Recuerdos de mi segundo matrimonio 8

Después de esa aventura con José Luis, me buscaba con cualquier pretexto para que fuera a su oficina, que corregir un escrito que archivar documentos etc. Ahí trataba de excitarme y de acariciarme, yo le decía que lo pasado fue un error un momento de debilidad pero que no se tenia que repetir, el me decía que yo le gustaba mucho y que si dejaba a mi esposo el me mantendría, pero no hablaba de una relación firme, pensaba en mis hijas como iba a estar con un hombre sin compromiso y así s lo hice saber, en una ocasión me llamó a su despacho y cuando me estaba dictando se me acerca y sacando su pene lo pone en mi hombro ahí me levanté y le dije que yo no era su puta que se creía, Salí corriendo al baño, cuando me calmé hice mi carta de renuncia y se la llevé al contador, él le llamo a José Luis, me dieron mi cheque completo y me salí, al llegar a mi casa temprano le dije a mi madre que me habían despedido, le di parte de mi cheque para los gastos de las niñas y me quedé con algo para camiones y buscar trabajo nuevamente.

M e quede el resto de la semana en la casa arreglando mis cosas y todo lo que no pude hacer mientras trabajaba, le hacía de comer a mi esposo trataba de atraerlo, pero no era suficiente seguía con su mismo ritmo de vida, seguíamos con altibajos y entonces decidí dejarlo por la paz.

Teníamos muchos pleitos por las intrigas de mi madre no sé porque se empeñaba en crear cizaña, entre nosotros si ella estaba casada con el padre de mi marido pero en fin creo que quedó frustrada cuando, él que me crio desde niña al casarme la primera vez le dijo a mi madre que ya había cumplido y la abandonó.

Pronto conseguí un trabajo por recomendación de Juan que los conocía por intermediación de un tío, en una pequeña empresa de extintores, me encargaba de controlar los pedidos, las recargas y la logística del negocio.

Los dueños eran dos señores jóvenes Alfonso de 30 años y Felipe de 33 años casado, eran hermanos y me trataban muy bien, en ocasiones los acompañaba a visitar clientes o a vender nuestros servicios nos íbamos los tres en el auto del mayor, era un galaxie muy bonito y amplio.

Estaba muy a gusto en mi nuevo trabajo y aprendía rápido el negocio, me quedaba tiempo extra para que vieran mi interés en aprender mas rápido todo el movimiento, con el tiempo habíamos formado un buen equipo de trabajo y en lo personal empezábamos hacer una bonita amistad se veía que me estimaban y yo a ellos, platicábamos de cualquier tema sin problema por la situación de Felipe que era casado el trato era más serio debido también a su carácter, Alfonso era mas extrovertido y nos hacia reír mucho con sus ocurrencias .

Resulta que por nuestros pleitos mi marido empezó a darme el gasto a cuenta gotas a veces no me alcanzaba para darle a las niñas bien de comer y mucho menos comprarles algo de la escuela o para mí.

En una de esas salidas a vender terminamos algo tarde y me dijeron si los acompañaba a comer, les dije que sí y nos fuimos a la polar, un lugar muy ameno, es una cantina digamos de lujo donde pedias de tomar y te servían el menú de la casa.

Pidieron las bebidas y hasta la segunda nos empezaron a servir de comer, como no había desayunado más que un pan y café, pues se me subió un poco el licor, en cuanto trajeron la sopa casi la devoro, para haber si así se me quitaba un poco lo mareada, pero como seguían pidiendo bebida sin darme cuenta ya estaba bastante alegre, jeje

La plática con ellos era muy amena sobretodo el menor era muy simpático y ocurrente nos hacía mucho reír, la estábamos pasando súper bien, todas mis penas y estrés, se diluyeron por encanto.

Entonces dijo uno de ellos que porque no íbamos a ver un show de no sé qué cantante de moda y como no quería regresar temprano a casa les dije que sí iba con ellos.

