Cuando Daniela y yo salimos del baño Pedro nos miraba desde lejos con una mirada de preocupación y pude notar que Veronica ya no se encontraba en el lugar lo cual agradecí infinitamente.

Al llegar a la mesa Daniela se sentó a un lado de mi y tomó mi mano por encima de la mesa y eso me causó una sensación muy extraña pero me agradó.

La sonrisa de Pedro no podía ser mas grande al ver nuestras manos unidas.

–Dios! –dijo tratando de no gritar –Están juntas?!

–Relájate primo, vamos poco a poco –habló riendo Daniela.

Pedro estaba demasiado feliz al igual que yo, me sentía bien y me agradaba la calidez que sentía en el pecho cada vez que Daniela tomaba mi mano y depositaba un tierno beso.

–Creo que deberíamos ir a festejar –dijo Pedro

–Que propones primito –dijo Dany entusiasmada

–Vamos al bar de siempre! –dijo animado –la noche es joven y tenemos que celebrar esto!

–Quieres ir? –me preguntó Daniela viéndome de manera tierna

–Si guapa vamos –contesté.

Pagamos la cuenta y salimos del restaurant y Pedro manejó directamente al bar. Una vez que llegamos, Pedro se adelantó ya que Daniela me había detenido y yo la miré confundida.

–Que pasa Dany –dije

–No sabes cuantas veces deseé hacer esto –me rodeó con sus brazos y una vez mas me besó y yo inmediatamente le correspondí.

Nos separamos y juntamos nuestras frentes y Habló

–Faby.. se lo que pasa y la situación en la que estas pero prometo que sacaré a cualquier persona que esté en tu mente –Dijo viéndome fijamente.

–Lo deseo con todo el corazón, gracias por estar siempre Dany te amo –Dije sinceramente

Me abrazó por unos minutos y de un momento a otro se separó de mi rápidamente lo cual me sorprendió e iba a preguntar cuando escuché la voz de Alondra detrás de mi.

–Holaa chicas! –La saludamos con un beso en la mejilla y con una sonrisa –veo que por fin diste el paso no?

–Si –Reí nerviosamente al pensar que Melissa podría estar cerca.

–Con quien estás!? –Preguntó Dany animadamente.

–Oh vine con las chicas, ya sabes querían salir a distraerse –Dijo quitándole importancia –recién vamos llegando y las vi y quise venir a saludar... me alegra verlas juntas y felices.

–Gracias Al –Dije sonriendo

–Bueno entramos?! –Preguntó Daniela.

–Si, bueno yo las dejo ya me deben estar esperando las chicas –dijo Alondra –nos vemos chicas!

Se fue dejándonos solas, Daniela me miraba fijamente y sonrió.

–Te mueres por saber si está aquí verdad? –dijo Dany y yo me sentí terrible por ser tan obvia.

–No, Dany.. –Me interrumpió.

–No digas nada –puso su dedo sobre mis labios –Yo lograré que la olvides te lo prometo –Besó mis labios antes de empezar a caminar Habló –Seré paciente.

Sonreí y caminé a su lado hasta donde Pedro nos estaba esperando. Cuando estuvimos en la mesa Pedro rápidamente pidió una botella de whiskey la cual nos comenzamos a tomar muy rápido.

Daniela y yo ya estábamos demasiado tomadas y nos importaba muy poco quien estuviera mirándonos, nos integramos rápidamente a las personas que estaban bailando. Yo me sentía sumamente bien, estaba demasiado cómoda al lado de Daniela.

Después de un muy buen rato bailando y riendo, Pedro decidió que era suficiente por hoy y había que regresar a casa. Caminamos a la salida, Daniela iba abrazada a mi y reíamos debido al alcohol que había en nuestra sangre.

Justo antes de llegar a la salida Daniela me besó y por ese beso chocamos con alguien y se trataba de Melissa que venía riendo con un chico pero al verme en esa situación se le borró completamente la sonrisa.

