HOLISSSSSSSSSS Mi gente bonita del gremio de TR cómo están???? les pido una disculpa ya que cuando lo subi cometi un error de categoria xD actualizar a media clase no es bueno mis amores u.u  Como ya saben les traigo otro capítulo el cual yo en lo particular LO AMEEEEEEEEEE. Les agradezco su paciencia y sus correos y comentarios siempre los leo todos. Sin más que lo disfruten:

Elsa subió con cuidado la escalera, llevando un plato de galletas en una mano, dos tazas de cacao peligrosamente caliente en la otra. Cada paso era una batalla contra el impulso, ya que el líquido espeso en las tazas amenazaba con caerse encima de la alfombra crema debajo de sus pies.

Esta fue la primera vez que se había apartado del lado de Anna en dos horas ya que la niña la quería tener siempre cerca, los cinco minutos de separación se debe únicamente al hecho de que su madre la había llamado abajo para llevarle a Anna algún tipo de "sorpresa de regreso a casa '. La mirada de anticipación emocionada en la cara de su hermana había dejado a Elsa embobada, tanto que casi tira las tazas con cacao a la alfombra. Con un suspiro de alivio cuando llegó al último escalón, se dirigió a la habitación de Anna. Su hermana estaba tumbada en la cama, igual a como Elsa la había dejado, el tobillo apoyado con una almohada. Su rostro se iluminó al ver a Elsa.

"Hey hermana!" tenía una sonrisa radiante. "Te extrañe." Miró las golosinas en las manos de Elsa. "Oh, son para mí?"

La niña mayor le devolvió una sonrisa a Anna, sin dejar de caminar con un paso un tanto exagerado para asegurar que todo se quede en sus manos. "Sí", se inclinó con cuidado para colocar la placa y una taza en la mesita de noche de Anna, mirando a la chica. "Está muy caliente", advirtió. "Ten cuidado."

Anna se mordió el labio. "Puedo manejar lo caliente", respondió ella, mirando intensamente a Elsa. "¿Y tú puedes?"

Es evidente que su hermana no tenía intención de dejar la búsqueda agresiva que había empezado en el aeropuerto.

La niña mayor trató de mantener la voz firme. "S-sí," tartamudeó ella, tomando una respiración profunda y armándose de valor. "Me gusta caliente."

¡¿Qué estás haciendo?! ¿Está coqueteando con ella? Dejar de coquetear con ella!

Se trasladó a poner su propia taza sobre la mesa de Anna, tratando de poner un poco de distancia entre ellas, viendo como Anna coge una de las galletas y la muerde dejando escapar un suave gemido.

"Dios, extrañaba las galletas de mi madre", se quejó la chica, tomando otro bocado.

Elsa no podía hacer nada más que mirar a su hermana mientras comía. Una sacudida de calor se disparó a través de ella cuando la lengua rosada de Anna salió como una flecha para barrer a través de una pequeña cantidad de chocolate en la comisura de la boca, la mitad de lo que falta.

Ella trató de acordarse de respirar. "Tu tiene un poco-" hizo un gesto hacia el lugar infractor. "Justo ahí."

Anna miró con confusión. "Hmm?" tarareaba, con la boca llena.

"Solo-" Elsa dio un paso adelante, deslizando su dedo índice sobre la marca pegajosa, antes de tirar de él hacia atrás y se lleva el dedo a su boca.

Los ojos de Anna se abrieron. Elsa se congeló.

Mierda.

Ella tiró rápidamente su mano de su rostro, limpiando el dedo en sus pantalones vaqueros. "Se ha ido", dijo, de forma rápida.

Anna sonrió. "Sí, puedo ver eso."

La niña mayor se aclaró la garganta, caminando de regreso a la recepción para recoger su cacao. La voz de su hermana vino de detrás de ella, una pequeña nota de pánico en su tono. "Hey, ¿quieres ver una película conmigo esta noche?" preguntó, obviamente preocupada de que Elsa se fuera.

Elsa volvió, a punto de expresar una respuesta afirmativa, cuando ella vio el calendario en el muro de Anna, y cambio de marcha su mente.

Es sábado.

Demonios!!!!

Cena con Belle.

La cara de Anna cayó cuando la niña mayor no respondió. "Elsa?" -preguntó, con timidez. "No quieres ver una película conmigo?"

Elsa cerró los ojos, completamente desgarrada. Ella quería. Por supuesto que quería. Interacción con Anna era de lo que ella vivía.

