–Las 4 am –Dije sintiéndome un poco culpable por despertarla –Lo siento Dany regresa a la cama mañana hablamos.

–No, dime que pasa es raro verte en ese estado –Dijo sentándose a mi lado.

–Mi madre eso pasa –Suspiré – Puso a alguien que me cuidara puedes creerlo? –Dije molesta.

–Es entendible es tu madre y quiere cuidarte –Dijo seria –Sabes bien en que mundo está y solo quiere cuidarte..

La dejé ahí y me fui a encerrar a mi cuarto demasiado molesta.

A la mañana siguiente desperté mas tranquila, me duché y cuando estuve lista salí a la sala donde toda mi tranquilidad desapareció.

–Que haces aquí? –Pregunté molesta.

–Pensé que ya éramos amigas Fabiola –Dijo jessie con risa burlona –Mira yo no tengo la culpa de las ordenes que me da tu madre..

–Quien Te dejó entrar? –Pregunté y vi a Dany ya lista saliendo de la cocina.

–Yo dejé que entrara –Sonrió. –no podía dejarla afuera

–Los espero en el coche Daniela.

Salí de ahí y me subí a mi coche a esperar a Dany y Pedro que momentos después salieron y subieron al auto ..

–Los dejaré en el despacho y luego iré a arreglar unos asuntos.

Solo asintieron y yo empecé a manejar viendo como el auto de Jessie nos seguía disimuladamente. Suspiré y seguí manejando, dejé a los chicos en la oficina y me fui directamente a casa de mi madre, ella y yo teníamos cosas que aclarar.

–Hija que sorpresa –Dijo al verme entrar por la puerta de su casa

–Sabías que vendría no creo que sea sorpresa –Dije molesta y ella soltó una leve carcajada.

–Mi pequeña tan predecible como siempre –Se sentó y me invitó a sentarme junto a ella.

–Solo dime porque pusiste a esa chica a cuidarme? –Dije molesta –Tu mejor que nadie sabe que me se cuidar sola.

–Eso lo se.. pero hija hay personas muy malas que saben que estás de regreso en la ciudad y creen que regresaras al negocio..

–No lo haré madre! No regresé para eso..

–Y yo se que tu no regresaras a este mundo y lo entiendo pero ellos no! –Me habló un poco fuerte. –Tengo miedo de que intenten algo en contra de ti hija déjame cuidarte por favor.

–Pero yo no quiero a una niñera detrás de mi a todas horas madre –Grité –Esto no lo aceptaré!

–No esta en discusión señorita es una orden.

Reí irónicamente y al ver que hablaba en serio salí como alma que lleva el diablo pero antes de salir volteé a verla nuevamente.

–Yo no trabajo para ti y no voy a seguir ninguna puta orden.

Salí de ahí y me topé de frente con Jessie que me miraba de manera molesta.

–No es mi problema Fabiola pero no creo que sea bueno hablarle así a tu madre –Dijo viéndome fijamente.

Y tenía razón pero claro que no se la iba a dar..

–Exactamente no es tu problema niña así que si me disculpas me tengo que ir.

Se preparó para subir a su coche y seguirme pero la detuve.

–Tu no.. yo no necesito que alguien me cuide, yo me se cuidar sola.

–Pero son ordenes –Dijo.

–Me valen madre la ordenes –Dije enojada –No me sigas porque te puedes meter en problemas.. y no con mi madre –Subí a mi coche –conmigo.

Acelere y salí de ahí dejando a Jessie con una leve sonrisa en los labios. Manejé sin rumbo tratando de calmarme pero todo era inútil, mi vida se estaba convirtiendo en un caos, un caos que yo estaba tratando de evitar.

El resto de la semana pasó demasiado rápido y todo parecía indicar que mi madre me había hecho caso y Jessie ya no me seguía a ningún lado por lo cual yo me mantenía alerta y con un arma cerca de mi, por si las dudas, no era miedo era precaución.

El sábado en la tarde mientras manejaba rumbo a casa de Melissa mi teléfono sonó y al ver de quien se trataba suspiré y contesté.

–Dime madre. –Dije tranquila.

-Estas ocupada? –Su voz era seria.

–Voy a casa de Melissa –contesté con la misma seriedad –Pasa algo?

–Necesito verte ahora..

–Bien, solo dime donde y voy para allá

–En la bodega de los chicos –Habló un poco mas relajada.

–Nos vemos ahí.

