Dragon Sex Ball- Capitulo diez-

Luego del torneo de las Artes Marciales, Goku le pidió a Bulma el radar del dragón para buscar la esfera de 4 estrellas que su abuelo le había regalado.

En su camino, Goku tuvo que toparse con una extraña organización llamada Red Cock (Pene Rojo), que al parecer también estaba tras las esferas del dragón, para pedir su deseo de dominar el mundo, naturalmente. Goku ya había logrado encontrar la esfera de seis estrellas en una pradera donde este grupo la buscaba trabajosamente. Ellos también tenían un radar pero no era lo suficientemente específico como el de Goku para indicarles la ubicación exacta de la esfera. Cuando Goku la encontró, tuvo que enfrentarse contra toda la sarta de pajeros que eran los integrantes de esa organización, comandados por un general que llamaban Silver. El niño no tuvo problemas en reducirlos a todos con sus potentes golpes y huir en un pequeño jet de la banda que era monitoreado por un robot.

Yendo hacia la siguiente esfera, Goku se adentra en un territorio gélido y por la baja temperatura tanto el robot como el avión se congelan y el niño pierde el control de la nave. Se estrella un momento después en un llano nevado y el pequeño queda totalmente desvanecido con su corazón luchando contra la congelación.

Por suerte, una niña de no más de 10 años que vivía por los alrededores pasaba por ahí y vio al avión estrellarse. Cuando llegó al lugar reconoció que Goku se había desmayado y lo arrastró hasta su hogar para que entrara en calor…

Después de llegar a la casa de la niña y descongelarse un poco frente a la chimenea reaccionó.

-¿Dónde estoy?-preguntó somnoliento.

-¡Estas en la aldea Jingle!-contestó la niña que se encontraba a su lado-. Estabas tirado en la nieve, te traje aquí para que te calentaras.

-¿Ah sí?-se sorprendió el chico.

-Sí-afirmó la madre de la niña, una mujer cuarentona, de cara amable con un delantal, y pechos grandes-. Si no te hubiera encontrado mi hija estarías muerto a estas horas. Toma algo caliente.

-¿Qué hacías allí?-preguntó la niña sentándose en el suelo al lado de Goku que estaba sobre una silla.

-Buscaba una de las Esferas del Dragón.

-¡Las esferas del dragón! ¡Eres de la organización Pene Rojo!-gritaron asustadas la madre y la hija.

Goku se bajó los pantalones y observó su verga que había adquirido un tamaño considerable luego de la bebida caliente que le dio la mujer. Chocolate peruano con alto contenido de estimulantes afrodisíacos. Además, casualmente había comido maní con pachuli, provocándole un deseo carnal bastante inoportuno. Instintivamente su mente le indicó que necesitaba sentir olor a mujer, necesitaba chupar con gran esmero una concha.

-No se muy bien los colores, pero me arriesgaría a decir que es color pergamino o marroncito-les comentó sin dejar de mirar su verga que de a poco alzaba volumen.

-¿Qué es eso mamá?-preguntó la niña señalando la verga de Goku que se alzaba perezosamente.

La madre le cubrió los ojos a la niña. Ni su marido la tenía así de grande. De hecho hacía tiempo que su marido estaba obligado por la organización criminal a buscar una esfera del dragón que debía estar en esas tierras, tal vez había olvidado su tamaño. De repente se le vino la nostalgia, mezclada con los efectos de la inminente menopausia, y tuvo un vigoroso deseo de sentir placer. Pero era sólo un niño, no podría aprovecharse de él…

-Mmm… señora, ¿alguna de las dos tiene una concha? Tengo unas ganas impresionantes de chupar una…-Goku no tenía problema alguno de decir la verdad.

La mujer quedó desarmada. Si su cerebro tenía alguna intención de respetar a ese niño, se esfumó. Le destapó los ojos a la hija sin preocupación y se sacó rápidamente el delantal y el vestido.

-¡Sí! No hay ningún problema niño, si eso te hace sentir mejor, si eso te hace entrar en calor, voy a hacer un esfuerzo por complacerte-la mujer se puso en cuatro y se sacó la ropa interior para que Goku pudiera saciar su sed de fluidos.

