandra y se lanzo para ir a recibirla.

 

-Pasele, pasele señorita -volvio a decir y estaba claro que le importaba poco los acompañantes de esta pues no dejaba de verla

 

-Gracias señor

 

-Buenas tardes Ricardo -intervino Fidencio al saludar a su hermano -Jejeje como, como vas

 

-Pos ahi la llevamos, pasale mano, pasenle... pasale Lulu -dijo sin tanta emocion para con ellos pues aun mantenia sus ojos para la otra dama

 

-Pos mira te presento aca a la señito Sandra

 

-Mucho gusto don Ricardo -saludo cordial Sandra

 

-El gusto nuestro, engalana nuestra humilde morada

 

-Pos la invite y pos supongo que no te vas amuinar por eso... -le dijo Fidencio a su hermano bajando un poco la voz

 

-Como crees Fidencio, hisciste bien... -respondio Ricardo e insistio - Y pos gracias señito pos por hacernos los honores de su prescencia jeje

 

-Jeje gracias a ustedes y pues la verdad que vengo muy contenta y todo, agradezo que nos reciba y osea tambien gracias aqui don Fide que me invito -con una sonrisa contesto Sandra

 

-Pos bienvenida y pasele a lo barrido jeje... miren sientense por aca -dijo mientras los conducia hacia una mesa muy bien ubicada por el centro del lugar

 

-Sientese sientese por favor -dijo don Ricardo ofreciendo la silla a la casada y que seguia de enpalagoso con ella

 

-Gracias don Ricardo

 

-Las que le adornan señito... ustedes tambien sientense... y pos les traigo unos refresquitos o una chelitas que les gusta

 

-Unas chelitas -apuro a decir Martin -De una vez aca pa todos ¿no? jeje

 

-Si -secundo Fidencio -Traite unas

 

-A mi algo de agua por ahora por favor -dijo Sandra

 

-Una chelita seño animese -animaba Fidencio a Sandra -Aproveche que es fiesta

 

-No, no, creo que mas tarde jeje

 

-Lo que usted guste y mande... pos vengo de volada ahorita traigo lo que me encargo -sentencio finalmente Ricardo

 

Se retiro de ahi para aparecer de nuevo tan solo unos instantes acompañado de un chamaco que traia una caja de carton, la de las cervezas.

 

-Aqui tiene señito... jeje su aguita

 

-Gracias y bueno traigo este regalito quisiera entregarselo a la festejada tengo entendido

 

-Ah si es el bautizo de mi nietecita...

mire pasele pa'ca venga se la voy a presentar

 

-Gracias -dijo la casada levantandose de su asiento para ser guiada por el muy entusiasmado don Ricardo -Compermiso, ahora vuelvo -prometia y se retiraba de sus acompañantes

 

-Ahi sirveles chamaco, atiende aca a mi hermano y este aca a los... los compadres jeje... ah, Lulu puedes ir a ver a tu tia creo que te necesita, sta ya 'dentro por favor hija -ordenaba el señor y apartandoles de 'su mujer' los dejaba ahi solos

 

Sandra con ese gran obsequio en mano iba acompañada de don Ricardo y este la presento con su hijo y su nuera y obviamente a la nena festejada. La casada saludo con cortesia a la pareja causandoles buena impresion conforme iban platicando de a poco dejando en claro su calidad como persona. Ahi estuvieron platicando un buen rato, despues Sandra fue invitada para que se quedaran en su mesa sobretodo bajo la insistencia de don Ricardo que pareciera se le fuese a perder si no la tenia cerca. Y ahi se quedo Sandra, en la mesa, por asi decirlo, principal, con los padrinos con los que tambien platicaba con mucha solvencia y armonia, con la familia y don Ricardo que apuro para sentarse a su lado. Entre tanto mas alejados de esta mesa, estaban el trio de viejos malumorados, viendo en que momento regresaria con ellos Sandra. Al verla ya bien acomodada con los principales de la dichosa fiesta, estos aun mas se hundieron en su decepcion.

