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La Venganza Es Dulce IV

en Amor filial

 
 
Después de ese intercambio de miradas; de pasar mil y una cosas por sus pensamientos, en el de Ana por el hombre guapo y varonil que tenía en frente y en el de Jorge rencor y resentimiento hacia su progenitora..
 
Digame rápido que desea, estoy muy ocupada. -Ana-
Quiero hablarle de una excelente idea para su revista, quisiera me de el espacio para política. -Jorge-
La verdad ese tema es muy aburrido, con eso, la revista irá a la baja. -Ana-
No me responda ahora, piénselo, tómese su tiempo, yo soy paciente. -Jorge-
Está bien, pero no le prometo mucho, déjeme sus datos con mi recepcionista, yo lo llamaré. -Ana-
Así dicen todos y nunca llaman, mejor, que le parece si la invito a comer, hablamos de mi idea y nos conocemos un poco ¿Qué le parece? -Dijo Jorge mirándola a los ojos-
¿Y para qué querríamos conocernos? -Preguntó Ana con una voz autoritaria-
No lo sé, una razón es que yo soy foráneo y no conozco más que a mis compañeros de trabajo. Acepte por favor. -Jorge-
Está bien, pero hoy no puedo, ¿Podría ser mañana? -Ana-
Claro que sí dulce dama, quedo a sus ordenes. -Dijo Jorge tomando y besando la mano de ella-
Gracias, mi nombre es Ana Durán Martínez. -Ana-
Soy Jorge Antonio Herrera Carrizales. Hasta mañana entonces, a esta hora. -Jorge-
Hasta mañana, a esta hora. -Ana-
 
Ana quedó impactada con ese hombre, tenía un "no se que" que llamaba la atención de ella, muy guapo, joven, y le agrado que la invitara a salir, pero ¿Por que aceptó salir con él? Apenas con unos minutos de haberlo conocido. No sabía la respuesta, pero ya había aceptado y además ya tenía mucho tiempo que no salía con un hombre y menos con un hombre joven.
 
Cuando Jorge vio a esa mujer, a su madre biológica, pensó muchas maneras en vengarse, pensó en secuestrarla, pero obviamente necesitaba al menos 2 cómplices para eso, pensó en asesinarla, pero eso sería manchar sus manos y su nombre, el nombre que le dieron sus padres adoptivos, pensó en quemar su oficina, pero eso se iba a arreglar con otra oficina, y lo último que pensó fue en enamorarla, ella  estaría tan enamorada de él, que cuando él le rompiera el corazón ella sufriría mucho, y eso quería él para ella, sufrimiento y más sufrimiento así que a partir del día siguiente empezaría su venganza.
 
Al día siguiente llegó Jorge puntualmente a la oficina de Ana, la espero un momento en recepción. Después fueron a comer, Ana le recomendó el lugar ya que Jorge no conocía algún buen lugar.
 
Permitame un momento Ana, enseguida regreso, es que olvidé algo en el carro. -Jorge-
Claro, pero por favor, no me hables de usted que me haces sentir más vieja de lo que estoy jaja -Ana-
Está bien, pero no estás vieja, estás tan joven y hermosa, que cualquier hombre podría caer rendido a tus pies bella dama. No tardo. -Jorge-
 
Luego de 5 minutos o tal vez un poco menos regresó Jorge con un ramo de rosas rojas..
 
