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El restaurante Parte 2

en No Consentido

EL RESTAURANTE PARTE 2

La familia continuaba perpleja, habían superado demasiadas barreras aquella noche, pero ellos aún desconocían que aquel camino justo acababa de empezar

Mario estaba sentado, extasiado viendo como Mar, continuaba mamando la verga de Borja.

- Joder Mar, me vengo.

Mar, la puso nuevamente entre sus tetas, aún con la corrida de Mario, ella estaba preparada para que alguien hiciera una nueva descarga de leche, era una adicta al sexo, por su parte Marga, continuaba acariciando, ese coño que cada vez estaba más mojado.

- Carla cariño, cómele las tetas a tu madre-jefe-.

Carla, no tenía miedo, sabía que aquello estaba mal, por su parte Marga se estaba resignando, ya no decía nada, sabía que los niveles de emputecimiento a la que estaba siendo obligada cada vez eran cada vez mayores, resignarse e intentar disfrutar, era lo único que podía hacer.

Carla, fue a buscar una de las tetas de su madre y empezó a lamerlas, tenían un tacto algo raro, pero no le hizo ningún asco. Marga se estaba excitando, y no querían que se diese cuenta, su niña le lamía los pezones, cada vez que ella pasaba la lengua, Marga se sentía más excitada, aunque quería negarlo.

- Para hija mia... no.... por dios.

Pero su cuerpo se estremecía.

- Bueno basta de comer niña, hay planes más ambiciosos para esta noche-jefe-.

Les obligaron a vaciar la mesa, soló dejaron el mantel.

El jefe dijo.

- Ahora me vais a escuchar, el que no haga lo que yo diga, le pego un tiro, ¿estamos de acuerdo ?

Las amenazas habían subido de nivel, la familia pareció entenderlo.

Hicieron estirar a Carla encima de la mesa totalmente estirada, ella era muy flexible, ya que hacía gimnasia desde los 5 años.

Todos estaban a la expectativa de lo que iba a pasar.

- Bueno Marga, tu hija necesita que la lubriquen, antes de que la estrenen.

- No por favor, es una niña, yo no......

- Decide, o lo haces tú o nos la violamos como una puta.

Marga accedió se acomodó y se puso entre las piernas de su niña, no había estado nunca con una mujer, aparte de algún beso o toqueteo cuando era universitaria, ese momento sería muy duro, vio el coño de Carla, tenía una buena mata de pelo, Marga, aún no lo sabían, pero iba totalmente rasurada, primero empezó a pasar su lengua, por su coño, Carla, empezó a gemir lentamente, la sensación que tuvo fue extraña, había mamado bastantes pollas de joven, pero un coño nunca, la sensación era extraña, así qué continuo pasando la lengua, al cabo de unos minutos, ya se había acostumbrado, fue entonces que el jefe dijo:

- Mar porque no besas a tu hermanita, así estará ocupada.

A Mar, no se le había pasado nunca por la cabeza besar a su hermana, pero aquellos hombres, estaban haciendo lo que querían con ellas. A pesar de sus tabúes ella no puso ningún reparo, se apartó el pelo, y se comenzaron a besarse, las dos niñas sabían lo que querían sus captores, así que su beso fue muy largo, sus lenguas se encontraban una y otra vez. Borja, se estaba poniendo burro de ver esa situación ni en las mejores pelis porno, había visto una escena como aquella, Marga lamiendo el coño Carla, la cual no paraba de mover su cuerpo y Mar morreándose, eso era superior a todo por su parte Mario, había tardado más tiempo en recuperarse, pero sus 23 centímetros, ya volvían a estar preparados.

- Venga chicos tengo un trabajo para vosotros.

- Borja ven aquí, te gustaría follar a Marga?, no aceptaré un no por respuesta.

Marga se giró, comérsela estaba bien follársela,  eso no entraba en sus planes, pero poco podía hacer en su situación, ella no podía decir nada, ese niñato, le iba a dar una buena ración de verga.

El chico no se lo pensó ni un instante, y se preparo, le bajo el tanga hasta los tobillos, empezó a comerle el coño, ella estaba realmente mojada, Marga no podía evitar gemir, aquello superaba todas sus expectativas, estaba comiéndole el coño a su hija y el novio de su hija se lo comía a ella.

- Mmmm Borja, para no por dios ohhh, noo.

Ella estaba disfrutando pero se negaba a decirlo, a los captores la situación les gustaba.

El jefe dispuso a Mario, en la misma posición, le hizo subirle el vestido a Mar, la muy guarra no llevaba ni ropa interior.

- Mario tu hija, creo que también necesita, que le des lo suyo.

- Es mi hija....

- Parece que no aprendes.

- Venga papá, tu puedes.-Mar-.

Aquellas palabras hicieron que Mario, tomará la decisión de follarse a Mar, Mario se dirigió hacia  el coño de su hija, y le puso un par de dedos de golpe, ella gimió, el jefe y sus chicos se reían, era bestial ver la secuencia.

En la sala se oían todo tipo de gemidos.

- Bueno Mario, Borja, es vuestro turno, dadles vuestras herramientas.

