Me levanté muy temprano y apenas hice ruido, lo que menos quería era cruzarme con mi madre o mi abuela, no tenia ninguna explicación pata mi actitud y no quería problemas, pensaba que de maltratador me iban a acusar de acosador o a saber

Llegue a la consulta y espere ansioso a que me recibiera, nada mas entrar fui directo al diván y le conté todo lo ocurrido, quería respuestas y no paraba de hablar.

Ella solo anotaba en una libreta y me sonreía cortésmente

Cuando terminé alterado e inquieto ella me habló

-          Jano ¿y cual es el problema? La convivencia es mejor en casa ahora, no crees?

-          Mejor? Oiga que me he desnudado y masturbado delante de mi madre y abuela!

-          Bueno antes no te importaba pasearte en ropa interior y todo resultaba violento, ahora es digamos más agradable, ya no estás siendo violento, al contrario eres más íntimo con tus seres queridos

Y me iba hablando mientras yo escuchaba sin entender a ratos lo que me decía, la cuestión es que ella acercó su silla y sin darme cuenta ya me estaba tomando la pastilla que tanto me relajaba.

La sesión pasó y fui despertando poco a poco, tomé un poco de agua y la Dra. Me dio la primera evaluación, la que mandaría a la jueza y según ella todo un éxito, mi odio a las mujeres iba desapareciendo y muy al contrario iba aceptando que la realidad era bien distinta y que debía respeto y sumisión a ellas, en especial a mi madre y familia

Yo no entendía nada, pero por alguna razón ni me alteré ni estaba nervioso solo escuchaba, ella me entrego las redacciones que yo había hecho en la consulta, las cuales repasé y me dejó boquiaberto y muy sonrojado

Ella muy animada, me decía que era uno de sus mejores casos, y que pronto aprendería a ser muy feliz y sentirme cómodo con mi vida, etc…

Resulta que no eran tales redacciones sino test donde yo debido a las pastillas y desinhibido,  iba asimilando y reafirmando mi nueva actitud, habían preguntas y afirmaciones tipo

-          Tu madre es lo mejor que te ha pasado

-          A tu madre debes lo que eres pero puedes mejorarlo observando sus enseñanzas

-          Es importante obedecerla

-          Una mujer sabe cuidar y mandar

-          Eres hijo y te debes a tu progenitora

-          Es importante portarse bien

-          Todo es mejor en casa

-          Mama sabe mejor, que la calle

-          Mama sabe mejor

Luego había redacciones donde yo incluía esas frases, y según me explicaba esto iba modelando mi forma de ser y abriendo y cultivando mi nuevo yo.

No pude leer mas, pero serenamente le devolví los papeles y quede esperando, ¿esperando? Si esperando que la dra. Me dijera que hacer

-          Muy bien Jano, muy bien, pues hasta la siguiente sesión, ¿estás contento?

Fue decir eso y me excité rápidamente, me levante del diván y le intenté dar la espalda no quería que se notara, mi cara caliente y mi pantalón, pero ella me tomo del brazo y me hizo mirarla. Otra vez a los ojos me dijo

-          ¿Estás contento?

-          Muy contento, me gusta que usted sea mi doctora (y la bese en la mejilla)

-          Jajajaj, que paciente mas aplicado, hasta la próxima

Salí a toda prisa, convencido que no me había contado, todo, ya de camino de vuelta no paraba de pensar en esos test, que no recordaba haber realizado, y en que ciertamente desde hacia tiempo no había ningún problema viviendo con mi madre, al contrario me encontraba muy a gusto, y que mi madre no se merecía esa vida tan triste y monótona, tenía que hacer algo, que menos que agradecer que ella me recogiera

Llegue al pequeño piso y otra vez me di cuenta que llevaba la compra que puse en la cocina y la vuelta de la misma. Mi Yaya entró y me preguntó que si me iba a bañar que parecía muy acalorado.

-          Por supuesto Yaya ahora mismo (lo hice de inmediato sin pensarlo)

Fui directo a bañarme, esta vez, me corte el pelo yo mismo, quitándome la coleta que de siempre llevaba, me afeité y salí en pijama. Al llegar al salón mi abuela no se lo creía y solo hizo un par de halagos, que qué nieto tan guapo, y eso. Yo agradecí el gesto y me senté a su lado a ver lo que fuera en la tele

Estábamos sin hablar y al rato, ella puso su mano en mi muslo y se puso a hablarme de que me había echado mucho de menos, que sentía mucho lo de mi matrimonio. Yo a los pocos minutos oía pero no escuchaba, solo sentía que me encontraba muy feliz siendo acariciado por mi abuela y eso me producía satisfacción y otra vez excitación

Ella acariciaba y me hablaba, pero yo iba perdiendo mi raciocinio, solo tenía en mente agradecer lo que ella decía y portarme bien con mi Yaya,…y portarme bien con mi Yaya,…y…porque yo soy su nieto…su nieto lindo…y….y ella tiene derecho a ver a su nieto lindo y….

