Ella tenía sus tragos encima ......... habrá sido mi culpa ......... Esa imagen no me dejo dormir pensando en lo que había hecho, era mi madre, pero a la vez era la mejor experiencia de mi vida. La palabra incesto se venía a mi mente, pero aun asi, de solo recordar lo que había vivido con ella , mi verga nuevamente estaba dura. Que pasaría mañana cuando mi madre despertara, como enfrentarla ..............

Continuación de incesto 1 :

Desperté muy temprano, era sábado y no tenía universidad. Me levante en silencio, al parecer mi madre aun dormía. Tomé mi bicicleta, y salí hacer ejercicio. Durante toda la mañana, recordaba lo vivido la noche anterior. Pensaba en que se transformaría mi relación con mi madre, me moría de vergüenza verla a la cara. Continué así toda la mañana, hasta que regresé a mi casa a eso de las dos de la tarde. Mi madre estaba en la cocina preparando el almuerzo.

La saludé a la distancia y ella sin darse vuelta me respondió el saludo. Me bañe y cuando salí, la comida ya estaba servida. Me senté a la mesa y ella también. Comenzamos a comer en silenció. Luego ella me dijo, que estaba pensando en cambiar el piso de su pieza, que era alfombra por alguno que fuese mas fácil de mantener, como cerámico o algo así. Conversamos todo el almuerzo sobre el tema y ya una ves que terminamos, ella se puso a lavar los platos y yo me fui a mi habitación a ver televisión.

Yo no hallaba la hora que llegara el día lunes, ya que como tenia jornada en la tarde, me tenía que quedar a almorzar cualquier cosa en la universidad y en la noche solo conversábamos un rato. El resto del fin de semana transcurrió, digamos normal. Nos hablábamos muy poco, solo lo justo y lo necesario.

Por fin llego el lunes, asistí a la universidad y ya me desaparecí todo el día de la casa. En la tarde me fui a jugar billar con unos amigos, por lo cual cuando llegue, ella me sirvió la cena y me fui a acostar. Poco a poco nuestras vidas tomaron el curso normal.

Así transcurrió como dos meses yo me puse a andar con una chica, que realmente me gustaba y con la cual hicimos muy buena pareja. Nos llevábamos muy bien , pero no me atrevía a llevarla a la casa. Un día mi madre me preguntó si andaba con alguien , le respondí que sí. Me preguntó que cuando la llevaría para que ella la conociera. Le dije que por el momento no, por que era alguien sin importancia, que solo andábamos y que yo no quería por el momento que pasara a mayores. Pasó el tiempo , ya mi relación con Patricia era seria, y me vi en la obligación de llevarla a casa. Para eso preparé antes el terreno, contándole a mi madre que aun seguía con la chica y que me gustaría que ella la conociera. Mi madre me dijo que la invitara un día a tomar once.

Llegamos con Patricia a mi casa. Mi madre había preparado una once muy rica. Ambas conversaron muchas cosas y al final congeniaron muy bien. Las horas pasaron volando y no nos dimos cuenta que ya había oscurecido. Mi madre nos acompañó a la puerta .

Me dio mucho gusto que se llevaran tan bien. Acompañé a Patricia hasta su casa , nos quedamos a la entrada de su casa, que estaba oscuro, nos dimos unos besos de esos calentones, con agarrones y todo, pero por lo tarde que era ella se tenía que entrar.

Al regresar mi madre ya se había acostado. Entre a mi habitación, me acosté y me puse a ver una película. Al rato me dio sueño y apague todo y me coloque a dormir. Deben haber sido como las 2 de la mañana, cuando siento a mi madre que abre a puerta y me dice que escucho ruidos dentro de la casa. Me levanté y tomando un palo que guardo como defensa personal, salí sigilosamente. Al asomarme por la ventana que da al patio, un hombre estaba tratando de robar mi bicicleta. Salí con rápidamente al patio, prendiendo la luz. Tampoco quería un enfrentamiento con el tipo. El soltó la bicicleta y salto como un gato la pandereta de mi casa.

Estuvimos un rato en el patio, viendo que otra cosa podría haberse llevado el hombre. Luego nos fuimos a acostar. Entré al baño y mi madre se quedó en la cocina. Al salir me dirigí a mi habitación y mi madre entró al baño. A los pocos minuto, siento que se abre mi puerta. Mi madre me pregunta si puede dormir conmigo, ya que había quedado muy asustada.

La verdad, en solo un segundo vino a mi mente lo vivido con mi madre anteriormente. Traté de que se fuera a su pieza, que dormiríamos incómodos al ser mi cama muy chica, mas ella no me escuchó y se metió a mi lado.

