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La Venganza Es Dulce XIII

en Amor filial

**Monterrey Nuevo León. Noviembre de 2016**

 
Ana Gaby alternó su relación con padre e hija. A veces era algo difícil, pero no imposible. Un día como otros tantos fue a buscar a Andrea a su casa.
 
Hola Andrés ¿cómo estás? -Ana Gaby-
Bien amiga, ¿qué haciendo por aquí? -Andrés-
Vine a buscar a Andrea ¿Está? -Ana Gaby-
No está, salió de compras con mi mamá, pero pasa, no creo que tarden. -Andres-
Gracias Andrés, y ¿a que hora se fueron? -Ana Gaby-
Hace como media hora-Andrés-
Bueno, mientras repasaré un poco mis lecciones de francés, sirve que si tengo dudas, tu me ayudas. -Ana Gaby-
¿En verdad vienes a las clases de francés? -Andrés-
Si, ¿ a qué otra cosa podría venir? -Ana Gaby-
Pues, tal vez a hacer lo que hicieron el día de nuestro cumpleaños. -Andrés, agachando la cabeza-
¿Qué hicimos? -Ana Gaby-
Las fui a buscar y las encontré besándose. -Andrés-
 
Ana Gaby sólo agachó la mirada, se quedó pensando en que Andrés posiblemente las echaría de cabeza con su madre, eso arruinaría sus planes.
 
¿ Mi hermana y tú son lesbianas ? -Andrés-
No Andrés, pero nos entendimos en ese punto y así la pasamos bien. -Ana Gaby-
¿Les gustan los hombres? -Andrés-
Si Andrés a ella y a mi nos gustan los hombres. -Ana Gaby-
A ok -Andrés-
¿Lo dudas? ¿Te lo demuestro? -Ana Gaby poniéndose de pie y acercándose a Andrés-
¿Cómo me lo vas a demostrar? -Andrés-
Tú sólo flojito y cooperando, déjate llevar, no digas nada. -Ana Gaby, con voz seductora-
 
Ana Gaby se acercó a Andrés, se hincó delante de él, desabrochó su pantalón, y sacó el pene de Andrés, aún flácido.
 
¿Qué haces Ana Gaby? Mi madre y mi hermana no tardan en llegar. -Andrés, nervioso-
Voy a demostrarte que me gustan los hombres, este amiguito está aún dormidito, que pena. -Ana Gaby-
Ya no tardan en llegar -Andrés-
Tú déjate llevar ya te dije, recuerda la letra de una canción "una aventura es más divertida si huele a peligro" -Ana Gaby, cantando la estrofa de la canción-
 
Ana Gaby comenzó a chupar el miembro dormido de Andrés, él estaba muy nervioso, pero le gustaba lo que sentía y eso era obvio por que su miembro comenzó a reaccionar.
 
¿Te gusta verdad? -Ana Gaby-
Si, nunca me habían hecho eso -Andrés, nervioso-
¿Nunca? ¿En serio? -Ana Gaby-
Nunca, ni siquiera eh tenido novia. -Andrés-
Bueno, ahora verás lo rico que es sacar la lechita. -Ana Gaby-
 
Ana Gaby nuevamente chupó el pene de Andrés, el cual ya estaba duro, una cosa larga y ancha, muy parecida a la de su padre.  Empezó a masturbar ese trozo de carne ya duro y a mamarlo a la vez. Andrés se sentía en la gloria, jamás había tenido una sensación así, sólo había visto esas escenas en películas XXX. 
 
Mmm siento cosquilleo, ah que rico. -Andrés-
Yo sé que te gusta papacito, ese cosquilleo es bueno. -Ana Gaby-
Sigue así, me gusta me gusta mucho. -Andrés-
Dame lechita papacito, quiero tu lechita en mi boca. -Ana Gaby-
Auuugg auuugg siento siento que yaa mm -Andrés-
 
Pasaron pocos segundos para que Andrés estallara de placer, llenó de leche la boca de Ana Gaby. Ella sin pensarlo exprimió la verga de Andrés, sacó cada gota de leche que provenía de ahí, se la tomó por completo, dejó limpo el miembro. Inmediatamente después de tomarse la leche de su medio hermano, se levantó y le dio un beso en los labios el cual Andrés respondió, un beso muy apasionada muy cachondo y con sabor a mecos de él.
 