 

-¿No que ibamos a estar aca con esa mamasita? No chingues ya se nos fue con esos -reclamo Martin

 

-Ese pendejo de mi hermano, el pendejo bien que sabe y nomas porque esta en su casa...

 

-¿Y entons que? -inquirio don Gil

 

-Pos orita la saco porque la saco de ahi y me la traigo pa'ca, si por eso la invite, para nosotros

 

-Y que chigaos estas esperando

 

Una voz interrumpio la platica:

 

-¿Oiga tio si me ayuda a meter unas cosas que trajeron? -era un muchacho joven sobrino de Fidencio

 

-¿Que cosas?! -poquito malhumorado dijo

 

-Las del conjunto tio, pos es que acaban de llegar y...

 

-Ora pues, orita vamos...

 

Ahi, a regañadientes fueron a ayudar tambien platicando de que manera hacer para volver con la mujer. Pero al parecer todo dependia de la pobre habilidad de Fidencio que tampoco iba a ir a molestar a Sandra y sacarla de la mesa que ya ocupaba y mas si ya se sentia comoda porque a leguas se notaba pues se le veia interesada en su platica,  con cada sonrisa que repartia con los y las que le acompañaban, ni si quiera se molestaba en voltear a ver a aquellos que la habian traido a la fiesta.

Si no fuese tan bonita, si no supieran de esas diminutas posibilidades y del hecho de que la fiesta apenas comenzaba, ellos se hubiesen largado de ahi. Se entretuvieron un poco cargando y metiendo cajas, instrumentos, herramientas y cables insistiendo la mirada hacia donde estaba Sandra. Terminaron y de nuevo a su mesa, con nervios y ansias que tranquilizaban con cada sorbo de cerveza que le daban a esas obscuras botellas de vidrio.

El folklor de todo el ambiente iba en aumento. La musica seguia y seguia, los gritos de los infantes, mujeres dandose ordenes una a otras, sirvieron la comida y bebida, plato por plato y botella tras botella en cada mesa hasta que terminaron de servir a todos los presentes. Los tipicos ruidos al comer y las platicas diversas en cada mesa se escuchaban tambien.

El trio de viejos evitaban la sabrosa y caliente comida y tan solo bebian tratando.de asomar la vista a donde siempre pero las personas en las mesas bloqueaban el objeto de su vision.

Entonces transcurrio el tiempo, el atardecer desaparecia y los focos incandescentes hacian resplandecer sus luces artificiales por todo el lugar. Habian vasos llenos, mediovacios,  platos a medio comer todavia sobre algunas mesas, en fin, el desorden tipico de una fiesta era aparente. Sandra seguia en esa platica particular con los que conocia ahora de temas de interes comun, alguno  que  otro chisme y con los que se daba a conocer, contando pormenores recientes hasta detalles mas prolongados de su vida. Estaban encantados con ella hasta las mujeres que empezaban a dejar ciertos recelos y prejuicios previos.

 

-¿Y su marido? ¿Por que no vino? -inquirio alguna de las mujeres que estaban por ahi

 

-De hecho el iba, mejor dicho va a venir mas tarde, lo que pasa que tuvo una reunion -respondio a oidos de todos los que atentos la escuchaban

 

-El trabajo ¿Verdad?

 

 

El señor Ricardo, en tanto, simplemente no dejaba de mirarla y se acomodaba a cada rato para poder hacerlo de mejor manera, pretendia verle las piernas pero estaban ocultas tras el mantel de la misma mesa, esperaba que escapara algo mas de ese discreto escote de ese alto pecho, para el pues era mas bajito que ella.

En otra mesa ya se encontraba borracho Martin que si de por si para beber era un maratonista, con los nervios y desesperacion fue demasiado para el termino por enborracharse. Don Gil no estaba tan lejos pero aun tenia cierto nivel de juicio. Fidencio a pesar de advertirles a sus compadres de que debian estar mas atentos, estos simplemente hicieron solo reclamos, pero igual pensaba que al final de cuentas era mejor para el. El en tanto esperaba un momento preciso. En algun momento noto que ella ya no estaba en la mesa pues habia salido al baño y justo cuando pensaba en buscarla ella ya estaba de regreso a su sitio.