No hay nada más bello que estas rosas que tú mi querida bella dama. -Dijo Jorge dándole el ramo-
Wow muchas gracias Jorge que caballero eres. -Exclamó Ana muy contenta con dicho detalle-
Nada que agradecer, es una manera de agradecerte que hayas salido conmigo. -Jorge-
Dime, ¿que idea política tienes para la revista? Es ese tu interés, por eso hemos salido hoy. -Ana-
Si, tengo cierta idea para un espacio, pero por el momento sólo quiero disfrutar tu compañía, tu serás siempre la directora de la revista, y yo desde que llegué a Orizaba no había salido con una mujer y menos una tan hermosa como tú, así que podemos hablar de mi idea política después ¿qué te parece? -Jorge-
Por mi encantada, yo no tengo muchos amigos y tú me agradas mucho, además que aburrido hablar de trabajo en horas de comida y más aburrido que sea de política. -Dijo Ana riéndose a carcajadas por su último comentario-
Jajaja que simpática eres Ana, pero ya que conozcas más de política verás que no es para nada aburrido. -Jorge-
¿Te apasiona la política verdad? -Ana-
Muchísimo, espero pronto poder tener un puesto en ello, me eh preparado y me siento capaz. -Jorge-
Haces bien, seguramente tu novia ah de estar muy orgulloso de tí.  -Ana-
Jaja ¿cuál novia? Yo no tengo novia. -Jorge-
Creí que si, eres un hombre muy atractivo, seguramente tienes a más de una mujer tras tuyo. -Ana-
Tal vez, pero no las eh volteado a ver, me eh concentrado en mi trabajo y mis planes que ni chance para verlas. -Jorge-
Hay tiempo para todo en la vida, cuando te sientas preparado, harás tu vida amorosa. -Ana-
Seguramente, pero dime tú, ¿eres casada? ¿Tienes novio? -Jorge-
Ninguna de las 2, soy soltera, no tengo novio pero sí tengo una hermosa hija.
¿En verdad? Me da gusto, seguramente eres una madre muy amorosa y tu hija está orgullosa de tener una madre como tú, ¿y no tienes hijos varones? -Preguntó Jorge ya sabiendo la respuesta a esa pregunta, pero sólo quería incomodar a Ana-
Mmm no, no tengo varones sólo tengo a mi hija Gaby. -Respondió Ana, pero por su mente le pasó su hijo varon, el que tuvo hace ya muchos años-
Mentirosa!!! Tuviste un varón, yo soy ese varón hija de puta!! Esas palabras pasaban por la mente de Jorge
Que mal, mi madre es muy linda y amorosa, pero si hubiera tenido una madre como tú me hubiera sentido muy orgulloso. --Jorge-
Gracias  por el alago -Ana-
 
Pasó la hora de comida, Ana estaba muy contenta con la compañía de Jorge, hace mucho que no se la pasaba tan bien con la compañía masculina. Jorge fue a dejarla a la oficina y quedaron de volver a salir el siguiente fin de semana.
 
**Orizaba, Veracruz. Febrero de 1997**
 
Jorge y Ana habían entablado una gran amistad, solamente amistad. Salían casi cada fin de semana de paseo, al cine, a comer, o aunque fuera a un parque, pero solían salir seguido. Jorge tan atento y caballeroso con ella, siempre le daba algún detalle, una flor, un piropo, siempre tenía algo para ella. Ana sentía algo "extraño" hacia él, siempre pensaba en él, lo extrañaba, lo necesitaba. No quería reconocerlo, pero se estaba enamorando de Jorge o tal vez ya lo estaba pero no quería admitirlo.
 
En cambio Jorge alimentaba más su rencor, su odio hacia ella. En cada detalle en cada palabra bonita iba un "te odio" "pudrete" "muerete" hacía ella, pero obviamente ella jamás sintió eso, ya que Jorge  supo disimularlo muy bien.
 
Sonó el telefóno de  Ana, la llamaba Jorge.
 
