Cuando me senté nuevamente en mi lugar todos hablan como si nada menos Dany que me observaba de manera triste, ella entendía perfectamente que algo me estaba pasando.

Traté de disimular lo mejor que pude mi ánimo para no arruinar el festejo y lo logré, salimos de ahí y cada quien tomó su rumbo.

–Faby está todo bien? –Preguntó Dany cuando íbamos en el coche

–Si todo bien No te preocupes –Sonreí.

Llegamos al departamento y dejé a los chicos ahí, tomé mi auto y me fui al lugar que siempre me había traído tranquilidad el lago.

Al llegar estacioné y bajé observando lo cambiado que estaba aquel lugar, había mas gente en el lugar y eso me desanimaba un poco porque arruinaba la tranquilidad de aquel lugar.

–Solo venías aquí cuando algo no andaba bien en tu vida, si no mal recuerdo –Dijo alguien a mi lado.

–Bueno.. creo que seguirá pasando –Reí y voltee a mirarla. –Me sorprende verte aquí Estela

–Este lugar es indicado para pensar a solas cuando se necesita –Dijo sonriendo de medio lado.

–Estamos de acuerdo en eso.. –la miré y ella tenía su mirada perdida en otro lugar –Como has estado?

–Bien, supongo que bien.. mi vida se resume en trabajo y solo eso no me puedo quejar.

–Me enteré que trabajas con Ruby –Dije recordando lo que me había contado mi madre

–Si.. es algo raro dado que yo sigo protegiendo a tu madre –Se rió –Le debo mucho a tu madre, es muy importante en mi vida y créeme que jamás le haría daño.

–Eso espero Estela

Después de un buen rato se fue dejándome sola

Nuevamente con mis pensamientos y mi mente regresó a Melissa que a pesar de todo seguía preocupada por ella.

Había decidido dejar de insistir y dejar que se tomara su tiempo para asimilar y superar su separación, no quería ser una molestia en estos momentos en su vida.

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Dos semanas mas pasaron y yo no había tenido noticias de Melissa, yo no le insistí ella tampoco lo hizo a lo cual traté de no ponerle atención y enfocarme en el trabajo que tenía con mis amigos.

Pedro nos había conseguido un caso que estábamos resolviendo entre los tres ya que se veía algo complicado para ser nuestro primer caso en la carrera.

Un día mientras me encontraba revisando unos documentos mi secretaria entró a mi oficina y me informó que la señorita Melissa Alvarez se encontraba afuera y no pude evitar levantarme rápidamente y salir a su encuentro.

Al salir la vi hermosa como siempre y con su típica sonrisa inocente y seductora. Note que no iba a sola y tres chicas mas venía con ella y no tenían buena cara.

Las hice pasar a mi despacho y mientras Melissa me explicaba lo sucedido no pude evitar hacerle un par de bromas a Melissa quien sorprendentemente las respondió dejándome babeando por ella.

Las chicas me explicaban lo que había pasado y al ver que el caso no era nada difícil y se trataba de Melissa me decidí a ayudarlas.

Ellas se adelantaron a donde tenían a la chica detenida y yo fui a la oficina de Daniela, toqué antes de entrar pero no esperé respuesta y entré.

–Melissa se acaba de ir –Me recargué en la pared dramáticamente –Dios me encanta esa mujer!!

–Vaya que milagro –Dijo Dany sorprendida –y a que ha venido? Digo si se puede saber –Preguntó de manera celosa.

–A pedirme que ayude a sus amigas en un caso

–Te busca cuando te necesita –Se rió –Que novedad!

–Vamos Dany no seas así –Hablé molesta – esa chica me gusta enserio y quiero conquistarla..

–Esa chica no sabe lo que quiere y te lo demuestra siempre Fabiola pero bueno yo no te diré que hacer –Dijo cruzándose de brazos – solo no digas que no te advertí.

La miré y sonreí me acerqué a ella y besé su frente antes de salir de su oficina. Sabía que Daniela solo se preocupaba por mi y no quería que Melissa me lastimara nuevamente con sus palabras.