Y de repente comenzo a tocar el grupo, de las bocinas se desprendia la musica tropical con sencillos sintetizadores. Tocaban de todo un poco pero practicamente todo era bailable. De a poco algunos empezaban a tomar sus parejas para salir a pista y bailar. Sandra aun no salia a bailar y no es que igual a algunos de los hombres les daba pena invitarla y asi de plano declaraban nula la posibilidad. Ella y los demas seguian entretenidos con las exageradas narraciones de las historias de don Ricardo. La fiesta se hizo madura y ahi fue que don Ricardo logro algo que varios de los hombres deseaban haber hecho, sacar a Sandra para bailar. El señor se divertia con ella que muy contenta seguia el ritmo de forma muy atinada y sutil muy al contrario de don Ricardo que fracasaba como bailarin casi haciendo el ridiculo pero que para el contexto hasta podria parecer gracioso. Como el ya sabia que ella era una mujer casada, se conducia con cierto nivel de respeto con el que se conducia hasta el momento, no debia arruinarlo pues al parecer Sandra estaba a gusto con el, aunque pues tenia que aprovechar el momento. La tomaba del talle con disimulo y luego, no arrastraba su mano mas alla de esa cintura por lo mismo de su timidez y tambien porque sabia que estaba a la vista de todos. Luego la soltaba y de nuevo iba su mano recorriendo su cintura y la soltaba para improvisar una vuelta con ella haciendo que su vestido se levantara levemente dejando  ver  un poquito mas de sus portentosas piernas, un regalo mas que deseado por muchos  de  los presentes. Por otro lado, don Fidencio hervia en coraje y celos al ver a esa mujer en brazos de otro, pues podia tolerar que el marido de ella pudiera hacer eso y quizas mas, estaba en su derecho, incluso podia tolerar hasta que sus compadres estuvieran ahi hechando roces con ella, pero que otro oportunista lo hiciese eso si le molestaba. Los demas compinches que decir, la cerveza era lo unico que se podian tragar con facilidad. El tan solo se conformaba con bailar con su esposa que no la trataba ni bailaba de igual manera como lo haria con Sandra.

Sandra y el señor Ricardo contentos, sonrientes volvieron a la mesa con los demas despues de unas tres piezas de baile. Pronto el sonido anunciaba que se aproximaba un vals como para agradecer a los padrinos, familia y amigos. Tocaron y bailaron ese famoso vals reunidos todos y ahi duraron un buen rato. Termino esta pieza musical ademas hubo un brindis con las palabras de agradecimiento de los papas y padrinos de la bautizada y una ves mas empezaban los temas musicales para bailar.

Don Fidencio que no perdia detalle de los movimientos de su deseada Sandra, noto como de pronto alguien llegaba a aquella  mesa y fue entonces que su hermano Ricardo se levantaba para salir del lugar con un tanto de enfado y muy pocas ganas de salir, pero ponia buena cara para  despedirse de Sandra. Fidencio vio la ocasion para ir a la mesa de esta y sacarla de ahi para por lo pronto bailar con ella pues sabia que estaba latente la posibilidad de que arribara su marido. Pero un tipo, seguramente padrino de la fiesta por lo bien vestido que estaba, prontamente la invito a bailar con la aceptacion de ella. Y una vez mas Fidencio se tuvo que conformar con verla, siempre tan sonriente, con alegria y muy jovial incluso intercambiando palabras con su pareja de baile. Terminaron de bailar, nuevamente ahi estaba, no necesariamente sola pero como ya no estaba don Ricardo ylos demas se pusieron a bailar entonces pues no platicaba. Fue justo en ese momento en el que se acerco pronto para donde estaba ella bebiendo algo en una copa.