Hola Ana ¿Cómo estás hoy? Ay pero que bruto soy, sé que estás más hermosa que nunca. -Jorge-
Jajaja ay Jorge como eres. Estoy bien ¿Y tú? -Ana-
Ahora que te escucho, estoy muy bien. Oye mi bella dama, esta noche es la inaguración del salón de baile y quiero invitarte a bailar ¿Aceptas? -Jorge-
Claro que sí, me encanta salir contigo. ¿A que hora nos vemos? -Ana-
A las 8pm ¿Pasó por tí a tu casa? -Jorge-
No a mi casa no, ahí estará Gaby, mejor nos vemos en la esquina. -Ana-
Ya deberías presentarme a tu hija, somos amigos y me encantaría conocerla. -Jorge-
Después te la presento, aún no, por favor. -Ana-
Está bien, como tú digas. Nos vemos entonces a las 8pm. Te tengo una sorpresa. -Jorge-
¿Una sorpresa? ¿Cuál? -Ana-
Si te digo, ya no será sorpresa. Nos vemos más tarde. -Jorge-
Hasta más tarde. -Ana-
 
En punto de las 5pm Ana se dió un baño, rápidamente terminó y salió a cambiarse, se puso un conjunto de pantalón y saco y un chongo como peinado. En eso llegó su hija Gaby y la vio casi lista.
 
¿Vas a salir mami? -Preguntó Gaby mirando de pies a cabeza a su madre-
Si mi amor, voy a salir a bailar con un amigo. ¿Cómo me veo? -Preguntó Ana mirándose en el espejo.
Te miras hermosa mami, como siempre. ¿Segura que es un amigo? -Gaby-
Si hija, un amigo, sólo un amigo. -Ana-
Ahh que bien, y ¿por que no me lo has presentado? -Gaby-
No se ha dado la oportunidad hija, pero en cuanto sea posible lo haré. -Ana-
Ok mamá, pero dime una cosa ¿ese amigo no te gusta? -Gaby-
¿Por que la pregunta Gaby? -Ana-
Es que te veo tan nerviosa y tan entusiasmada, que pensé que podría ser un novio. -Gaby-
No es mi novio hija, somos amigos, hace 3 meses que salimos pero solo como amigos, aunque la verdad, si me gusta mucho. -Dijo Ana sonrojandose-
Ayy mamita que emoción ¿Y tú le gustas a él? -Gaby-
No lo sé mi reina, pero me dijo que me tenía una sorpresa.  -Ana-
¿Y piensas ir así vestida? -Preguntó Gaby volviendo a mirar a su madre de pies a cabeza-
Si Gaby, me dijiste que me miraba bien. -Ana-
Si mamá te miras hermosa, pero ¿Quieres gustarle a tú amigo? -Gaby-
Mmm, si hija, me gustaría tener un novio como él. -Ana-
Entonces esperame mamá, mientras quitate esa ropa que no va acorde con gustarle, si vas a bailar mamá, no vas al trabajo. Espera un momento, voy a mi cuarto.
 
Salió Gaby del cuarto de su madre, mientras tanto Ana obedecía lo que dijo su hija y comenzó a desvestirse; unos minutos después entra Gaby con un vestido, unos zapatos altos y una plancha para cabello.
 
Si quieres gustarle a tu amigo debes verte super super super hermosa mami y con esto seguramente lo conseguirás. -Dijo Gaby mostrandole un vestido cortito y con un buen escote tanto de enfrente como de espalda en color rojo y unos zapatos de tacón alto, muy alto.
Ay mi amor, eso es demasiado juvenil para mi -Ana-
Mamá si no estás vieja ya te lo eh dicho muchas veces; anda cambiate que se te hará tarde.-Dijo Gaby con un tono de regaño-
 
Ana obedeció a su hija, ellas eran de la misma talla así que el vestido le quedó pintadito; su hija le planchó el cabello y la maquilló; Ana se arregló como nunca, ese vestido rojo, era lo bastante corto y escotado como para gustarle a Jorge. Se miraba en el espejo y le gustaba la mujer que en él veía; para sus 45 primaveras, parecía de 30. Quería llamar la atención de Jorge, quería gustarle a Jorge, quería ser su novia. La edad no le importaba en lo absoluto, había conocido parejas en donde se llevan 15 y hasta 20 años y todo estaba muy bien.
 
Llegó la hora esperada, Jorge puntualmente esperaba a Ana en la esquina, y cuando la miró quedo impactado con su belleza y su cuerpo juvenil.
 