¿Ya viste que si me gustan los hombres? -Ana Gaby-
Si, que rico me has hecho sentir. -Andrés-
Lo sé, lo sé, soy experta mamando vergas jaja. -Ana Gaby-
¿Chupas seguido? -Andrés, acomodándose la ropa-
Vergas no, pero le chupo la raja a tu hermana. -Ana Gaby-
¿Tienen sexo también? -Andrés-
Pues claro, ¿Apoco creías que era sólo besitos y manita sudada? Claro que no, eso ya no se usa. -Ana Gaby-
Si, creía que sólo besos. ¿Y un día puedo verlas hacerlo? Sólo eh visto películas. -Andrés-
Claro, y participar si tu quieres también. -Ana Gaby-
 
En eso se escucha el motor del coche de la madre de Andrés. Viridiana y Andrea habían llegado.
 
Hola Ana Gaby que gusto verte en esta tú casa. -Viridiana-
Hola señora, gracias. Vine a buscar a Andrea para tomar las clases hoy aquí. Pero llegué y Andrés me dijo que tenían poco que habían salido y me autorizó para esperarlas. Espero  no se moleste. -Ana Gaby-
Sabes que no es molestia, puedes venir cuando quieras, cuantas veces quieras. -Andrea-
Gracias, me siento tan bien con ustedes, me hacen sentir como de la familia. -Ana Gaby-
Ya lo eres, nunca lo dudes, los dejo con sus clases, voy a ver los preparativos de la comida, te quedarás a comer verdad Ana Gaby. -Viridiana-
Si no hay inconveniente con todo gusto señora; gracias -Ana Gaby-
 
Andrea y Ana Gaby estaban en la recamara con sus clases de francés. La madre de Andrea la llamó un momento, cuando ella salió entró a Andrés a hablar con Ana Gaby.
 
¿Y cuándo voy a verlas a mi hermana y a ti en acción? -Andrés-
No lo sé, si quieres esta misma noche. -Ana Gaby-
¿Y cómo? -Andrés-
Mmm ¿Y si finjo que me siento mal y me quedo aquí? -Ana Gaby-
Suena bien, espero funcione. -Andrés-
Cuando estemos solas, en un descuido que Andrea se pare al baño te metes rápido al closet y desde ahí nos espias. -Ana Gaby-
 
Las horas pasaron, pasó la clase de francés, la hora de comida. Platicas, viendo tv. Rato después llegó Jorge, miró sorprendido a Ana Gaby, ella sólo le echaba ojitos. Llegó la hora de la cena a la cual Ana Gaby por petición de Andrea se quedó.
 
Muchas gracias señora, ustedes siempre me hacen sentir como una princesa. -Ana Gaby-
Eres una princesa Ana Gaby, muchas gracias a ti por acompañarnos y ser amiga de mis hijos. -Viridiana-
Más que amigos, los considero mis hermanos. -Ana Gaby, haciendo gestos de dolor-
¿Qué tienes Ana Gaby? -Andrea-
Me duele un poco el estómago, nada de cuidado. Debo irme. -Ana Gaby-
¿Cómo te vas a ir nada más asi? No, por favor quédate, al menos hasta que te sientas mejor. -Andrés-
Ya eh molestado todo el día en esta casa es mucho. -Ana Gaby-
Ninguna molestia y Andrés tiene razón, quédate hasta que te sientas mejor, dormirás en mi recamara para yo misma cuidarte. -Andrea-
Si te sigues sintiendo mal no te presentes a trabajar y ve al médico. -Jorge-
De ninguna manera señor, a mi trabajo no faltaré por nada, esté seguro que ahí estaré por la mañana. -Ana Gaby-
Bueno, quédate con mi hija, que pase tu malestar y por la mañana te vas conmigo a la oficina. -Jorge-
Hija, lleva a Ana Gaby a reposar, ahorita le llevo un té para su dolor. -Viridiana-
 