Cambié de rumbo y fui directamente a la bodega, era muy raro que mi madre solicitara verme y mas en la bodega de los chicos. Después de unos minutos manejando llegue a la bodega, entré rápidamente y pude ver a los chicos, mi madre y a Jessie que todos me miraban fijamente.

Salude a todos con un simple movimiento de cabeza y miré a mi madre quien estaba muy seria.

–Dime madre que pasa?? –pregunté curiosa.

–Bueno hija este tema es algo delicado y créeme que si no se tratara se tu seguridad no lo haría.. –Dijo pensando las palabras adecuadas. –Tenemos sospechas de que están preparando un atentado contra ti..

No podía creer lo que mi madre estaba diciendo, yo ya no estaba en ese mundo y no había porque hacerme daño.

–Porque? –Pregunté confundida.

–Por el simple hecho de que eres mi hija –contestó triste –Necesito que Jessie entre a trabajar al despacho y viva en tu departamento.. –Dijo seriamente. –Solo es temporal, queremos mantenerte protegida hija.

–Bien.. –Acepté quería tener a alguien de mi lado que me pudiera ayudar para no poner en peligro a mis chicos. –Vámonos entonces– le dije  a Jessie

Mi madre sonrió  y me dio un gran abrazo.

–Perdóname hija pero esto es por tu seguridad..

–Lo se madre no te preocupes –Suspire y la abracé mas a mi. –Perdóname tu a mi, no debí hablarte de mala manera.

Después de un rato retomé el camino a casa de Melissa pero ahora con Jessie manejando mi coche, sería mi chofer el día de hoy.

Llegamos a casa de Melissa, bajé a tocar el timbre y salió con una sonrisa enorme y rápidamente se colgó a mi cuello y beso mis labios.

–Estas lista? –Pregunté.

–Si amor vamos..

Aseguró la casa y caminamos al coche y le abrí la puerta del auto dejando que Melissa entrara primero y al mirar a Jessie me miró a mi confundida.

–Oh amor ella es Jessie una vieja amiga, espero que no te moleste que la haya invitado –Dije nerviosa.

La cara de Melissa se suavizó y saludó amablemente a Jessie quien miró muy detenidamente a mi chica por el retrovisor y tuve que contenerme para no sacarle los ojos.

–Mucho gusto Jessie soy Melissa, me alegra conocer a mas amigos de mi chica –Dijo feliz.

–El gusto es mío preciosa –Dijo con una sonrisa de medio lado.

Quería matar a Jessie en ese momento pero me contuve al sentir la mano de mi chica sobre la mía.

–Todo bien? –Preguntó viéndome preocupada.

–Perfectamente mi amor. –Besé sus labios y emprendimos camino a casa de Alondra y Ems.

Cuando llegamos las tres bajamos y yo tomé de la cintura a mi chica y la alejé un poco de Jessie quien seguía con sus miraditas a mi chica, Melissa se adelantó y yo tomé bruscamente a Jessie del brazo.

–Una vez mas que te atrape mirando a mi chica de la manera en que lo haces pondré una bala justo aquí –puse mi dedo sobre su frente y di un leve golpe.

Dejé a Jessie parada y caminé para alcanzar a mi chica que justamente saludaba a las chicas. Les presente a Jessie y rápidamente la integraron a la platica, me seguía pareciendo increíble como estas chicas te hacían sentir como en casa sin siquiera conocerte.

La tarde noche se pasó entre bebidas y platicas muy tranquilas hasta que la mejor amiga de Alondra, Lexa propuso ir a algún bar a divertirnos. Todos aceparon rápidamente.

Melissa sugirió que invitara a Pedro y a Dany lo cual me pareció una buena idea y sabía que no dirán no.

Mientras esperábamos la hora para irnos al bar seguimos platicando animadamente, todos estaban muy interesados en las historias de Jessie que hasta ese momento a todos les había caído bien.

Cuando por fin Jessie dejó de hablar nos pusimos en marcha al bar donde Dany y Pedro nos esperarían.

Melissa iba muy animada por los tragos que se había tomado en casa de Alondra y eso me encantaba. Melissa y Emily se fueron platicando sobre un tema que no le puse atención y a mi lado caminaba Alondra.

Estuvimos unos minutos en el estacionamiento esperando a Dany y Pedro y mientras esperábamos pude ver como Jessie miraba descaradamente de arriba a bajo a mi chica e iba a caminar hacia ella y romperle la cara pero alguien me tomó del hombro con suavidad.

