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Diario de una puta adolescente (16)

en Hetero: General

Hola queridos lectores

Aquí esta otra parte de mi diario, espero que lo disfruten.

DIARIO DE UNA PUTA ADOLESCENTE

El Certamen de Belleza

Los chicos de mi colegio organizaron un certamen de belleza para escoger a la reina que nos representaría en los juegos deportivo juveniles de ese año, era una iniciativa propia que bajo el consentimiento de la directiva y del profesorado fue aceptada, por supuesto yo me inscribí y quería ganarlo a como diera lugar, yo a mi 14 años tenia un cuerpo que le quitaba el hipo a cualquier hombre y con mas huella que un pasamano de escalera... jajaja, para lograr mi objetivo indague quienes eran los miembros del jurado para ese certamen y sorpresa!... eran 5 miembro y 3 eran varones y de la cual uno era conocido así que un día antes del certamen estando solo en los pasillos del colegio lo aborde:

Hola

Hola Alejandra... supe que te inscribiste en el concurso – me dice con algo de desprecio

Si – le contesto pícaramente

Sabes que soy miembro del jurado – me dice

Si, lo se y de eso quería hablarte...

¿Dime? – me pregunta extrañado

Quiero ganar ese concurso – le digo jugando con mi falda provocativamente poniendo cara de niña picarona

Bu, bueno... tienes que ponerte muy bonita y luchar con tus compañeras por el puesto – me dice nervioso

Ese es el problema, tu sabes que puedo ser generosa contigo si me ayudas – le digo mientras le arreglo la chemise del colegio y de paso le acariciaba el pecho pegándome a el

Por mi no hay problema pero sabes que no soy el único, faltaría convencer a 4 mas – me dice como nervioso porque nos vieran, no los profesores sino los compañero ya que yo era de la segunda etapa y el de la tercera (diferencia de edades)

Solo me falta el voto de los varones, las chicas no importan – le decía casi encima de el – soy capaz de hacer cualquier cosa por ganar – le digo al oído

¿Cualquier cosa? – me pregunta ya perdiendo el miedo por estar hablando con una chica de 14 años

Cualquier cosa – y discretamente le agarro el bulto

Este un poco avergonzado me aparta la mano y sonriendo me dice:

¿Y mis compañeros?

Habla con ellos... quiero ganar y si lo hago también puedo ser muy generosa con ellos – le digo picándole el ojo

Ok, a la salida volvemos hablar – me dice

Dale – le digo dándole un beso en la mejilla y separándome de el para dejarlo en el medio del pasillo

Me fui sonriendo, sabia que lo había dejado confundido y caliente... pan comido, solo era cuestión de esperar, pase el resto de la mañana escuchando aburridas clases y a la salida me estaba esperando, al verme sonriendo me dice:

Hola Ale

Hola... ¿Qué dijeron tus amigos? – le pregunte

Vamos hacer que ganes pero debes hacer todo lo que digamos – me dice sonriendo

No te preocupes por eso, no los voy a defraudar – les digo seguirá

Eso espero, te vamos a ver después del certamen – me dice

¡Genial! – le contesto contenta

Nos vemos pequeña putica – me dice para despedirse

Chao

Llego el día del certamen, para ello no me quise vestir extravagante mas bien me puse unos pescadores blancos que dejaba marcar mi atrevido hilo dental tanto adelante como por detrás, me puse una franela rosada muy ceñida al cuerpo con un tierno "keropi" en el pecho y debajo un brassier blanco transparente que no dejaba nada a la imaginación, gracias a mi mami y su peluquero me hicieron un peinado muy bonito dejándome el cabello suelto, me puse unas sandalias altas de tiras que combinaban con mis pescadores... la idea del concurso (como lo habían propuesto los chicos) era que la chica ganadora debía ser muy juvenil y reflejara la "inocencia" de nuestro instituto.... jajaja, la verdad que tenia bastante rivales, se habían inscritos chicas mayores que yo y muy bonitas, las pobres ilusas creían que podían ganar... todo se desarrollo con naturalidad, quede entre las finalistas y por supuesto gane, las otras chicas aceptaron la derrota y me felicitaron, me sentía feliz cuando me pusieron la corona, la banda y las flores a pesar de que hice trampa, mi madre que había ido a verme estaba muy contenta y orgullosa de mi, tuve felicitaciones de parte del profesorado y bueno... fue una alegría total, cuando ya había pasado la algarabía y ya la gente comenzaba a marcharse del colegio (inclusive mi madre) llego el momento de pagar mi deuda, en uno de los pasillos del colegio estaban esperándome y discutiendo mis tres "verdugos", tres hombres bastante jóvenes (17 años), demasiados lindos (muy diferente a los maduros con que siempre estoy) y con ganas de darme lo mío, me presente con mi corona, banda y las flores diciéndole con picardía:

¡Hola chicos!

Hola Ale – me dice Arnaldo el chico al que le propuse aquello, era alto y medio catire – te presento a David – me dice

Hola – le digo estrechándole la mano a un joven espectacular, blanco también pero un poco regordete

Hola – me contesta tímidamente

Y este es Pablo – me dice Arnaldo presentándome al chico que faltaba

Hola – le digo estrechándole le mano

Mucho gusto y felicitaciones – me dice este

Gracias

Este ultimo era un chico de color, siempre me había atraído por eso... porque es negro y sentía curiosidad de ver como lo tenia ya que era musculoso y líder en deporte al igual que Arnaldo que era el líder entre las chicas al ver que se quedaron como pendejos viéndome les digo alegremente:

¡Bueno, aquí esta su reina!

Entonces... ¿a dónde llevamos a la perrita? – pregunta Arnaldo

Parece que el motivo de la discusión era el sitio que iban a usar de "matadero", no se ponían de acuerdo, ninguno podía en sus casas por estar ocupadas y a un hotel era obvio que no se podía por nuestras edades, en eso Pablo dice:

¡Hablemos con el Sr. Martínez!

¿Con el que limpia? – pregunta Arnaldo sorprendido

Si, el tiene un lugar ideal en el sótano... solo el nos puede ayudar – le contesta este muy seguro

Pero va querer participar – dice David que hasta ahora no había hablado

Por mi no hay peo que lo haga – dice David

Por mi tampoco – dice Armando

Por mi menos – dice el negrito

¿Y que dices tu Alejandra? – me pregunta Armando

Yo encogiendo los hombros les doy a entender que no me importaba, además quería ver como se portaba este viejo que se la pasaba mirándome todo el tiempo, todos caminamos a donde el Sr. Martínez y este nos abre la puerta del cuartucho, al mirarme sonríe con su dientes llenos de caries y me dice con aquella cara de sádico:

Felicidades preciosa...

Gracias

El viejo ese vestía una franela de raya, unos jeans todos sucios y se ve que estaba descansando, del cuartucho salió un hedor que ni les cuento, el viejo ve a los chicos con cara de salido y les pregunta:

¿Qué los trae por aquí muchachos?

¿Podemos pasar viejo? – le dice Pablo

El viejo sacando la cabeza para mirar a todos lados se cerciora de que no viene nadie y entrando nos dice:

Pasen rápido...

El lugar era grande, habían muchas cajas, los adornos de Navidad, un escritorio con una lamparita, los tobos de limpieza... en fin, típico de este hombre todo desordenado, me senté en una camita que aun estaba caliente del descanso que de seguro se estaba dando el viejo, este se me quedo mirando con morbo y le pregunta a los chicos:

¿Que quieren?

Viejo, queremos que nos prestes este lugar – le dice Pablo

¿Para que?

¡Dile de una chamo! – le dice Armando a Pablo dándole con el codo

Para cogernos a esta carajita – le dice Pablo sin anestesia

Ustedes saben que se pueden meter en problema por esto y me pueden meter a mi – dice el Sr. Martínez

Tranquilo mi don que nadie tiene porque enterarse – le dice Armando

¿Y que hay para este pobre viejo? – pregunta sonriendo mientras me veía

¿Quiere participar? – le dice Pablo

¿Usted quiere jovencita? – me pregunta el viejo

Si – le digo muy sumisa agarrando fuerte las flores

Entonces cerremos bien esa puerta y vamos a darle verga a la coñito esta – dice el viejo cerrando la puerta