 

-Buenas noches seño Sandra -saludo con fuerza Fidencio llamando la atencion de Sandra pues la musica estaba fuerte

 

-Hola don Fide

 

-¿Como la esta pasando? -pregunto ahora sentandose al lado de ella ante ciertas miradas de incredulidad de algunos personas de esas que se sorprenden por todo pues mirandoles si era contrastante el porte de cada uno

 

-Muy bien -de inmediato con una gran sonrisa le respondio -La verdad que todo es maravilloso osea la musica, la comida que le digo, estuvo deliciosa y aparte todos aca han sido muy amables conmigo... hace tiempo que no me la pasaba tan bien

 

-Pos que bueno que se este divirtiendo, si se lo dije jeje, que se iba a divertir

 

-Si es verdad y yo crei que sin Rodrigo me la iba a pasar mal pero todo lo contrario

 

-Y hablando del patron ¿Ya no vino verdad? porque si es asi pos yo la llevo  su casa...

 

-Gracias pero ya hace rato me llamo y me dijo que vendria tarde pero que vendria y de hecho ya tiene un buen que me hablo asi que yo creo que ya esta en camino jeje. Espero aunque sea bailar un rato con el ahora que vuelva.           

 

-Y porque no mientras llega su esposo pos bailamos uste y yo, que dice, bailamos?!

 

-Si claro, vamos -dijo ella entusiasmada pues le gustaba bailar y tomandose de la mano de aquel hombre se arrimaron a la pista

 

Y ahi empezaron y estuvieron bailando lo que duro aquella pieza musical, el intensificaba sus movimientos y trataba de repegarse al cuerpo de esa mujer cada vez que podia pero no le era muy comodo y placentero pues habia mucha gente bailando y no se veria bien si el empezaba con manoseos o cualquier otra cosa. Procuraba bailar lo mejor posible que a decir verdad no lo hacia tan mal.

Termino la cancion y continuaron bailando la siguiente. Volvieron a la mesa apenas terminando la segunda.

 

-Bueno, que bien bailamos hacemos buena pareja usted y yo jeje -bromeo Sandra

 

-Eso si Sandrita -atendio al comentario pero al mismo tiempo sacaba algo de su bolsillo izquierdo -Mire lo que traje

 

-Jugo de ciruela ¿verdad?

 

-Eso mero y pos como bailar y estar en una fiestesita cansa pos me traje un poco ¿Le sirvo?  Bueno eso ni se pregunta jeje, paseme su vasito

 

-Amm... ok... aqui tiene

 

El viejo  al  ver que no habia negativa, ni si quiera peros, apurado sirvio el jugo que traia en un vaso transparente de plastico, pretendia calentarla un poco aprovechando el hecho de que ya estaban juntos, solo esperaba y rogaba de que algo o alguien les viniera, mejor dicho, le viniera arruinar su plan.

 

-Aqui tiene, tomele porque seguro que usted ha bailado mucho y pos tiene que seguirle jeje pos es fiesta

 

-Jeje si creo que si jeje -dijo al tiempo que ya bebia sorbo tras sorbo de ese liquido

 

-Y entos por que no le seguimos aca gastando suela jeje

 

-Ahm ahorita, si me permite voy primero al baño

 

-Si pase pase, es por aca, aqui subiendo las...     

 

-Si ya hace rato Lulu me dijo donde

 

-Ta bueno pues

 

Ella se encamino hacia adentro de la casa, pasando por los cuartos hasta llegar al baño. En ese momento el viejo creyo propicio ir tras ella pues ya dentro de la casa no habia nadie que los interrumpiese pero prefirio esperarla no pretendia inpertinencias ni que otros empezaran a pensar mal.

Ella termino lo suyo sin rezagos, aun no hacia efecto ese brebaje en ella. Regreso a su sitio para seguir platicando con Fidencio mientras este le hacia seguir bebiendo del supuesto jugo de ciruela, hasta la animo a que bebiera una cerveza, estaba claro que buscaba atontar sus sentidos. Ella seguia displicente pues habia esa natural confianza. Luego de un rato empezaron otra vez a bailar. Llevaban un ratillo bailando  fue  cuando  ella  empezo  a  sentir  algo  en su cuerpo y a acelerar su ritmo cardiaco. Como ella ya habia experimentado eso sabia que debia mantener la calma pero estos iban en aumento.

