Antes de llegar a su casa, el Cónsul Smith presenta a Rebeca a varios lugareños y visita al carpintero para que le fabrique una cruz a medida para ella. Esa noche Rebeca duerme a los pies de la cama del Cónsul, pero de repente algo la despierta.
Rebeca inicia su periodo de esclavitud con el viejo cónsul con unas compras por la ciudad.
El alcaide informa al juez de que el compatriota de las periodistas, el cónsul Smith, quiere extorsionarles. Sin querer Rebeca da al alcaide un información muy interesante. Al final la propia Rebeca es usada como moneda de cambio con el cónsul.
Sánchez prepara todo para torturar a Rebeca delante de su tío y del alcaide. Al día siguiente se reanudan los interrogatorios de las gringas esta vez con una extrema crueldad.
El carcelero abusa de Yulia en la cámara de tortura, mientras tanto el juez decide tomar a su sobrina como esclava aunque pronto se arrepiente ante la insistencia de ella en ser castigada por sus faltas. Hay más cosas pero tendréis que leer el capítulo si queréis saberlas.
Las dos gringas son sometidas a una larga y cruel sesión de tortura para que confiesen sus "crímenes".
Alina pasa una noche de pesadilla en las garras del carcelero. Mientras tanto el alcaide sigue entrenando a Rebeca como esclava.
Rebeca es testigo de la brutal sesión de tortura de Yulia a manos de Sánchez. Entre tanto el alcaide descubre gracias al juez quiénes son las dos gringas.
El alcaide inicia a Rebeca en los rigores de la esclavitud
Yulia es puesta en el cepo a disposición de los soldados. Mientras tanto el alcaide se lleva una agradable sorpresa en su despacho
Sánchez el verdugo muestra a Yulia y Alina las diferentes dependencias del penal para que vean lo que hacen con las presas.
Las presas forman en el patio para asistir a una cruel flagelación
Las dos gringas aceptan la proposición del alcaide para visitar la prisión como dos presas comunes, pero antes acuden los verdugos para desnudarlas y atarlas convenientemente.
Yulia y Alina recurren a todos los métodos para intentar convencer al alcaide y así poder visitar la prisión.
Dos bellas gringas ingresan en el Penal de los Lamentos, una cárcel de mujeres en un país tercermundista donde los guardianes y celadores son todos hombres.
No cuento nada para no destripar el final. ¡Que disfrutéis!
Continúa la cruel ordalía y Nadia y sus amigas experimentan durante horas los "placeres" de la crucifixión
Comienza el suplicio....
Las tres condenadas llevan la cruz a cuestas por las calles de la ciudad. Una vez en la plaza son puestas en el cepo a merced de la muchedumbre.
Nadia y Luba son juzgadas y condenadas. La noche antes de la ordalía son custodiadas por unos lujuriosos guardianes.
Nadia y Luba sufren tortura a manos de María ¿se rendirán y firmarán el documento? ¿o resistirán?
Las prisioneras del Krak forman en el patio para asistir como espectadoras a una cruel crucifixión
Nadia sufre y disfruta en manos de Ismail el verdugo
Nadia y Luba satisfacen los bajos instintos del Coronel Ahmed en la Cámara de tortura n. 4
La sesión de tortura continua....