 
A Ana Gaby le funcionó el truco del malestar para poderse quedar en casa de la familia Herrera, Viridiana tan mimosa y maternal le llevó el té a Ana Gaby, la cual se lo tuvo que tomar, llegó la hora de domir. Andrea le prestó una pijama a Ana Gaby, ambas se cambiaron y se metieron a la cama apagando la luz pero dejando encendida la lampara de mesa. Luego de un rato Andrea se paró al baño, Ana Gaby aprovechó para mandarle el mensaje a Andrés. Luego de unos segundos Andrés se asomó cuidadosamente por la puerta, Ana Gaby le hizo una señal y él rápido se metió al closet y cerró la puerta. Otro momento después entró Andrea, se metió a la cama; Ana Gaby se puso cariñosa.
 
Ya me siento mejor de mi estómago chiquita, pero ahora no me quiero ir. Estoy aquí contigo, toda la noche para nosotras solitas. -Ana Gaby, besándo la nuca de Andrea-
No hagas eso, que es mi debilida. -Andrea-
Mmm me encanta cuando estás débil. -Ana Gaby, tocando la cintura de la chica, sin dejar de besar su nuca-
Ay que rico. -Andrea-
 
Andrés vigilaba desde el closet. Mientras en la cama, Ana Gaby exploraba con sus dedos la puchita de Andrea. Cuidadosamente quitó la ropa de Andrea, la dejó por el suelo, abrió sus piernas y bajó a saborear ese delicioso manjar de placer y de lujuria. Andrea se arqueaba de placer mientras acariciaba el cabello de Ana Gaby. Andres sólo espiaba, pero tenía una erección tremenda con dicha escena. Le daban ganas de salir, pero tenía miedo a que su hermana gritara.  No pasó mucho tiempo para que Andrea empapara la carita de Ana Gaby, había tenido un orgasmo muy rico, estaba muy complacida, pero ahora le tocaba a ella complacer a su amada. Rápidamente cambiaron de posición, ahora Ana Gaby estaba acostada con las piernas abiertas, se inclinó un poco para que Andrés mirara mejor desde donde estaba; Andrea se colocó entre las piernas de Ana Gaby, colocando las nalguitas hacía dirección del closet, donde estaba escondido su hermano. Andrés sólo miraba el culito perfecto de Andrea, tan delicioso, tan antojable, había visto muchas veces a su hermana en traje de baño, pero jamás la había visto como mujer, una mujercita hermosa, tan perfecta, por eso algunos de sus amigos de la escuela estaban tan locos por ella. Ana Gaby gemía de placer, su media hermana le metía la lengua por la entrada de su vagina mientras dedeaba su clítoris delicioso. Por otro lado Andres se masturbaba, era tan delicioso mirar a esas mujeres tan hermosas, comiéndose las rajitas. Andrés y Ana Gaby terminaron juntos, sin saberlo, Andrés chorreaba la puerta del closet de su hermana, Ana Gaby terminó en los labios de Andrea.
Después de un momento, Ana Gaby y Andrea se abrazaron, se acomodaron, luego de un  momento Andrea se quedó dormida. Cuidadosamente Ana Gaby se levantó de la cama, se dirigió al closet y hablando en voz baja...
 
Andrés, ¿te gustó lo que viste? -Ana Gaby-
Mucho Ana Gaby, me fascino, me masturbé mirándolas. -Andrés, también en voz baja-
¿Y por que no saliste a participar? -Ana Gaby-
Estás loca, como iba a salir. Bueno me voy no vaya a despertar mi hermana.-Andrés-
Bueno, luego participarás, hasta mañana. -Ana Gaby-
 
 
Andrés salió del cuarto, se dirigió al suyo y se fue a dormir, muy complacido por ver lo que vió. Ana Gaby se durmió junto a Andrea, abrazandola y acurrucándose junto a ella.
 
