Me quede sin material, y ustedes lectores, lo saben por qué se los hice saber en mi anterior relato, Comiéndome un Santo Pecado, si leyeron esta historia de la que les habló sabrán también que tengo un nuevo “Amo” Cibernético, y que para él fue dedicado el relato en cuestión, cómo recibí tantos comentarios a mi e-mail, preguntando mas sobre este nuevo “Afortunado” como muchos lo llamaron, pues aquí va la historia.

Era una madrugada como tantas otras, estaba aburrida, sin sueño, harta de Facebook, ya había revisado mi e-mail, y estaba sin nada que hacer, pero renuente de irme a la cama temprano, así que contra todos mis pronósticos decidí ponerme Online en mi cuenta de Messenger, la abrí y para mi infortunio no había nadie que pudiera ayudarme a pasar el rato con una buena plática, o que por lo menos hiciera que  me diera sueño; mi día hubiera terminado ahí de no ser por que encontré 4 solicitudes de amistad, todas de chicos por supuesto, como ya muchos sabrán, mi contacto con ustedes es simplemente a través de correos en Hotmail, así que por lo general no acepto solicitudes de amistad en mi cuenta de MSN, pero como no tenía nada que hacer, pues decidí aceptarlas esta vez, con la intención de eliminarlos en unas cuantas horas. Dos de esos cuatro chicos que agregué estaban Online, pero mi costumbre tampoco es  saludar a nadie, ni a mis amigos más cercanos ni a nadie, así que solo esperé a que por lo menos uno se animara a saludar, y así fue, pocos minutos después de haber sido agregado, él, me saludo en un tono muy cortés, casi respetuoso y solemne, me llamó la atención que me tratará con tanto respeto, pero correspondí de igual manera, el chico era bastante simpático, me hizo reír un par de veces con sus ocurrencias, y cuando le pregunté a que se debía el trato tan solemne, me dijo que era porqué el respetaba a sus “mayores” (Jajaja, vaya muchachito), el comentario lejos de ofenderme me tentó de risa, no soy tan vieja que edad podría tener él, me dijo que tenía 18 y que estaba próximo a cumplir los 19, y que aunque solo fuera mayor que él dos años, pues que me trataba con respeto, en fin, me morí de la risa con lo que decía, nos pasamos un buen rato hablando, sabiendo más cosas  el uno del otro, pero como era de esperarse, pronto la conversación rosa, se fue tiñendo de un rojo intenso, la temperatura comenzó a aumentar muy rápidamente, y yo solo me dejaba llevar, por un chico, que tiene amplia experiencia en la Web Cam, y por lo que se ve, en la cama es un animal delicioso. Curiosamente pronto dejé de sentirme como la “mayor”, la de la “experiencia”, para pasar a ser la alumna, y dejarme llevar por la calentura reprimida y seguir con el juego.

En un momento de la conversación, mi amo halagó la foto de perfil, y admitió que tengo unas grandes tetas, en las cuales podría disfrutar y pasar un buen rato, y desde ese mismo momento comenzó a tratarme como “Su Puta”, y como mi mayor debilidad es esa, pues termine a sus pies, convirtiéndome en su nueva esclava, en su nueva puta, cachonda y deseosa. Tanta era la calentura del momento que terminamos viéndonos por Cam, (privilegio que hasta el momento solo había tenido Cami, mi amante Cibernético, con pase de exclusividad, hasta ese día jeje), en un principio no quería mostrarme, pero cuando vi su rostro, me pareció un chico guapo, simpático, sin duda sería el artífice de muchas horas de calentura y “Masturbación asistida” y no me he equivocado, no le enseñé mucho esa madrugada, solo abrí un poco mi escote, y con forme él me lo pedía, iba dejando ver mas y mas mis tetas, hasta desnudarlas por completo y mostrar para sus goce, mis pezones  duritos, fueron unos pocos minutos lo que estuve frente a la Cam, amasando mis pechos para él, mientras su mirada lasciva me excitaba y me hacía mojar, ver como se relamía viendo mis tetas, y su lengua inquieta y juguetona, ufff, me erizaban la piel y las ganas se adueñaban de mi.  Ya era tarde, y ambos teníamos clase en la universidad, así que nos despedimos, prometiendo que pronto nos veríamos de nuevo y esta vez como toda una puta obedecería sus órdenes, y haría lo que me pidiera.