O era de lo que vivía en un pasado cercano.

Entre las sesiones de gimnasio con Kristoff y almuerzos con Belle, de alguna manera Elsa se había encontrado con los intereses que se extendían más allá de las cuatro paredes de su habitación. Que iba a pasar tiempo con personas reales, reales. Personas que no eran Anna.

No estaba segura de sí estar aterrada o eufórica.

Ella trató de explicarle. "Anna," ella respiró. "Yo lo siento. Tú sabes que normalmente no podría siquiera dudar. Es sólo que..." se fue apagando, insegura de cómo introducir su nueva relación con Belle, especialmente teniendo en cuenta la reacción apasionada de su hermana las últimas dos veces al escuchar el nombre de Belle.

Anna se desplomó, mirando a otro lado. "Es Belle, ¿verdad?" dijo, resignada. "tu tienes una cita con ella, o algo así."

Agradecido que ella no tenía que decir las palabras por sí misma, Elsa exhalo. "Sí." Ella trató de atrapar la mirada de Anna. "Es nuestra primera cita de verdad. Cena y esas cosas." Ella dio un paso hacia su hermana, tratando de llegar a comprender. "Podría cancelar, pero se le rompería el corazón, Anna. No quiero hacerle daño."

Ella trató de ignorar la voz que grita en su cabeza diciéndole que ella estaba haciendo daño a su hermana en su lugar.

Anna cruzó los brazos sobre su pecho. "Está bien", dijo, en un tono que llevó a Elsa para creer que no estaba bien en absoluto. "Entiendo."

"Anna," Elsa intentó, desesperadamente en busca de las palabras adecuadas.

Por último, los ojos azul verdoso cumplen su cuenta. "Realmente, no pasa nada", dijo la chica más joven, más intensamente esta vez. Ella se rió suavemente. "Tu actúas como si no lo estuviera, pero sabes que está mal hacer daño a los demás apropósito."

Ella se movió un poco, descruzar los brazos y colocando sus manos sobre el regazo. "Tú has encontrado a alguien que te hace feliz." La culpa roía el estómago de Elsa cuando su hermana le dio una sonrisa a medias. "Sólo quiero verte feliz."

No sé si estoy feliz.

Tu no estas feliz.

Quiero que nos tanto que seamos felices. Juntos.

Pero Elsa permaneció en silencio, jugando con el asa de la taza, sintió que su lengua estaba pegada al techo de la boca.

"Creo que esto es lo que me pasa por huir," dijo Anna, rompiendo el silencio. "Yo como deseo haberme quedado." Su voz era tranquila y llena de pesar. "Y que no me hubiera tomado tanto tiempo para darme cuenta de lo que sentía." Una pausa. "¿Cómo me siento?"

Elsa no podía aguantar más. Esto era muy difícil de controlar. De repente comenzó a recordar los sentimientos no correspondidos que la había atormentado durante tanto tiempo, y le resultaba casi imposible mantener la confianza que adquirió este tiempo sin Anna. Ahora que había comenzó a experimentar cuánto mejor podría ser su vida sin estar Anna en el centro de esta...

Yo no quiero volver a eso.

Se dirigió hacia la puerta, lanzando una mirada larga, de disculpa a su hermana. "Debería de irme a alistar", explicó. "Te prometo que vamos a pasar el día de mañana, ¿de acuerdo?"

Anna le dio una sonrisa forzada. "Bueno."

Elsa salió de la habitación.

"Pareces distraída," una voz dulce flotaba encima de la mesa. "¿Es por tu hermana, ella está bien?"

Elsa levantó la vista de su plato, mirando a los ojos de color marrón de Belle. "Sí, no, está bien." Ella cogió otro pedazo de pizza, tratando de mantener las coberturas de queso fuera de su regazo, maldiciendo en silencio a sí misma por haber elegido el elemento más desordenado en el menú.

"Cuando le van a hacer la cirugía?" Preguntó Belle, girando la pajita en su bebida, antes de girar con delicadeza unas hebras de fettuccini alrededor de su tenedor. ¿Hay algo que esta chica no pueda hacer a la perfección?

"Lunes", finalmente respondió, dándose cuenta de que se había quedado mirándola fijamente. "Ella es uh ella está bastante nerviosa."

Belle miró comprensivamente, moviendo la cabeza. "Sí, me puedo imaginar", dijo. "¿Puedo hacer algo para ayudar?"

