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La familia de mi mujer (3)

en Amor filial

Después de la noche con mis suegros y mi mujer yo caí rendido en la cama fruto del cansancio al que me habían sometido las dos mujeres.

Cuando desperté al día siguiente a mi lado se encontraba mi mujer  que aun  dormía, quite suavemente su brazo de mi pecho para no despertarla y fui al cuarto de baño al lavarme la cara, una vez seco me dirigí de nuevo al dormitorio, debía haber hecho mucho ruido ya que Noelia se encontraba recostada en la cama.

Pronto me pregunto por lo de anoche, por cómo se torno la historia y demás sucesos.

Con una sonrisa en la cara la dije que estaba encantado que me parecía una buena manera de hacer lazos familiares, ambos reímos mientras nos abrazamos como muestra de comprensión y cariño.

Habíamos dormido un buen número de horas porque ya estábamos más cerca de la hora de la comida que la del desayuno.

Me puso mi bañador y mi camiseta y me disponía a salir por la puerta cuando pronto oí a mi mujer decirme “no no” la mire y en su cara se reflejaba la picardía, quiso recordarme que las normas habían cambiado, ahora que ya todos sabíamos lo que pasaba se iría desnudos por el hotel.

Me entro un poco de pudor porque me vieran todos desnudos pero buenos me baje los pantalones y sali de la habitación ahora si con la equipacion oficial: Desnudo.

Baje las escaleras y me encamine al comedor, tome aire antes de entrar ya que todo había cambiado y no sabía la reacción.

Entre cargado de optimismo pero para mi sorpresa allí no había nadie, era ya muy tarde para que la gente siguiera durmiendo, asique como si de un espía se tratara me recorrí los pasillos, mi tarea no iba a ser muy complicada ya que ahora todas las puertas pertenecían abiertas asique fui una por una.

Cuando me llegaba por el tercera habitación escuche ruido de agua, estaba claro que alguien había pero quien, esa era la pregunta.

Abrí la puerta del baño y allí estaban  metidos en el jacuzzi  Alfredo y Nines (tíos de mi mujer) y su hijo Mario y su mujer  Rosa no practicaban sexo pero sí que se tocaban mientras hablaban, Alfredo me miro y me hizo pasar.

En el jacuzzi no había más hueco ya que solo era para cuatro asique estuve hablando con ellos mientras me apoyaba suavemente en la espalda de Mario.

Mientras hablábamos Rosa por debajo  del agua empezó a tocarse con Alfredo y sin mucho inmutarse aunque yo estuviera delante ya que me consideraban parte de la familia.

La cosa empezó a calentarse al ver Nines lo que hacia los otros dos se puso  entre las piernas de su hijo mirando hacia él, rozándole con su culo la polla y con sus tetas la cara.

La conversación empezó a atascarse y mientras todos se tocaban yo miraba desde fuera como si fuera el árbitro del partido.

Rosa me pidió que me acercara, esta se levanto y me miro, poco a poco se acerco a mí y nos besamos como dos adolescentes, mientras Alfredo también se levanto y salió del agua.

Rosa llamo Alfredo para que se acercara y se puso al lado mio, una vez ya juntos los dos hombres, ella se agacho y empezó a pegarnos lametones a nuestras pollas que por esa altura ya estaban más que duras.

Nuestras pollas se rozaban ya que ella quería tenerlas bien cerca iba alternando metiéndose  hasta lo más profundo de su garganta ambas pollas.

Cuando ya estábamos en el clímax oí un chillido llamándome sin duda era la voz de mi mujer , Nines me hizo señas de que fuera a la llamada de mi mujer ,sin más preguntas me dirigí hacia mi cuarto que era de donde procedía su voz.

Entre en la habitación y sobre la cama estaba el resto de la familia es decir mi mujer sus padres y mi cuñado y su mujer.

Mi mujer y su madre pertenecían abrazadas a Pepe (mi cuñado) mientras a mi suegro José le comía la polla su nuera.

Cuando llegue Pepe se levanto quitándose a las dos mujeres de encima y me abrazo como se abrazan dos buenas amigos me dijo que se alegraba mucho de que estuviera con ellos y con un apretón de manos terminamos el saludo.

Mi mujer llamo a Alicia para que viniera con ella a la cama y mientras Pepe y Eva se fueron con Pedro que estaba sentado en una silla.

Noelia y Alicia empezaron a besarse algo que me dio muchísimo morbo  asique me metí en la cama y empecé a comerla el coño a mi cuñada, tenia unos labios carnosos más de lo normal, grandes cuanto menos.

Pronto empezaron a caer los gemidos por todos los rincones de la habitación y mis dos hembras querían probar mi polla.

Deje de comerla el coño a Alicia para sentarme en la cama mientras ellas se deslizaban por mi cintura, cuando chuparon mi polla ambas bocas juntas el gusto fue enorme tanto que tuve que hacer esfuerzos para no correrme en el momento.

Estaba en el cielo pero sabía que si estaban mucho tiempo así no aguantaría mucho asique agarre a mi mujer la puse de cara a la pared mientras le metía la polla, mi cuñada estaba detrás mío agachada comiéndome los huevos y de vez en cuando sacando la polla del coño de mi mujer para limpiarla.

Mi mujer se corrió un par de veces asique como hay que compartir cambiaron de posición las dos mujeres y ahora a quien penetraba era a Alicia.

Sin duda era una sesión de sexo soñada con dos mujeres que están muy bien.

Después de que mi cuñada gritara unas cuantas veces por las corridas que la provoque, puse a las dos de rodillas en el suelo y la deje que chuparan mi polla hasta que me corriera.

No tarde más que un par de minutos todo el semen cayó sobre la teta izquierda de Alicia, aunque poco duro ahí ya que entre las dos lo dejaron todo limpio.

Una vez ya escurrida mi polla en la boca de mi mujer, ambas fuera a la ducha mientras yo cogí un poco aire pero cuando mire al frente de repente se me fue todo por la escena que vi.

Pepe estaba comiendo a su madre el coño mientras era penetrado por su padre, la escena era totalmente novedosa pero pese a lo que creía me excito bastante, pero yo por ahora estaba ya satisfecho asique sin más me fui al jacuzzi mientras mi mujer y Alicia se frotaban en la ducha.

Continuara……