El anterior relato acabó así…

─MMM…AYYY…ME COGES SABROSO LA PANOCHA...SÍ TU VERGA ES MEJOR QUE LA DE TU PAPÁ…COGETE A LA CHINGADA DE TU MADRE…¡¡ME CORROOO...!!

Al oír a la madre tan excitada y cachonda, se le dispara la excitación.

La enviste como un animal, con un mete saca diabólico. A cada envite, le mete toda la polla, soltándola un hirviente chorretón de leche…como si la verga fuera un pistón mecánico…

─UUUFFF…¡¡REPUTA…!! COMO MUEVES LA PANOCHA PARA QUE TE LA COJA MÁS…TOMA POLLA, ME CORROOO…¡¡MAMÁ!!

─SPLURTTT…AH TU LECHE…SPLURTTT…ME LA CLAVAS TODAAA…SPLURTTT…AYYY…TU CIPOTE…ME LLENAS TODAAA…SPLURTTT…ME LLENAS DE VERGA Y LECHE…

El mimado hijo, al sentir como se está corriendo su cachonda mamá, se echa en la espalda, ocultando la cara, en la negra melena, inhalando el olor de la madre.

La agarra de las tetas, la culea como un perro, sin sacársela.

Siente como el coño le ordeña, atenazándole la gruesa y dura polla con las jugosas y calientes paredes.

A cada «apretón» de la caliente panocha, el hijo responde con una profunda envestida, y un potente chorretón de leche, enculando a su madre profundamente…

─SPLURTTT…AH…CUANTA LECHE TIENES…¡¡MIJO…!!

─SPLURTTT…OOOHHH MAMÁ…TU PANOCHA SE TRAGA MI POLLA…

─AYYY…ME CLAVAS EL CIPOTE…EN EL FONDO DE LA PANOCHA…

 Madre e hijo quedan enganchados como dos perros. María siente la polla del hijo, igual de dura que antes de correrse.

Jhony besa el cuello de su madre. La tironea del pelo, haciendo que, la madre le gire la cara. La besa en los labios, mientras observa, las duras facciones de su mamá.

No es guapa, pero es atractiva. Con esos pómulos perfilados. Y los labios carnosos, hechos para ser besados.

─MMMPPP…mamá eres tan guapa y caliente…

─MMMPPP…mijo me vas a hacer ruborizarme…no seas chiqueado─. Jhony mete la lengua dentro de la boca de la madre. Ella entre abre los labios con timidez. Él aún tiene la polla como una piedra.

Siente como la caliente y carnosa panocha, le oprime la polla, con excitantes y calientes apretones.

Las lenguas se acarician fuera de las bocas. Se intercambian saliva la una a la otra. El rebelde hijo, le susurra a su caliente madre ─Te voy a volver a violar…¡¡chingada…!!

Tu ardiente panocha necesita mucha polla…─.

Diciéndola esto, la tironea fuerte del pelo. Hace que la madre empuje las nalgas, como una perra caliente.

La enviste con fuerza, haciendo que su vientre choque, con las duras nalgas a cada mete saca.

María, desatendida por su esposo, siente como la polla del hijo, la vuelve a violar. La sigue teniendo atada, con ambas manos a la espalda.

─UUUFFF…¡¡MAMÁ…!! TU PANOCHA ESTÁ…JUGOSA Y MUY CALIENTE…TOMA POLLAAAA…

─AYYY…TE EXCITA VIOLAR A TU MA…DRE CABRÓN… TU VERGA ME LLENA LA PANOCHA…¡¡COGEME MIJO…!!

Jhony, viendo como su caliente mamá empuja el culo para que la folle más, se vuelve más perverso. Golpea las rotundas nalgas, con fuerza, tironeándola fuerte de la negra melena. La insatisfecha y caliente madre, se excita a cada envestida del hijo. Siente como la gruesa verga, la roza todo el coño, como su esposo no se lo supo hacer jamás. Los azotes de su mimado mijo, la ponen más perra a cada golpe.

La susurra al oído…─mamá quiero cogerte duro, en tu recámara…─.─ me da vergüenza hijo…es la cama de matrimonio…MMM AYYY…ME LA METES MUCHOOO…─ protesta la excitada madre, sin ninguna convicción.

Sin sacarle la verga, Jhony se la lleva a la recámara del matrimonio, tironeándola del pelo, y nalgueándola, como si su madre fuera una yegua a la que está domando.