Vimos el show, y en el intermedio abrían la pista para bailar, entonces me sacaron a bailar primero uno luego el otro, me estaba divirtiendo mucho como hace tiempo no lo hacía, ya los tres estábamos algo picados tomando y como que ellos se estabilizaron ya no se les subía tanto, solo al menor que se veía un poco mas bebido y si de por sí, era más abierto pues con copas mas y se me empezaba a insinuar y al bailar me pegaba mucho a su cuerpo yo me dejaba hacer y mas que empecé a sentir el roce de su erección, primero en mi pierna, o al darme algún giro posaba su mano más abajo de mi cintura o ponía su pene erecto en medio de mis nalgas, yo me estaba excitando bastante y mas con las copitas ufff sentía mucho calorr.

El mayor era más discreto aunque también me acariciaba "sin querer" ya sean mis senos o mis nalgas, tenía ya mis pezones muy parados que al pegarme a su pecho él solo sonreía, seguro al sentirlos máxime que traiga una blusa de gasa y una minifalda que me quedaba como pintada, siempre me ha gustado la ropa entallada que realce mi figura.

Terminamos de bailar y ya nos fuimos, los tres nos fuimos adelante, obviamente me quede en medio en el asiento, por el tipo de falda que llevaba se subió un poco más mostrando mis panties donde ya se obscurecen porque empieza la parte que cubre la cadera.

Ellos no dejaban de verme las piernas, el hecho de saberme observada me estaba humedeciendo, entonces me dijeron que como estábamos cerca de su departamento si nos tomábamos la ultima y luego me llevaban a casa al fin al otro día no había trabajo yo les dije que me llevaran a mi casa pues tenía que atender a mis hijas y marido se encogió de hombros Felipe y me dijo ok por donde nos vamos le dije donde vivía y me llevaron al bajarme del lado de Alfonso se me subió la falda al recorrerme en el asiento yo creo que me vio todo porque solo se sonrió y me dijo huy que guapa, le di un beso en la mejilla y me fui. Estaba muy excitada con los escarceos de los dos al bailar.

Llegue a mi casa acosté a las niñas y esperé a mi marido, cuando llegó le serví la cena y me puse cariñosa pero él no me hacia caso al contrario me alejaba y decía que estaba cansado, le dije que hablaramosporque era así conmigo, pero rehuía el tema, cada dia nos alejábamos mas.

Entonces empecé a salir más con mis jefes ellos encantados, ya que bailaba con los dos y por decepción empecé a beber al parejo de ellos.

Llegaba muy tarde a mi casa y bastante bebida y manoseada pues no desaprovechaban la oportunidad de verme alegre y con el pretexto de sostenerme me metían mano por todos lados, ya a mi no me importaba me sentía muy desilusionada, que nadie me quería y que mi suerte era ser objeto de los hombres.

Asi pasaban los días y las semanas cada dia llegaba mas tarde, un sábado al levantarme vi que mi esposo revisaba mi ropa intima en el bote de la ropa sucia, eso me dio mucho coraje y le dije que hacía con mis prendas, y me dijo que donde había estado y con quien, yo le dije que si desconfiaba de mi y le creía mas a mi madre de que andaba en malos pasos porque ella le metía la idea que me drogaba y me acostaba con varios hombres que por eso llegaba tarde, yo le dije tú sabes donde trabajo ve por mi si no confías en mí, además conoces a Felipe y solo voy a bailar sabes que me gusta mucho y como tu ya no me sacas a ningún lado que mal hago en divertirme un rato para calmar la tensión de tanto pleito.

Se levantó olió nuevamente mis pantaletas, las arrojo y salió aventándome.

Yo me sentía muy mal relegada a cero, sin valor para él, le grite si ya no me quieres divórciate de mi y salió azotando la puerta.

En una ocasión estábamos Alfonso y yo trabajando colocando los extintores y recargándolos y como siempre bromeando, al ir de un lado a otro en dos ocasiones rozábamos nuestros cuerpos sin intención, hasta que me incliné para colocarle las etiquetas nuevas a los extintores y él estando detrás de mi, se me quedó viendo yo sentí su mirada y voltie a verle y le dije que haces, deja de verme y sigue trabajando, él me dijo hay Rocío es que con esos cachetes que tienes no me puedo concentrar, me rei y le dije déjate de bobadas y seguí con lo mío.

De repente siento que me agarra de las caderas y me acaricia las nalgas le digo que no se pase y en respuesta me coloca su paquete en medio de mis nalgas y me dice Rocío mira como me tienes no hay que ser!!!!!