Yo abrí mis piernas y deje que brotara por debajo del pantalón mi gran erección, mi abuela se dio cuenta pero en lugar de decir nada siguió acariciándome ahora hasta un poco mas cerca de mi ingle

No recordaba que mi abuela fuera asi pero en cierta forma no me extraña quizás mi carácter autoritario y violento fuera herencia de ella, la cuestión es que yo solo podía pensar en agradarla y portarme bien con mi abuela y asociaba a dejarme hacer, quizás por el tratamiento, quizás mi yo interior desconocido para mi

Así que me notaba cada vez mas caliente y yo fui tirando poco a poco mi pantalón hacia abajo, dejando ver cada vez mas mi entre pierna, hasta que ya asomaba parte de mi polla

Mi abuela, calló lo que estaba diciendo y dijo bien alto, ¡que buen nieto, que contenta estoy!. Eso fue todo, yo de inmediato termine de bajarme los pantalones  y me puse de pie delante de ella, otra vez sumiso y queriendo mucho a mi abuela, decía cosas desconocidas para mi

Como un autentico niño pequeño, le decía cosas como “siii, Yaya yo soy tu nieto lindo, ¿me quieres?. Yo quiero mucho a mi Yaya, mucho mucho”

De mi pene hasta brotó varias gotas, era increíble lo excitadísimo que estaba. Yo sentía la necesidad de desnudarme ante las mujeres, al menos las de mi familia, sentías que así era transparente y buen hombre para ellas, yo…

En eso ella, se acariciaba las medias de descanso, y dijo que le dolían, no hizo falta nada mas, asi lo entendí yo. En un momento regrese con una crema tópica y me senté en el suelo ante ella, con mis piernas cruzadas. La descalcé de sus  zapatos y fui bajando sus medias poco a poco, para ello subí mis manos por su falda y tomándolas desde arriba las fui deslizando, mientras le decía todo lo que la quería y que me perdonase. (En esa situación siempre les pedía perdón)

Yo creo que ella estaba un poco cortada y asombrada pero no dijo nada, simplemente vió como desnudé sus piernas, ahora puse su pierna derecha en mis piernas cruzadas y comencé a masajearlo, notaba como ella lo agradecía. Tomé crema y la unte por sus dedos, que esitraba suavemente y entre de ellos, luego su empeine, talón, ella decía que notaba como se refrescaban.

Unte un poco mas y me puse a acariciar su pantorilla y rodilla, mientras me centraba en mi tarea, ella apoyó su pie en mi entrepierna, yo no dije nada pèro estaba justo encima de mi polla empalmadas la cual quedó bajo su pie.

Yo seguía acariciándola y mi abuela totalmente confiada y que se yo en que estaría pensando, se puso a mover su pie en pequeños círculos, yo lo notaba y me daba cosquilleos en mi cuerpo, pero no podía ni me atrevía a decir que no. Era una mujer y una mujer puede hacer lo que quiera, asi me venia a mi mente.

Asi continuó por unos minutos hasta que con sus dedo, atrapó por así decirlo mi capullo, el cual se humedeció de excitación. Yo de reojo la miré y ella me estaba mirando seria sin decir nada, pero la notaba atrevida, estaba jugando conmigo, en ese instante se quito la dentadura y me la dio, yo no sabia que hacer con ella y me fui a levantar.

En ese instante, ella apretó mas con su pie y volvió a jugar enredando sus dedos en mi capullo y empezó a bajarlo y subirlo, bajarlo y subirlo, ¡me estaba masturbando!

-          Yaya, yo…por favor

-          (Ella muy seria como siempre) ¿por favor que?, ¿no dices que me pieds perdón?, pues pórtate bien

Fue oir esa frase de pórtate bien, y sentir como de mi ingle, llegaba un torrente que no podía parar, ella seguía jugando con mi polla, ahora acerco el otro pie, con el que me apretaba los testículos, ella se divertía

-          Yaya yo…..perdona pero es que me co…..

-          ¿Te corres? Que nieto tan lindo

Y brotaron varios chorros de esperma que cayeron en sus piernas y alguna mancha en su dentadura que yo sostenía con mi mano.

Mi respiración estaba agitada, me repuse enseguida y muy avergonzado miraba abajo, notaba mi cara sonrojada, muerto de vergüenza, no solo estaba desnudo delante de mi abuela, es que me había corrido y sujetaba su dentadura.

Sali directo al baño y me lavé, luego regrese con una toalla a tomar mi ropa, justo cuando mi madre entró en la casa y me vio

-          ¿estas bien Jano, que haces así?

