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Di placer a mi vecina de 60 años

en Sexo con maduras

DI PLACER A MI VECINA DE 60 AÑOS

Vivo en un edificio de diez plantas en donde los vecinos casi no nos conocemos.

Por eso me sorprendio el dia que la inquilina del 6º 2ª (una mujer soltera de 60 años ,poco atractiva y mas bien huraña)me encontró en el ascensor y me pidió ayuda para sustituir la luz fluorescente de su cocina.

Como no encontré ninguna excusa plausible,le aseguré que en 10 minutos bajaría a su casa.Cuando llamé a su puerta la encontré vestida con una ligera bata corta que dejaba entrever sus pechos y sus piernas.En ese momento pensé que habia equivocado mi valoración sobre sus encantos fisicos pues los pechos se insinuaban todavía firmes y grandes mientras que sus piernas bien torneadas parecian las de una mujer mas joven.

Me acompañó hasta la cocina en donde había dispuesto una escalera para subir hasta la lampara,ella misma la colocó y se subió para indicarme en donde residía su problema.Una vez arriba pude contemplar con total libertad sus bonitas piernas mientras decia:

_"sujetame las piernas,tengo miedo de caerme ".

Yo la así con ambas manos a la altura de sus rodillas y noté como un suave temblor recorria su cuerpo al tiempo que sentí una suave erección por aquel calido contacto.

_"Sujétame mas arriba,por favor¡".

Aquello fue demasiado y a medida que mis manos ascendían por sus muslos,la incipiente erección se convirtió en algo real.

A ella mientras tanto se le había erizado la piel de las piernas y esa sensación me excitaba todavía mas.

Permaneció quieta pero temblando mientras yo seguía subiendo mis manos hacia la calidez de su entrepierna y sus bragas que encontré deliciosamente humedas.Introduje mis dedos por la abertura de la ingle y comencé a masajearle lentamente el clítoris.

A estas alturas toda ella era un gemido pero no se movia de la escalera.

-"Que haces ?"-me preguntó con un susurro.

-"Darte el placer que mereces"-contesté yo.

Todavía seguimos asi unos segundos hasta que realmente sus piernas se doblaron debido al orgasmo al que habia llegado con mis tocamientos.

Bajó de la escalera temblando y yo la atraje hacia mi besandole en el cuello mientras le quitaba la bata.

Se mostró asi como la esplendida hembra que es mientras mi boca se dirigia ávida hacia sus enormes pezones que pronto adquirieron una dureza insolita al contacto con mi lengua humeda y juguetona.

Mientras yo seguia recorriendo su cuerpo con todos mis sentidos ella me condujo lentamente hasta su cama.

Me desnudó como una poseída arrancandome los botones de la camisa y rompiendome el slip en su desmadrada lujuria.

Su boca buscó rapidamente mi pene amoratado por la excitación y comenzó a succionarlo de una manera que demostraba su falta de experiencia en estas lides pero que a mi me hacía crecer el deseo todavía mas .Le así la cabeza con mis manos y lentamente le impuse el ritmo que mas me complacia.Cuando noté que ya no podia resistir mas,la aparte suavemente ,la tumbé sobre sus espaldas y abriendo sus piernas me apliqué en un segundo masaje clitoridiano-esta vez con mi lengua- que le hizo aullar de placer mientras sus fluidos vaginales corrian con la fuerza de una jovencita de veinte años.Me detuve para no dejarla agotada antes de la embestida final y poniéndola de espaldas lubriqué mi verga con saliva y se la introduje por su orificio anal mientras ella se afanaba en una masturbación prodigiosa que producia espasmos en su esfínter comprimiendo mi glande lo que me condujo a una eyaculación no prevista pero no por eso menos placentera.

Seguimos excitandonos de nuevo durante un rato y cuando noté que mi pene volvía a estar en condiciones,introduje mi verga en su vagina que resultó agradablemente estrecha y tras bombear con un ritmo muy lento llegamos a un orgasmo conjunto que nos dejó totalmente derrengados.

Aquella fue la primera entrega de una relación que se prolongó por mas de cinco años pues a pesar de la diferencia de edad gozamos como el primer dia en todos nuestros encuentros y solo acabo cuando ella se fue a vivir con una sobrina a otra ciudad.

Ahora veo a las mujeres de 60 años con otros ojos y no descarto volver a tener una relacion con una de ellas.