Al sentir su pene bien parado en mis nalgas me incorporo y le digo que se esté quieto, él me jala y me planta un beso fuerte y apasionado que me quedé quieta y con los ojos de plato, pues no me lo esperaba, me aprieta de las nalgas hacia él para que sienta como está, y me dice no te voy a mentir me gustas mucho y de solo verte me excitas ya no aguanto mas cada vez que salimos a bailar me dejas con un dolor de pene tremendo, no seas mala alíviame un poco.

Le digo sabes que soy casada y conoces a mi esposo creo que no está bien, además si he provocado tu estado de ánimo no fue mi intención y si hemos……

Ahí me calló con otro beso tan apasionado y con sus caricias en mis pezones hizo que me empezara a mojar y correspondí a su beso entreabriendo mis labios el metió su lengua en mi boca y se trenzo a la mía, ya no aguanté mas y me abracé a él dejándome llevar, al ver mi entrega continuó desabrochando mi blusa y mi falda la cual cayó al piso, levanté mis piernas para zafármela, ahora sentía más su pene entre mis piernas punteando mi vulva y restregándomelo.

Baje mis manos y le desabroche el pantalón que sufrió el mismo fin que mi falda, me quito mis pantis y mi pantaleta de un solo jalón, mientras yo le quitaba el bóxer y sobaba todo lo largo de su pene que parecía reventar, con un glande amoratado y brillando por la secreción que tenía en la punta, no era muy grueso pero si bastante largo pues lo agarré con mis dos manos y sobraban como cinco centímetros y la cabeza, con un colgante escroto que se veía bien cargado.

Quise besarlo pero me volteo diciendo quiero ver tus nalgas mientras te lo meto.

me recargue en la mesa de trabajo y el abriendo mis glúteos dirigió su largo pene hacia mi vagina que lo recibió con gran apetito, centímetro a centímetro fue entrando como cuchillo en mantequilla, metía unos 5 centímetros y retiraba dos y así estuvo dándomelo hasta que lo introdujo por completo, en ese ir y venir de su pene por mi canal vaginal tuve un excelente orgasmo que hizo que me recargara completamente con mis brazos en la mesa, para no desfallecer, que rico sentía su pene entrar y salir de mi vagina en un movimiento constante, su calor invadiendo mis sentidos, me lo dejó todo adentro por unos segundos y después empezó a meterlo y sacarlo solo hasta la mitad para introducírmelo completamente en cada embestida, me daba tanto placer que empecé a gritar y gemir sin control pidiéndole mas y mas, cerré un poco mis piernas alrededor de semejante miembro para sentirlo mas, el golpeteo de sus bolas en mis piernas me hacían estremecer llegando a mi segundo orgasmo y él seguía al mismo ritmo agarrándome de mis nalgas marcando el ritmo del coito, que bien me lo estaba haciendo, ya estaba por llegar a mi tercer orgasmo cuando empezó a acelerar sus movimientos hasta que en un empujón final me lo dejó todo adentro eyaculando en mi interior fuertemente, era tal mi éxtasis que le apretaba su mano con tal fuerza que le dejé marcadas mis uñas en el dorso de su mano.

Sacó su miembro de mi vagina y lo restregó en mis nalgas dejándome en ellas las últimas gotas de su corrida; me voltie y lo bese en los labios diciéndole que fue muy rico como me lo hizo.

Me acomodé mi ropa y me fui al baño, cuando regresé estaba en la oficina platicando con Felipe, yo fui a mi escritorio a continuar con la facturación.

Salieron de la oficina y me dijeron dijeron que iban a entregar los extintores y a buscar nuevos clientes que si quería acompañarlos, les dije que si, cogí mi bolsa y los alcance en el auto, Alfonso se bajó para que yo me subiera en medio ya que en el asiento trasero y cajuela iban los extintores, hicimos las entregas y visitamos algunos prospectos, veníamos contentos pues hicimos tres nuevos clientes y recogimos otros extintores para recarga.