Goku se acercó a olerla y fue un olor fuerte como una trompada. Echó la cara hacia atrás pero luego tomó valor para comenzar a lamerla. Esa mujer tenía un olor a mujer muy potente. Las papilas gustativas de Goku se contrajeron al probar los líquidos vaginales como si hubiera chupado un limón. El gusto era muy amargo, pero era muy suave, no como los labios vaginales de Bulma que eran ásperos y fibrosos. Goku podía chupar y estirar los labios vaginales de la mujer como si fuera chicle. La señora suspiraba con añoranza.

-Ma-mamá, ¿Qué haces?-preguntó la niña desubicada al ver que su madre se sacaba la ropa interior y le ofrecía el trasero al niño.

-Hija, no deas desatenta. Se hospitalaria con nuestro huésped y chúpasela-señaló la pija de Goku que al haber llegado al mejor momento, ya estaba desinflándose. La madre trataba a su hija como si fuera una bolsa de huesos, no le importaba, ese niño si que sabía chupar una concha.

A la pobre niñita no le quedó otra más que echarse al lado de Goku y tomar su miembro con las manos. Cerró los ojos con miedo y se la metió en la boca. Sin sentir nada raro la niña comenzó a chuparlo de muy groso modo, como si fuera un sorbete. El niño comenzó a tiritar de placer como si estuviera nuevamente enterrado en la nieve.

-¡Que bien chupas la concha niño! Déjalo hija-la mujer se recostó en el suelo y puso la cola en pompa lo más bajo que pudo para que Goku pudiera penetrarla-. Métela en el agujero que está en mi concha- Goku no era idiota en ese sentido, Roshi le había enseñado como se cogía, lo hacía casi siempre con Lunch, no era nada difícil. Goku nunca lo había hecho, eran muy escasos los momentos en que se le paraba. El niño se afirmó de las caderas de la mujer y apuntó su trozo al orificio. Cuando estaba por empezar la puerta se vino abajo y dos soldados de Pene Rojo (este juego de palabras es demasiado) entraron en la casa con armas.

-¡Mi marido!- se quejó la mujer sin poder ver hacia la puerta, estaba demasiado inclinada- Ah, no, son soldados que vienen a matarnos…

-¿No es tu Papá?-le preguntó Goku a la niña subiéndose los pantalones.

-No, son de Pene Rojo-contestó la niña asustada.

-Oh, buen dato, es útil saberlo-dijo Goku poniéndose en posición de batalla.

-¡La esfera del dragón esta sobre esa mesa!-dijo uno de los soldados.

-¡Nunca la tendrán!-dijo Goku lanzándose al ataque. Les pegó un Masturba la Concha y un Cachetea las Nalgas y quedaron tirados en el piso con heridas de primer grado de gravedad-¿Dónde está tu padre?-le preguntó Goku a la niña.

-Esta buscando la esfera del dragón con el resto de los hombres de la aldea. Los de Pene Rojo los obligan a hacerlo por que tienen a nuestro alcalde en aquella fortaleza de allá-señalo una gran torre negra que había en el horizonte- y si no hacen lo que les dicen lo matarán.

-Bien. Yo iré. Llegaré a la torre y lo salvaré. Todo estará bien-dijo Goku abriendo la puerta para irse. El frió del exterior heló su caliente cuerpo-¡Afuera está helado!-

-Lógico-dijo la madre insatisfecha-. Ponte esta ropa para nieve. ¿No quieres ir después de terminar lo que estábamos haciendo?

-¡Debo apurarme! Además, ya perdí las ganas-dijo Goku

-No parece-dijo la mujer observando el bulto en la entrepierna del niño. El combate con esos tipos lo excitaron más aun-. Bueno, no importa, otra vez será-la mujer se retiró bufando a la cocina.

Goku salió corriendo hacia la torre.

El niño llegó a la torre y lo recibieron unos guardias con armas. El niño usó su bastón mágico para atajarlas y lo usó ofensivamente para atacar a esos tipos. Usó su arma también como garrocha y se impulsó hasta lo alto de la torre, que no era muy alta. Era un torreón negro grueso y con artillería en su último piso.

