Confesiones 12.
Hoy he quedado con mi amiga María (la lesbiana) para enseñarle el video que me grabé haciendo guarradas.
Hemos estado hablando un buen rato, y entonces le he dicho que si quería ver algo muy fuerte, y se lo he puesto en mi móvil.
Se ha quedado boquiabierta, cuando ha terminado el video ha dicho que era la hostia, y que por qué me había interesado en ella de repente.
Le confesé que quería saber lo que se siente al follar con una chica, que me quiero comer su coño y frotarme con ella.
Cuando creía que se iba a lanzar a mis labios se ha levantado y ha ido a su ordenador, sin decirme palabra me ha puesto un video.
En ese video salía ella, masturbándose, pero no de cualquier manera, salía sentada en el suelo de su habitación desnuda y abierta metiéndose el puño dentro de su coño.
En el video ella gritaba y ponía caritas de zorra mejor que las mías, el flujo de su chocho se le caía hasta que casi formó un charquito en el suelo.
Al verlo me puse súper cachonda, ya estaba decidido, quería tener mi primera relación lésbica hoy.
María se levantó, vino hacia mí y se sentó encima de mi abierta de piernas.
-¿Crees que eres la única que se graba haciendo cochinadas? ¿Qué pasa? que creías que desde lo del otro día en los probadores iba a caer rendida a ti ¿No? ¿Creías que iba a ser tu juguete?
Terminó de decir esto y me beso en la boca, me metió la lengua un poquito y al sacarla me dijo...
-Pues ahora la pelota está en mi tejado bonita, claro que vamos a follar, pero cuando yo quiera. Ahora yo marco el compás.
Se bajo de encima mío y me dijo que me tenía que ir, que había quedado con unos amigos para tomar algo.
-Ya te llamaré cuando me apetezca una gordita sexy, hasta entonces, ahora te toca a ti desesperarte por mí
Salí de su casa casi sin creérmelo, primero me rechaza un repartidor de pizza y luego mi amiga juega conmigo de esta manera.
¿Qué me está pasando? tengo una semana muy mala, me fui a casa bastante depre.
¿Acaso ya no le pongo a los chicos? ¿Me he convertido en el juguete de mi amiga?
Necesito consejo.
Hasta la próxima perversión.
Besos.