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Placentero y cruel castigo (3)

en Confesiones

Placentero y Cruel castigo (3)

La pregunta que siempre es la que a un hombre o mujer ponen en una situación de desventaja es aquella que dice "¿Te gusto?". La razón es muy variada pero la verdadera pregunta es "¿En realidad te gusto, te satisfacío?".

Mi compañera ahora mi novia vestida únicamente por ese mallon negro y esa camisa del mismo color hasta medio muslo, pelo suelto, descalza, de un traserito hermoso, pechos discretos y bien formados me quería confesar algo que en ese momento aclararía el por que no era virgen aunque no hubiese estado antes con ningún hombre hasta ese día que estuvo conmigo. Comenzó su relato mas o menos así.

Hace dos años después de mi fiesta de 15 años antes de entrar a la escuela mis 4 primas y yo quedamos solas en esta casa. Mis primas todas tenemos mas o menos la misma edad sin embargo una de ellas es de una comunidad protestante tradicionalista de esas del norte creo que se llaman Gnósticos o algo así.

Todas excepto ella estábamos vestidas aun con el vestido de cóctel, y ella con una falda negra, camisa blanca de manga larga y cuello cerrado con un pequeño chaleco negro también nos sentamos en mi cuarto que en ese momento no tenia cama pues la sacamos para mis tíos y poder dormir todas a gusto en el cuarto. La verdad todas le echábamos carrilla hasta que se nos ocurrió lanzar un juego de retos.

Te reto a que no te quitas el chaleco (Prima G (gnóstica)se lo quito)

Te reto a que no te quitas tu bra (me lo quite)

Te reto a que no te quitas tu falda (Prima 1 se la quito)

Te reto a que no te quitas las medias (Prima 2 se las quito)

Y así seguimos hasta que quedamos la mayoría de nosotras con solo una prenda, nuestras pantaletas, estábamos risa y risa comparándonos cuando mi prima G dijo el ultimo reto, las reto a que se quiten todo. Y todas risa y risa nos quitamos todo y se las aventamos en son de protesta y ella también se quedo desnuda. Tomo una almohada y empezó la pelea durante un buen rato, se sentía sabroso con esas almohadas suaves sobre nuestro cuerpo y durante la pelea no era raro el roce entre nosotras por el estar corriendo unas atrás de las otras.

Ya bastante cansadas mi prima 3 dijo -las reto a que se duerman desnudas- y así preparamos todo y dormimos como Dios nos trajo al mundo. Al otro día mis 3 primas se fueron a mediodía, mi prima G no se iría sino hasta dentro de 15 días pues su papas estaban en una preparación para una celebración. Al tercer día de estancia de mi prima ella y yo nos llevábamos bien y éramos buenas amigas e incipientemente confidentes. A los seis días mis papas nos dieron la noticia de que se iban a ir 4 días a una junta de trabajo y mi mama lo iba a acompañar así que nos quedamos solas en casa.

En la noche mi prima retomo el juego de los retos y las dos acabamos desnudas de nuevo, peleamos de nuevo con las almohadas y nos dormimos así o al menos pensé que ella se durmió.

Mi prima se debió levantar a algo y yo acostumbrada a dormir a mis anchas me di la vuelta y quede boca arriba cubierta solo por una sabana, cuando de repente me despertó una sensación de creciente calor y placer en mi intimidad y cuando intente moverme me di cuenta de que mi prima estaba debajo de la sabana probándome con su lengua, ella era la primera persona que me tocaba ahí y yo aunque quise decirle algo ella se dio cuenta de que había despertado y se empeño aun mas y su lengua se metió dentro de mi, lo cual hizo que me estremeciera de placer y en ese momento oí – te reto a que hagas lo mismo. Nos acomodamos cada una de lado con la cara en la entrepierna y empezamos a probarnos, ella era mas que experta y lo hacia con una vehemencia terrible mientras yo trataba de probarla al máximo y así estuvimos un buen rato hasta que ya no pude aguantar mas y me vine por primera vez, se separo de mi y vio como estaba sudando y respirando fuerte.

Sin mas mi prima saco un consolador que traía guardado y creo que había comprado en el tianguis al que fuimos dos días antes, en un momento que la perdí de vista. – Prima te voy a confesar algo. Apenas logre mover la cabeza pues estaba muy exhausta. – Me voy a casar cuando regrese, si ya se que soy joven pero allá así se acostumbre pero antes de casarme quiero disfrutar y te voy a confesar que a mi me gustan las mujeres y no pienso dejar que un hombre sea el que me robe mi virginidad. ¿Me ayudarías?.

No se por que realmente me senté, me acerque a mi prima y la empecé a besar tan apasionadamente, lo único que se es que sentía la imperiosa necesidad de ella en ese momento. Sin embargo ella se hincó ante mi y me pidió un favor que me marcaría y fue que quería ser totalmente dominada y quería que fuera de una manera tranquila y muy pensada por eso se fue a bañar no sin antes hacerme prometer que mañana por la noche le haría realidad su fantasía y para ello me dio un maletín negro.

Cual seria mi sorpresa que ahí venían otros dos consoladores uno simple y uno doble, cuatro pares de esposas, ropa muy sensual toda de cuero, así como amarres de cuero, vendas para los ojos y por si fuera poco había un body de cuerpo entero hecho de tela de media negra y completamente semitransparente. Así como algunos juguetes en su empaque y con su instructivo.

El día paso normalmente mientras yo tenia algunas ideas para preparar todo aunque no había pensado cada detalle tenia una muy buena idea.

Prepare la comida y en su vaso de naranja le puse el contenido de dos pastillas contra insomnio que mi papa toma de vez en cuando. Simplemente se lo tomo y a los quince minutos empezó a tener sueño y se quedo recargada en la silla. Mi prima no pesaba mucho pero aun así me costo llevarla a la sala donde la recosté en la alfombra.

Primero lo primero dije y la desnude toda, me quede observándola y entendí que su cuerpo era bellísimo y eso me excitó demasiado. Baje el maletín de mi cuarto y le puse un top de cuero amarrado al frente, un liguero de seda negra muy ajustado con unas medias hasta arriba de la rodilla, le agregue entonces a su vestimenta un par de botas negras, le vende los ojos de antemano y mediante la lleve haciendo uso de toda mi fuerza hacia la separación de la cocina que es de un arco de hierro resistente. Le puse en sus muñecas un par de muñequeras atléticas y la espose con un par de esposas tratando de no lastimarla mucho, le coloque las manos esposadas al arco, y le acerque una pequeña escalera para que se recargara, después tome sus piernas y las ate separadas mediante las esposas. Y mientras despertaba me fui a cambiar, me quite todo y me puse el Body transparente únicamente.

Por fin como 25 minutos después de haber recogido todo y habiéndolo preparado, comenzó a despertar.

Continua. ....