Me quedé completamente paralizada al verla y no reaccioné hasta que Daniela me tomó la mano y yo seguí mi camino junto a Dany.

Nos subimos al coche y toda la borrachera había desaparecido y solo estaba en mi mente la risa de Melissa esa que yo siempre causaba.

Todo el camino fue en completo silencio hasta llegar a casa, Daniela se había puesto muy distante, ella sabía que Melissa me afectaba pero no sabía cuanto, hasta que lo vio hoy por ella misma.

Daniela bajó del carro sin decir nada y Pedro también y yo me quedé por unos minutos en el coche tratando de procesar lo que había pasado.

Melissa:

Después de Arturo la vida me premió con la mujer mas hermosa e increíble del mundo, la amaba con locura, era mi vida.

Habíamos pasado los mejores años de nuestra vida, a su lado me sentía plena, segura y en paz. No negaba que había veces que dudaba porque siempre me dejaba llevar por el que dirán y mi madre siempre estaba sobre mi tratando que yo dejara esa vida de "libertinaje" como ella decía y muchas veces estuve a punto de caer pero el amor por Fabiola siempre me detenía.

Cuando me enteré sobre la muerte de Arturo sentí un alivio, por fin nos habíamos librado de ese asesino y ser despreciable pero al darme cuenta que la persona que lo mató fue Fabiola me rompió el corazón.

Tenía la oportunidad de demostrar que no era igual que el y de demostrar que había cambiado pero prefirió saciar su sed de venganza, yo no podía estar con alguien igual a Arturo, me daba miedo el simple hecho de pensar estar cerca de alguien que se atrevió a quitarle la vida a alguien mas.

La amaba demasiado pero el miedo superó a ese amor tan grande que le tenía y que aún le tengo. El dolor que sentí al alejarme de ella no se compara con el dolor que estaba sintiendo en esos momentos al ver como Daniela besaba a Fabiola y ella no ponía resistencia alguna.

Quería irme de ahí sin decir nada pero no podía mi realidad era otra, yo estaba con Carlos, ese chico lindo y tierno que cualquier chica quisiera.

–Todo bien Mely? –Preguntó Carlos.

–Si, todo bien. –dije caminando a la mesa donde estaban las chicas.

Al llegar rápidamente tomé a Alondra de la mano y la llevé al baño.

–Acabo de ver a Fabiola –dije apunto de llorar.

–Si.. –Dijo esperando a que continuara hablando.

–Estaba besando a Daniela –Dije soltando algunas lágrimas.

–Si.. pues están juntas –dijo un poco confundida por mi actitud.

–Y porque mierdas no me lo habías dicho Alondra!! –Le grité

–Porqué tendría que decírtelo Melissa?! –Preguntó muy molesta –Tu estas con Carlos y eres feliz o al menos dices serlo, ella estaba sufriendo mucho ya es hora de que haga algo por ella y trate de ser feliz.

Mi llanto era incontenible y Alondra me miraba de manera molesta, nunca la había visto así.

–Porque lloras Melissa? –dijo seria –porque ahora que la ves con alguien mas si te importa? –Dijo viéndome a los ojos – porque ahora que está tratando de ser feliz quieres arruinarle eso! Yo vi las miles de veces que te rogó para que te quedaras con ella y tu la ignorabas.

–Tenía miedo Alondra !!

–Miedo, miedo siempre con tu maldito miedo!! –gritó –conocemos perfectamente a Fabiola y sabíamos que ella nunca se atrevería a hacerte daño.

–Alondra por favor! –dije llorando, sus palabras me estaban hiriendo mucho.

–No Melissa, te comportaste muy mal.. fuiste una idiota y ambas sabemos que no fue el miedo si no otra cosa. –dijo furiosa –sigues siendo la misma perra de siempre.

Salió de ahí y me dejó sola en un mar de lágrimas tenía razón y yo tenía la culpa de que ahora Fabiola estuviera en brazos de Daniela, yo era la idiota.