Esa noche me vi obligada a masturbarme y dedicarle mi orgasmo a él, la corta sesión de Cam, me había dejado mojada, caliente y con el clítoris saltando dentro de mi tanga, así que cuando estuve acostada, abrí mis piernas y me toqué imaginando a este chico, que me había puesto tan cachonda.

Pero esa masturbación no fue suficiente y a la mañana siguiente, tuve que correr al baño para tocarme de nuevo y una vez más correrme en su honor, deseándolo con ferviente pasión, y acalorado deseo, por lo demás el día transcurrió con total normalidad, tuve mis clases en la Universidad y volví a casa, a eso de las 3 de la tarde opté por conectarme a Messenger, estaba sola en casa, y pues tenía la esperanza de encontrarlo conectado y mostrarle aun mas. Para mi buena suerte, encontré que mi amo si estaba online, y que estaba dispuesto a hacerme pasar una tarde excelente, después de un saludo nada ceremonial, y de unas cuantas palabras de protocolo, pues decidimos poner la Cam y comenzar con el ritual (jeje),

Esa tarde me ocupe en usar una blusa que tuviera un buen escote, para dejar ver mis “encantos” y comenzar a calentarlo. No tuvimos que decir nada, ambos sabíamos que queríamos y en menos de lo que pensé ya estaba con mis tetas desnudas, en frente del PC, apretándola, lamiéndola ´para él, con mi mirada clavada en el monitor para no perderme ni un solo detalle de lo que hacía con su lengua, de la forma en ponía los labios simulando chupar mis pezones, succionarlos vorazmente, mi tanga para ese momento ya estaba húmeda, mis jugos no se habían hecho esperar, ambos queríamos ver más, y yo ya me moría de ganas por comenzar a darme dedo mientras seguía las instrucciones de este hombre que me ponía más caliente que el mismo Cami.

En medio del calor del momento, me pregunto si quería ver su pene, obvio respondí que sí, y cuando me enseño su cañón bien erecto, no pude disimular mi cara de gusto. Lo vi bien grande, duro y enrojecido, y aunque sé que la Cam hace ver las cosas más grandes, se que realmente tiene un pedazo de carne enorme, no me ha dicho cuánto mide pero calculo unos 18 centímetros de placer que quiero algún día comerme en persona, ambos reímos porqué mi cara había dicho lo mucho que esa vista me agradaba, ahora estaba más excitada que antes, acomodé mi cámara y le enseñe mi vagina mojada, y comencé a tocarme para él, viendo su cara, su lengua y por momentos su rico pene que me ponía más loca, estaba  a mil, mi cuerpo sudaba y temblaba y mis jugos seguían saliendo para mojar mis dedos, esta vez comencé a frotar cada vez más rápido mi clítoris, y con ayuda de mi consolador me penetraba duro para aumentar mi disfrute, no lo pude evitar ya no aguantaba más y le regale ese orgasmo en vivo y en directo a mi amo, para finalizarlo enfocando mi cara sudorosa con una gran sonrisa de agradecimiento, me había encantado correrme para él, y luego de haberme calmado y como aun seguía caliente, volví a hacerlo, esa tarde fueron dos orgasmos, en frente de la Cam, uno en el baño dedicado a él, y dos más en la noche, un día perfecto con 5 orgasmos cuyo responsable era mi amo, que con solo llamar “Mi Puta”, conseguía de mi lo que quisiera, me encendía y de verdad me hacía sentir la más puta de todas, que rico. Esa tarde mi satisfacción no era completa, porque no había tenido mi lechita, pero mi amo, prometió que me la daría en la noche, y así fue, un rico chorro de leche espesa salió para caer en su vientre mientras yo por mi parte también tenía un orgasmo desbocado, el primero de esa acalorada noche, correrme con él, es algo que  me deja más satisfecha que muchas cosas jeje.