¿La ponemos a mamar? – pregunta el bobo de David

¡Pues claro... que vamos a esperar, la foto! – dice Pablo desabrochándose los pantalones

Esperen, déjeme de darle un beso antes que se lo mame a ustedes – dice Armando

Se inclino y tomándome por la barbilla me planta un tremendo beso de lengua que yo gustosamente lo recibí, después que me estuvo besando un buen rato lo deja de hacer y me dice a la boca:

Espero que te portes bien y seas bien complaciente... nosotros los fuimos contigo

Ok – fue lo único que dije

Dame un permiso chamo para besarla yo también – le dice Pablo a este apartándolo

Aquel negro acerco su boca a la mía y también me beso apasionadamente, tenia la lengua gruesa y bastante húmeda aparte de que era un negro bembón, en eso me deja de besar bruscamente y me pone el guevo frente a la cara... mi madre! que verga tenia el negro ese, sin mentira alguna le debía de medir unos 20cm y exageradamente grueso, me golpeo la cara con el mientras me decía agarrándose las bolas:

Bésame la paloma mi reina...

Y de un solo golpe me lo metió en la boca, vaya aparato me estaba comiendo, sus compañeros se molestaron un poco por lo brusco que fue este para ponerme a mamar... pero lejos de esa pequeña molestia estos se unieron a la fiesta y se acercaron a mi rostro para golpeármelos con sus erectas vergas, me dieron duro por toda la cara y de inmediato me la llenaron de sus deliciosos líquidos pre-seminales y cuando me la pasaban por la nariz me dejaban ese divino olor a macho que tanto me gusta, en eso bruscamente se separaron y fue porque el Sr. Martínez los empujo para darme un beso de lengua, no me dio tiempo ni de negarme ya que este me agarro por las mejillas con ambas manos obligando que abriera la boca para el meter su asquerosa lengua, quise negarme pero sabia que iba a ser inútil a si que me deje besar correspondiéndole, olía mal y tenia un aliento peor, oí cuando uno de los chicos dice:

¡Este viejos si es abusador!

El viejo me dejo de besar y también poniéndome la verga en la cara le responde mientras trataba de metérmela en la boca:

Abusador no... no sabes lo mal que la paso yo viendo estas niñas pretenciosas desfilando sus deliciosos cuerpos...

Tiene razón el viejo, vamos a dejar que se de gusto – le dice el negro que recién le había mamado la verga

Abre la boca putica – me dice el viejo mientras me restregaba su enorme glande sucio por los labios

¿Entonces mi reina, en que quedamos? – me dice Armando jalándome el cabello para obligarme abrir la boca

Abrí la boca y el viejo aprovecho para meterme el guevo hasta la garganta, era bastante grueso ya que me lleno completamente la boca, tenia el falo salado ya que fue lo único que pude saborearle en ese momento, este me agarro la cara con ambas manos mientras extasiado decía:

Ahhhhh calentica la boca de la putica esta....

Armando me quito las flores de la mano mientras que el viejo me decía:

Así nena... mámale el guevo a este pobre viejo...

¿Desde cuando no esta con una carajita viejo? – le pregunta Armando que se quitaba los pantalones en ese momento al igual que los otros chicos

Ufffff – fue lo único que dijo

Aun yo no salía de mi asombro, no podía creer que le estaba mamando el guevo al conserje del colegio, al hombre mas asqueroso según mis amigas, este me cogía literalmente por la boca haciendo que le saboreara y limpiara su erecto miembro viril, lo tenia salado y lo peor es que por lo sucio que lo tenia en su cabeza habían varios pelos que se me atoraron en la garganta y no había forma de tragármelos, en eso Armando ya sin pantalones me quita las flores y dice apartando el viejo que tubo que sacar su aparato de mi boca:

Vamos a desnudarla...

