Capitulo 2

Cuando Oscar me dijo que en un rato nos íbamos, no lo dude, justo en ese momento yo no tenia erección, salí inmediatamente del agua, y no espere ese rato, no sabia que podía pasar en ese rato... evité mirar a nadie, demasiados topless y bikinis ajustados, que simulaban un campo de minas para mi, y conseguí llegar a la toalla, secarme, y enrollármela al cuerpo para atrapar y retener a la bestia, mientras la toalla estuviera ahí, la bestia no podría escapar... pocos minutos después, vino también Oscar y su madre empezó a recoger, nos íbamos, y por fin terminaba mi tormento, agarré mi ropa y me dirigí a la salida... en el camino, gustosamente caí en todas las minas, aunque la bestia reaccionara ya no podía delatarme... así que observé todo lo que pude al tiempo que Willy crecía y crecía y pedía ser liberada. Al llegar a un pequeño muro que separaba la arena de la playa de la acera de la pequeña ciudad, la madre de Oscar le ordeno a éste que se sacara el bañador y se quitara toda la arena, éste, sin rechistar, se saco el bañador, quedando completamente desnudo delante de todo el mundo y le entregó el bañador a su madre, mientras ésta le sacaba toda la arena que podía al bañador, Oscar se metió en una ducha para quitarse el resto... en esos segundos, mi corazón latía a 100 millones por segundo, me moría, me daba algo, juro que casi me da un ataque, eso quería decir que tras Oscar era mi turno... y yo que había caído en esas minas a posta... Willy estaba ahora enfurismada, y tardaría muchos minutos, sino horas, en calmarse... Oscar se salió de la ducha, se empezó a vestir, y su madre me miro a mi...

Estaba a punto de ponerme a llorar, esperando su condena, sus palabras... pero no me dijo nada, continuó recogiendo cosas y quitándose su propia arena, y luego nos empecemos a ir... ¿¿Quizás mi cara de pánico la hizo desistir??

Lleguemos a la casa, yo aun estaba muy alterado, en menos de 24 horas mi sexualidad se había desbocado y me habían pasado muchas cosas, pero las mas recientes me tenían loco, estaba tan desorientado que necesitaba urgentemente mi dosis personal, Oscar se lanzó a ver la tele, y su madre me agarro del brazo y me dijo, "Ya que tu no te has quitado la arena en la playa, quítatela ahora aquí antes de que me dejes arena por todo el piso", me pareció lógico, y hasta me pareció una buena idea, prefería mil veces ducharme en ese baño sin puerta a hacerlo en la playa... pero, ella fue la que arrastrándome por el brazo me llevo hasta el baño, y una vez allí me metió en la ducha y empezó a desatarme el bañador, ¿Acaso pretendía ducharme ella?, mis sensores volvieron a activarse, ¡¡¡esa condenada mujer estaba a punto de desnudarme!!! ¡¡¡Me iba a ver desnudo!! Claro que, ya me había visto... no supe reaccionar a tiempo, me dejé hacer, no dije nada, por un lado pensaba que ella en realidad ya me había visto desnudo, por el otro, que prefería eso a que me vieran todos en la playa, además, si me hubiera obligado a ducharme en la playa ella también me habría visto, la diferencia eran unos cientos de personas... yo extrañamente me sentía en deuda con ella, porque ella no me hizo desnudarme en la playa, y si el precio era ese estaba dispuesto a pagarlo, además, por otro lado yo pensé que esa familia tenia pocas vergüenzas, Oscar se había despelotado en mitad de una playa llena de gente como si no pasara nada!!! Pensé que en esa familia eso era algo normal... y la deje hacer. (Si, pensé todo eso en unos 5 segundos).