Hermosura de mujer, te miras espectacular. -Dijo Jorge impactado con lo bien que se veía Ana.-
Jajaja hay Jorge, harás que me sonroje. ¿En verdad me veo bien?-Preguntó Ana, con algo de tímidez-
Bien es poco, te miras hermosa. -Mencionó Jorge, tomando de la mano a Ana y saludandola con un beso en la mejilla.-
Gracias, tú como siempre tan galante. -Ana-
No tienes nada que agradecer, yo sólo digo la verdad. ¿Nos vamos? -Jorge, abriendo la puerta del coche-
Claro que sí -Dijo Ana, enseguida se subió al coche-
 
Aunque era su madre biológica, Ana era una mujer muy guapa y con esa manera tan provocativa que se había vestido, Jorge no pudo evitar tener una erección, la cual pudo disimular muy bien. No la miraba como madre, la miraba como una mujer equis, una mujer, la peor de las mujeres; la odiaba, pero un buen palo y hacerla sufrir era lo que le importaba ahora, como dicen, en tiempos de guerra, cualquier agujero es bueno, aunque sean los agujeros de su progenitora.
 
Luego de unos minutos llegaron a su destino, rápidamente buscaron mesa para dejar sus pertenencias y en seguida pedir unas bebidas para alegrar la noche. Entre pláticas, ricas, y vodka Jorge pensó que ya era hora de empezar la segunda parte de su venganza...
 
Ana, me encanta compartir mi tiempo contigo, mis días son tan largos sin ti y tan cortos contigo, siento que te necesito mucho. Me gustas Ana, me gustas mucho, disculpa que te lo diga pero necesitaba sacar esto, esto que me oprime el pecho, que en cada suspiro quería salir a la luz. -Jorge-
Jorge, yo, yo.. -Dijo Ana, tartamudeando-
Ya sé que me vas a decir, que hay mucha diferencia de edad entre nosotros, que es algo imposible, que me miras como amigo, hasta que podría ser tu hijo, tú hijo Ana!. -Dijo Jorge recalcando la última frase-
No Jorge, no pensaba decirte nada de eso, al contrario, tú también me gustas mucho, sólo que creí tú pensabas algo al respecto de la diferencia de edades. -Ana-
¿Entonces no te importa la edad? -Jorge-
En lo absoluto. -Ana-
¿Quieres ser mi novia? -Dijo Jorge tomandola de la mano-
Sí Jorge, quiero ser tu novia. -Ana-
Es la mejor decisión que has tomado, no te arrepentirás de nada. -Le dijo Jorge, enseguida la besó en los labios.-
 
Madre e hijo se besaron, se besaron por primera vez; Ana se sentía en las nubes, al fin el hombre del que se estaba enamorando le había pedido ser su novia, disfrutaba su primer beso de "amor" de el amor verdadero pensaba ella; en cambio Jorge sólo pensaba en su venganza.
Luego de unos minutos de besos, se pararon a bailar, disfrutaban de la noche, de las bebidas, de la compañía y ahora de el noviazgo. Ana contoneaba sus caderas al ritmo de la música, Jorge le seguía el paso, disfrutaban la noche. Luego de 2 horas de diversión...
 
Me gustas mucho Ana, me muero por estar contigo, te deseo.  -Jorge-
Yo también quiero estar contigo mi amor. -Ana-
¿Te gustaría ir a mi casa? -Jorge-
Vamos, además me siento mareada, ya no quiero estar aquí. -Ana-
 
Pagaron la cuenta del lugar, se dirigieron a casa de Jorge. Estando ahí, apenas cruzando la puerta, empezaron a besarse locamente; Jorge abrazaba a Ana mientras la besaba con pasión; Ana se dejaba llevar, lo estaba disfrutando mucho, tenía ganas ya de estar con un hombre. Ana pensaba que era por ella, que había conquistado a Jorge por ser como es, pero para Jorge todo era una simple venganza, una dulce venganza. Continuaron abrazándose y besándose con pasión y lujuria; de pronto Ana, se hincó ante Jorge, desabrochó su pantalón y bajo su ropa interior estaba una verga, algo que Ana hace mucho tiempo no tenía ante ella; rápidamente empezó a mamarle a Jorge; a él le estaba gustando la mamada, lo hacía muy bien esta mujer; entre sus adentros y disfrutando el sexo oral pensaba " qué pensarías su supieras que le estas mamando la verga a tu hijo?"
 