Por un megáfono le habló el que debía ser el comandante de la torre y le preguntó para qué había llegado hasta allí. Goku respondió que había ido a buscar al alcalde y que reduciría la torre a cenizas si era necesario. El tipo del megáfono rió y le dijo que si quería encontrar al alcalde debía entrar a la torre y llegar al último piso que era donde estaba. Goku, ingenuamente ingresó al lugar y en el primer cuarto se encontró con cuatro tipos de aspecto rudo que empezaron a atacarlo en cuanto entró. El primero lo atacó cuerpo a cuerpo, haciéndose el Jackie Chan y Goku lo dejó reducido a una mierdita en un rincón. Luego lo atacaron con cuchillos y armas pero para Goku y su soberana técnica de defensa Sobando la Espalda, fueron inútiles los esfuerzos de los luchadores.

En el piso siguiente había un tipo enorme, con un aspecto similar a un Terminador del pasado, con lentes negros, cabello erizado y mandíbula ancha. Los golpes de este tipo eran devastadores, partía los mosaicos como si fueran de vidrio. Con la desventaja de que era muy lento y Goku lo esquivaba con facilidad. Luego de no poder vencerlo con cientos de golpes intentó utilizar el kame-hame-ha, la técnica que había aprendido de Roshi. Cuando se disipó la polvareda, el tipo aun seguía de pie, sin la cabeza. Y así mismo atacaba, el sujeto estaba hecho completamente de metal, era un robot, y seguí atacando al niño. Luego de un momento se detuvo. La energía del cuerpo del robot se había agotado. Goku avanzó confundido al siguiente piso.

En esa habitación se encontró con un bosque invernadero. De la nada comenzó a atacarlo un ninja de ropa púrpura. Era hábil y contaba con muchos trucos estúpidos de camuflaje, nada que Goku con su puño no pudiera solucionar. Usó decenas de técnicas, estrellas, escondites, multiplicación de cuerpos, y Goku las destruyó a todas.

El último esfuerzo del ninja fue liberar a un tipo al que solo llamaban Numero 8, al parecer era un androide y ese era su número de serie. El ninja lo mandó a atacar, pero el tipo no quiso hacerlo. Entonces sacó un aparato con un único botón que según decía, podía hacer explotar al androide.

Goku actuó rápidamente y le arrebató el aparato de las manos cuando estaba distraído hablando con el androide. De un puñetazo lo dejó desparramado en el piso. Le prometió al androide que lo sacaría de allí, Goku pensaba que era una persona normal, no sabía lo que realmente era. Luego de un largo y encrucijado laberinto llegaron a una oficina donde había otro general que se apodaba White. El tipo oprimió un botón y Goku y numero 8 cayeron a una trampa. En la trampa había un monstruo que parecía estar hecho de goma o algún elemento similar y cualquier golpe que le hieran no le afectaba. Hasta que Goku usó su cabeza, abrió un hueco en la pared, y el frió polar que ingresó en la habitación endureció el cuerpo del monstruo y pudo acabar con él. Luego de una conversación no muy amistosa con el general White, y de algunos golpes, lograron liberar al alcalde y volver airosos a la aldea.

Una vez allí, numero 8 les habló y señaló la esfera del dragón que tenía consigo y la había escondido para que el ejercito de Pene Rojo no matara a los ciudadanos de la aldea si la encontraban. Goku se alegró y se la llevó consigo aunque era la esfera de 2 estrellas, no la que él buscaba de 4.

Al otro día, preparado para irse, llamó a su nube para que lo llevara. Cuando buscó en su radar la ubicación de la siguiente esfera se encontró con el problema de que no andaba. Luego de pensar un momento se aseguró que debía hacerle una visita a Bulma…

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Hola de nuevo a todos… Pude hacer este capitulo bastante rápido, aun con el poco atractivo del capitulo, siento que no tenga la cantidad de sexo suficiente y se que hay gente que pase directamente al siguiente gran sexo que va a ser Ten Shin Han con Lunch sádica, pero no puedo esquivar todo el resto de la historia, me propuse hacerlo completo y aunque sea de la espantosa escritura con la que hice este episodio así tendré que hacer los demás. Esta parte que es correlativa con la de la Red Ribbon esta bastante ausente en el tema del sexo, pero trato de poner algo en cada capitulo para que no sea aburrido. Faltan 2 o 3 capítulos más hasta llegar al sexo que les prometí. Y siento mucho no haber puesto un chiste malo para el capitulo nueve y para este pero espero que comprendan que no encuentro chistes para todos los números, lo siento… . Espero que sigan leyendo. Suerte.