No sabia que contestar, me quede quieto, la verdad es que no me podías controlar cuando oía o hacia ciertas cosas. No discutí ni hable, era mi madre, una mujer, y mi madre y yo no quería que se enfadara

-          Jano, será mejor que te vistas

-          Si mama, disculpa

Regrese a mi habitación y me quede dentro pensando en lo que había pasado. Las oía hablas en el salón, me pareció escuchar hasta alguna sonrisa pero dudaba

-          Esto va muy bien madre, estoy muy contenta con Jano, va mas rápido de lo que esperaba

-          Ya lo creo, hija ya lo creo, lo único que te puedo decir es que estoy muy descansada y feliz

-          Si, madre yo también

-          Ya hija, yo me entiendo

Y mi madre fue a preparar la cena, yo salí del cuarto cuando me llamaron. Sentando en la mesa era incapaz de mirar para la Yaya. Ellas me preguntaban por mis progresos y yo le contestaba con monólogos y poco mas.

Al terminare fui yo de inmediato el que recogí todo, y lave y coloque los platos, ellas se limitaron a decir ¡perfecto! Y se fueron a ver la tele

Cuando hube terminado, mi madre me llamó, me pidió que se sentase y se puso a hablar conmigo de tonterías, ella estaba en bata como siempre después de su ducha y mi Yaya a su lado apenas prestando atención.

En un momento dado, mi madre se acarició las piernas y dijo que las notaba cansada del día. Yo trague saliva y miré para el suelo, de reojo estoy seguro vi a la Yaya mirarme y sonreir.

 Yo estaba cada vez mas nervioso, no quería, no, no…mi madre me dijo que si le traía la crema del baño que se iba a poner un poco.

(No por favor pensé yo). Regrese del baño y me incline para dársela, pero se le cayó de las manos, justo a las lado de sus pies

-          ¿Me la alcanzas cariño?

-          Claro

Me agache y vi el bote y las piernas de mi madre descalzadas, enseguida me noté nervioso, veía esas piernas femeninas tan bonitas y además eran las piernas de mi madre a la que tanto quería, si y que quiero y…

-          ¿Te pasa algo Jano?.,  ¿me la das o no me la das?

Yo seguía encorvado viendo sus piernas y con el bote en la mano, sus piernas, las piernas de mami, las piernas de esa mujer que …miraba sus caderas, caderas anchas donde estar y cobijarme donde… ¡Jano!

-          Dame la crema ¿o es que acaso me la vas a poner tu?

Fue ori eso y no hizo falta nada mas, me arrodille y abri un poco la bata, dos bonitas piernas ante mi, que unte de crema y sin hablar solo mirando, acariciaba y acariciaba. Perfecto escuche decir a mi Yaya

Yo no pensaba solo me centraba en las piernas de mi madre.

-          Oh Jano, que buen hijo eres, que contesta estoy

Oh no, oh no,….oh..mmmm…si…si…Me levante y sin hablar delante de las dos, me desnudé

-          Si mama, soy tu hijo bueno, gracias yo….te quiero mucho

Y volví a bajar y seguí con mi masaje, mi madre no decía absolutamente nada, estaba absorta, pero…le gustó se dejo caer en el sillón y recibir el masaje. Por fortuna ella no movió los pies simplemente se dejó hacer.

Yo termine mi trabajo totalmente empalmado y me levante para irme y dejar la crema en el baño, pero mi madre me tomó la mano y me tiro un poco hacia ella que recostada en el sillón me hablo bajito, yo tuve que acercarme mas

-          Jano, me ha encantado, estoy muy orgullosa de ti, como has cambiado y te quiero mucho

-          Gracias…mama…mmmfff (yo me excitaba al oír eso y mi polla se estiró hacia ella)

Mi madre se dio cuenta y sonrió, tiro un poco mas de mi mano hacia ella y volvió a hablarme, quería ver hasta donde podía llegar no había duda

-          Jano, ¿te he dicho que te quiero mucho? Y las dos estamos muy orgullosas de cómo has mejorado. ¿Estas contento de estar con nosotras?

-          Si….mmmfff…..si mama, por favor…. Voy a ….voy a….

-          ¿A dónde vas? Y abrió sus piernas un poco

-          Voy a….voy…mama….si..voy a comerte…el coño..mami

-          ¡Jano! Como te atreves

Ella se hizo la sorprendida pero no soltaba mi mano, dudó unos segundos, pero luego totalmente atrevida y seguro que envalentonada por mi abuela o la doctora, volvió a hablarme

-          Jano, ¿estas contento? Pues demuéstralo cariño

Me tire a sus entrepierna sin dudar, chupe y chupe como un caramelo, mientras ella acariciaba mi cabeza, yo acariciaba y abrazaba su ancha cadera y buscaba meter mi mano por su culo.

-          Asi, cariño, sigue asi, eso me hace mas poderosa

-          Siii….mmmm…..mama….yo…..quiero

Perdí la noción del tiempo, solo recuerdo estar en mi cama, con un regusto extraño en mi boca...