–Tranquila Faby.. –Dijo Alondra con una leve sonrisa –Solo te está provocando.

–Es una idiota le quiero romper la cara –Dije poniéndome en marcha hasta Jessie pero Alondra me tomó por los hombros y me alejó un poco de ahí.

–Tranquila si? –Dijo viéndome fijamente. –Ella no se acercará y sabes bien que Melissa te quiere solo a ti, vamos a disfrutar esta noche por favor!

Asentí un poco avergonzada por mis estupidos celos. Un rato después entramos al lugar cuando mis chicos habían llegado, tomamos una mesa grande donde todos pudiéramos sentarnos juntos.

Me había relajado bastante al sentir a Melissa a mi lado, me veía de una manera que hacía que todas las sensaciones malas desaparecieran.

La noche transcurrió de manera tranquila las cervezas iban y venían y yo me sentía cada vez mas alegre al igual que todos en esa mesa.

Cada quien tomó a su pareja y se fueron a la pista y bailábamos animadamente, me la estaba pasando sumamente bien.

De un momento a otro perdí de vista a Daniela y solo veía a Pedro que platicaba con una chica y fui hasta el dejando a Melissa bailando con Alondra.

–Donde está Dany? –Pregunté buscándola con la mirada.

Pedro se veía nervioso lo cual me comenzó a poner de mal humor.

–Donde está, Pedro?!

–Afuera..

Tenía una idea de con quien estaba y mi sangre comenzó a hervir del coraje y no me di cuenta que alguien me estaban siguiendo. Caminé hasta la salida y pude ver a lo lejos un grupo de personas que venían pero no puse atención porque una discusión me distrajo.

Pude ver como Dany forcejeaba con Brenda quien se veía algo tomada y rápidamente me acerqué a ellas.

–Suéltala! –La empujé –Te advertí pequeña zorra que te alejaras de Daniela

–Tu no eres nadie para darme ordenes –Gritó –No te tengo miedo Fabiola, mátame!! Hazlo ahora.

–Cierra la boca idiota –Dije entre dientes, Dios sabe cuanto me contuve para no sacar mi arma y pegarle un tiro. – solo aléjate no te quiero cerca de ella entiéndelo.

–Que Fabiola? –escuché una voz frente a mi y me sorprendió ver a todos mis viejos amigos. –Sigues con la estupida costumbre de enamorarte de tus mejores amigas? –Escupió una ya tomada Estela.

Quise darle un golpe pero sentí los brazos de alguien rodearme y me di cuenta que era Alondra nuevamente quien me abrazaba y hablaba al oido.

–Tranquila Por favor  –Decía sin soltarme

Cuando me separé de ella pude ver a Melissa con lagrimas en los ojos y se fue dejándonos ahí.

Una parte de mi quería correr detrás de ella pero Alondra me detuvo y fue tras ella, error grave error.

En mis ojos podía verse la furia que estaba tratando de contener pero me era imposible, me acerqué a Brenda y le di una cachetada y luego me fui sobre Estela y rápidamente sentí como Elisa y Luis me apuntaron con su arma y rápidamente alguien se puso delante de mi y les apuntó con un arma, yo saqué la mía y ya estábamos en igualdad de condiciones .

La tensión se podia cortar con un cuchillo, mis manos temblaban por la furia que sentía en ese momento.

–No se que mierdas les pasa pero no se olviden con quien están tratando idiotas –Dijo Jessie frente a mi. –bajen las malditas armas o no voy a dudar en disparar.

–Bajen las armas chicos –Dijo Estela quien limpiaba la sangre que salía de su labio por el golpe que le di.

Los chicos bajaron las armas y nosotras también, Daniela estaba presenciando todo y se veía sumamente sorprendida.

–Aclararemos esto después –Dije viendo a Estela y a Brenda –Ahora mejor lárguense antes de que algo mas pase –mi respiración era agitada.

Desaparecieron y nosotras caminamos de regreso al bar.

–Discúlpame –Dijo Jessie, pude haber evitado esto si hubiera llegado un momento antes –se veía apenada.

–No hay problema –Dije pensando en Melissa.

Daniela caminaba a un lado de mi y de un momentos otro tomó mi brazo e hizo que nos detuviéramos de golpe.

–Estas enamorada de mi? – preguntó viéndome fijamente.