─UUUFFF…TIENES LA PANOCHA SIN COGER…COMO ME ATENAZA LA POLLA…QUÉ SABROSO TE LA METO TODAAA…¡¡MAMÁ REPUTA!!

─AYYY TE LO IMAGINAS TÚ, AAAHHH…NO LA METAS TANTO…¡¡CHINGÓN…!!

Al llegar a la cama matrimonial, María se deja caer de bruces. Queda espatarrada, con las nalgas expuestas. Al verla sumisa, en esa lujuriosa postura, el adolescente no pierde la ocasión. Sin sacar la polla a la madre, la levanta uno de los rotundos muslos, apoyando él, uno de los pies en el colchón.

En esa postura, la folla con envestidas profundas, toda espatarrada como una puta. Los peludos huevos del hijo, golpean con fuerza el peludo coño de la madre a cada mete saca.

─SPLAFSSS…SPLAFSSS…SPLAFSSS…SPLAFSSS…SPLAFSSS… 

María grita como si el hijo la matara. Pega la cara al colchón para que, su comadre Marta no la oiga gritar.

─¡¡¡AAAHHH!!!…MMM ASÍ ME VIOLAS MÁS DURO…LA METES MUY PROFUNDO…

─OOOHHH…QUÉ PANOCHA TAN CHINGONA…TIENES MADRE…UUUFFF…TOMA VERGAAA…¡¡REPUTAAA…!!

─SPLAFSSS…SPLAFSSS…SPLAFSSS…SPLAFSSS…SPLAFSSS… 

─¡¡¡AYYY…!!! ME ROMPES LA PANOCHA…MMM NO PARO DE CORRERME CON LA VERGA DE MI HIJO…

─SPLAFSSS…SPLAFSSS…SPLAFSSS…SPLAFSSS…

─OOOHHH…¡¡¡QUÉ PANOCHA!!! SABROSA…NO ME CANSO DE VIOLARTE…TOMA CIPOTE HASTA EL FONDO…

─¡¡¡AAAHHH!!! NO PARAS DE VIOLARME…AYYY…COJES MEJOR QUE TU PADRE…ME CORROOO ¡¡HIJO…!!

─SPLAFSSS…SPLAFSSS…SPLAFSSS…SPLAFSSS…

Jhony, sin sacarla la polla, pone a su madre a cuatro patas, en el centro de la cama matrimonial. La suelta las ligaduras, las muñecas están algo amoratadas.

Jhony se coloca delante de su amada madre. La coge con firmeza del pelo. La mete la polla hasta la garganta.

─Comeme la verga…pónmela dura mamita ─se reclina sobre ella susurrándola ─te voy a coger rico el orto…¡¡mamá chingona!!

María intenta sacarse la gruesa polla del hijo, que apenas puede tragar, por el grosor que tiene. El chico se lo impide. Sujetándola fuerte de la leonina melena. Folla la boca a la madre, como si fuera un coño.

─UUUFFF…NO TE LA SAQUES…TRAGALA ASÍ…DALE AL CIPOTE PARA QUE TE ENTRE RICO…EN TU RICO ORTO.

La madre, sumisa, traga toda la verga, moviendo la cabeza adelante atrás, con la boca toda abierta. Excitada, aprieta los labios por la venosa verga, para sentirla latir, y sentir su grosor.

─MMMPPP…MMMPPP…MMMPPP…MMMPPP…SLURPPP…MMM

─UUUFFF…MAMÁ, CÓMO ME LA COMES ¡¡OOOHHH…!!

─MMMPPP…ME AHOGAS…COF…COF…MMMPPP…MMMPPP…

Sin hacerla caso, Jhony hace que la madre le de lengüetazos en la gruesa y morada cabeza de la polla.

─OOOHHH…COMETE EL CIPOTE…MAMÁ QUE TE ENTRE BIEN EN TU RICO CULO…OH SÍ…MMM

La madre sin hacerse repetir, atrapa el grueso cipote entre los carnosos labios y el paladar.

─SLURPPP…SLURPPP…SLURPPP…SLURPPP…¡¡QUÉ CIPOTE!!

