Tenía 35 años cuando un torneo de futbol me llevó, con mi hijo y un amiguito suyo, a ir a otra ciudad, donde viví la pasión , por el amiguito de mi hijo, al cual lo hice descubrir su sexualidad y muchos secretos de la misma, en un curso intensivo que se prolongó casi por una semana, ¡de placer!.
Les cuento cómo comenzó una relación incestuosa con un tío, hermano de mi papá, luego de una fiesta en casa de mis abuelos.
Les queremos compartir una aventura sexual que tuvimos hace algunos años, muy rica. Yo, Gabriel, estaba apenas llegando a la mayoría de edad y ella, Malena, estaba al final de los 30s. Ella no era una mujer de esas despampanantes pero , el haber estado con ella ¡fue algo fenomenal e inolvidable!.
Resumen: Les queremos compartir una aventura sexual que tuvimos hace algunos años, muy rica. Yo, Malena, estaba al final de los 30s y él, Gabriel, estaba apenas llegando a la mayoría de edad. Yo no soy una mujer de esas despampanantes pero ,¡tenía una inmensa ilusión de tener relaciones con un jo
Platico con mi hijo sobre sexo, sobre la manera que tenía él y sus amigos de ver la vida y el sexo. Tengo coito con mi pareja y luego me encuentro con otro amigo de mi hijo, que también quería que tuviera sexo con él. Intercambiamos ideas y termino adoptándolo como amigo con derechos.
La noche anterior había estado fajando grueso con un amigo y compañero de escuela de mi hijo, de su edad. En la noche había estado fantaseando y al otro día , tuve que darle salida a mis ansias tan reprimidas.
Tengo 35 años y sin saber cómo, me vi de repente, de manera inconsciente teniendo que ver con un compañerito de mi hijo, de su edad, con quien di salida a mis instintos sexuales que tenía yo reprimidos y guardados por ahí. Fue algo completamente impensado, que brotó de lo más profundo de mí.
Aquí describo como, luego de una fiesta de bodas, luego de que descubro a mamá cogiendo con un completo desconocido, tenemos sexo en el hotel donde nos hospedábamos y al otro día, luego de nuestro desayuno comida, al regresar a nuestro cuarto, le damos salida a un sexo violento, arrebatado, brutal
Aquí les describo cómo llegué a mi viudez y cómo se me presentaron las ganas de seguir teniendo vida sexual, misma que satisfice con un muchachito muy jovencito que la providencia hizo favor de mandarme y con el cual aprendí algunas cosas de sexo, nunca practicadas antes por mí.
Resumen: aquí les cuento algo que me sucedió al estar esperando a mi segunda hija. Andaba yo muy caliente, pero panzona, y mi esposo ya no me tomaba. Un hombre me hizo proposiciones y yo lo acepté. Fuimos a un motel y ahí di rienda suelta a mis necesidades sexuales.
Soy una mujer madura, ardiente, sin hombre de planta, secretaria eficiente de una empresa pequeña, en expansión. Aquí narro un día, estando en el msn, en que el sexo se me dio de manera desbordante e impensada, culminando una deliciosa felación a mi jefe, en la oficina.
Soy secretaria en una empresa. El día previo a las vacaciones, luego de una fiesta muy pasada de alcohol, tres jovencitos, ex compañeros y amigos de mi hijo, se aprovechan de mi borrachera y me violan. Uno de ellos, enamorado de mí, me busca nuevamente, para dejarme panzona y que le regale un bebé.
Aquí describo como, impensadamente, estando en un hotel con mamá, comienzo a verla como mujer y ella, por la falta de sexo, empieza a buscarlo en otro hombre y termina por contagiarme sus ansias, hasta que termino por hacerlo con ella. A continuación les narro la segunda vez que nos sucedió.
Siendo una mujer ya treintona, casada, con dos hijas, pierdo la cabeza ante un jovencito, al que le llevaba más de 10 años y me propaso con él, aprovechándome de su virilidad y energía para satisfacer mis pasiones y ansias que tenía reprimidas y que no había podido sacar.
Soy una mujer madura, divorciada, con un hijo, secretaria en una empresa fabril. El día previo a las vacaciones de diciembre, luego de una fiesta muy pasada de alcohol, tres jovencitos, ex compañeros y amigos de mi hijo, se aprovechan de mi borrachera y me violan, como regalo de navidad.
En este relato les narro cómo sucedió mi primera experiencia sexual, vía vaginal, regresando de una boda, cuando ese hombre me regresaba a la casa, en su camioneta.
Aqui les describo como, de manera impensada, al estar en un hotel junto con mi mamá, comencé a verla como mujer y ella, desesperada por la separación de mi padre y la falta de sexo, empieza a buscarlo en otro hombre y termina por contagiarme sus ansias de sexo, hasta que termino por hacerlo con ella
Luego de haber sido violada al salir de una boda, me encuentro nuevamente con uno de mis violadores, el más jovencito de ellos, quién viene a buscarme a mi escuela, se ofrece a llevarme a la casa, y termina por avasallarme, haciéndome suya de nuevo. Aquí les cuento los detalles de tales sucesos.
Salí de la iglesia un domingo y me fui hasta la casa, en donde vivo yo sola. Aquí me sentí de pronto atacada por un muchacho, al que yo conocía, de la edad de mi hija, su ex novio, un muchacho muy grande y muy fuerte. Me viola y termino por disfrutar de la violación. Desde entonces formamos pareja.
Esto que cuento pasó hace ya algunos años: mi padre tuvo que abandonarnos, siendo yo apenas un adolescente y mi madre, madura, muy guapa, entró a trabajar, para sostenernos. Ahí conoció a un muchacho, de la mitad de su edad, del cual se prendó. Esta es la historia de cómo este chico la fue cautivand
Aquí les describo cómo, al llegar a mi casa, caliente, me siento atacada por el vigilante encargado de cuidar a mis hijos, quién me doblega y abusa de mí en un principio, pero termino por excitarme, por complacerlo en sus peticiones, y por violarlo yo a él, complaciéndonos mutuamente.
Me acababan de violar, entre dos tipos, amenazándome con hacerle daño a mis hijos. Uno de ellos me sodomizó y ¡yo alcancé un gran orgasmo!. Al terminar de violarme, me quedé rendida sobre de un sillón y me dormí por un tiempo. A continuación narro lo que siguió, al despertarme.
En este relato les cuento cómo, de una manera totalmente impensada, un día vi desnuda a mi madre: ¡de inmediato la deseé!; vi cómo se le insinuaba a un jovencito, apenas un poco mayor que yo; vi cómo él se la cogió por la fuerza. Luego de eso, mi mamá, arrepentida, terminó por hacerlo conmigo.
Aquí les cuento cómo, de manera impensada, conocí a una mujer de 28 años, VIRGEN; cómo la seduje y la desvirgué, enseñándole el placer de coger.
Me invitaron a la boda de una compañera. Llevé a mis hijos, pequeños. Al regreso me interceptaron dos tipos, y con tal de que no le hicieran daño a mis hijos, me tuve que someter a sus caprichos sexuales conmigo.