Le di la espalda, para evitar cualquier roce con ella, mas mi verga estaba completamente despierta. Mi madre me abraza por detrás. Apoyándome sus pechos en mi espalda. Todo mi cansancio y sueño se había esfumado. Sentía latir mi corazón a 1000 por hora. Sus manos en mi pecho, me aferraban hacia ella . Ya habían paso como 15 minutos y yo dándole la espalda estaba mas despierto que nunca. Me empezó a dar calor, por lo que tuve que sacarme la parte de arriba de mí pijama. Nuevamente dándole la espalda, siento como mi madre se acurruca a mi espalda, sintiendo sus tetas a través del delgado camisón, y no solo eso, si no que sus pezones que se habían parado. Ella comienza a acariciar mi pecho. Estaba muy excitado al sentir como su manos bajaba lenta, muy lentamente. Luego de unos minutos, su mano se encontraba en mi vientre. Yo simulaba estar dormido, pero su mano, me tenía al borde del éxtasis. Emitía sonidos como leves ronquidos. Mi madre me llamó por mi nombre muy suavemente, ( ya a todo esto había transcurrido como media hora ) Yo no le contesté. Al cerciorarse que yo estaba dormido, comenzó lentamente a meter su mano en mi pantalón de pijama. Lentamente casi en forma imperceptible, hasta que llegó el momento que sus dedos se encontraron con mi verga completamente erecta, subiendo rápidamente la mano pocos cms. mas arriba. Nuevamente mencionó mi nombre y yo continué callado. Comenzó su suave descenso hasta encontrarse nuevamente con mi verga. Al momento de tocarla, dejó su manos quita como por 5 minutos.

Que hacer, acostado nuevamente con ella, y con su mano, rozando mi verga. Moví mi pene un poco. Ella no movió la mano, y poco después comenzó a bajarla, hasta que mi pene quedó completamente bajo su mano. Muy lentamente comenzó a acariciarlo. Podía sentir como sus pezones crecían aferrándose aun más a mi espalda. Pude sentir, como con su otra mano, la colocaba entre sus pierna y comenzaba a masturbarse, mientras me lo acariciaba muy suavemente. Me moría de ganas de darme vuelta y hacerla mía nuevamente, mas algo me detuvo.

Sus movimientos fueron aumentando, hasta que pude sentir como con leves quejidos ella llegaba al orgasmo. Cuando su respiración se calmó, me soltó mi verga y volvió a colocarla en mi pecho.

Me dejó completamente excitado. Me costó mucho no acabar en su mano mientras ella alcanzaba su orgasmo, pero ahora ella parecía conciliar el sueño, mientras yo, con una verga de este porte, estaba completamente desvelado y mas aun hirviendo por meterla dentro de una vagina.

Haciéndome el dormido, me di vuelta, con lo cual mi madre también lo hizo. Mis manos quedaron en sus piernas y mi verga apoyada entre sus nalgas. Me mantuve quieto por unos minutos, sabía que ella no dormía, y que sentía como mi verga descansaba apoyado en su culo. Comencé a mover mi verga, asiendo sentir a mi madre como la tenía. Ella no se movía. Al igual que yo debe estar simulando que dormía. Mi mano entre su muslo, aun sobre su camisón. De un solo movimiento la bajé hasta tocar su desnuda pierna. Luego aun durmiendo, la volví a mover, pero esta vez quede a escasos centímetros de su calzón. Mis movimientos continuaba y la respiración de mi madre volvía a acelerarse. No me atrevía a mover mi mano, y colocarla en su vagina. Pasaron uno minutos y yo no me atrevía hacer el siguiente movimiento .Derrepente , fu ella la que bajo un poco mas sus caderas , y mi mano quedó sobre su mojado calzón.

Sentía la humedad de la prenda y sus vellos que escapaban de esta. No aguantaba mas mi calentura. Con mi dedo muy despacio comencé a acariciar su humea vagina. Ella echaba hacia atrás su culo, haciéndome sentir mas presión.

Fue mi madre la que dio el siguiente paso, agarrando su calzón y corriéndolo a un lado, permitiéndome meter mi dedo en su húmeda concha. Comencé a masturbarla, suavemente. Aumentando paulatinamente mis movimientos, hasta lograr meter casi la totalidad de mi dedo en ella. Siento la mano de mi madre levanta su camisón, y como la desliza hacia atrás, bajándome mi pantalón de pijama . Con mi verga en su mano, y con los mismos dedos corre su calzón y me coloca en la entrada de su vagina. Siento la humedad de su vagina en la punta de mi verga. Comienzo a meterla mientras ella echaba mas aun su culo hacia atrás. Ya no podíamos engañarnos que estabamos durmiendo. Ambos lo deseábamos. Mi dedo aun en su vagina, sentía rozaba mi verga que entraba y salía. Mi madre con los brazos echados hacia atrás me tomaba de la espalda y me aferraba a ella. Ella se colocó boca abajo y yo sin sacarla, me monte sobre ella. Ya ambos nos quejábamos fuertemente. Mis manos se aferraban a sus tetas, apretándoselas, mientras ella bajaba sus manos hasta su concha y se masturbaba mientras era penetrada por detrás por su hijo. Mis movimientos dieron clara señal que me venía, y ella aumentando sus movimientos logro venirse justo en el momento en que yo le llenaba el coño con mi caliente semen.

Continuamos abrazados toda la noche, yo jugando con mis dedos entre sus vello púbico y ella dejándose querer hasta que nos quedamos dormidos.

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