─UUUFFF…¡¡REPUTA!! COMO ME LO COMES…PARA O ME CORRERE…OOOHHH…

Tras unos instantes, la amorosa madre levanta el culo en alto, como haría una Kajira. Con el rubor hasta las orejas por el incesto, por un lado, y la vergüenza y el morbo, de ofrecerse así a su chiqueado mijo, por el otro.

Se abre ambas nalgas con las manos. Tiene el coño chorreando jugos, boqueando como un pez. El adolescente, escupe en el oscuro ano materno. Pasa la lengua sin prisa alguna. Con dos dedos, hurga el coño. Las paredes de la caliente vulva, le aprietan los dedos. Le excita descubrir lo caliente que está el coño.

A los pocos segundos, la lengua penetra el esfínter.

─SLURPPP SLURPPP SLURPPP…MMM ¡¡QUÉ CULO!!

La madre, no puede evitar sollozar y gemir, al sentir la pervertida caricia ─MMM OH…eres un pervertido…OH.

El chico, mucho más hábil de lo que cree la madre, lame todo el esfínter. Siente como el ano le aprieta la lengua. Con el grueso pulgar

Saca los lubricados dedos del coño, metiéndolos en el recto. Hace con el dedo pulgar una «perversa pinza».

Mientras hace rotar los dedos, abriéndole a su madre el culo, con el pulgar titila el clítoris. María no esperaba esta «triple caricia» ─OOOGGG…¡¡MÍJO!!…MMM.

Jhony mete los dedos más a cada instante. El esfínter se cierra, atenazando los dedos. El rebelde adolescente, hurga el recto de la madre, sin prisa alguna. Siente como el culo, le aprieta duro los dedos. Acaricia el excitado clítoris, a la vez que mete el pulgar hasta el fondo.

La excitada madre, siente como el hijo la folla el coño, con el grueso pulgar, haciéndola empujar las caderas, para sentir más las caricias.

—AYYY…ME FROTAS TODA LA PANOCHAAA…TOCA MI PIPA, ME CORROOO HIJO…

Jhony vuelve a acariciar el clítoris de su madre.

María se corre al sentir como su hijo la acaricia el carnoso clítoris.

—AYYY…TOCA ASÍ MI PIPA…MMM ME MATAS DE PLACERRR…¡¡ NENE…!!

En el momento que la madre mueve más las caderas, Jhony saca los dedos, enfilando el grueso cipote en el ano.

Tras unos instantes de presionar la amoratada cabeza, consigue meter el cipote. María, tensa los macizos muslos al sentir el grosor de la polla de su pequeño. El chico, al sentir como el culo de su madre, le aprieta duro la polla, grita como un animal.

La madre, con los ojos en blanco, aprieta los labios, aullando a la vez que el hijo.

—JODER…¡¡¡QUÉ ORTOOO…!!

—AAAYYY…NO CABE…¡¡¡QUÉ POLLAAA…!!!

Tras unos instantes, azota las duras nalgas de la madre.

—PLAFFF…PLAFFF…PLAFFF…RELAJA EL CULO MADRE…UUUFFF…PLAFFF…PLAFFF…PLAFFF…PLAFFF…

A cada nalgada, la insatisfecha esposa relaja el esfínter. Sin que su hijo se lo diga, empuja las nalgas poco a poco.

El chiqueado hijo, tironea a la madre del pelo.

—MMM…AAAHHH ES DEMASIADO GRUESA…ME ABRES MUCHO EL CULO…ESTÁ MUY DURA…CARIÑO…

A pesar de las protestas sin convicción, la madre empuja sin parar el culo.

Jhony, la enviste hasta meterla toda la polla. Los peludos huevos chocan con las rotundas nalgas.

—SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…

—OOOHHH…TU CULO ES MUY CALIENTE Y ESTRECHO…NO PARAS DE EMPUJAR LA COLA…¡¡REPUTA…!!

—AYYY…NO LA METAS TAN DURO…MMM LA SIENTO EN EL ESTOMAGO…TE COJES POR EL CULO A TU MADRE…¡¡ CHINGADOOO…!!

Excitado de ver a su madre tan perra y excitada. La tironea más fuerte del pelo, hablándola como a su puta.

— SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…

—¡¡OOOHHH MAMÁ…!! TOMA LA POLLA DE TU MIJO…QUE RICO MUEVES LA COLA…¡¡COJE PUTAAA…!!