El negro me quito la corona mientras que David me quitaba mi preciada banda, yo misma me quite la franela mostrándole a los chicos y al viejo mi generoso sostén, me levante y me afloje los pescadores para hacerlos rodar por mis piernas mientras Pablo me acariciaba descaradamente las nalgas, Armando no perdió tiempo y se coloco detrás de mi para desabrocharme el sostén y quitármelo mientras el Sr. Martínez me bajaba las pantaletas mientras que me agarraba de su hombro para no caerme en el momento que me las sacaba por los pies, estando desnuda delante de aquellos 8 ojos masculinos David tomo la banda para ponérmela mientras que el negro me pone la corona, Armando con voz burlona dice:

¡Señores, les presento a Miss Mujerzuela!

Todos rieron del "chiste", el viejo me agarro por un brazo para tirarme en la cama pero Armando lo detuvo diciéndole:

Así no viejo, todos tenemos derecho de disfutarla...

El viejo medio molesto se puso de nuevo su interior y el pantalón para decirnos:

Como quieran, tengo que ir hacer un trabajo, los dejo encerrados aquí y regreso dentro de un rato a comer del pastel

Okey viejo, nosotros le dejamos algo – le dice Armando

El viejo salió y los tres chicos jalándose sus miembro se me lanzaron encima, sentía manos por todos lados, dedos en mi coño otros que atrevidamente trataban de colarse entre mis apretadas nalgas para hurgar mi culito mientras las bocas de Pablo y David se apoderaban morbosamente de mis erectos pezones, que bien me mamaban las tetas estos dos chicos, yo estaba que me moría de deseos por que me penetraran de una vez, Armando que en ese momento estaba agachado detrás de mi abriéndome las nalgas y dándome el mas placentero beso negro dice:

¡Verga mis panas estamos de suerte, esta carajita a llevado guevo por ese culo... lo tiene abierto! – y vuelve a meter la lengua en mi orto

¡Yo se lo meto por ese culo! – dice el negro

¡No yo! – dice David

Están equivocado los dos, mi guevo es el que va entrar por este delicioso culito - dice Armando que seguía saboreando mi orificio anal

¡Rifemos el culo de la reina! – dice el negro sacando su cara de mis pechos

Me parece justo – dice Armando levantándose

Yo opino que... – digo siendo interrumpida

Esto es un asunto de hombres, las niñas se callan... es mas, arrodíllate y usa la boca para mamar mientras nos sorteamos tu culito – dice Armando

Algo que no soporto es el machismo pero bueno... sumisamente me arrodille y esto me acercaron sus vergas a la cara y mientras que por mi boca desfilaban sus erectas vergas estos jugando "piedra, papel o tijera" se sortearon mi codiciado culito, estaba preocupada ya que no quería que el negro fuera el primero en encularme dada las dimensiones de su aparato y se cumplió la ley de murphy... fue el ganador de mi culito, Armando jugando el mismo juego con David se gano el derecho de penetrarme por el coño, lo muy morbosos iban hacerme una doble penetración, Armando se acostó en la cama y mientras se acariciaba el "machete" para mostrármelo me dice:

Acércate princesa para meterte esto...

¿No hay condón? – pregunto preocupada

Si, si... yo los traje – dice David buscando entre los bolsillos de su pantalón que estaba apilado juntos a los otros

Esta carajita es una puta – dice Armando sorprendido por mi precaución

David le da un preservativo a Armando y otro a Pablo que se hacia la paja a un lado, armando lo deja sobre su vientre diciéndome:

Pónmelo mamita...

Yo lo agarre y lo saque de su envoltorio, me lo puse en la lengua y me puse en cuatro patas viendo su miembro, se lo quite de la mano y muy femeninamente se lo puse con la boca, todos aplaudieron y gritaron eufóricos al ver mi "experiencia" en poner condón, puse cada piernas a los lados de Armando y me senté metiéndome todo su miembro en mi atormentada vagina, trate de besarlo buscándole el lado romántico a la situación pero este me voltio la cara y no lo culpo... el aliento a guevo que debía de cargar no era para menos, me estuvo culeando un buen rato hasta cuando sentí a el negro que se monta en la cama arrodillado y apoya su enorme glande en la entrada de mi recto, sin dejar de gozar al chico que tenia abajo me volteo y le digo angustiada a Pablo:

Con cuidado papi que lo tienes grande...

