Manejé directo a donde estaban mis amigos y en todo el camino Zoé jamás soltó mi mano, sabía que estaba muy nerviosa y yo también pero ya no había marcha atrás y si quería cambiar mi vida debía hacer esto.

–Tranquila –Le sonreí –No pasará nada guapa

–Estás segura? –Preguntó –no tienes miedo a lo que digan tus amigos??

–Ellos sabrán entender, son mis amigos deberán aceptarlo y si no pues no me importa, es mi vida y hago lo que quiera.

Le sonreí y regresé mi vista al camino, cuando llegamos estacioné el coche y antes de bajarnos del auto la acerqué a mi y besé sus labios y sonreí.

–Tranquila guapa no pasará nada..

Nos bajamos, pagamos las entradas y entramos al enorme lugar que estaba repleto de gente, recorrimos gran parte del lugar viendo a la gente en los juegos mecánicos divirtiéndose, otros en los restaurantes y por último en los bares que estaban esparcidos por todo el lugar.

Tomé mi teléfono y le mandé un mensaje a Carlos quien me respondió estaban en un restaurante, me dijo cual era y caminamos hasta ahí agarradas de la mano pero antes de llegar al lugar nos encontramos con Naty quien venía del brazo del idiota de su novio y al verme tomada de la mano de Zoé puso cara de malestar.

–Vaya! –habló Naty – Pensé que no vendrías.. –dijo molesta y después miró a Zoé con mala cara –y menos acompañada.

–Carlos ya sabía que yo vendría, no se porque te sorprende tanto Natalia  –Dije con desinterés total. –Si nos disculpas tenemos que llegar con los chicos.

Caminé con prisa sin soltar la mano de Zoé que para ese entonces iba aferrada a mi con fuerza.

En el momento que me percaté de esa situación la miré y me detuve a verla.

–No voy a obligarte preciosa –acaricié su mejilla –si no estás cómoda con esto dímelo y nos vamos..

–Lo haré si tu estás completamente segura.. –suspiró

–Lo estoy Zoé –Sonreí –No es tan difícil entender que ahora estoy con una chica inteligente, interesante y muy guapa –besé su mejilla –Ellos lo entenderán.

Seguimos a paso mas tranquilo y una vez llegamos, soltó mi mano de golpe al ver a Javier en ese lugar, yo también me sorprendí demasiado ya que el no acostumbraba a ir a las reuniones.

No tenía planeado decirle a mi hermano aún pero si estaba aquí era por algo y lo iba a hacer sin importar nada.

Entramos y nos sentamos con mis amigos quienes veían algo sorprendidos a Zoé ya que sabían que era la ex de mi padre. La saludaron amablemente y comenzamos a platicar animadamente mientras nos traían la comida, después de un rato Natalia se integró a la mesa sola, se veía de muy mal humor pero hice lo posible por ignorarla.

–Que sorpresa verte aqui Zoé –Dijo Javier curioso.

–Pues ya ves.. –Dijo nerviosa –Recién llegué a la cuidad después de unos meses de vacaciones.

–Me alegro.. –dijo pensativo –No tenía idea de que ustedes dos fueran amigas..

–Amigas?? –Dijo Zoé en tono burlón –Son todo menos amigas.

Agache la mirada tratando de evitar la de todos que me veían sumamente sorprendidos, no era el momento de hablar de eso y Natalia lo había echado a perder.

–Estamos saliendo, no veo cual es el problema –Dije molesta viendo a Natalia que sonreía con molestia. –y si salgo con ella en que te molesta Natalia –Levanté la voz –Es mi maldita vida y si no lo aceptan no me importa por que estoy cansada de hacer las cosas solo por el que dirán..

–Cálmate –Dijo Javier –no hay necesidad de pelear, yo lo acepto hermana no te voy a juzgar nunca y tu lo sabes –Dijo con seriedad

Suspiré y traté de tranquilizarme, el ambiente estaba demasiado tenso y todos se miraban entre si.

–Somos tus amigos –Dijo Laura después de un silencio –y si esto es lo que quieres te apoyaremos.

Pasamos otro rato platicando y el ambiente se relajó bastante y todos platicaban y compartían anécdotas con Zoé, menos Natalia que estaba sumida en su teléfono.