La madre al oírlo, se siente avergonzada. A la vez se pone cachonda pérdida, loca de excitación, de ver como la viola su hijo…

—AYYY…ME VIOLAS SIN PARAR…TU PADRE NUNCA ME COGIO LA COLA…ME COJES RICO…¡¡CHINGÓNNN…!!

Espoleado por la voz materna, Jhony se sube a la grupa de la madre. Sin dejar de tironearla de la negra melena, la coge de uno de los brazos, retorciéndoselo en la espalda.

En esa postura, la penetra analmente de arriba abajo, como si fueran dos perros follando en la calle. Las peludas pelotas del hijo, chocan con violencia a cada mete saca, contra las macizas nalgas…

— SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…

—UUUFFF…COMO MUEVES LA COLA…¡¡REPUTA!! TOMA POLLAAA…HASTA LOS HUEVOS…QUÉ RICO COJES…¡¡MAMÁ CACHONDA!!

—AYYY…ME ROMPES EL ORTO…ME CORROOO…LLENAME DE TU LECHE MIJO…DAMELA…ME CORROOO…

—OOOHHH…ME CORRO CONTIGO PUTAAAA…TOMA LA LECHE…UUUFFF…

Al llegarles a la vez el orgasmo, se corren de forma sincronizada. A cada chorretón de leche, le clava a la madre el cipote en el útero…

Se corren gritando cómo dos bestias salvajes...   

— ¡¡¡ME CORROOO HIJO…!!! —¡¡¡ME CORROOO MADRE…!!!

— SPLURTTT…TOMA LECHEEE —AAAHHH…NENE…

— SPLURTTT…UUUFFF…ASÍ TODA LA POLLAAA… —AYYY…LA CLAVAS TODAAA…

— SPLURTTT…QUÉ COLA TRAGONAAA…TOMA VERGA… —MMM…AYYY…ME LLENAS DE LECHE…¡¡CABRÓN…!!

—Con los últimos chorretones de leche, Jhony la agarra de las tetas.

Sin sacársela, la culea de forma convulsiva.

—OOOHHH…QUÉ BUENA ESTÁS…TOMA POLLAAA…

La excitada madre, mueve el culo de forma obscena, a cada envestida de su hijo —AYYY…NO LA METAS TANTO…AAAHHH…QUÉ POLLA TIENES…¡¡CHINGÓN!!

Madre e hijo quedan así, hasta que se «desenganchan» cómo dos canes.

Los siguientes días, María no puede evitar sentirse culpable. Su comadre Marta, la nota algo contrariada, al hablar con ella, mientras toman café, ya sea en casa de una o de la otra.

Peró por no ser indiscreta, prefiere no decirla nada a la amiga.

De forma reiterada, su esposo Pancho se ve «obligado» a tener que pasar varios fines de semana fuera de casa. El motivo es una huelga del transporte. Para evitar ser despedido, siendo ya un hombre maduro, debe trabajar varios Sábados de forma continuada.

Esta situación provoca que María se sienta cada vez más desatendida por él. Ella jamás ha disfrutado tanto del sexo, como lo ha hecho con su «chiqueado mijo», como llama Pancho, a veces, al hijo de ambos.

Ella sabe que esto es incesto, y siente un rechazo anti natura por esta relación. Peró también es cierto que, al verse inmovilizada como la ató Jhony, la puso muy caliente y excitada.

Además está el sexo anal. Su hijo la ha violado por el coño y el culo. Se le hace difícil, explicarse ella misma cómo es posible que, su mimado hijo, haya sabido darla ese placer.

El Sábado al medio día, llega Jhony con unas molestias en los aductores, al recibir una fuerte entrada en el partido de futbol americano.

—Mamá después de comer ¿te importara darme un masaje, por favor? Tus manos son únicas… —al decirla esto, la abraza desde atrás, rodeándola por la cintura, con sus fibrosos brazos, mientras la madre está cocinando.

—no necesitas hacerme la pelota…te tengo demasiado chiqueado y consentido…Jhony… —le espeta la amorosa madre.

El adolescente, se atreve a subir ambas manos, cogiendo los menudos pechitos de la madre que, se marcan desnudos, bajo la vaporosa tela.

María, siente como su hijo, la acaricia hábilmente los pezones, haciendo se le pongan tiesos y duros rápidamente.

La besa zalamero, en el cuello, con rápidos besitos por las mejillas, hasta besarla en los labios con pequeños piquitos.