Felipe dijo que ya tenía hambre que si íbamos a comer algo, Alfonso y yo secundamos su idea y nos fuimos a comer a la Polar, es una cantina muy afamada, donde se bebe y come bien.

nos dieron una mesa y como era la hora del amigo al 2 x 1, ordenamos las bebidas e inmediatamente nos sirvieron el primer platillo, estuvimos comiendo y bebiendo estábamos muy entusiasmados y alegres, celebrando nuestros nuevos logros que se nos paso el tiempo sin darnos cuenta, Alfonso como siempre haciendo sus chistes y con cualquier pretexto brindábamos y me abrazaban o tocaban las piernas, entre la bebida sus toqueteos y el encuentro en la oficina con Alfonso estaba yo súper excitada, disfrutando plenamente su compañía, como a las 8 salimos de ahí y dice Alfonso vamos a bailar hoy hay dos orquestas buenas en la Maraka se me quedaron viendo y como el que calla otorga, nos fuimos al salón, cuando llegamos todavía no estaba lleno asi que ocupamos una buena mesa cerca de pista, yo ya estaba mareada y agradecí la idea de ir a bailar ya que ahí no venden mas que refresco y con la bailada me iba a recuperar rápido, empezaron a tocar salsa y como a mi me fascina le dije Alfonso que fuéramos a bailar el ni tardo ni perezoso me tomo de la mano y nos fuimos a la pista, bailaba una o dos piezas con cada uno, la estaba pasando genial, nos sentamos un rato fui al sanitario y al regresar ya estaba la otra orquesta y empezaron las calmadas, Felipe me sacó a bailar puso sus manos en mi cadera y yo las mías alrededor de su cuello nos movíamos con cadencia al ritmo de la música disimuladamente bajaba su mano hacia mis nalgas y como no le dije nada solo le miré ahí las dejo subía y bajaba una de ellas de mi espalda a mi nalga izquierda, la otra la mantenía cubriendo casi la totalidad de mi otra nalga, movía mi cabeza al son del ritmo quería disfrutar plenamente el momento sin importarme nada me quería sentir halagada y deseada y estos hombres me lo demostraban pues ya Felipe mostraba una considerable erección que por su altura de 1:80 me daba justo en mi ombligo, era una sensación excitante sentir el roce de su glande en mi ombligo como si tocara queriendo entrar, asi estuvimos bailando dos o tres piezas hasta que se acercó Alfonso y cogiéndome por la cintura le dijo a su hermano ya me toca bailar a mi.

Me resistí unos segundos de despegarme de Felipe sentía su pene palpitar en mi vientre y eso estaba logrando que me mojara nuevamente, me Giro Alfonso y poniendo su mano en mi cintura me acercó a él yo abrí ligeramente mis piernas y asi sentir su pene que a cada roce empezaba a despertar él es mas bajito asi que su paquete me daba exactamente en mi vulva y en la posición que bailaba con mis piernas medio abiertas sentía perfectamente su glande tocar mis labios vaginales y topar con mi clítoris que ya estaba excitado y como la tela de mi falda era muy delgada sentía perfectamente la forma de su glande pegado a mi vulva, a mitad de pieza ya no aguante y lo abrace fuertemente mordiendo mi puño para no emitir ningún sonido pues me estaba viniendo en plena pista, él se dio cuenta al recargar mi cabeza en su hombro y me sostenía de la cintura ya que mis piernas flaqueaban por momentos, al terminar la pieza fui al baño me quite las pntis y mi pantaleta estaba muy mojada, la limpie y seque en el seca manos, me las volví a poner y guardé mis pantis en la bolsa que estaban mas húmedas, regresé a la mesa, al levantarse Felipe para acomodar mi silla se dio cuenta que no llevaba medias y solo sonrió, no le di importancia y seguimos bailando y excitándonos los tres hasta que Felipe dijo que ya van casi a cerrar y pidió la cuenta.

Nos subimos al auto, iba en medio de ellos y al llegar a un alto acariciando mi pierna Felipe me dice sonriente ahora no nos puedes despreciar eh! nos debes una última copa, a lo que Alfonso completó diciendo vamos a mi departamento ahí tengo con que brindar, me encogí de hombros y les dije solo un ratito y me llevan a casa ya es tarde, pensé para mi “sigamos disfrutando esta, noche seguro no pasa de algunos escarceos y me voy a casa no creo que pase nada” ¡que equivocada estaba!!.