Este escupió mis nalguitas y con sus mano guío el escupitajo a mi ano para lubricarlo metiéndome el dedo en el culo, yo estaba a mil... volvió a apoyar su glande en mi pequeño orificio anal y de un solo golpe lo hundió en el mismo sacándome de mi garganta un pequeño gritico de dolor, sentía ambos penes acariciándose dentro de mi cuando ambos empezaron a cogerme desesperadamente a todas esta David nos veía desde un rincón haciéndose la paja esperando su turno (que tonto, en vez de ponerme a mamar), el negro se quedo quieto y se quejo diciéndome excitado:

Te voy a llenar el culo de leche mi reina....

¡Nooooo! – gritaron David y Armando, este sin dejar de cogerme

El negro asustado me lo saco y siento los chorros de semen que caían abundantemente en mi espalda y en mis nalgas, la tenia caliente y se termino de vaciar apretando su falo con mis dos nalguitas, cuando se vacío salió detrás de mi diciéndole a David:

Es tu turno...

Este corriendo con su verga erecta se monta en la cama y arrodillándose apoya también su glande en mi culito y me lo metió de un solo coñazo también sacándome quejidos, ya eran dos lagrimas la que salían de mis ojos por el dolor, este cuando me lo metió completo en el orto dice:

¡Mierda, que culo el de esta carajita!

¡Si! y ya el negro la iba a cagar – dice Armando que me seguía cogiendo por la cuca

Es que lo que provoca es llenárselo de leche – dice el negro descansando sentado en una poltrona que había en aquel lugar

Que lechero mi pana – le dice David al negro

David que tampoco era nada manco empezó a culearme salvajemente cuidando de no mancharse por la lefa que tenia entre las nalgas, a todas estas Armando no daba señales de acabar y fue David quien no aguanto mucho y agarrándome de las cadera me lo mete hasta el fondo de mi orto para dejarme las tripas intestinales repletas de semen, el negro al ver que David se había vaciado en mi culo le reclama:

Tu si pudisteis acabar en el culo...

No aguante – dice este defendiéndose

Yo tampoco daba señales de acabar ya que me molestaba ese desfile de guevo por mi culo... David me lo saco y en ese preciso momento se abre la puerta de aquel lugar, el negro que estaba mas cerca de la puerta le dice sonriendo al Sr. Martínez que era el que entraba:

¡Epale viejo, estas de suerte... el culo esta libre!

En ese preciso momento Armando y yo nos estabamos viniendo, a mi me éxito la idea de que aquel viejo me encontrara ensartada como estaba y se sentía rico el calor de la leche represada por la gomita, en eso Armando sacándome el pene de mi cuquita se levanta rápidamente y dice asustado:

¡Mierda!

Yo sin poder estar de pies por los espasmos del orgasmos, veo que el negro estaba blanco del susto y tanto el como Armando recogían sus ropas en el preciso momento que detrás de mi dicen:

¡Muy bonito!

Me volteo y horror!... era el subdirector, el Sr. Villegas que venia acompañado del Sr. Martínez que le decía:

Vio jefe, como le dije...

El viejo pajuo nos había delatado con el subdirector, ahora éramos tres lo que parecíamos una comiquita buscando nuestras ropas, no conseguía mis pantaletas, los chicos se nerviosamente no sabían que ponerse primero y fue cundo el subdirector nos dice con voz autoritaria:

¡Tienes cinco minutos para ponerse la ropa y largarse de aquí!

¡Si profe! – dijeron los tres chicos apresurando el paso

Yo igualmente lo hago cuando el profe me agarra por el hombro inmovilizándome y diciéndome:

Usted se queda como estas señorita Pérez...

Profe yo... – trate de decirle pero fui interrumpida por el mientras trataba de taparme los senos con los brazos por pudor... (¿?)

Las explicaciones me las da luego... ¡cuento hasta tres y se me desaparecen antes de que me arrepienta! – le dice a los chicos

Los muy cobardes ni se pudieron vestir bien, salieron disparados de aquel lugar dejándome a mi con tamaño de problema, cuando por la puerta salió el ultimo de los manganzones el Sr. Martínez cierra la misma poniéndole el seguro, yo me puse a llorar, el Sr. Villegas me dice soltándome el hombro:

¿Ahora vas a llorar?