—Mmm…mijo no seas chicado…las madres y los hijos no se dan besos así…

Sin escucharla, Jhony la hace voltearse hacia él. La sigue besando por el cuello, chupándola la oreja. Baja las manos por la cintura, hasta coger las respingonas nalgas. Los brazos de María, rodean al hijo por la cintura.

Su mente la dice que, no debe dejarlo seguir. Pero su cuerpo siente que, necesita ser acariciado, como la acaricia su mimoso hijo.

Una de las manos del adolescente, se mete bajo el corto vestido, entre los gruesos muslos de la madre. Pasa los dedos adelante y atrás, acariciando toda la canaleta, desde el coño al culo. Nota húmeda la fina blonda de la tanga.

Sin que las manos la obedezcan, una de las manos coge el grueso paquete que se marca en el pantalón de deporte. Los dedos del hijo se meten dentro de la tanga. Cogen el carnoso y peludo coño con toda la mano. María al sentir como la coge el coño, solloza de placer.

A la vez, la mano se le cierra con fuerza alrededor de la verga del chico.

—MMM ¡¡AH NENE…!! PARA POR FAVOR…NO PODEMOS…

—UUUFFF MAMÁ QUÉ BUENA ESTÁS…TU PANOCHA…

María consigue dominarse, haciendo que se vaya a la ducha, antes de sentarse a comer.

Después de comer, María le dice al adolescente.

—Dame unos minutos y te daré el masaje que me has pedido, antes de echarme una siesta un rato, ¿Ok cariño…? —E-eh…sí c-claro mamá…seguro— la responde nervioso y excitado el hijo, incrédulo a las palabras de su sensual madre.

María baja la persiana discretamente. Entra un cálido sol por la parte baja de la persiana, creando un sensual claro oscuro. La suave penumbra, ilumina la alcoba de forma exótica. El ventilador, encima de la cama de matrimonio, rota silencioso, creando una relajante corriente de aire.

María está sentada en la cama. Lleva una tanga brasileña, de blonda transparente, roja. Es no mayor que un paquete de tabaco. El carnoso coño, se muestra claramente a través de la fina blonda. Varios mechones de pelos negros, ensortijados, escapan por los lados.

Arriba lleva un pequeño top de algodón. Los gruesos y oscuros pezones, parecen querer romper la prenda, tiesos como pequeñas chinas de jardín.

Jhony entra sin llamar, excitado por la invitación de la madre. Sólo verla, siente que le duele la polla por lo excitante que le parece, así echada, medio sentada, esperándolo.

La madre, sólo verlo entrar, no puede evitar ver el enorme bulto del pequeño pantalón de deporte.

Nada más sentarse al lado de ella, María coge un frasco de aceite.

Hecha una buena cantidad sobre sus manos. Se pone de rodillas diciéndole al adolescente

—Echate cariño, no te preocupes que mamá te va ayudar, hijo.

María masajea el fuerte muslo con suaves y largas pasadas — ¿así va bien nene?— Pregunta la madre, acariciando el muslo de forma sensual, sin dejar de mirar, el escandaloso bulto del paquete, y mirando a los ojos del excitado hijo —MMM…sí mamá qué manos…¡¡sigue…así!!

Jhony, echado al lado de ella, acaricia suavemente el muslo de la madre, subiendo la mano hacia la tanga.

La penumbra los ilumina de forma apagada, velada, con caprichosos claro oscuros.

Las manos de la madre, se acercan cada vez más al enorme bulto. La habitación huele sensualmente, a coño caliente.

Los dedos de Jhony, tironean suavemente los pelos ensortijados del coño materno. La madre excitada, se queja de forma incitante —MMM…AH NENE…—.

Al oírla, mete los dedos entre la fina blonda. Descubre los carnosos labios, calientes y húmedos.

Los repasa arriba y abajo, mojándose los dedos de jugos. La madre gime quedamente —OH MMM…—.

Las manos de la madre, bajan el pantalón de deporte. La gruesa y dura verga, salta golpeando el vientre.

María se echa más aceite en las manos.

Masajea sin ningún pudor la polla del hijo, con ambas manos.

Coge la barra de carne y las gruesas pelotas. Los dedos del hijo, la hurgan con desparpajo el húmedo coño.