Al día siguiente, después de vernos en la tarde y de correrme como antes, me desconecté, con la promesa de volver en la noche y complacerlo de la manera que él quisiera.

La noche llegó, y mientras entrabamos en calor para poder encender la Cam, mi “Nuevo Amo”, comenzó a preguntarme sobre mis experiencias en el sexo anal, y si me gustaba practicarlo, tuve que responder con toda la sinceridad del caso, nunca he tenido sexo anal y lo máximo que había llegado a sentir en mi colita, era el dedo mientras me duchaba, y no introducía más de una falange, es un tema algo espinoso para mí, no lo consigo tan divertido, aunque después de lo que pasó esa noche, puedo cambiar de opinión. El tema siguió avanzando y en los ojos de mi “Amo” se notaba una mirada pícara y morbosa que me calentaba, cuando ya pudimos encender la Cam, empezamos a ponernos en ambiente, me exhibí para él, dejé al descubierto mis tetas, y jugaba con ellas pensando que eran sus manos, imaginando su boca rodeando mi pezón, y haciendo manjares sobre él, cada vez la calentura aumentaba, su pene ya estaba como un hierro, y mi concha cada vez se humedecía más, me menee enfrente de la Cam, permitiendo que viera como movía mis caderas y como me clavaba los dedos lo más adentro que podía, tratando de leerlo cada una de las palabras que él escribía y de seguir sus indicaciones, hasta que me pidió algo que dude en hacer, me pidió que me metiera el consolador por el culo, me quede pensando un momento, mi cara de asombro se notó, no sabía que responder, no quería hacerlo, pero la curiosidad me mataba, pero mi “amo” es un chico inteligente, sabía persuadirme aunque solo hubiéramos hablado pocas veces, me retó, -“Eres una PUTA, no creo que esto te detenga”, sonreí porque sus palabras lograron hacer que mi mente se calentara y dejara de pensar en pudores o recatos, le dije que si lo haría, pero que me pondría de píe para hacerlo mejor y que buscaría un lubricante, él aceptó que me pusiera de píe, me dijo que lo hiciera sin lubricante que era mejor que sintiera ese dolorcito, el dolor no es mi límite y me encanta sentirlo, así que me puse de pie, le enseñé mi culo, y comencé a penetrarme, lo hice de golpe, el consolador al entrar hizo un extraño ruido, como cuando destapas una botella, y luego lo empujé hasta donde más pude, me ardía el ano, y cuando comencé a mover el consolador dentro era un dolor fuerte, pero me encantaba, por mi cuerpo corría un sudor frío, me estaba excitando darme por detrás, me volteé para ponerme de frente a la Cam, y aun teniendo el consolador dentro, comencé a meterme los dedos en la panocha, duro, primero uno, luego dos, y finalmente tres, así un buen rato, hasta que me saqué el consolador, lo puse en el suelo, y me abrí las nalgas frente a la Cam para que mi amo pudiera ver mi ano (no sé si se vio bien el primer plano de mi culito, pero ahí estaba abierta por detrás mostrándome para él).

Me recosté en la cama con las piernas bien abiertas y acomodé la Cámara para enseñarle ahora mi coño, me toqué para él y él hizo lo propio, hasta que nos corrimos casi al mismo tiempo, fue delicioso estaba agitada con el rostro sudoroso, y él se veía complacido, satisfecho.

Bueno voy a dejar el relato ahí, este está más corto que los demás, espero que les guste, hemos seguido jugando en la cam todo este tiempo, pero estamos en un receso obligatorio jeje.

Gracias por leerme, envíen sus comentarios, quejas y sugerencias a mi e-mail, seguimos en contacto.

Besos Clandestinos a todos.