**Monterrey Nuevo León.  Diciembre de 2016**
 
Jorge cada día está más embobado con Ana Gaby y por ella ah dejado a todas sus amantes. Ahora ella tiene una cuenta en el banco con varios ceros, el departamento ya está a su nombre y recientemente ah adquirido un carro. Ella sigue alternando la relación con padre e hijos, aunque la relación que tiene con Andrés no pasa de unas mamadas de verga y aunque Andres ah querido penetrarla ella no lo ah permitido. Él la sigue espiando con su hermana pero de ahí nada más ha pasado. Un día decide que ya es tiempo de confesarle a Andrea la relación que tiene aparte de ella.
 
Andrea tengo algo que confesarte pero no se como vayas a reaccionar. -Ana Gaby-
Pues dímelo y te darás cuenta de mi reacción. -Andrea-
Bueno, pues; desde hace poco más de dos meses soy amante de tu padre. Y algunas veces le eh mamado la verga a tu hermano. -Ana Gaby-
 
Andrea se quedó callada un momento. Se quedó pensando en lo que escuchó; luego sonrió y le dijo...
 
Bueno, mi hermano es un lelo bueno para nada, es una equis, como si no existiera. Respecto a mi padre, pues te lo perdono por que es mi padre, pero si fueran otras personas si te hubiera dejado. -Andrea-
¿No te enojas entonces? -Ana Gaby-
No, en realidad ya sospechaba lo tuyo con mi padre, tantas atenciones, tanto apoyo, ya era raro. Además siempre eh tenido curiosidad y quien mejor que tú para responderme lo siguiente. ¿ Qué tal es mi papá como amante? -Andrea-
Es increible no sabes. Siempre me deja satisfecha y es muy muy apasionado. -Ana Gaby-
¿Y ya te dió por el culo? -Andrea-
Desde el primer día. -Ana Gaby-
¿Y duele? -Andrea-
Al principio es molesto, pero luego se disfruta, no pensé se pudiera sentir tan rico por ahí. -Ana Gaby-
Como te envidio. -Andrea-
¿Te gustaría tener sexo con tu papá? -Ana Gaby-
Si, desde ese día que me dijiste que si fuera tu padre tendrías sexo con él, se me metió la idea en la cabeza. -Andrea-
Yo te voy a ayudar, vas a ver. -Ana Gaby-
¿Crees que mi padre se enoje? Eso me da miedo. -Andrea-
Yo me encargo de él, ya verás como es de amante. -Ana Gaby-
¿Y mi hermano que tal? -Andrea-
A tu hermano sólo le eh mamado la verga algunas veces. -Ana Gaby-
¿No has tenido sexo con él? -Andrea-
No, aún no. ¿A tí te gustaría tener sexo con Andrés?Aún es virgen. -Ana Gaby-
Nunca lo había pensado, prefiero más con mi padre, después ya veremos. -Andrea-
 
 
Ana Gaby volvió a su casa pues era día de visita de Jorge; Ella lo esperaba en ropa muy ligerita, así como a él le gustaba. Jorge llegaría temprano pues quedaron en cenar juntos. 
 
A las 7:00pm llegó Jorge, al ver a Ana Gaby tan sexy y en poca ropa semi transparente se puso muy cachondo, entre besos y manoseos se la  llevó a la cama. Ahí la puso boca abajo y le quitó la diminuta tanga.
 
Que rico culito tienes chiquita, como me encanta, me enloquece. -Decía Jorge mientras le metía la lengua.-
Ay mi amor a mi me encanta que te guste mi culo, que me des por ahí, lo dejes lleno de tu leche. -Ana Gaby-
Eres una puta, ¿te encanta lo que te hago? ¿Lo disfrutas ? Dime putita -Jorge-
Yo disfruto todo lo que tu me haces mi amor, me fascina mmm -Ana Gaby-
Hace muchos años, en Veracruz tuve un par de culitos muy sabrosos, pero bueno, ni al caso viene, el tuyo está mucho más rico. -Jorge.
(Seguro piensas en mi madre y mi abuela, idiota )-Pensaba Ana Gaby-
 
Jorge colocó la punta de su verga venuda en la entrada de el culito de Ana Gaby, y de jalón la penetró, Ana Gaby sólo gimió con un poco de molestia, pero fue algo momentáneo.
 