Cuando terminó de desatarme el bañador, me lo bajo, yo estaba tan nervioso y cortado, que mi pene se había encogido, pero prefería eso a que se alargara... parece que Willy era algo tímida, suerte para mi. Empezó a sacarle al bañador toda la arena que pudo, de los bolsillos, de la redecilla que tenían... y tras eso me miro a mi, yo estaba ahí como una estatua, estático, sin mover ni una pestaña del miedo y vergüenza que tenia, y miro mis partes... que tenían arena enganchada, ella mirándome el pito... yo muerto de vergüenza... pero entonces, pasó lo que desencadenó tantos acontecimientos, ella empezó a sacudirme el pene lleno de arena, para hacer caer esta al plato de la ducha, aunque fuera a sacudidas, los primeros segundos mi impresión fue de tanto asombro que creo se encogió mas todavía, luego, ella continuó quitando la arena de mis testículos, pero esta parte ya era mas complicada, no bastaba dar unos suaves azotes, sino que tenia que agarrarlos y frotarlos un poco, eso provocó en mi, que llevaba mas de 24 horas sin mi dosis, que hacía tan solo un rato había visto muchos melones tomando el sol, otros tantos en un bikini muy revelador y chicas, muchísimas chicas, incluidas las de mi edad, lo que ya todos sabéis, que fue inevitable... empezó a crecer, ella continuó frotando mis testículos, luego, me giró, y empezó a azotarme suavemente el culo para sacarme la arena, tras esto, me dijo que abriera las piernas, lo hice y ella pudo meter su mano por entre estas, justo entre mi culo y mis testículos, de donde salió también bastante arena, mi pene no tan solo estaba creciendo con eso, además se levantaba y a gran velocidad... yo no sabia como salir de allí!! Ella volvió a girarme, yo cerré los ojos, no quería verlo, no quería saber cual era su expresión ni que estaba pasando... note que ella volvía a tocarme el pene, al levantarse, se dio cuenta que en la parte inferior de mi pene también había arena, así que empezó a azotarlo, no se si porque esa parte era algo mas complicada o porque estando erecto darle ostias provoca que de unos votes un tanto incómodos, pero sus tocamientos provocaron en mi una excitación increíble, no pude mas, debieron ser los 5 segundos mas calientes de toda mi vida... porque nunca mas me he vuelto a correr en tan poco tiempo.

Y ahí estaba yo, con 13 años, y escupiéndole en la cara a la madre de Oscar..., pero escupiéndole con el pene. Mi semen no era del todo blanco, era mas bien transparente con restos blancos... ¿¿¿Qué quería que hiciera??? Me moría de vergüenza... me ve desnudo, me lo toca todo, me ve la erección... y encima ve lo que nadie, excepto yo, había visto antes... mi semen.

Ella se limpió, enchegó la ducha y me bañó, sentí como si fuera mi madre... como cuando mi madre me bañaba, solo que no era mi madre y acababa de correrme en su cara. Como llevaba un día de abstención y todo aquello era muy excitante, cuando me estuvo secando note que aquello volvía a levantarse... pero por suerte lentamente y me dio tiempo a salir de allí a mi habitación para vestirme. Cuando terminé de vestirme, escuché que ella se estaba duchando, aproveché que Oscar veía la tele y a ella la controlaba con el sonido del agua para masturbarme y me limpie el semen con un pañuelo, almenos así, yo ya estaba mas relajado... salí, ella se duchaba, mire medio segundo a la ducha, y ella me estaba mirando, me dio vergüenza, pero almenos le había visto ligeramente las tetas... podía haberle visto algo mas pero por vergüenza no lo hice, además teniendo en cuenta aquella ducha tendría mas oportunidades de verla... aunque para lograrlo, tendría que entrar a mi habitación cuando ella se duchase, eso me daría a mi tiempo de observarla mientras atravesaba el pasillo... y era una excusa perfecta, pero era mejor dejarlo para otra ocasión. Entré en el comedor y me senté junto a Oscar a ver la tele, recuerdo que le miré, el tan inocente... y a mi su madre acababa de hacerme una paja.

Aquel día terminó sin mas sucesos sexuales, por la noche, yo no podía parar de pensar en todo lo que me había ocurrido... me había arrepentido de ir allí nada mas llegar, pero ahora en cambio me había encantado... aunque no podía mirar a la madre de Oscar a la cara, pensaba que ella iba a echarme de allí, que me enviarían de vuelta a mi casa y se lo contarían a mis padres, pero dándole vueltas, me di cuenta de algo, si su madre quería quitarme la arena, ¿porque no me ducha directamente? Es mas, ¿porque no dejo que me duchara yo solo? ¿A que viene meterme mano de esa manera? Me di cuenta que quien había hecho algo malo no era yo, sino ella, y que aunque yo en parte también había colaborado, ella no podía contarle nada a mis padres, así que estaba salvado...