 

-¿Esta uste bien señito? -pregunto el viejo al verla agitada simulando preocupacion pues el sabia o entendia de que se trataban esas repentinas reacciones

 

-Si estoy bien... sabe, es que me siento como acalorada -dijo Sandra que tenia sonrojadas las mejillas y separandose de Fidencio, con ambas manos muy sutilmente simulaba un abanico

 

-Deveras esta bien es que pos la veo como agitada

 

-Am sabe, voy a pasar al baño y echarme un poco de agua en la cara

 

-Si pase la acompaño

 

-Gracias -dijo ella aceptando la compania de ese hombre

 

Sandra estaba en el baño, restregandose en la cara el agua pensando en situaciones pasadas tal vez pero a fuerza de voluntad buscaba la calma pues extrañas sensaciones habian recorrido hasta su intimidad. Afuera esperaba Fidencio espectante mientras yacia sentado en unos de los sillones de esa sala. Luego de un rato la vio salir respirando profundo y un poco mas calmada.

 

-Como se siente -pregunto Fidencio

 

-Un poco mejor gracias

 

-De que y pos sientese un ratito, dejeme le escombro esto... -sugirio el hombre mientras escombraba un poco el sofa donde el estaba de las cosas que ahi habia pues habria que decir que todo era un completo desorden, pues todo mundo dejaba cosas por cualquier parte.

 

Haciendole ya un espacio, justo al lado de el para que ella pudiese sentarse, ella hizo lo propio y quedaron ahi uno del lado del otro.

 

-Y  pos mire traje mas juguito tomeselo porque parece que con la agitadera pos como que se sintio mal

 

-¿Usted cree que sea por eso?

 

-Si pos si no que otra cosa puede ser... andele tomele jeje

 

Ella bebio una vez mas sin saber obviamente lo que le provocaba a su cuerpo. Pero de nuevo se hicieron aparecer dichas reacciones. Agitada una vez mas respiraba profundo.

 

-¿Se siente bien? Otra vez la veo agitada

 

-Necesito un poco de aire fresco...

 

-Venga -el la tomo de la mano y la llevo afuerita de la casa, no muy alejado de la fiesta pero si era un lugar mas discteto por lo obscuro y solitario

 

-Gracias -dijo ella con mas calma

 

-¿Ya se siente mejorsita?

 

-Si ya un poquito mejor, gracias -respondio con una timida sonrisa

 

El tomandola con una de sus manos la mano de ella y con la otra despejaba el poco cabello que cubria su hermosa cara.                  

-Oiga porque no bailamos un rato asi pos mientras se relaja

 

-Es que aun me siento acalorada y no quiero volvet todavia alla...

 

-Yo digo aca, aca que esta mas fresquito y pega el vientesito

 

-Ah pues...

 

-Animese asi pasamos el rato -dijo tomandola con decision  de  las  manos

 

Ella sentia como esas callosas manos aprisionaban las suyas y entonces cedio. Empezaron a bailar, la cancion tambien iba empezando y se escuchaba claramente desde ese lugar. El tomo su mano derecha para enlazarla con la suya, su mano izquierda y el con su derecha la tomo del talle mientras ella acomodaba la izquierda en el hombro de Fidencio. La cancion era bastante ritmica, movidita asi que no habia pretexto para andar juntando los cuerpos. Sandra misma hacia unos ligeros movimientos sutiles con su cadera. La mano del viejo sentia como esa cintura se movia de un lado a otro. La cancion termino ella misma se separo para tomar aire y secar su mano de lo sudada que la empezaba a tener. Se vino despues una melodia algo tipo danzon, movida pero como sugiere este genero, era todo mas calmo y pausado. El ni espero a que estuviese lista, simplemente la tomo.

 

-Estas son las que me gustan -presumio diciendo Fidencio y asumiendo que ella no conocia del genero consulto -¿La sabe bailar?

 

-No, pero mejor vamos alla con los demas que seguia distraida de sus sensaciones

 

-No como cree -dijo aun sin soltarla de la mano -Aqui sta mejor ademas pos la veo mas tranquilita, alla ahi harta gente y pos la pueden atosigar mas

 

-Ok -se limito a contestar -Creo que tiene razon

 

-Y pos aca le enseño como se baila esa musica... mire ponga aqui la mano -le indico para que pusiese su manita izquierda una vez mas en su hombro.