Decidí que me quería ir de ese lugar ya que el maldito carácter de Natalia me estaba poniendo de muy mal humor.

Sabía que no me tenía que importar pero era imposible olvidarme tan fácil de lo que sentía por esa chica.

Me despedí y nos fuimos rápido no esperé ni un momento más en ese lugar.

–Porque nos fuimos? –Preguntó Zoé caminando a mi lado –te noté muy incómoda, está todo bien??

–No me sentía muy cómoda.. –evite decirle la razón.

Nos subimos al coche y manejé sin rumbo  mientras platicábamos animadamente hasta que se hizo muy tarde y la llevé a su casa.

Cuando se iba a a bajar del coche le hablé.

–Lo siento si no fue lo que tu esperabas –Hablé apenada –No me sentía muy cómoda

–Erika, yo me siento muy bien a tu lado –besó mi mejilla –Pero mañana paso por ti yo e iremos a cenar y después vemos a donde vamos ok?

–Me parece una gran idea –Besé lentamente sus labios.

Se bajó del coche y manejé con dirección a mi casa y sabía que al llegar mi hermano estaría ahí para interrogarme.

Una vez que llegué a casa me estacioné, entré y como lo había pensado mi hermano me esperaba en la sala.

–Aún estas aquí –Dije fastidiada –Pensé que ya estabas dormido.

–Que me tienes que decir sobre tu relación con Zoé? –dijo serio

–Ya sabía que era sobre eso.. –caminé hasta el patio, si íbamos a hablar sería donde mi padre no escuchara nada.

Una vez que salimos encendimos un cigarrillo y el esperaba pacientemente mi respuesta.

–Hace tiempo teníamos un tipo de relación pero solo se basaba en sexo –Dije fumando de mi cigarro – después ella se fue de la ciudad por dos meses en los que ella dio por terminado lo que teníamos –suspiré – me buscó y me dijo que la razón por la que se había ido era por que se había enamorado de mi y pues yo quise intentarlo –me encogí de hombros – eso es todo..

–Porque con ella? –Dijo mirándome fijamente

–Tienes algún problema? – dije empezándome a molestar –Pensé que lo habías aceptado.

–No es eso Erika –dijo –Es la ex de mi padre!! –pensó lo que iba a decir — y si te lastima??

–Eso no pasará! –dije molesta – no necesitas hacerte el preocupado Javier, ambos sabemos que eso no es lo que te preocupa..

–Erika no.. –antes de que hablara nuevamente lo interrumpí

–Te preocupa lo que pueda decir mi padre, no lo que me pase a mi –sonreí irónicamente –Nunca te ha importado.

Lo dejé ahí y me fui a mi cuarto a encerrarme ya no tenía ganas de seguir hablando con el.

Me tiré en mi cama y me quedé dormida minutos después. A la mañana siguiente me despertó una llamada en mi teléfono y lo tomé viendo que se trataba de mi madre.

Llamada:

–Despierta! –dijo riendo

–Ya ya, no grites mamá –dije fastidiada – es muy temprano.

–Hay hija ya consíguete a alguien para que te quite lo amargada – dijo con burla lo cual me hizo reír a mi.

–Si, lo siento ma, solo que me duele un poco la cabeza.. qué pasa?

–Recuerdas que hablamos del departamento ayer? –Dijo animada

–Amm si que con eso?? –Pregunté

–Ya tengo el indicado – dijo muy feliz –y eso no es todo.. te tengo una gran sorpresa..

–Que sorpresa? –dije ilusionada, sus sorpresas siempre me agradaban mucho.

–Estoy en la ciudad!!!

Mi sonrisa no cabía en mi rostro, hacía mucho tiempo que no veía a mi madre y ya la extrañaba demasiado.

–Nos tenemos que ver madre! –dije feliz –en este momento!

–Lo se hija.. que tal si me recoges en el aeropuerto??

–Claro madre voy para allá.

Me arreglé rápidamente y fui directamente al aeropuerto, al llegar vi que mi madre platicaba animadamente con alguien pero la persona estaba de espaldas, cuando me acerqué y vi de quien se trataba mi sangre comenzó a  hervir del coraje..

–Que haces aquí Natalia!