Mi vecino viejito y yo

Hola amigos, soy Lucia, ya todos me deben de conocer. Hoy vuelvo a relatar otro de mis eventos sexuales. Esta vez fue la visita de Fabiana a mi casa.

Una mañana suena el timbre  y mi mamá me pide si puedo abrir la puerta de calle, y voy a ver quién golpea. Grande y linda fue mi sorpresa cuando veo parada frente a mí, nada menos que a Fabiana, la recuerdan verdad? Es mi amiga traba, quien me ha hecho feliz varias veces y también a mi mamá. Luego de un gran abrazo y dos besitos la hice pasar:

“-Mami, vení a ver quién nos visita!!! Dije tomándola de la mano y casi arrastrando hacia el interior. Cuando mamá la vio, abrió los brazos y la cobijo dentro de ellos, dándole otros dos besos.

:”que agradable sorpresa Fabiana, bienvenida”- acoto y entramos todas. La vestimenta de nuestra visita era muy linda, una mini por medio muslo, sandalias y una camisa anudada en el ombligo.

:”Estas preciosa!!” le dije y ella me regalo una sonrisa.  Como yo era la más audaz me senté en el sofá grande y mi mami enfrente, en uno individual. Por supuesto bastante cerca de la visita y ya mi conchita se mojó, pensando que no podía dejar pasar esta oportunidad de tener un pene dentro de mí y tenerlo tan cerca. Hablamos de lo que se nos ocurría en el momento, tratando de agradar a Fabiana y hacerle la estadía placentera. Y cada vez que tenía oportunidad, le tocaba la pierna o el brazo o lo que fuera de su  cuerpo. Realmente estaba caliente, con solo mirarla. No tocamos para nada el tema de la colita de mi mamá, ninguna de las tres.

:”-Mi vida lleva a Fabiana a tu cuarto” , dijo mamá” mientras termino de limpiar esta pieza!”

:”seguro mami” dije- “vení Fabiana subamos”- y le agarre la mano y tire de ella, subimos la escalera y llegamos a mi dormitorio, cerré la puertay como si supiéramos ambas nos enlazamos en un beso con mucha lengua, y me puse de rodillas, subí su pollerita , corrí la manga de su bikini y salto como un resorte, la pija llena de venas, gruesa y con la cabeza bien puntiaguda, ni corta ni perezosa, lamí toda y mirándola a los ojos me la engullí en la boca, toda adentro, tocaba mi garganta y mis labios su vello púbico, bien recortado, me lengua hacia las delicias del traba.

:” si putita, chupa bien la pija que la vas a sentir en la pepa, llenala de saliva”- decía mientras agarraba mis costado de la cabeza y trataba de meterla más. Hice un poco de arcadas pero ella no cedió en nada, me rehabilite y seguí chupando. Estrujaba sus huevos y orillaba su culito, y nos fuimos desvistiendo, me tiro en la cama me abrió las piernas exageradamente y se zambullo entre ellas, antes me besaba desde mis rodilla hasta los pelitos, manoseando mis pezones redondos y rosaditos. Mi estado era calamitoso, no podía respirar por la gran calentura que tenía, abría mucho mis piernas para que Fabiana pudiera comerme bien el coño muy mojado

:”Te voy a meter la pija de un solo saque, putita para que pruebes, sentirás ganas de más verga putona, aprontate!”- dijo y se escupió la verga, la enfilo hacia la conchita y sin miramientos empujó como si le fuera la vida en ello, sentí claramente como entraba apartando lo que estuviera adelante, no importara si fuera pelo o pliegues, solo entro y golpeo en el fondo no entrando más cuando el traba cayó encima mía. Solo salió de mi un lastimoso quejido de dolor o gozo no sé lo que fue. Y así comenzó el mete y saca, sacándome un chorro de leche.

:”si putita coge que me gusta, dame más que estoy mojando toda tú verga con mi leche”- le decía mientras movía mis caderas tratando de que entrara más. Y como todo lo lindo acaba pronto, ella también se vino dentro de mí con desesperación, tratando de sacarla por la boca, quedando rendida encima mío.

:”Estuvo lindo amor, sentí tu pija muy dentro de mí, sabrosa, que lindo me clavas.”. Le decía mientras sentía que se pene salía con jugos míos y suyos. Cuando nos repusimos nos levantamos, le di unos besitos en su pene, en sus tetas y boca, tratando de que entrara en calentura de nuevo, porque mi mamá seguramente quería probarla también. 

Y claro que fue así, pues me vestí y fue a su encuentro, dejando al trolo acostado en mi cama.

:”mami, voy a buscar pan, ve y habla con Fabiana que está en mi dormitorio”- dije, le di un besito tomé el bolso y sali, con una sonrisa cómplice, sabía que ahora mi mamá probaría la pija que me había hecho feliz un rato antes-

Demore bastante en la panadería , cuando entre a la casa ya estaban en el living conversando muy animadas, y me sume al dialogo. Por supuesto nadie comentó nada de lo sucedido con anterioridad, pero cuando se fue Fabiana, ahí si con mi mamá nos pusimos al día y otra vez le puse cremita en su colita dolorida, pero no tan abierta como la otra vez.

Bien amigos eso fue todo por el momento, cuando tenga otra aventura se las relataré.

Gracias a los que me escriben, siempre contesto, cuando no son tonterías, como pidiendo citas y todas esas cosas.

Lucia  luciamas@outlook.com.ar