miprimita.com

La violación de Veronica

en No Consentido

Verónica es una hermosa adolescente tiene 18 años, mide 1,74 delgada, cabellos rubios, lindos pechos y un culito bien parado que es admirado por muchos hombres, acababa de bañarse, se vistió y se encamino a su trabajo. Hace un mes que trabaja en un geriátrico, ella había mentido su edad, había dicho que tenia 21 y como tenia un muy buen cuerpo aparentando esa edad no tuvo problemas en ingresar a ese trabajo, cuidadaba a hombres adultos de mas de 65 años, los cuales estaban allí por diversos problemas familiares pero que su salud estaba bien, hoy trabajaría de noche, nunca lo hacia, su horario de trabajo era por las mañanas, pero Susana una compañera le pidió el cambio de turno dado que tenia asistir a un cumpleaños. Llega al geriátrico y Maria le abre la puerta:

Hola como estas.

Muy bien, ya puedes irte así no llegas tarde a tu casa

Si tienes razón ya estaba preparada, Susana me había dicho que vos venias a reemplazarla, ya que ella esta noche tenia una fiestita familiar, hasta mañana Vero, que pases una buena noche

Hasta mañana, ojala sea así, espero que todos descansen bien hoy por la noche

Verónica cierra la puerta, va al vestuario y se cambia, se pone su uniforme, pero sin nada debajo, solo una pequeña tanga, hacia mucho calor allí adentro, estaba muy alta la calefacción ya que estaban en invierno, comienza a recorrer las habitaciones para ver si ya todos estaban en sus camas, ya que normalmente se acostaban muy temprano y veían la televisión hasta que les venia el sueño, le llama la atención encontrarlas vacías, llega a la sala de música y lectura y ahí están todos, le pareció raro ver a todos juntos como si esperasen algo ya que después de la cena la mayoría se iba a su habitación, en total había 14 hombres internados de diferentes edades, decide mandarlos a sus habitaciones ya era bastante tarde, les dice:

Bueno es hora de ir a dormir, cada uno a su dormitorio.

Mira muchacha, quien te ha dicho que nosotros queremos dormir- contesta Juan

Porque es tarde don Juan, por lo que yo se siempre a estas horas ya están todos en su cama

Pero hoy es un día especial - le dice Antonio, mirándola en forma extraña

No sabe que hacer, estaba acostumbrada a que en el día todos le hicieran caso, pero que estaba pasando, estaba allí sola ante esa situación, de pronto todos hacen un circulo a su alrededor, alguien la toma por detrás, y tapa su boca para que no grite, varias manos la sujetan, quiere zafarse pero no puede, el temor se apodera de ella:

No grites, pasaras una buena noche con nosotros – le dice Juan

Quiere zafarse pero no puede, muchas manos recorren su cuerpo, la llevan a una habitación que se usa cuando alguno de ellos no esta bien de salud que tiene las paredes recubiertas con un material que evita escuchar ruidos molestos, le quitan el uniforme, sus hermosos pechos quedan al descubierto, solo la tanguita recubre su cuerpo, la atan en la cama, sus manos y piernas abiertas, todos comienzan a desvestirse. Verónica desea gritar pero le han puesto una mordaza oval en su boca, mira aterrorizada como rodean la cama todos desnudos, algunos tienen las pollas flácidas pero otros las tienen paradas, su mirada va de un lado a otro le llaman la atención dos pollas son descomunales, la de Juan y la de Antonio, ella no tiene mucha experiencia pero de ese tamaño solo vio en las películas porno que solía ver junto a sus amigas. Juan toma una tijera y corta la tanga, ella se depilaba dejando un corazón formado por sus vellos, ante la vista de todos quedan sus labios.

Juan que parece ser el que los dirige, le dice:

Es mejor que colabores la podrás pasar bien con nosotros.

A una señal de el, de a uno van pasando y manoseándola, le tocan las tetas, le chupan los pezones, los muerden, ella se retuerce inútilmente, bajan hacia su concha, la abren la penetran con sus dedos, la chupan probando el sabor de sus jugos, aunque ella quiere huir, sin darse cuenta todo eso provoca el fluir de sus jugos, no quiere excitarse pero sus jugos comienzan a salir. El mordillo que tapa su boca la esta ahogando con la agitación que le produce el querer huir y la excitación de lo que sucede, Antonio lo nota y se lo quita diciéndole:

Si gritas, la pasaras mal – hace una seña y todos quedan alrededor de la cama

Juan se acerca, se echa sobre la cama, ella lo mira asustada, el tiene su descomunal polla entre sus piernas, los jugos han mojado su vagina pero esa polla es muy grande, el presiona y de un solo golpe la penetra metiéndosela toda, Verónica siente un dolor agudo, quiere gritar pero una mano le tapa la boca, caen lagrimas de sus ojos, el comienza a moverse, la polla chapotea en el interior no solo por los jugos sino por la sangre que emana de su vagina desgarrada, ella muchas veces fantaseaba con ser violada esto le produce excitación, el lo nota y comienza a moverse con fuerza, quita la mano de la boca de ella porque sabe ya no va a gritar, se mueve por varios minutos, siente un fuego en su vagina, el le aprieta los pechos y comienza a despedir borbotones de semen que se junta con todos sus jugos en su interior, se levanta y uno a uno comienzan a echarse sobre ella. Su vagina esta dilatada, las pollas son mas pequeñas, aunque bien duras seguramente han tomado viagra para tenerlas así, ya no siente dolor eso provoca una mayor excitación en ella, no lo desea pero sus orgasmos no tardan en llegar, su vagina esta llena de semen, ardida, con restos sanguinolentos, sus pechos están doloridos de tanto que tocan y muerden sus pezones, pero los orgasmos se siguen sucediendo, no los desea, pero aun así los sigue disfrutando.

Ya solo falta el último, Antonio, ella lo ve y vuelve a sentirse mal, el tiene una polla inmensa no tan gorda como la de Juan pero extremadamente larga, la penetra siente nuevamente un gran ardor a pesar de estar dilatada, la polla golpea contra su útero, el arremete con todo, era muy extraño, estaba siendo violada y disfrutaba de esa polla, le producía una sensación diferente a las anteriores y el maldito viejo notaba como ella estaba excitada olvidando el dolor y sintiendo una oleada de placer, su pelvis se movía rítmicamente, la polla comenzó a escupir semen golpeando el fondo de la vagina, un gran orgasmo la sorprendió, no pudo evitar gemir, el la miro sonriente, y dijo:

Parece que termino gustándote la fiesta – comenzó a desatarla - esto ha sido todo por hoy, ya deberás cambiar el turno nuevamente cuando te necesitemos.

Verónica se levanto dolorida, todos fueron saliendo de la habitación, estaba parada a un costado de la cama colocándose su uniforme, sentía como el semen salía de su concha y se escurría por sus piernas, miro a Antonio con cara de furia aunque interiormente pensaba todo lo contrario, esa experiencia no la olvidaría, su fantasía de ser violada se había cumplido, ya lo agarraría solo a el y seguro le daría su culito que aun era virgen.

Ya todos estaban en su dormitorio, seguramente estarían dormidos, estaba muy dolorida como para verificar si era así, ella se estaba bañando para eliminar vestigios de todo lo sucedido, su vagina había quedado ardida, pero aun estaba excitada tras lo sucedido, mientras recordaba comenzó a masturbarse bajo la ducha, no había notado que estaba siendo observada, sintió una mano sobre su espalda, se dio vuelta sobresaltada , y ahí estaba el, como si hubiese interpretado sus deseos, desnudo y con su larga polla parada, comenzó a acariciar su espalda a recorrer su cuerpo con sus manos, ella se dejo llevar, el deseo la invadía, agacho su cuerpo hacia delante poniendo las manos sobre el lavabo , dejando su culo a merced de el, Antonio comenzó a jugar con el, sus dedos hacían círculos en la entrada, mojaba los dedos en los jugos de la concha y con ellos empezaba a penetrarlo, estaba muy cerrado pero de a poco se dilataba, acariciaba su clítoris con una mano y con la otra seguía trabajando ese hermoso culito, ella gemía, estaba tan excitada, que necesitaba ya sentir la polla en su interior:

Dámela, penétrame, yaaaaaaaaa, hazlooo

El sabia que su polla era muy grande para ese culito , estaban a un costado de la ducha el jabón seria ideal para penetrarla, enjabono su polla y la puso en ese agujerito tan deseado, la tomo de su cintura, la atrajo hacia el y presiono un poco, entro la cabeza, ella la sintió quejándose , antes que ella se arrepintiera la atrajo de golpe y la espuma jabonosa permitió que la polla se deslizara en ese canal tan estrecho, el grito de Verónica fue terrible, pedía que se la sacara, el la fue serenando acariciando su espalda, sus pechos, hasta que ella se fue dilatando y el culo se acostumbro a semejante polla, de a poco comenzó a moverse, acariciaba su clítoris, ella empezaba a gemir, a acompañar los movimientos, cada vez era todo mas rápido, mas fuerte, el orgasmo que ella tuvo la hizo contraer, el sintió como el culo al contraerse ahorcaba su polla y le producía una hermosa acabada llenando ese culo de semen.

Ella se enderezo, ahora si que debería cuidarse por unos días, tenía su concha ardida, el culo destrozado, pero lo que ella había gozado le hacia olvidar todo eso, el la miro, sonrió, y dijo:

Hacia tiempo que no gozaba como hoy, de ahora en mas serás solo mía – se dio vuelta y se fue.

Veremos si te dejo otra vez grito Verónica sonriendo, y volvió bajo la ducha pensando en esa próxima vez.