—MMM OH MADRE, NO PARES… —a la vez el hijo, abre con una mano los carnosos labios, metiendo hasta el fondo los dedos, produciendo un chapoteo acuoso que, les dispara la excitación a los dos —PLAFSSSS…PLAFSSS…PLAFSSS… —UUUFFF COMO TE CHAPOTEA LA PANOCHA…QUÉ RICO…PLAFSSS…PLAFSSS…—AAAHHH…JHONY METES MUCHO TUS DEDOS…MMM…

La excitada madre, se lanza por la verga, metiéndosela toda en la boca.

El hijo se mueve hasta acabar haciendo un sesenta y nueve con la madre.

Encaja la boca en el carnoso coño, metiendo toda la lengua, sacándola los jugos a lametazos, loco de excitación —SLURPPPP SLURPPP SLURP...MMM QUÉ PANOCHA TAN SABROSA…SLURPPP SLURPPP…

María, al sentir la lengua del mimoso hijo en el fondo del coño, se corre, llenándole la boca de jugos.

—AAAHHH… ¿QUÉ ME HACES…MMM EN LA PANOCHA…? MMM ME MATAS MIJO…AAAHHH…

Jhony al ver cómo su madre le frota el coño contra la boca, la atrapa el Carnoso clítoris, entre los labios, dándola chupete…como se dice en México…María le grita fuera de sí…

—UUUFFF QUÉ SABROSA PANOCHA MADRE…TU PIPA TAN CARNOSA…SLURPPP…SLURPPP…SLURPPP…

—¡¡¡ ME CORROOO…!!! TOMA MI PANOCHA…DAME CHUPETE EN LA PIPA…HIJO AAAHHH…

Sin poder resistir el placer, María deshace el sesenta y nueve. Salta sobre la gruesa verga del hijo, como si fuera una amazona. Los dos de cara al espejo de la cabecera, observan como la gruesa polla penetra la peluda panocha.

La madre se empala toda la polla. El hijo, la sujeta por las nalgas, haciendo que su madre mueva el lubricado coño como una puta…

—AAAHHH…COJETE LA PANOCHA DE TU MADRE...AAAYYY…¡¡COJEME CHINGÓN…!!

—OOOHHH MADRE QUÉ PANOCHA SABROSA…TOMA POLLA…¡¡REPUTAAA…!!

—AAAYYY…¡¡QUÉ POLLAAA!! ME LLENAS TODA LA PANOCHA…ME CORROOO DAME LA LECHITA…HIJO

—UUUFFF…QUE RICO MUEVES LA PANOCHA…ME CORRO CONTIGO MADRE….TOMA LECHEEE…

En el instante mismo de correrse, María se voltea. Madre e hijo quedan sentados, en el centro de la cama. Se abrazan por la cintura, como si les fuera la vida en ello.

La madre sentada encima de los muslos de su chiqueado hijo. Los dos moviendo violentamente las caderas.

—AAAYYY…¡¡COJEME LA PANOCHA!!  ME MATAS…DAMELA TODAAAA…¡¡COJEME MIJO…!!

—OOOHHH…TU PANOCHA SE TRAGA MI POLLA…TOMALA TODAAA…¡¡TE COJO SABROSOOO…!!

Ambos sienten un latigazo que les hace abrazarse aún con más fuerza, gritando el placer violentamente.

—SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…

—¡¡¡ME CORROOO HIJO…!!! —¡¡¡ME CORROOO MADRE…!!!

A cada chorretón de leche, en el coño de la madre, Jhony solloza, por la intensidad del placer.

—OOOHHH QUÉ PANOCHA…TOMA LECHE…SPLURTTT…—AAAHHH NENE…— TOMA POLLA…REPUTA…SPLURTTT…—AAAHHH ME LLENAS TODAAA…TU POLLA Y TU LECHE…—SPLURTTT…SPLURTTT…¡¡OH MAMÁ…!!— ¡¡AH JHONY…!!

María, para su sorpresa, siente la polla del hijo dura como una piedra, después de haberla llenado de leche.

Sin deshacer la postura, con desparpajo el rebelde adolescente hace que la madre se separe un poco de él.

Los dos echados hacia atrás, así ven como la gruesa polla, penetra el carnoso coño, brillante de jugos y leche. En esa postura, madre e hijo mueven las caderas locos de excitación. A cada mete saca, Jhony clava el cipote en el fondo del coño de su madre.