 

El,  astuto, aprovecho para pegarsele mas argumentando que todo esto era porque asi se debia bailar aquel tema. La noche era calida y corrian unos airesitos muy livianos y frescos. Aires que se condujeron por debajo de ese vestidito de Sandra rosando sus muslos, fue ahi que sintio un leve cosquilleo que se recorria hasta su intimidad. Y no fue solamente una vez, uno tras otro se hacian presentes desde sus piernas hacia arriba. Ella un tanto incomoda solo seguia los pasos de su pareja que iban lentos y aritmicos. El la tenia tomada de la cintura y  asi  de  pronto le apreto esa parte de anatomia para arejuntarse con ella una vez mas. Ella sintio esa brusca accion pero no le molesto curiosamente pues sintio como ahora le recorrian leves corrientes electricas por todo el cuerpo. Insistio una vez mas con los apretones y con las corrientes de esos calidos vientos que ingresaban por su vestido, las corrientes de placer la recorrieron de pies a cabeza. Sintio un dejo de placer recorrerla toda, su mente divagaba y poco a poco se entregaba a lo rico que se podia sentir. Tenia ligeramente las piernas abiertas asi que busco acomodarse  para  cerrarlas y apretar sus muslos y sus labios vaginales que deseosos buscaban que algo se hundiera en ellos o por lo menos los rosaran.

Por lo pronto acomodo sus suaves y blancas manos sobre el ceboso y arrugado cuello de su acompañante para sentirse mas comoda. Inutilmente hacia esto pues sus pechos sintieron las corrientes y empezaron a espigarse, a quedar duros sus pezones.                  