Jorge contuvo su venida y levantó a Ana, la acostó boca arriba sobre el sillón y luego la penetró. Primero suavemente, después con pasión. Ella perdió la cordura de sí misma; "soy tuya mi amor" fue lo que alcanzó a decir entre sus gemidos de pasión. Y estaba dispuesta a entregarse como jamás se había entregado. Después de un buen rato de mete y saca; Jorge llevó a Ana a la cama..
 
Te voy a dar por este rico culo que tienes. -Jorge-
Si mi amor, lo que tú quieras, soy tuya. -Ana-
Que culito tan rico tienes ¿quieres que te de? -Jorge-
Si papito, dame, lo deseo; quiero tu verga dentro. -Ana-
 
Jorge, sin lubricante, sin crema, saliva ni nada se la metió casi de un trancazo; Ana resintió mucho la penetración ya que hace muchos años había dejado de practicar el sexo anal; pero no se quejó, quería complacer a Jorge y seguro una queja apagaría la llamarada de la pasión y siguió disfrutando.
 
Mmmmm que rico ano tienes chiquita, me aprietas delicioso. -Dijo Jorge entre el mete y saca anal-
Dale mi amor, dale duro que lo estoy disfrutando como nunca. -Ana-
Quiero que seas mia, que seas mi mujer a partir de esta noche. -Jorge-
Seré tu esclava mi amor; jamás me habían cogido como tu ahora; Con tanta lujuria, con tanta pasión, mmm me encanta, quiero ser tu esclava, complacerte en todo lo que tú me pidas papi. -Decía Ana entre gemidos y pujidos-
¿Mi esclava? ¿Estás segura? -Jorge-
Segura papi, quiero complacerte, me encanta hacerlo, lo disfruto; y que rico me estás culeando, dame así siempre. -Ana-
 
Ambos terminaron en un gran orgasmo, que los dejó satisfechos. Durmieron hasta entrada la tarde. Luego Jorge llevó a Ana a su casa.
 
Gracias mi amor, ha sido la mejor noche de mi vida. -Ana-
Gracias a ti princesa; gracias por aceptar ser mi novia y... mi esclava. -Jorge-
Soy tuya papi, no lo olvides. -Ana-
Ahora que somos novios ¿cuándo me presentarás a tu hija? Debo pedirle autorización -Jorge-
Pronto Jorge, hoy hablaré con ella y organizaré una comida o cena para presentarlos. -Ana-
Está bien Ana, seré paciente. Debo irme, tengo una comida con unos clientes. ¿Nos vemos mañana? -Jorge-
Si, hasta mañana Jorge. -Dijo Ana-
 
Se dieron un beso apasionado, Ana bajó del carro, enseguida Jorge se fue. Ella entró a su casa.
 
Bonitas horas de llegar mamá ¿Se puede saber donde andabas y con quién? -Dijo Gaby, en un tono burlesco por la reclamación que le hacía a su madre-
Ay mi amor, ha sido la noche más maravillosa de mi vida. -Ana, entre suspiros-
¿Por que mamá? ¿Acaso ya son novios? -Gaby-
 
Ana no emitió sonido alguno, sólo movió la cabeza de manera afirmativa y sonrió...
 