Snif - Profe déjeme explicarle, yo...

Ahórrese las explicaciones señorita Pérez... vamos a ver como arreglamos este asunto, a usted le sale expulsión del plantel

Llore aun peor, porque aunque fuera puta yo quería terminar bien mis estudios, el subdirector viéndome me dice:

Ya veo que a usted poco le importa los estudios... en fin, no le hacen falta, ya vemos que ya definió su carrera y ya la esta ejerciendo

¡Profe! – le digo con los ojos ahogados en lagrimas

¡Hija de puta... salisteis igual que tu madre! – me dice sin ningún pudor y me sorprendí

¡Profe... respete! – le digo ya molesta

Que respeto, si no te respeta ni tu misma, vamos arreglar esto de la forma como tu madre lo arreglaría – me dice bajándose el cierre del pantalón y buscando entre el mismo su miembro viril

Yo me quede helada pero no perdí un detalle de cómo este se sacaba su pene aun morcillon y se sienta en la cama donde me habían estado cogiendo los chicos para meneársela y decirme:

Acércate putica y comienza a mamar a ver si lo haces mejor que tu madre...

Muy sumisamente me acerque al Sr. Villegas y apoyándome de sus rodillas me arrodille y agarre su miembro para pajearlo un poco y limpiarlo con la mano, me arregle el cabello que aun sostenía vagamente mi corona de reina y me metí su mal oliente verga en la boca, este suspiro al sentir la húmeda de mi boa y comenzó a disfrutar de la mamada, aquel pene entro en mi boca medio aguado y a medida que mi lengua jugaba con su glande y mi boca le daba excitantes chupadas fue adquiriendo consistencia y cuando menos lo estaba pensando tenia en mi paladar un enorme miembro masculino, a todas estas el Sr. Martínez ya se había desnudado y estaba arrodillado detrás de mi acariciándome con sus mano derecha mi húmeda cuquita, con su mano izquierda mis abultadas tetas mientras recostaba sádicamente su erecto miembro entre mis nalgas... ya me excite de nuevo, el Sr. Villegas mientras se lo estaba mamando se abrió el pantalón para bajárselo un poco y dejar sus enormes bolas afueras para que yo se las acariciara mientras le mamaba el guevo... el Sr. Martínez me obligo a que abriera un poco las piernas para acariciarme con su enorme glande mi juvenil cuca mientras sentía su respiración en la nuca y fue cuando sentí la cabeza en la entrada de mi vagina que me saque el guevo de la boca para decirle con los labios hinchados de tanto mamar:

Póngase un condón Sr. Martínez..

Para que preciosa, si lo que quiero es verte barrigona de un hijo mío por todo el colegio – me dice sádicamente lamiéndome el oído... ese morbo me gustaba enormemente

Tiene razón la nena... póngase el condón porque a mi no me gusta batir la chicha – dice el Sr. Campo que disfrutaba de mi mamada que reanude

La verdad que esos señores estaban de suerte ya que los chicos habian dejado los otros preservativos sin usar (y el usado en el piso por cierto), este de mala gana se levanto y lo busco para nuevamente arrodillarse y sin piedad alguna meterme el guevo hasta las metras, que rico estaba siendo dominada por ese par de hombres maduros, saciando su sed de sexo con una adolescente de 14 años recién coronada de reina escolar (aun tenia la banda puesta), acelere la mamada a ver si el Sr. Campo se vaciaba de una vez, y me había tragado sus líquidos preseminales y sabia que faltaba poco para que se vaciaran sus huevos, el sabia mis intenciones así que me agarro por los cabellos tumbándome la corona y diciéndome:

¡No seas tu tan pendeja! ¡a mi no me vas a vaciar así!

Se levanto dejándome a mi y al Sr. Martínez arrodillados en el piso mientras cogíamos como conejos, se termino de quitar los pantalones y se coloco el preservativo y acostándose en la cama le dice al Sr. Martínez:

- Déjame a mi probarle la cuquita a la alumna...

