Hello! Pueden hallar los capítulos previos en mi perfil, espero sea de su agrado!
—¡Hola Alondra! Tiempo sin saber de ti —escuché.
Cada dia era mas dificil que el otro
Las malas noticias viajan juntas
Si te dieran a elegir obviamente elegirias lo que para ti es lo mejor, pero y para una segunda persona
(¿Confiráis en mí?)
—Leila, ¿Acepta por esposa a Olivia Gómez Vargas? —preguntó.
Mientras hablábamos le coqueteaba, le acariciaba los brazos, le besaba el cuello. Su olor era tan delicioso que sólo quería prenderme de su cuello y tenerla cerca siempre. Sus besos se me hacían adictivos. Quería que no parara de besarme.
—Yo también compré un regalo para ti —me extendió un caja.
Un problema que nos afecta a muchas de nosotras tratada de una forma lésbica
—Oye—cogió mi mentón para que la mirase—Tu deber, es quedarte aquí con la pequeña y no tienes por qué ir a un lugar si no deseas —mencionó
—¡Hola mamá! —expresó con una sonrisa escalofriante.
...Ahí, bajo los ojos de los dioses y de una en particular… la historia de las amantes eternas comenzó...
...En vez de detenerse al ver que su compañera no podía más, introdujo dos dedos dentro de ella y la comenzó a penetrar rápidamente.
... pero tal vez el amor no es suficiente-...
Me senté en la cama y la abracé por la cintura atrayéndola hacia mí, volvimos a besarnos, sentí el delicioso sabor del alcohol en su lengua. Yo acariciaba sus tetas, su espalda. Entonces ella abrió sus piernas, dejando en medio una de las mías frotando su vagina...
Siempre tuve la fantasía de estar con una mujer..y se me dio!
Comenzamos a besarnos nuevamente hasta que Beth se acomodó sobre mí y siguió besándome los labios y el cuello. Yo la tomé por las nalgas para levantarla un poco y deslizar mi mano por dentro de su pantalón hasta llegar a su vagina. Ella estaba empapada ...
Beth se puso en seguida de rodillas y llevó sus labios a mi coño que ya estaba empapado a causa de sus besos y comenzó por dar leves y deliciosas lamidas. Poco a poco fue subiendo de intensidad y yo abriendo más mis piernas para dejarla comerme toda