Elsa sintió un tirón en su corazón. Dios. Estás siendo un puto perdedor en este momento. Abatida en la mesa, no sabes nada al respecto de lo que le interesa. No es de extrañar que esta sea la primera cita real que tienen. ¿Quién demonios va a querer salir con una perdedora como tú?

Una mano suave se tapó con la suya. "Hey," Belle susurró, con una sonrisa en su cara en forma de apoyo. "Ella estará bien."

Bueno, por alguna razón, esta chica te quiere de verdad. Así que lo menos que puedes hacer es tratarla adecuadamente.

Elsa inhaló profundamente, sonriendo de nuevo, moviendo la mano para enredar sus dedos juntos. "Sí. Tienes razón," ella estuvo de acuerdo. "Gracias."

Una masa de ingredientes con queso cayó sobre el mantel.

"Mierda," juró Elsa. Entonces ella se sonrojó. "Oh, uh, dios, lo siento. No quiero que pienses que soy una troglodita mal educada." Ella tiró de su mano, tratando de salvar el resto de la división. "Cristo soy una idiota." Cerrando los ojos un instante, ella se reprendió internamente. ¿Qué parte de 'tratarla adecuadamente' estúpida no entendiste?

Los abrió de nuevo para encontrar a Belle sonriéndole, la nariz se arrugó en una forma que era asombrosamente similar a la expresión habitual de Anna de placer. Ella no pudo evitar sonreír de nuevo.

"Este lugar es demasiado ostentoso para mí de todos modos," susurró la morena. El corazón de Elsa se hundió un poco. Se había pasado al menos media hora tratando de elegir un restaurante apropiado para una primera cita.

Belle noto que la sonrisa de Elsa vaciló, y ella dio marcha atrás. "No, no me refiero a que no me gusta el lugar" dijo ella, rápidamente. "Amo la comida italiana." Ella se sonrojó. "Y me encanta estar contigo." Pasando una mano por su pelo, ella trató de minimizar el daño, sin darse cuenta de la pequeña sonrisa cada vez mayor en la cara de Elsa.

"Quiero decir, podrías haberme llevado a McDonalds o algo por el estilo y habría sido feliz. Pero aprecio el esfuerzo que pusiste en encontrar este lugar. Al igual, que no es del todo malo! Sólo se ve más como un antiguo castillo francés que un restaurante italiano”. Ella agitó una mano en la dirección de un gran retrato en la pared del fondo. "Quiero decir, echa un vistazo a ese cuadro espeluznante. Ese tipo tiene la más atemorizante que he visto en mi vida."

Así que ella no es infalible, después de todo. El corazón le dio un salto cuando Belle balbuceó, y ella trató de reprimir una sonrisa. Sin embargo es increíblemente linda.

"Seguro que no hay necesidad de poner una rosa en una campana de vidrio. Sylvia Plath estaría rodando en ella" Miró a Elsa, notando su diversión mal oculta. Ella dejó caer su frente en su mano. "Oh señor," murmuró. "Tengo que aprender a mantener la boca cerrada."

Elsa finalmente soltó la risa que había estado reprimiendo. "No, por favor, continua. Esa fue la mejor tirada en el diseño de interiores que he oído en mi vida", bromeó.

Belle enrojeció y se mordió el labio inferior y empujo suavemente la pierna de Elsa con la suya. "Shush", dijo, en broma. "O no te daré un beso de buenas noches más tarde."

Elsa trató de detener que sonrisa tonta se propagara por toda su cara, pero fracasó rotundamente. Ella encontró su mirada atraída por los delicados dedos de Belle cuando la mano de la chica se lanzó encima de la mesa, y el robo su rebanada de su pizza de la mano.

"Tu comida es mucho mejor", dijo, justificando sus acciones. "Tienes buen gusto."

Elsa puso los ojos en blanco. "Por supuesto que sí", respondió ella. "¿Has visto a mi novia?"

Hijo de puta.

En realidad lo hiciste. En realidad te felicitó.

Su corazón se detuvo.

Al fin le dijiste que es tu novia.

Pero la sonrisa que iluminó el rostro de Belle hacia que casi valiera la pena la punzada de culpa que sentía por ignorar la confesión de Anna y cimentar esta relación.

Casi.

Son tan lindas ellas dos juntas :3 me encantan!!!! Y a ustedes?????

Yo creo que debería de quedarse con Belle y olvidarse de Anna u.u

Hasta la próxima n///n