Al día siguiente, volvimos a ir a la playa, el padre de Oscar tampoco vino, me di cuenta de que a su padre no le gustaba mucho la playa... aunque vino algún día con nosotros, siempre intentaba escaquearse y se iba con sus amigos. Pero, antes de eso, y antes de desayunar, aproveché que Oscar se levantaba antes para entre las sabanas tranquilizar a Willy, aunque el día anterior si había tenido dosis, me estaban pasando tantas cosas, y encima iba a tener que ir a la playa... así que necesitaba darle, quise darle una dosis doble, pero Oscar entro en la habitación y me lo impidió diciéndome que teníamos que desayunar, así que tuve que conformarme con ir con una sola dosis, me levanté con la erección en mis calzoncillos evidente y Oscar me miró con mucha sorpresa, aquí me di cuenta de una cosa, ¡¡¡yo no me había masturbado junto a Oscar!!! Y la verdad lo necesitaba, porque si también tenia que esconderme de Oscar mis dosis se hacían mas difíciles, así que Oscar tenia que entrar al trapo, como ya dije, Oscar no era mi amigo, y en unos meses paso a ser uno de los mejores, pero aun no tenia con él ese tipo de confianzas, además, el tenía un pene muy pequeño, y yo no quería humillarle, por lo que prefería no hablar con el de ese tema, pero ahora era imprescindible porque yo lo necesitaba urgentemente, así que decidí contárselo pero a la tarde.

Fuimos a la playa, tuve alguna erección, pero esta vez mas controlada que el día anterior que estaba que reventaba, cuando nos teníamos que ir, sin problema alguno me seque y enrolle la toalla y deje que mi fiera despertara nuevamente mientras caía gustosamente en todas las minas... luego Oscar como siempre se despelotó y duchó delante de todo el mundo y nos fuimos para casa... yo me preguntaba porqué Oscar no se duchaba en su casa si la tenía a 500 metros... realmente esa familia era rarísima. Cuando lleguemos a casa, su madre volvió a cogerme del brazo para a llevarme a la ducha... solo de pensarlo, tuve una erección, me sentí algo sucio por hacer algo así, pero en realidad la mayor, la adulta y la que no debería hacerlo era la madre de Oscar... por tanto...

Me volvió a desnudar, y esta vez a mi no me importo mirarla a la cara, mi pene erecto ya se intuía por el bañador, empezó a sacarme la arena con sus manos y yo a excitarme, me dió la vuelta, quito la del trasero y la entrepierna, yo estaba ya muy caliente, y entonces empezó a tocarme el pene de forma mas directa, casi frotándolo, para, según ella, quitarme la arena mas pegada... según yo quería masturbarme y punto porque para eso enchegas la ducha.

Me empecé a excitar, pero al contrario que el día anterior, esta vez yo si me había masturbado y me encontraba mas relajado, así que no me corrí a los 5 segundos, dure mas, pero no mucho, quizás 2 minutos y volví a eyacular, a pesar de todo yo no estaba acostumbrado a las manos de una mujer en mi aparato y la excitación continuaba siendo inmensa, esta vez puse la mano y evite que le cayera todo en la cara, ella enchegó la ducha y empezó a frotarme todo el cuerpo y bañarme. Luego me secó y salí a mi cuarto, bueno, yo ya tenía clara una cosa, la madre de Oscar tenía alguna especie de rollo especial conmigo, yo joven no sabía muy bien que era, pero sabía que aquello era una bomba y tenía que aprovecharme, cuando escuché que ella se estaba duchando, esta vez, me di cuenta de mi error, se me había olvidado dirigirme hacia el comedor completamente desnudo con alguna excusa, tras eso yo estaría obligado a volver a mi habitación para vestirme y durante los segundos en que yo atravesase el pasillo podría verla desnuda con amplio disimulo.

Tras comer y cuando Oscar y yo nos disponíamos a salir a la calle, yo le dije a Oscar de ir a su habitación, si ese chico no sabia cascársela, ya era hora de que alguien le enseñara...

Continuará en el próximo capitulo.