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ARA’S (El Altar del Sexo) IX

en Dominación

            Habían pasado algo más de un mes, desde que ambas mujeres fueron marcadas como propiedad de Adela, y autorizar el uso degradante dentro del club. Tanto Esther como Alicia, iban regularmente a la discoteca e ingresaban en la zona VIP, el club como decían ahora, allí los porteros leían los códigos de barras, que les fueron grabados a fuego en la palma de sus manos, antes de ingresar. Cuando la puerta se cerraba a sus espaldas, se desnudaban y eran llevadas ante el altar, en donde otras esclavas, como ellas, eran obligadas a follar de forma salvaje mientras que ellas eran flageladas de forma inmisericorde. Adela deseaba tener familia, pero no le apetecía pasar por el tema de quedarse embarazada, así que uno de sus amigos del club era especialista en la fecundación in vitro. Así que habló con él y consiguió que le diera una cita para tener dos óvulos fecundados, que serían inseminadas en sus dos esclavas.

            Habían pasado bastantes meses desde que tanto Esther como Alicia habían sido inseminadas con óvulos, de Adela, fecundados in vitro. Las dos estaban desnudas punto de terminar.

Ama 3:                        “Hay que felicitarte, tus dos esclavas son de lo mejor que hay en nuestro club. Suelen ser azotadas hasta la extenuación y sin embargo no se han quejado de nada, y cuando no se les azota son degradadas hasta unos límites insospechados y nada. Si…

Adela:             “De eso nada, son mis esclavas ya que ellas vinieron a mí de forma voluntaria y no estoy dispuesta a abandonarlas…

Ama 1:                        “Me dijeron el otro día que estabas por tener una nueva línea de negocio. Alquilas a tus esclavas por 10.000 € para que se queden preñadas…

Adela:             “Es verdad, en cuanto nazcan mis dos pequeñines, podremos hablar de negocios. Si el parto es de forma natural y no conllevase ninguna cesárea. En dos o tres meses, creo, que podrán volver a recibir óvulos fecundados, y en el momento de que paran no podrán recibir a los niños, se os entregarán a vosotras. El pago se hará en tres golpes, el primero de 3.000 € en el momento en que vuestros óvulos queden fecundados, y se inseminen dentro de las esclavas, el segundo cuando se sepa el sexo de la criatura y será de otros 3.000 € y el tercer, y último, pago se hará en el momento que recibáis a la criatura y será de 4.000 €, esto es en el caso de que el óvulo represente a una criatura, si por cualquier motivo, el óvulo tuviese más de una criatura, los pagos serán multiplicados por el número de críos vengan.

Ama 1:                        “¿Si deseamos darle a nuestros niños leche materna?

Adela:             “No hay problema, la esclava que haya parido os la cederé para que la ordeñéis para darle la leche materna a vuestro hijo. Pero en ningún caso la esclava puede estar en el mismo lugar que el bebé y mucho menos cogerlo para darle de comer.

FIN