Que rico aprietas mi vara mamacita uff que delicioso.. -Jorge, con el vaivén de la penetración-
Es tuyo mi amor, para que lo desgarres. -Ana Gaby-
Ay mi amor, mi amor me vengo -Jorge, acelerando el ritmo-
Si corazón, dame tu lechita en mi ojo café si si mm -Ana Gaby-
 
Luego de unos segundos de penetración acelerada, Jorge terminó en el culo de Ana Gaby y ambos tuvieron un rico orgasmo. Se metieron a bañar juntos, ésta vez sólo con sesión de besos y caricias. Terminaron de darse su baño y se sentaron a cenar.
 
Mi amor, hace tiempo quiero comentarte algo. -Ana Gaby-
Si, ¿que cosa? -Jorge-
Este, mm este, no es algo fácil. -Ana Gaby-
Sólo dilo y ya, no pasa nada. -Jorge-
Es que... Andrea y yo.. Ella y yo somos amantes desde antes de empezar contigo. -Ana Gaby-
¿Qué? ¿Mi hija es lesbiana? -Jorge, sorprendido por lo que acababa de escuchar-
No exactamente mi amor, a ella y a mi nos gustan los hombres, pero sin esperarlo llegamos a eso y nos gustó y desde entonces nos entendemos aún más. -Ana Gaby-
Bueno, no sé que decirte, no esperaba eso de mi hija. -Jorge-
Hay otro pequeño detalle Jorge -Ana Gaby-
¿Algo más? ¿Qué pasa? -Jorge-
Pues es que Andrea, ella, ella está enamorada de tí. -Ana Gaby-
¿¡¡Quéee!!!? ¿Está loca o que le pasa? -Jorge.-
¿Por qué tendría que estar loca? Eres un hombre guapo y muy atractivo, a cualquier mujer puedes gustarle, hasta a tu hija. -Ana Gaby-
Pero eso es incesto, eso no puede ser. -Jorge-
¿Apoco crees que sería el primer y el último caso de incesto? -Ana Gaby-
 
De inmediato a Jorge se le vino a la cabeza el recuerdo de Ana y Gaby, su madre y su hermana, la relación incestuosa que tuvo con ellas en Orizaba y cuanto había disfrutado cogiendo salvajemente con ellas. Pero esta vez era diferente, Andrea es su hija, su pequeña, su bebé, su vida entera. 
 
No, eso no es posible, no lo concibo, por favor, no quiero hablar más de esto. -Jorge-
Está bien mi amor, no hablamos de eso, pero por favor no regañes a Andrea, ella no sabe que hablé contigo, me vería como una traidora si me delatas. -Ana Gaby-
No diré nada, haré como que no me has dicho nada, descuida, tu amistad o lo que tengas que ver con mi hija puede seguir pero no me hables más de lo que acabas de decir. -Jorge-
 
Al día siguiente Ana Gaby y Andrea se vieron para sus clases de francés, el cual Ana Gaby ya entendía un poco más. Y salió el tema de su padre.
 
Chiquita ya le dije a tú papá que quieres coger con él. -Ana Gaby-
¿Y qué te dijo? ¿Se enojó? ¿Aceptó? -Andrea, muy intrigada.-
No, no se enojó y tampoco aceptó, al menos no por ahora. Se sacó mucho de onda, no esperaba eso de ti, no quiso le hablara más del tema. -Ana Gaby-
¿Entonces a mi no se me va a hacer coger con mi padre? -Andrea-
Te aseguro que si, pero todo es poco a poco. Al menos tu padre ya sabe que lo deseas. Pero le dije que tú no sabías que yo hablaría con él. Piensa que no sabes que él ya sabe que estas enamorada y que lo deseas. -Ana Gaby-
¿Y qué sigue? -Andrea-
Ahora debes poner de tu parte, viste más provocativa, más escotada, sé más sexy frente a él, como que lo provocas, sólo no seas tan obvia, podría sospechar que hablé contigo. -Ana Gaby-
¿Y crees que funcione? -Andrea-
Te aseguro que si, tu papá es un cachondo, si ve a una escoba con tanga seguro que se le para. Tu hazme caso. Ya verás como muy pronto cogerás con Jorge. -Ana Gaby-
Está bien, a ver como nos va. -Andrea-.
 