El estaba al tanto de todas esas reacciones y gestos, justo lo que el esperaba, le veia como el viento le meneaba algunos de sus sedosos cabellos, le veia los ojitos entrecerrados a veces miraban a lo lejos y otras a el y por su puesto sus radiantes y carnosos labios. Sus manos las sentia en  su  cuello y el  acomodo  las suyas sobre las caderas de esa  sexy  mujer. Pero al sentir como se endurecian sus suaves senos, para el fue un aviso de que todo iba marchando de maravilla. Apreto una vez mas, acercandola de nuevo, su barriga y el suave abdomen de ella se hacian sentir. El llevo su cabeza a un lado de ella y puesto que ella era mas alta pues quedo al lado de su fino cuello. Empezo a oler ese fino y claro cuellito, desprendia un aroma de mujer, de fina mujer, de esas que son imposibles pero ahi la tenia el a centimetros para poder clavarle alguna sutil mordida o recorrerla con salivosos besos. Comenzo a mover sus manos mas alla de donde las tenia, con la derecha subio por la espalda muy de apoco con ese manoseo recorriendola sobre esa tela tan suave, sentia la calidez que desprendia la piel de su espalda. Ya incluso estaban tocando otra cancion pero seguian con la misma tematica y ritmo. Subio aun mas sintiendo las costuras superiores del vestido, casi llego hasta el hombro pero antes de llegar bajo suavemente a ahi fue cuando el creyo escuchar en algun instante un leve gemido interpretandolo a este como todo un exito de ese el masajeo que el le estaba propinando a esa mujer. Ella estaba relajada y disfrutando el momento, cerraba los ojos y solo los abria para observar algo a lo lejos sin importancia. Estaba practicamente juntita a el, sus brazos se soltaban y se mesian sobre los hombros de este, extrañamente sentia una protuberancia que rozaba poquito arriba de sus muslos pero no lo comprendia pero si lo sentia punzante. Sin hacer mucho caso  a  esto pues estaba mas atenta a sus meras reacciones, cuando Fidencio le comenzo a acariciar desde el talle hasta su espalda, de inmediato le surgieron tremendos y profundos pulsos de placer que le recorrian esas zonas especificas de su cuerpo haciendola gemir en  ese  instante. Siendo mas bajito el, ella le podia ver la espalda y la cabeza con esos desmarañados cabellos pero a parte de eso, de el se desprendia olor un poco a cerveza, otro poco  a  cigarro y otro tanto a sudor, aromas que en otro momento o practicamente desde siempre eran desagradables pero todos sus sentidos se avocaron a traducirlos en aromas seductores que a ella le empezaron a gustar tanto que empezaba disimuladamente y un tanto inconsciente a olerlo mas de cerca. El a continuacion  decidio dar un paso mas arriesgado y con una de sus manos decidio avanzar ahora hacia abajo de esa femina anatomia. Vacilaba con sus manos, iba de un lado  a  otro hasta que empezo por llevar primero sus dedos, poco a poco fue siguiendo su trayecto y ella tal vez no lo notaba o no lo queria evitar, el ya llevaba buen recorrido y con ambas fue bajando mas. Ella continuaba con las manos arriba sobre los sebosos hombros de ese viejo y el muy abajo ya practicamente sobre los gluteos de su patrona. Para apasiguarla un poco mas, empezo a soplarle un poco al lobulo de su oreja, ella sintio el airesito rozar su oreja y se estremecio de inmediato apretando sus manos y ejerciendo cieta fuerza en los hombros de este. El sabia que habia funcionado aquel movimiento y continuo con mas. Soplo una vez mas incluso por el cuello y ella volvio a reaccionar con mas intensidad. A  estas  alturas el ya habia aprovechado y tenia aprisionados con sus manos aquel par de nalgas aunque de forma muy leve. Apretarlas era lo siguiente que pretendia y siguio soplandola, y ella apretaba con sus brazos, Fidencio sentia lo duro de sus pechos y que decir de sus pezones, eso simplemente lo calentaban, entendia lo bien que la estaba pasando asi que con ligeros movimientos empezo a puntearla muy disimulado con su verga que pedia a gritos salir de ese pantalon. Ese bulto  se  hundia en la tela de aquel liviano y coqueto vestido y ella notaba los roces y mas o menos adivinaba de que se trataba esa protuberancia pero que mas daba le ocupaba mas disfrutar, no habia prejuicios ni juicios, nada de eso. El ya no aguanto mas pues practicamente se mansturbaba y las pulsaciones en su verga estaban al maximo, asi de pronto le apreto las nalgas sentia ademas de la tela del vestido, la tela de esa inimaginable ropa interior. Ella estaba ya entregada al momento y sentir ese apreton fue poco para ella, su cuerpo pedia mas que eso, sus dedos formaban un puño que apretaban con fuerza, con su pierna buscaba y rozaba esa protuberancia, ihnalaba las sucias fragancias del viejo, le encantaban, con los ojitos cerrados bajo una de sus manos para recorrer la espalda del viejo. Estaba ya ella que pedia besar y ser besada, y no solo eso si no tambien de ser acariciada, pues sentia como el viejo acercaba su boca por su cuello, ella le veia sus escasos cabellos y la piel arrugada del cuello, le parecia todo tan agradable, queria buscar esos curtidos labios pero en eso se escucho:    

 

-Seño! Seño Sandra! -una juvenil y aguda voz de mujer a lo lejos llamaba por ella -Seño Sandra!! -insistia ante una nula respuesta

 

Sandra con la insistencia, reacciono de inmediato y asi al instante se aparto de don Fidencio sin necesidad de realizar algun esfuerzo que aunque este le apachurraba con gusto con las manos sus gluteos tampoco la tenia sujetada con una gran seguridad. Se acomodo un poco de su pelo que tenia desordenado, calmaba su respiracion que estaba un tanto alterada, tosio disimulando algo sin saber que solo habria que simular algo y sonrio timidamente dirijiendole una mirada instantanea a su acompañante, una que duro quizas apenas unas milesima.de segundo. Se sentia apenada aunque no estaba segura de lo que habia hecho.