El Sr. Martínez me lo saco y me ayudo a levantarme, me subí a la cama pasando las piernas sobre el profe y me senté yo misma ensartándome su grueso falo, me senté sobre el y comenze a cabargarlo y a disfrutar de aquella penetración tan profunda, el Sr. Campo jadeando de placer me decía:

¿Dónde te cabe tanto guevo mamita?

El Sr. Martínez se subió a la cama también y se paro detrás de mi pajeándose, era inevitable que me penetrara por el culo, así que yo misma me incline poniéndole los pechos a mi profe en los suyos para facilitar la penetración, el Sr. Martínez rápidamente se puso en posición y apoyo su glande en mi culito y lo abrió deslizando su grueso falo a través del mismo hasta que su cabeza se alojo cómodamente en lo mas profundo de mi intestino, el placer era el máximo... yo jadeaba y trataba de gritar de placer pero debía ser discreta, estaba en el colegio...jajaja, no aguante y me vine mientras estos dos hombres mayores se movían como maquinas, estuvieron dándome duro un buen rato hasta que el Sr. Martínez me lo saco del culo y trato de metérmelo por la vagina junto con el profe, a este no le gusto y le dijo sacándome el guevo también:

¿Qué le pasa viejo marico?

¡Estoy que acabo! – fue la repuesta de este

¿Le gusta la leche Srta. Pérez? – me pregunta el profe sacándose el condón de una vez

Si

Que esperas para ordeñarnos...

El Sr. Villegas se quedo acostado y en forma contraria se acostó el Sr. Martínez quedando yo encima de ellos y como pude me puse a mamarle el guevo a los dos alternadolos, sabia que el Sr. Martínez no aguantaría mucho así que me concentre en el, le hacia la paja con los labios subiendo y bajando la cabeza mientras le apretaba el falo con los labios haciendo que se vaciara rápidamente, tenia la leche babosa, espesa y caliente... algo amarga para mi gusto pero me tube que tragar 7 tacos que me regalaron sus bolas mientras el Sr. Campo se hacia la paja viendo el espectáculo, cuando me termine de tragar la leche mire al Sr. Martínez y le pique el ojo para irme a el otro miembro que esperaba mi golosa boca, se lo quite de la mano y comenze a pajearlo con la mano mientras le chupaba la cabeza... este agarrándome por la cabeza e inmovilizándome me dice jadeando:

¡Sssss ya me las sacaste hija e puta, igualita a la madre!

Y siento en mi paladar borbotones de leche de hombre que me inunda la boca, al igual que la otra era viscosa, salada y muy caliente, apresure en tragarme los primero pero fue inevitable que corriera por la camisura de mis labios unas gotas gruesas de leche, cuando se termino de vaciar lo miro a la cara aun acariciando su pene y le pregunto:

¿De donde conoce a mi madre?

De el burdel donde trabaja, era una de mis putas favorita, ahora lo eres tu... "de tal palo, tal astilla" – me dice

Que humillante era para mi eso pero me sentía aliviada, el muy cochino me dijo mientras me levantaba:

Como crees que entraste en este colegio Srta. Pérez, aun recuerdo la mamada que me hecho tu madre en mi despacho... salisteis glotona igual que ella... jajaja

Busque mis ropas y como pude me vestí, estos dos lo hicieron conmigo y antes de salir del cuartucho el subdirector me pone la corona, la banda y dándome mi ramo de flores me dice:

Espero que esto no se repita, si quiere tirar lo hace fuera del colegio... entendió "Miss puta"

Si señor – le dije sumisamente

De ves en cuando se acuerda de este pobre viejo Srta. Pérez – me dice el Sr. Martínez

Le voltee los ojos y salí de aquel cuartillo con ese culo bien adolorido, apenas podía caminar... eso me paso por tramposa y puta.

Espero que le haya gustado esta entrega, se que mucho de ustedes se preguntan porque son tan repetitivos mis relatos pero deben de saber que son productos de mis fantasías, me masturbo mucho con ellas y quiero compartirlas con ustedes de alguna forma, a los que les guste bien y a los que no... también.

Será hasta la una próxima entrega, los quiero mucho y cuídense.

Besos

Alejandra