Los besos aumentaban de intensidad necesitaba sentirla, la recoste en él sillón y comencé a darle besitos por toda la cara y su cuello, la situación se comenzó a calentar hasta que tocaron él timbre de la casa, me separé de ella muy a mi pesar y fui a revisar de quien se trataba tenía miedo de que Arturo se haya atrevido a venir.

Con mucho cuidado para no ser vista me asomé por la ventana y vi a Melissa quien esperaba a que yo abriera la puerta con su móvil en la mano, suspire de alivio y abrí la puerta y la hice entrar.

–Hey Mely como estas? –Dije dándole un beso en la mejilla

–Estoy bien y tu? Porque estas tan agitada? –preguntó curiosa.

–Amm ehh buena pregunta.. –dije nerviosa –estaba haciendo ejercicio ya sabes

–Ya.. –dijo entrecerrando los ojos.

–Al quien era? –salió preguntando Emily de la cocina.

–Con que ejercicio eh?! –dijo dándome un leve golpe en él brazo –que sucia eres. –dijo riéndose y Emily solo veía la situación muy seria.

–Oh amor recuerdas a Melissa? –pregunté

–Si como olvidarla –Dijo con algo de molestia.

–Mucho gusto me imagino que eres Emily la novia se Alondra –Dijo Melissa

–Asi es soy su novia –dijo de manera muy seria.

En ese momento lo que quería era besar a Emily y continuar lo que momentos atrás habíamos dejado pendiente

–Porque no nos sentamos para poder platicar mejor –dijo Melissa

–Claro si tienes razón sientense – dije distraída

–Y que te trae por acá Melissa? –preguntó Emily lo cual me sorprendió

–Amm no se si Alondra te haya contado pero estamos planeando como acabar con Arturo –Dijo Melissa tranquilamente

–Si amor, ella está de nuestro lado Arturo también le ha hecho mucho daño –Dije mirando a Emily

–Bien, entonces si estás aquí es porque eres de confianza –soltó Emily.

–Si, supongo que también sabes lo que pasó hace tiempo, y como se lo dije a Reily yo estoy muy arrepentida y dispuesta a corregir mi error ayudándolas en lo que pueda –habló Melissa.

–Esta bien igual yo no soy nadie para juzgar, y si Alondra confía en ti yo también –contestó mi novia sonriendole.

La situación se relajó bastante y pasamos un rato muy agradable entre platicas y anécdotas sobre nuestra adolecencia y la amistad que Melissa y yo teníamos antes.

Unas horas después Melissa se despidió dejándonos nuevamente a solas, cuando cerré la puerta me acerqué a Emily y la abracé y le di un pequeño beso en los labios.

–En que estábamos? –pregunté con una sonrisa pícara

–En que ya me iba –Dijo riendose.

–Estas hablando enserio? –pregunté haciendo un berrinche

–Si, mañana tengo que trabajar y ya es un poco tarde –Dijo tocando mis labios con sus dedos

–Bien pero él fin de semana serás mia –le hablé en él oído y Sonreí maliciosamente al ver como se estremecía –pero estas segura que no te quieres quedar?

–Eres muy mala Alondrita –Dijo a pocos centímetros de mi boca –pero no, mañana tengo que trabajar

Se separó de mi y sonrió al ver la cara de tonta que yo tenía.

–Bien –dije fingiendo molestia

–Te ves muy linda cuando pones esa carita de enojada sabías?

–Si te vas a ir hazlo ya Cabrera porque no respondo de lo que te pueda hacer si sigues diciéndome cosas bonitas –Dije en tono de advertencia

–Ya me voy –Dijo dandome un beso en los labios –te veo mañana

–Claro amor hasta mañana, te amo –Dije viendo como salia de mi casa.

–No tanto como yo a ti –Dijo antes de subir a su auto lo que me hizo sonreír como tonta.

Me fui a dormir siendo la persona mas feliz del mundo tenia todo lo que que quería ahora solo faltaba esperar la reacción de Arturo y eso era lo que mas me preocupaba.

A la mañana siguiente me levanté de muy bueno humor, me arreglé y me fui a directo a la empresa, nadie absolutamente nadie podía dañar mi felicidad en ese momento.

Cuando llegue al edificio, aun se encontraba muy poca gente, la mayoría iba llegando, me encerré en mi oficina y comencé a trabajar, minutos después entró Lexa para preguntarme como estaba.

–Que tal estás? –preguntó Lexa preocupada.

–Excelente, no puedo estar mejor  –dije con todo él animo del mundo.

–Y a que se debe tu cambio de humor tan repentino? –preguntó Lexa curiosa

–Cosas de la vida –dije riendo –regresé con Emily –dije gritando de la emoción

–Estas hablando enserio? –preguntó muy emocionada.

–Si ya solucionamos todo –dije segura.

–Me alegro mucho amiga De verdad que ya te hacía falta sonreír de nuevo –dijo Lexa feliz.

–Lo se, me encanta, Lexa ella es mi vida mi razón de ser –dije suspirando

–Puedes dejar de ser tan cursi –preguntó –me pones de mal humor.

–Eres una amargada –le reproché

–Lo soy –Dijo saliendo de mi oficina.

Pasé él resto de la mañana en relativa calma hasta que abrieron la puerta de golpe por lo que yo me imagine que era Lexa .

–Adelante Lexa –dije ironicamente sin voltear a ver la puerta.

–Que se supone que estabas pensando maldita perra –Dijo Arturo sentándose enfrente de mi

Inmediatamente mi puslo se aceleró y volte a verlo con furia

–Ya no pienso caer mas en tus estúpidos juegos mentales! –dije enojada –es suficiente me tienes harta.

–Aun no sabes de lo que soy capaz Alondrita no creo que te convenga saberlo.

–Largate Arturo nada de lo que mi padre ha construido va a pertenecer a ti primero muerta antes de entregárselo a alguien mas.

–Parece que no has entendido nada mi amor –dijo poniendo un arma en él escritorio.

–Si me vas a matar hazlo Arturo pero de mi no vas a recibir ni un solo peso que te quede claro –dije viéndolo fijamente a los ojos.

–Si yo te mato no tendría nada de sentido todo esto mi amor –Dijo sacando una hoja doblada de su pantalón.

–Entonces que quieres –dije mas enojada

–Firma este papel o si no jamás vamos a salir de esta maldita oficina hasta que lo firmes –dijo acomodándose en la silla.

–Por favor Arturo no me hagas reír, en cualquier momento puedo levantar él teléfono y hacer que seguridad venga por ti –Dije retándolo

–Hazlo, solo llama –Dijo señalando él teléfono –Que lo hagas maldita sea llama! –me grito.

Tomé él teléfono y marqué a mi secretaria la cual no contestó, mi puslo se comenzó a acelerar, después marque él numero de Alexa y tampoco me contestó.

–Que mierdas hiciste pedazo de mierda donde está Alexa y mi secretaria –Dije levantándome de la silla

–No se.. –Dijo pensando –quizás no están en él edificio o quizás si pero muertas no se aún la verdad no estoy seguro.

–Te juro que si le hiciste algo a Alexa te voy a hacer mierda, te estás metiendo con la persona equivocada –Dije furica.

–Me da mucho miedo –dijo burlándose –eres patética Alondra jamás has servido para nada ni como mujer, siempre seras un frscaso.

Yo solo podía pensar en Lexa, si Arturo se atrevió a hacerle daño juro por mi vida que lo mato y me importaba una mierda si me iba presa.

 aqui les dejo la continuacion espero sea de su agrado muchas gracias por leer. saludos 

wattpad: FerAguilar390