Ninguno de los dos se lo pensó ni una sola vez, ellas estaban tan mojadas que en ambos casos sus pollas no tardaron en penetrar a aquellas mujeres, aquello era frenético, Mar jadeaba como una loca, había estado con muchos chicos, pero una polla de aquel calibre, no la había tenido nunca.

- Papá así, joder... es muy grande pero me encanta, métemela, por favor, más por favor, joder, me corro por dios.... qué bueno.... más, más fuerte.

Mar estaba fuera de sí, ya no le daba su boca a su hermana estaba tan ocupada, que sus pechos, eran agarrados por Carla, que los mamaba, aquello provocaba orgasmos continuos en Mar.

En el otro lado Borja, estaba follando brutalmente a Marga.

- Te gusta Marga-, venga más que te gusta. le dijo Borja.

- Calla y continua... ohhh

Marga estaba entregada aquella polla, ella estaba acostumbrada a la de su marido, pero la noche, iba por aquellos caminos y ella no podía decir nada, Borja la empujaba tanto que sus zapatos de tacón hacían clac-clac en el suelo., cada vez que ella recibía el envite de aquella verga, a ella solo le quedaba gozar, estaba dando y recibiendo a la vez, Carla no tardo en correrse nuevamente en la cara de Marga.

Todos estaban fuera de sí., Mario le dijo a Mar.

- Cariño creo, que no voy a poder aguantar más…oohhh.

- Papa, córrete por dios…. Que gusto córrete.

Los deseos de su hija fueron realizados por su padre, su padre explotó dentro de su hijita, toda su semen inundo aquel coño, llegado hasta el fondo de su ser, ella se sentía exhausta de haber recibido aquella sesión de sexo duro, y de tener un pollón como aquel dentro de ella.

Fue entonces que el jefe se dirigió a Mar.

- Bueno Mar, te sabría mal enseñarnos tu cuerpo, te lo digo por tu bien.

Ella se levantó y se quitó ese vestido,  si medio desnuda ya era espectacular, ahora con solo unos zapatos, la visión era el no va más, Borja viéndola totalmente desnuda, dijo:

- Joder,  Marga, me voy a correr de ver a tu hija.

Ella ya no quería decir nada, así que, espero el desenlace, ella no tuvo tiempo ni de pensar, aquel niñato, se vació dentro de ella, Marga tuvo un orgasmo tan brutal que soltó un alarido, parecía que nunca nadie se había corrido dentro de ella.

Los asaltantes no paraban de reírse y no era para menos, las mujeres todas desnudas y con sus coños llenos de leche, menos Carla, pero esto aún tenía solución.

- Bueno Marga, Mar, a vuestros chicos les tendríais que limpiar las herramientas, porque la noche aún no ha terminado.

Marga, no estaba mucho por la labor, fue entonces que Mar, la que  cogió la mano de su madre y la acompaño, hacia aquellos mástiles.

Marga se fue hacia Mario y empezó a limpiarla dejándola bien brillante, y Borja hacía Mar, los jefes no dijeron nada, estaban humillándolos.

Entonces Mario dijo.

- No os habéis reído ya bastante.

- Que va, aún falta mucho para terminar, por tu bien espero que tu polla esté preparada, porque aún tiene que trabajar mucho, chicas ayudadle, venga las tres.

El jefe les indicó las posiciones obligaron a Mario a estirarse: Marga y Mar se pusieron a la altura de su polla y a Carla, le hicieron ponerla encima de su padre, nuevamente aquello superaba a cualquier peli porno, la polla de Mario a pesar de su edad, no tardo en volver a la vida, y es que madre e hija, sabían cómo chuparla.

Madre e hija, parecían mantener un combate entre cuál de las dos, la comía mejor, la veteranía de marga, se notaba, estaba disfrutando de la polla de su marido como nunca, sabia como ponerla casi hasta el fondo de su garganta, sin que le dieran arcadas, Mar no estaba a ese nivel, pero poco le faltaba.

- Venga chicas un beso mientras coméis la polla –jefe-.

Mar cogió la cara de su madre, y le metió la lengua, hasta el fondo, Borja estaba sentado viendo aquel maravilloso espectáculo, con su polla en la mano, e intentando no pajearse para aguantar... aunque no sabía para qué.

- Papí como me gusta tu lengua- dijo Carla.

Estaba desatada, aquello la estaba superando, por momentos, sus jadeos eran continuos.

- Bueno chicas dejad de chupársela- Jefe.

Agarro a Carla del pelo, y le dijo.

- Ahora tu padre de va a desvirgar, espero que lo disfrutes.

Ella estaba nerviosa, parecía bloqueada, nunca la habían follado y aquella polla, superaba a la de cualquier fantasía que una chica de su edad tuviera.

- Venga Mario prepárate para follártela, por vuestra parte chicas, ayudad a Borja, que os folle un rato, para sacaros el calentón que lleváis, pedazo de putas.-jefe-.

Mario se puso en posición de misionero.

- Hijita tranquila, papá te quiere.

- Ya lo sé, que me cuidas.

El jefe se miró a Mario y le dijo.