Me fui directamente a seguir a las chicas, mi actitud al llegar ahí fue completamente profesional y demostré todo mi conocimiento para sacar a esa chica, el oficial estuvo de nuestro lado y pudimos sacar a La amiga de Melissa sin ningún pero.

Me sentía orgullosa, me encantaba mi trabajo y mas poder ayudar a la gente que se lo merecía, ellas eran buenas personas y me agradaba la manera en que trataban a Melissa.

Después de un acalorado agradecimiento por parte de los padres y de Alondra, me despedí y salí rumbo al estacionamiento para tomar mi coche e irme pero justo antes de abrir la puerta me gritaron a mis espaldas.

–Fabiola!!

Me giré y vi a Melissa que venía corriendo para alcanzarme, se paró frente a mi y la miré con mi típica sonrisa de medio lado

–Que pasa guapa – pregunté

–Me acaban de decir cobarde por tu culpa –Dijo fingiendo molestia y mi cara era de confusión.

–Cobarde? Porque?

–Porque todos se dan cuenta que me gustas pero no me atrevía a decírtelo.

Mi sonrisa apareció de forma inmediata y la miré fijamente buscando en su cara cualquier rastro de broma pero luego vi la seriedad e intensidad con la que me miraba y me acerqué rápidamente y la besé después de mucho tiempo mis labios probaban nuevamente los suyos y en ese momento me sentía totalmente completa.

Nos separamos al sentir muchas miradas sobre nosotras, al ver que se trataba de las amigas de Melissa solté una gran carcajada al ver que Mely no sabía ni donde esconderse y yo solo pude abrazarla.

–Sabes que en este momento soy la persona más feliz del mundo – Dije abrazándola mas fuerte

–Lo eres? –Preguntó sorprendida

–Lo soy hermosa cuando estoy a tu lado siempre soy feliz

Los ojos de Melissa brillaban de emoción al escuchar mis palabras y me prometí que jamás apagaría ese hermoso brillo.

Después de despedirnos se fue con las chicas prometiendo llamarme para salir al día siguiente. Maneje al despacho con una sonrisa que nadie me iba a a poder borrar de la cara.

No podía pedir mas a la vida, me estaba dando lo que tanto quería después de mucho tiempo. Melissa era la única que me hacía sentir esa paz y tranquilidad que Yo tanto necesitaba y me juré que jamás le haría daño.

Llegué me fui directamente a la oficina de Daniela para contarle lo que había pasado y cometí el error de abrir la puerta sin tocar y me llevé una sorpresa no muy buena.

Brenda sentada sobre el escritorio de Dany y se besaban muy apasionadamente y al escuchar el ruido de la puerta se separaron.

–Fabiola no es lo que parece –Dijo Dany acercándose a mi y yo la miraba completamente seria

–Entonces que se supone que es? –Dije mirando fijamente a Brenda que no pudo sostener mi mirada y me sentí mal al ver que yo seguía causando cosas en ella.

–Fue mi culpa –Dijo Brenda bajándose del escritorio –Me tengo que ir

La detuve antes de que se fuera y le pedí hablar un momento a solas lo que muy dudosa aceptó.

Dany miraba todo en forma nerviosa y trate de calmarla con una sonrisa y funcionó. Me fui a mi oficina y Brenda me siguió cerrando la puerta cuando entró.

–No te atrevas a jugar con Daniela–Dije muy enojada –Si la lastimas créeme que me vas a conocer Brenda..

–Que te hace pensar que la voy a dañar Fabiola –Dijo alejándose de mi

–Crees que no me doy cuenta que siempre me miras y nunca me sostienes la mirada?? –dije mas molesta

–No te creas única Fabiola –Dijo riendo y yo me acerqué mas a ella tratando de demostrar mi punto y su respiración se aceleró demasiado.

–A esto me refiero Brenda  –Me alejé y me senté en mi sillón cubriendo mi cara con frustración. –ya estas advertida Brenda.. si la dañas no tendré piedad contigo.