 

-Seño Sandra -insistia aquella voz

 

Se trataba de Lulu, Sandra ya la reconocia asi que pronto dirijio su mirada hacia donde provenia la voz y empezo a encaminarse para alla sin voltear a ver a Fidencio. Este estaba tan enchufado con aquellos arrumacos y sobajeos ni siquiera estaba atento a lo que se escuchaba por ende ni enterado estaba de que llamaban por su patrona por lo que al ver como ella se apartaba se sorprendio pensando en que ella se habia dado cuenta de todo.  Se le quedo mirando agitado y con excitacion buscando una explicacion. Quiso volver a tomarla de la cintura pero escucho esa voz que llamaba por ella, tambien su patrona ya se apartaba aun mas e incluso ya caminando hacia donde le llamaban.

 

-Señito... que sucede -pregunto acercandosele a Sandra

 

-Este... debo irme, me llaman -nerviosa contesto

 

-¿Por que no seguimos bailando? La estabamos pasando rebien... -lo dijo esto con un tono sugerente

 

Ella no contesto y el entonces la tomo de la mano con la calentura que le era muy delatora en sus ojos.

 

-Andele, sigamos bailando

 

-Seño, señito! -seguia Lulu vociferando -Seño Sandra!!   

 

-Debo de irme -su cuerpo pedia que se quedase pero reacciono y asi sin mas palabras ni gestos, fue lo ultimo que dijo pues camino rapido hacia Lulu.

 

El se quedo ahi, Sandra fue mas rapida para una posible reaccion de este. La vio desaparecer de su vista y el quedo solo con la calentura del momento, quizo ir tras ella pero sabiendo que alguien la llamaba pues tampoco iba a cometer algun desfiguro. No le quedo mas que ir ahi en un rinconcito y terminar por darle una buena jalada a su falo que lo tenia a reventar desde hace rato cuando habia rosado los muslos de su hermosa patrona.

 

-Lulu... hola, aqui estoy -llegaba diciendo con cierto nivel de agitacion

 

-Seño Sandra ¿Esta usted bien? ¿Donde estaba? La andaba buscando de hace rato hasta crei que ya se habia ido

 

-Si este... es que... es que sali a tomar un poco de aire fresco alla afuera -un poco intranquila contesto

 

-Ah bueno... ah que ya llego don Rodrigo esta alla afuera

 

-¿Rodrigo?!

 

-Si la andaba buscando y me mando tambien...

 

-Ah si... ya voy, bueno vamos jeje...

 

Rodrigo ahi platicaba con algunos de la fiesta, comia pastel, bebia un poco y esperaba a su mujer.

 

-Amor, llegaste -dijo al encuentro con su marido

 

-Sandy ¿donde estabas?

 

-Por ahi, tomando un poco de aire es que me senti acalorada

 

-¿Bebiste acaso?

 

-Un poco... sabes, me siento cansada ¿Podriamos irnos?

 

-Si, si, tambien estoy cansado ya solo quiero llegar a acostarme

 

Entonces se despidieron de los anfitriones de la fiesta a pesar de la insistencia de los mismos para que se quedasen. Pero no hubo modo, Rodrigo por el cansancio y Sandra por la incomodidad y tambien quizas por un agotamiento por aquello de esas sensaciones. Amables agradecieron, se despidieron de Lulu que se quedaria todavia, Rodrigo todavia pregunto por Fidencio y sus amigos pero al no ver por lo menos a Fidencio pues asumio que aun se quedarian ademas de que estaba en casa de su hermano, vieron a don Gil pero se le veia verdaderamente indispuesto ademas de que algunos ahi le sugirieron de que no.se preocuparan. Sin mas salieron del lugar. Al poco rato llego Fidencio con la ligera esperanza de verla ya no habia rastros de ella, estaban los demas, bailaban, platicaban pero esos no le importaban. Sus amigos estaban ahi.arrumbados en una mesa ya bastante borrachos y seguramente ni cuenta se habian dado de lo que habia acontecido entre el y Sandra.

 

La  pareja  llego a casa, ya ni platicaron demasiado pues el cansancio les abatía realmente. Se dispusieron y fueron a la cama quedando dormidos y analizando ese día, un día  muy  particular para Sandra.