RUBIA HERMOSA

Contaba yo con 18 años y estaba recién llegado de la ciudad de Oaxaca, buscando un ingreso que me ayudara a continuar con mis estudios, solicite trabajo en la cabecera municipal, que me dieron empleo como notificador del departamento de reglamentos y control, por cierto ya desaparecido.

Entregaba citatorios, requerimientos, notificaciones de pago, a las personas y negocios que previamente habían sido multados. Cierta vez tuve que entregar una notificación a la ''casa de asignación'' [no sabia lo que significaba eso].
Llegue al domicilio indicado como a las 11 de la mañana, era un portón entre abierto donde metí mi bicicleta, di unos pasos al interior y pregunte en voz alta por alguien sin recibir respuesta, minutos después cuando me disponía a salir.

Se abrió la puerta de una habitación y para mi asombro y jamás olvidada impresión, apareció una preciosa muchacha como de 18 años rubia de pelo largo, que recién bañada se peinaba pacientemente, me quede paralizado, mudo de la sorpresa pues nunca antes de ninguna forma había visto algo semejante, la lozanía de su blanca piel, sus húmedos labios juveniles lucían frescos apetecibles e incitantes, sus cafés ojos me veían picarescos, noto pronto mi turbación y con leve sonrisa me pregunto:

- Que quieres?-

No pude contestar, se me seco la boca, se me ofusco la mente, sudaba de la frente, mi aceleración cardiaca se elevo haciendo jadeante mi aliento, dándome la impresión que me temblaban además de las rodillas, todo el cuerpo. En medio de mi torbellino pasional apenas note que mi pené estaba rígido como nunca hasta entonces.

- Que té pasa?- me dijo y para colmo me tomo de la mano y me guió al interior del cuarto, sentándome al borde de la cama ella junto a mí, sentí un mareo incontrolable, mi pinga comenzó a chorrear, ella que bien notaba mi torpeza, cerro la puerta regreso junto a mí y tenerla tan cerca acabo de trastornarme.

Sus blancos senos llenos de juventud, sus rozados pezones tentadores, se posaron en mi pecho, suavemente me abrazo, con igual ternura me beso en la boca y poco a poco me fue acostando sobre mi espalda mientras unas de sus manos descubría mi pecho, quitaba mi pantalón y ropa interior, yo temblaba no atinaba a creer lo que sucedía, lo que menos se me ocurrió fue tocarla, acariciarla o besarla, ella lo hacia todo.

A mí me fascino ver su hermoso rostro sintiendo la caricia viajera de su pelo por todo lugar que recorría de mi cuerpo, sus suaves brazos me rodeaban, causándome al contacto un erizamiento frenético indescifrable:

- Es tu primera vez?- pregunto, moví la cabeza afirmativamente ella entonces separo sus sedosas piernas y condujo mi babeante y duro miembro a su vulva, para introducirlo lentamente, cada milímetro de mí pené me transportaba al máximo placer con el contacto de sus músculos vaginales vibrantemente cálidos, con los que me cubrió totalmente.

Mis testículos también fueron cubiertos amorosamente hasta donde alcanzaron sus inolvidables labios sexuales, así en prolongado abrazo, sin separarnos genitalmente, sin prisas ni locuras, sin medida del tiempo, ni desesperación permanecimos, ella me hablaba al oído, su aliento cálido mas embriagaba mis sentidos -no hay prisa, gózame como yo a ti, así quietecito, te sacare la leche mordiéndote con la suavidad de mi vagina.

Apenas notaba su movimiento pero gradualmente mi placer y el suyo aumentaban, lo indicaban sus suspiros agitados, sus enrojecidas mejillas y fulgurantes ojos, en un involuntario movimiento mi pené se derramo y ella me apretó mas, mordiéndomela igual que mis labios al tiempo que clavaba en mi espalda sus uñas, y empujaba su pelvis hacia mi, fundiéndonos totalmente.

NO tardo su entrepierna en escurrir nuestros líquidos mezclados, pero ella me abrazo con las piernas para no permitirme salir; así permanecimos hasta que me repuse, me pidió ella que la limpiara un poco y lo hice, besando su sexo cuanto pude para volver a penetrarlo y disfrutar nuevamente el hermoso orgasmo femenino, ella me manejaba a su antojo me aprisiono en sus entrañas todo el tiempo que decidió, después de sacarme otro chorro de leche, me invito a regresar cada jueves, día que tenia libre, me enseño todo cuanto sabia de sexo, a la vez que grabo en mi esta verdad:

ESTO SOMO TODAS LAS MUJERES,

NUNCA, NINGUNA TÉ DARA OTRA COSA,

NI MÁS QUE ESTO, BUSCA AMOR,

ESTO SOLO ES PLACER...