Aaaaahhh ahhhh que bueno mamita, que bien que bien -Dijo Gaby gritando muy emocionada-
Jorge te quiere conocer hija; ¿qué opinas? -Preguntó Ana a Gaby-
Pues ya te estás tardando demasiado mamá ¿cómo que ya son novios y yo no eh dado mi aprobación para ello? -Gaby-
Jajaja, fue justo lo que Jorge pensó. -Ana-
Entonces hay que organizar algo, y comprar algo de ropa, debes mirarte muy hermosa ese día. -Gaby-
 
Pasaron 4 días, Ana y Gaby organizaron la cena para Jorge; el cual llegaría puntualmente a las 7:30pm.
 
¿Cómo me veo mi amor? -Preguntó Ana, nerviosa-
Hermosa mamita; le vas a encantar. -Gaby-
Me ves con amor por que soy tu madre. -Ana-
Con amor o sin amor, te miras hermosa mamá ya no lo dudes. -Gaby-
 
Dieron las 7:30pm y Jorge puntualmente estaba llegando. Tocó el timbre de la casa; Ana muy contenta lo abrazó y lo invitó a pasar.
 
Mira Jorge, ella es mi hija Gaby. Hija, el es Jorge, mi novio. -Ana los presentaba-
Mucho gusto señorita, tan hermosa como su madre. -Dijo Jorge, tomando y besando la mano de Gaby-
Wow, que galante; Gracias por el alago. -Gaby-
¿Verdad que es un amor hija? -Preguntó Ana a su hija-
No la obligues a decir una mentira -Jorge-
Para nada, no me obligan a nada jaja -Gaby-
 
Jorge miró a la hija de Ana, su hermana o media hermana, no lo sabía aún, pero lo que sí sabía era que habían salido de la misma mujer, compartían la misma madre. Su hermana Gaby era muy parecida a Ana, sólo que  un poco más alta. Su cabellera oscura y muy larga, unos ojos grandes y su piel blanca; guapísima. Tenía que admitirlo. Luego de unos minutos en la sala, pasaron al comedor y siguieron platicando.
 
¿Y qué estudias Gaby? -Preguntó Jorge-
Ciencias de la comunicación. -Gaby-
Una carrera muy interesante. ¿Y tienes novio? -Jorge-
Este, si eh tenido, pero por ahora no. -Gaby, tartamudeando-
¿Y no te gusta algún compañero? Eres muy bonita, tan bonita como Ana, seguro tienes a uno o más suspirando por tí. -Jorge-
No, no me gusta nadie. -Gaby-
Ya mi amor, deja de incomodar a mi hija con preguntas sobre novios, a ella le gustan las mujeres. -Dijo Ana con toda la naturalidad del mundo-
¿De verdad? Disculpame Gaby, lo que menos quiero es incomodarte. -Jorge-
No hay problema, tú no lo sabías. -Gaby-
¿Y tú permitiste eso mi amor? Yo no lo veo malo pero ya vez que eso está muy discriminado hoy -Preguntó dirigiéndose a Ana-
Al principio si fue extraño, pero es mi hija y la amo con todos sus defectos y virtudes, además, la locura por las mujeres la heredó de su padre jajaj. -Dijo Ana riéndose-
¿Y cómo conociste al padre de Gaby? -Preguntó Jorge-
Fue en el año de 1974 en que ellos se conocieron, mi madre me contaba eso desde que era niña. -Gaby-
 
Sonó el teléfono, Ana contestó, pero era una llamada para Gaby. Mientras ellas atendían el teléfono, Jorge pensaba en el año que le había mencionado Gaby; 1974; entonces no eran hijas del mismo padre, ya que Jorge había nacido en 1968. También pensaba en el gusto de Gaby por las mujeres, pero ella le mencionó que ya había tenido algunos novios, entonces podría incluirla en su venganza; cojerse y hacer sufrir a madre e hija, a su madre y a su media hermana. Tal vez Gaby no sabía nada, pero era hija de su madre, la que lo abandonó, Gaby obtuvo el cariño que Ana negó a Jorge, así que también tenía que vengarse de ella, vengarse de ambas.
 
Continuará...
 
 
Gracias por leer mi relato; espero sus comentarios por favor.