**Monterrey, Nuevo León. Diciembre de 2016**

 
Ah pasado casi un mes, a Jorge no se le ha olvidado lo que le contó Ana Gaby sobre su hija, eso le ha dado muchas vueltas en la cabeza. Ahora ve a Andrea con otros ojos, se ah convertido en toda una mujer, es perfecta, su culito bien parado, sus pechos perfectos y con esos escotes que últimamente usa se ve mucho más sensual. Jorge no sabe si es la idea que tiene en la cabeza o ah visto a su hija Andrea más provocativa, lo besa juntito a la boca, lo abraza muy apretadamente, se agacha por cualquier motivo y para las nalgas ah dirección de él. Simplemente no aguanta más, desea a su hija aunque no quiera admitirlo y habla con Ana Gaby.
 
Oye Ana Gaby, ¿ tu crees que Andrea, que ella quiera tener sexo conmigo? -Jorge-
No lo creo, estoy segura de que si querrá. -Ana Gaby-
¿Y cómo lo haríamos? -Jorge-
Sería más fácil que sea aquí en mi casa, nadie se enteraría, además yo estaría presente, por si alguien los mira salir no tengan sospecha alguna. -Ana Gaby-
¿Y cuándo? -Jorge-
¿El sábado en la tarde te parece bien? Así nosotros sólo trabajamos un rato y ella no tiene escuela. -Ana Gaby-
Está bien. Que sea el sábado. -Jorge-
 
Jorge se levantó del sillón, se colocó arriba de Ana Gaby y quiso besarla, pero ella lo rechazó. 
 
¿Qué pasa? ¿Acaso no quieres estar conmigo? -Jorge-
Sabes que me encanta estar contigo mi amor, eso nunca lo dudes, pero hay que ponerte a dieta, no te voy a dar nada de nada, para que el sábado te desquites con Andrea. Debes cumplirle como león en primavera. -Ana Gaby-
Falta mucho para ese día, pero esta bueno, esperaré, a dieta entonces. -Jorge, dándole un beso en la mejilla-
 
Por la noche Ana Gaby fue a ver a Andrea, para contarle la noticia que Andrea deseaba escuchar desde hace algunas semanas atrás. 
 
Chiquita te tengo una noticia. -Ana Gaby-
¿Qué noticia? -Andrea-
El sábado debes de venir a mi casa en la tarde. -Ana Gaby-
¿A qué? -Andrea-
Funcionó el ser más provocativa, tu papá ya me dijo que quiere tener sexo contigo. Y yo le dije que el sábado por la tarde. -Ana Gaby-
Ahhhh ahhhh wooow ¿De verdad? ¿No me mientes? -Andrea. gritando de emoción-
Jeje de verdad chiquita. Ya no le doy nada de nada a tu papá para que ese día esté muy muy cachondo y conozcas como es en la cama cuando está así de caliente. -Ana Gaby-
 
Los días que pasaron para llegar el sábado Andrea aún más atrevida con su padre, se ponía buenos escotes, mini faldas que cuando se agachara se le asomara todo. Lo abrazaba y lo besaba a cada momento. Jorge no soportaba más la situación, la abstinencia sexual provocaba que estuviera más caliente y deseoso. Varias veces le pidió a Ana Gaby que adelantaran la fecha, pero ella se negó pidiéndole que fuera paciente, ya faltaba menos. Y así, largamente, llegó el tan esperado día, Jorge, a las 7am llamó a Ana Gaby a su casa. Ella ya estaba despierta, alistándose para ir a su trabajo.
 