Llegamos a su casa, al estacionarse me dicen ya llegamos y posa su mano en mi pierna Felipe, abre la puerta para bajarse y al hacerlo veo que no quita la vista de mis piernas, voltie hacia mi y es que se me había subido de mas la falda hasta el borde de mis pantaletas, trate de acomodar mi falda para bajarme tras Alfonso que estiro su mano para ayudarme sin quitar la vista de mis piernas las cuales al deslizarme en el asiento para bajarme tuve que abrir dándole una visión perfecta de mis partes intimas, dije entre mi no vio más de lo que ya probó y me baje del auto, dándole las gracias.

subimos a su departamento una sala muy bonita con una pequeña cantina que el mayor abrió y sirvió las copas, nos sentamos en el sofá y platicábamos de la buena música que había en el salón, en eso volteo a un lado y Alfonso se había dormido, nos reímos y en eso Felipe aprovecha me acerca a él y me besa yo al principio me sorprendí pero fue un beso tan rico el que me dio que le correspondí abriendo mi boca dando paso a su lengua que se enlazó a la mía, empezó a bajar sus manos por mi espalda hasta mis caderas, posando luego una en mis piernas y otra en uno de mis senos, que rico besaba este hombre y yo que tenía tiempo sin sexo imagínate como estaba ufff

Se despego de mi y tomándome de las manos me indico que nos paráramos en silencio y nos dirigimos a la habitación, yo estaba tan excitada con todo lo sucedido que no puse ninguna opción el paso ya estaba dado. emparejó la puerta y nos abrazamos, sentía yo su excitación en mi vientre, empezó a desabrocharme la blusa y besar mis senos mientras yo le desabrochaba el pantalón que cayó al suelo dejando ver un abultado bóxer, empecé a sobárselo de arriba abajo, apretando levemente sus testículos, estaba súper excitada ya quería que me penetrara, me quito la blusa y la falda yo le ayudé quitándome mi ropa interior, me subí a la cama lista para recibirle, pero él me jalo de las piernas poniéndome en la orilla de la cama e hincado empezó a darme una lamida de vulva que ay Dios me hizo terminar con solo pasar su lengua a lo largo de mi vagina, jugo un rato con mi clítoris mientras yo no dejaba de mover mi cabeza lado a lado mientras ligaba otro orgasmo, hasta que le dije ven ya dámelo!!!

Se quito el bóxer que cosa más bella un pene liso curvado hacia arriba que dejaba ver una enorme bolsa bien cargada y un glande amoratado chato, delicioso!!!

se colocó en medio de mis piernas y de un envión me introdujo más de medio miembro, que me hizo arquear mi espalda y exclamar un pequeño gemido ahhh, comenzó con un delicioso mete y saca retiraba su pene hasta el glande y me lo introducía completamente hasta sentir golpear mis nalgas con su escroto. Así estuvimos un buen rato como aguantaba este hombre me seguía lime y lime y no terminaba, cambiamos de postura me giró y entonces yo lo cabalgaba, yo tenía mi tercer orgasmo y él seguía sin terminar acariciando mis pezones, en eso siento unas manos que acarician mis nalgas era su hermano, había entrado sin hacer ruido, volteo y lo veo totalmente desnudo y agarrándose el pene lo pone en la entrada de mi ano y sin decir nada empieza a introducirlo mientras Felipe me abrazaba recostándome en su pecho para facilitar la penetración anal, nunca había sentido dos penes dentro de mí al mismo tiempo, y empezó a avanzar lentamente y llenando por completo mi ano que sensación tan deliciosa y excitante sentir dos penes apenas separados por una membrana llenándome por completo.

Empezaron a alternar sus movimientos en lo que uno se movía el otro me acariciaba, así me estuvieron cogiendo por varios minutos hasta que se vinieron dentro de mí, primero en mi vagina que recibió tres fuertes y abundantes chorros , era bastante lo que me deposito que sentía totalmente inundada mi vagina, cuando dejo de moverse Alfonso empezó un frenético mete y saca en mi ano que me hizo sentir un placer tan grande que termine junto con él en mi cuarto orgasmo de la noche.

Nos acostamos los tres en la cama y nos quedamos dormidos, con la mano de cada uno sobre mis senos y yo acariciando sus flácidos penes