- Dale un buen beso a tu hija que se lo merece.

Allí recostada, Mario, empezó a darle un beso a su hija, para que se relajara, fue un beso corto, ella no tenía idea de besar a hombres, de mujeres había aprendido aquella noche, pasados unos segundos, la dejo de besar, le habían dado una orden y no se quería demorar.

Mario se dispuso a acariciar aquella rajita, estaba mojada, pero no sabía cómo toleraría su verga, su niña. Puso su polla en la punta de su coño, él sabía que aquello estaba mal, pero para que la desvirgara cualquiera, lo hacía él.

Poco le importaba todo en aquél momento

Nuevamente se oían gemidos y es que Borja tenía a 4 patas a Mar y a Marga, y se las estaba follando, alternamente todo lo que oía eran gritos de placer, parecían dos perras en celo, el cabrón cambiaba de agujero y mientras ambas mujeres se besaban, animado por aquellos gritos de placer, y sin  pensárselo dos veces, empezó a meter esos 23 cms de polla dentro de Carla.

- Papa puede aliviarme Mamá.

Los jefes indicaron a Marga, que se pusiera su coño en la cara de Carla, y así lo hizo, aquello dejo el camino despejado a Borja, que se dedicó en cuerpo y alma a perforar a Mar, Carla lamía aquel coño tenía una mezcla de sudor y semen, mientras que Marga, le gustaba y es que se acariciaba sus tetas, mientras su hija le comía el coño.

- Joder Papis os quiero mucho –con una voz entrecortada-.

Marga ya no tenía perjuicios, ahora le daba las tetas a su hija.

- Venga niña cómetelas como cuando eras pequeña.

Marga quería que aquel momento en que Mario desvirgara a su hija fuera especial, él estaba fuera de sí, tardó un buen rato, en que su pene llegará hasta él fondo de su niñita y llego el momento, notó como su herramienta había llegado al final de su recorrido y como algo se rompía, fue en aquel momento que Carla, empezó a ponerse roja, no le aliviaba, comerle las tetas a su madre, Mario notaba el sufrimiento de su hija.

- Papá me duele, mucho…. Ohhh. Os quiero papis.

- Venga dale es una orden-jefe-.

Carla, estaba empezando a gemir lentamente, su padre estaba allí disfrutando, era incesto, pero la vida de su familia estaba en juego, por el rabillo del ojo veía como su hija estaba a cuatro patas jadeando como una loca, aquello hacía que él estuviera más caliente.

Fue entonces que Carla, con una voz entrecortada dijo.

- Os pido una cosa cuando llegué el momento, no quiero que se corra dentro…. Por favor, con lágrimas en los ojos-ella no tomaba anticonceptivos aún-.

- Tú aquí no mandas, mocosa, pero por ser la primera vez te escucharemos, en ese caso te vas a comer toda la leche, que tu padre expulse y que tu madre te ayude.

Mario, estaba marcando un ritmo, el dolor, se volvio, lentamente en placer, su madre, le daba un rato sus tetas y en otros le regalaba aquel coño sudado y corrido, sus orgasmos empezáron a aparecer, padre e hija lo estaban disfrutando, cada vez la embestía más fuerte. Marga la besaba ahora efusivamente, Carla empezó a gemir y a soltar sus primeras palabras de agradecimiento.

-          Joder, no pares aún, me duele pero me gusta….. ohh, así….

Tenía la cara llena de lágrimas, el dolor había sido muy fuerte pero el placer, la estaba llevando a límites superiores.

Mario notó que su polla estaba muy caliente, aquel momento era único para Carla y Mario, quería que ella lo disfrutara, entonces le dijo.

- Chicas me voy a correr.

El notó que no podría más, sacó la polla de dentro de Carla, ellas se arrodillaron, fue entonces que empezó, a pajearse, fue muy poco el tiempo, su leche estaba a punto.

- Me voy a correr.... joder,  quiero que os lo comáis todo.

El empezó a soltar menos semen que antes pero si una buena cantidad Marga y Carla, se lo tragaron todo, estaban hechas una pena, sus cabellos estaban alborotados, llenas de semen, en sus bocas.

El jefe les dijo.

- Por qué no os besáis, y intercambiáis la leche, que os han dado.

Las mujeres se besaron fuertemente, Marga lamió los labios de Carla, pasando su lengua por las comisuras, ese espectáculo era digno de ver, estaban entregadas al placer, poco parecía importarles lo que pudiera pasar con su vida, mientras Borja continuaba taladrando a Mar aquello le puso a mil por hora.

- Jefe puedo yo también llenarle su cara.

- Si hombre faltaría más.

Se la sacó y descargo su leche encima de Mar, casi sin tiempo a reaccionar, Borja inyecto toda su leche, directamente hacia la cara de ella, la sudor y él semen se mezclaban en su cara y por encima de todo,ya sabía lo que tenía que hacer, limpiar aquella polla, que la había follado, ella sabía ser agradecida, ante el polvo que le habían dado.

Parecía que aquello no podía denigrar más.

- No te parece ya suficiente- le dijo Marga.

Suficiente... nunca es suficiente-jefe-.

Continuará.....