Hola Ana Gaby, ¿aún mi hija está dispuesta a ir a la cita? -Jorge-
Claro mi amor, ella no se ha echado para atrás. ¿Tú ya te arrepentiste? -Ana Gaby-
No, para nada. Te llamé para decirte que no vayas a trabajar, prepara todo, compra comida, vino, lo que tu creas necesario para pasarla bien. -Jorge.-
¿Seguro no quieres que vayas a trabajar? -Ana Gaby-
Si, quiero que este día sea inolvidable, por favor encárgate de eso. -Jorge-
Está bien, te esperamos pasando las 3pm. Hasta pronto. Besos. -Gaby, colgando el teléfono.
 
Cuando terminó de alistarse Ana Gaby salió de su casa y fue a buscar a Andrea para llevarla al centro comercial. Estando allá compraron un 2 baby doll blancos, uno para cada una, compraron zapatos de tacón también en color blanco. Llegaron a casa, ambas se pusieron a limpiar, no compraron nada para comer, optaron por pedir una pizza cuando tuvieran hambre. Ambas se bañaron juntas, tocaron sus cuerpos, pero no quisieron hacer cositas ricas debido a que tenían que guardar todas sus energías para más tarde. Dió la 1pm y los nervios comenzaron a apoderarse de Andrea.
 
¿Qué tal si mi padre no viene? -Andrea-
Si va a venir, por favor no te muevas, tengo que plancharte el cabello. -Ana Gaby, peinando a Andrea-
¿Y si no le gusto? -Andrea-
Le vas a encantar, tenlo por seguro. -Ana Gaby-
¿Me dejarás hermosa con el maquillaje y el planchado? -Andrea-
Divina chiquita, pero por favor ya cálmate. -Ana Gaby-
 
Ana Gaby terminó de planchar el cabello de Andrea, la maquilló como toda una mujer, no como el maquillaje de niña que suele usar para ir a la escuela. 
 
Ya casi estamos listas muñeca, sólo hay que ponernos los baby doll y los zapatos y sólo tenemos que esperar. -Ana Gaby-
¿Y por que nos ponemos eso ahorita y no más al rato? -Andrea-
A Jorge le gusta que lo reciba con ropa sexy, cada que me visita lo recibo ligera en ropa, eso le fascina. -Ana Gaby-
Tú conoces a mi papá mejor que yo, así que a ponernos la ropita. -Andrea.-
 
Ellas se cambiaron, se veían tan hermosas con esa ropa semi transparente, el maquillaje y los zapatos de tacón las hacían ver como unas sexys prostitutas. Ahora sólo tenían que esperar a que su hombre llegara.
 
Son las 2:30pm, Jorge también está nervioso, que tal si Andrea se arrepiente, si se va de ahí o simplemente no llegó. Era hora de irse de la oficina, era hora de dirigirse a casa de Ana Gaby. Tomó sus cosas, subió al carro y tomó camino.  Tardó 15 minutos en llegar a su destino. Con sus propias llaves abrió la puerta y vió a ese par de bombones sentadas en el sillón mirando televisión. Al escuchar abrir la puerta ambas se pusieron de pie y Jorge las miró de pies a cabeza, estaban tan hermosas, con su conjunto atrevido, resaltaban a la perfección los senos de cada una. Jorge poco a poco se acercó a ellas, no podían decir nada, Andrea y Jorge estaban muy nerviosos, sólo se mirában. Jorge suspiró y por fin pudo sacar algunas palabras de su garganta.
 
Andrea, hija ¿sabes a lo que vienes? -Jorge-
Si papi, sé a lo que vengo. -Andrea-
¿Y estás dispuesta? ¿Quiéres hacerlo? -Jorge-
Si papá, lo deseo con todas las fuerzas de mi ser. -Andrea-
No sé que decirte, mi amor, mi bebita querida. -Jorge-
Mi papito chulo, papito de mi corazón. -Andrea-
 
CONTINUARÁ...