María nunca se ha sentido tan follada. Siente como la verga del hijo, gana grosor y dureza.

— SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…

—AAAHHH…MMM NUNCA HE COGIDO ASÍ…LA METES MUCHO…AAAYYY…¡¡CABRÓN…!!

—UUUFFF…TU PANOCHA TRAGA MI VERGA…NECESITA MUCHA POLLA…COMO COGES MADRE…

María se coge al cuello del adolescente, empujando así con más intensidad el coño contra la verga del hijo…

—AAAYYY…ME ROMPES LA PANOCHA…LA CLAVAS TODAAA…OOOGGG…¡¡ COGEME CHINGÓNNN…!!

Jhony viendo tan cachonda a la madre, la sujeta fuerte por las nalgas, dándola así un mete saca diabólico.

—OOOHHH TE VOY A MATAR A POLLAZOS…¡¡MAMÁ REPUTA…!! TOMA POLLAAA…

— SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…SPLAFFF…

—AAAHHH…ME LLENAS TODA LA PANOCHA...COGETE A LA CHINGADA DE TU MADRE…

La madre con los ojos en blanco, deja ir un alarido, como una bestia herida…

—¡¡¡AAAHHH MI PANOCHA…!!! ME LA COGES TODAAA…¡¡¡ME CORROOO…!!!

Los incestuosos amantes, se besan como animales, sellando los labios. María resopla en la boca de su hijo…

La es imposible silenciar el placer que su chiqueado mijo, la está dando, susurrándole al oído, caliente como una perra… —AAAYYY…ME…COGES…TODA…LA PANOCHA…MEJOR…QUE TU PAPÁ…ME MATAS…

¡¡¡COGEME MIJO…!!!

Las calientes y soeces palabras de la madre, detonan la resistencia del chico. Se corre violentamente, penetrándola como un demonio…

—UUUFFF…TU PANOCHA ME ORDEÑA LA VERGA…TOMA LECHE REPUTAAA…¡¡¡ME CORROOO EN TU PANOCHAAA…!!!

A cada chorretón de leche, la madre tiene un micro orgasmo, con cada envestida...

—SPLURTTT…AYYY, SPLURTTT…MMM, SPLURTTT…ME CORROOO, SPLURTTT…¡¡QUÉ POLLA…!!

Tras el intenso fin de semana, María parece haber «aceptado» que, el descubrir el sexo que a ella la satisface, con su hijo, no es distinto a cómo sería hacerlo con cualquier hombre.

Está cometiendo un incesto, lo sabe. Pero ella no ha ido buscando esa «relación singular» y amoral, así sin más.

La diferencia es que, no puede compartirlo con nadie, como si fuera un amante cualquiera. Quien la folla es su hijo, esa es la diferencia.

El lunes poco antes de comer, su comadre Marta, la vio de mejor humor que, unos días atrás.

—Hola mexicanita caliente, ¿está Pancho por aquí? Haces mucha mejor cara que unos días atrás. Vaya ojos negros tienes, parecen dos ascuas… —Jejeje qué cosas tienes Marta— la responde sonriente, la ahora satisfecha madre— sólo es que me encuentro bien, no más, no seas mal pensada ya— sí claro, y tu comadre se chupa el dedo— la responde sonriente la madura gallega— lo que sea, pero se te ve con ganas…— María se contagia por el comentario picante —Jejeje…bien, me alegro me veas así.

Al despedirse, Marta la dice —dejame a tu hijo un rato después de comer, si no está estudiando, necesito me eche una mano… ¿me lo enviaras…cariño?— Ok viudita gallega, pero no me lo perviertas— la dice con sorna, soltando una risotada— HAHAHA…

— a ti te voy a pervertir…casada mal cogida…como decís por acá…qué estás para darte chupete…tía buena…HAHAHA…

Al oírla, María se sonroja por el comentario soez y ordinario de su comadre —¡¡Marta…!! Estás loca…me voy.

                                                                                                                               FIN

                                                                                                                   Azalais copyright©2019

¿Continuara…?

Espero que, todos los que leéis mis relatos, perdáis sólo cinco minutos en puntuarlo. Y valorarlo, diciendo qué os ha parecido. Cualquier crítica constructiva es bien recibida. Esto me anima a escribir e inspirarme mejor.

Saludos desde BCN, Catalunya, España.