miprimita.com

Vacaciones

en Gays

Llevaba saliendo con mi novio 5 meses, Thomas nunca fue un chico escultural, pero compartíamos residencia, teníamos cosas en común, lo que se suele decir y mirar cuando tu novio físicamente no te pone, pero es un chico con el que congenio, hacía muy poco que acababa de ingresar en la Villa Universitaria, tengo 18 años, para que os hagáis una idea, yo soy mulato, mi moreno no es muy oscuro, tengo los ojos color miel, las labios gruesos mido 1,78 y peso 72 kilos, mi cuerpo esta fibrado debido al baile que hago a diario, con cara de niño de 14 años, el pelo muy corto anillado y suelen decir de mi que tengo una mirada muy expresiva. Thomas tiene la piel blanca, mide 1,80, es rubio y tienes los ojos verdes. Su cuerpo, como ya dije no era escultural, delgado eso si. Yo diría que se encuentra en el montón grande, él y yo pertenecemos a los cerebritos. No era algo que me hiciera especial ilusión, porque la verdad no me considero un friqui, ni un empollón, pero mi dificultad para relacionarme, esta unida a la timidez que por desgracia tengo. A mis 18 años y todavía sin haber mantenido sexo, era otra de las cosas que no me gustaba, pero con Thomas me llegaría la oportunidad pronto. Esa ocasión se dio, cuando llegó lo que llaman " El día del aniversario " Consiste en lo que se llama de toda la vida ir de excursión con los compañeros de la Villa, un complejo rural donde estaríamos 7 días. Pagando la cuota, podías estar desde uno solo en la cabaña, hasta cuatro personas, Thomas y yo la cogimos para nosotros dos. No me apetecía ir de excursión con los compañeros de la Villa, pero yo solo pensaba en estar con Thomas a solas en esa cabaña. Cuando llegamos dejamos el equipaje en la cabaña, era bonita y muy bien preparada. Con un montón de cosas por hacer y con Thomas con ganas de realizarlas, sabía que el sexo se pospondría para la noche, pero después de 5 meses, unas horas más no sería un problema. Llegamos a las 8 de la mañana, desayunamos montamos a caballo, etc... Comimos pronto y nos fuimos por el río en barca, llevábamos poco tiempo por el río, cuando el grupo de Pablo, Manu y Omar se acercó a nosotros, Manu se pasó a nuestra barca.

- ¿Qué hacéis por aquí chavales? - Pregunto Pablo con ese tono de burla de "los chulitos" de la Villa. Siempre iban juntos, pertenecían al equipo de Basket del la Villa.

- ¿Eso me pregunto yo? - Dijo Thomas algo molesto por esa forma de llegar nuestra barca como si fuéramos amigos, cogiéndose confianzas que obviamente entre nosotros no existían.

- No te pongas así - Dijo Manu - Solo hemos venido a divertirnos ¿Verdad muchachos? - Preguntó a los otros que respondieron a su pregunta afirmando entre risas.

- Hagamos una carrera, mira cabrones yo con él solo y os ganamos a vosotros 3 capullos. - Dijo Omar mientras se sentaba a mi lado, agarrando los remos.

- Venga si. - Dijo Pablo.

- Vosotros hacer lo que queráis pero a nosotros dejarnos en paz. - Les dije.

- Solo es una carrera, tienes miedo de perder. - Mencionó Manu.

- No tengo ganas echar una carrera. -Repliqué.

- Puede ser divertido - Dijo mi novio subiéndose a la otra barca. Yo me quedé atónito eran los mismos tíos que el la Villa se metían con él. ¿Por qué ahora iban a ser diferentes? Manu se pasó a la otra barca y Omar se quedó sentado a mi lado. Después de la reacción de Thomas, yo me encontraba ahí, en la dichosa barca con un negro de dos metros remando. Yo me encontraba de cara a Omar, de espaldas a los demás y lo que venía, ya que a Omar le sobraba con él sólito para remar, como yo dije no quería y eso no iba a cambiar porque Thomas si quisiese hacer la dichosa carrera. En el río había un saliente de roca, que dividía el camino en dos, como iba de espaldas no me di cuenta, hasta que comencé a ver la pared de roca. Miré hacía delante y el río se encontraba divido todo lo que me alcanzaba la vista, Omar continuaba remando...

- ¿Qué haces?¿Por qué te has metido por aquí?

- Tranquilo se donde estoy. - Respondió.

- A mi me da igual donde tu estés y lo que sepas vuelve por el camino de ellos. - Le dije malhumorado.

- ¿Y perder la oportunidad de ganar? No - Seguía remando.

- ¡He dicho que volvamos! - Le dije enfurruñado.No me hizo el menor caso y siguió remando, pese a que yo continué replicando, él pareció no escucharme. Paro de remar, supuse que ya había asumido que no sabía donde estábamos. Dejó los remos y se quitó la camiseta marcando una tableta de chocolate y en este caso con el color de su piel, chocolate puro y el sudor le impregnaba el pecho.

- Al fin te diste cuenta que estamos perdidos, hay que volver. - Le dije

- No estamos perdidos.

- Y dale que cabezón er... - No terminé la frase porque me agarro de la camiseta y comenzó a morrearme violento.Me separé rápido de él.

- ¿Qué coño haces? Quita.

- ¿Crees que me importa algo la mierda de carrera? - Se mordió el labio inferior mirándome.

- Pues a mi menos, vayámonos ya de aquí y olvídate de mí - Le dije alzando mi vista y levantando una ceja.

- Nos iremos cuando acabemos. Me quitó a la fuerza mi sudadera y rajó mi camiseta interior.

- Para, estate quieto... - Dije intentado levantarme.

- Ese gilipollas no sabe darte lo que necesitas - Se sobaba el paquete mientras decía eso.

-¡Déjame! - Dije hiendome a un rincón de la barca.

- Solo quiero hacerte disfrutar. - Me echó sobre el suelo de la barca a la fuerza y a estirones comenzó a quitarme el pantalón y me descalzó. Yo forcejeaba con el en vano. Era una bestia a mi lado, quedé en slips blancos, poco tardó él en quedarse en boxer negro, pegó su paquete al mío, noté la presión de él sobre mí, su bulto duro pegado contra el mío, sus manos agarraban mis muñecas por encima de mi cabeza, mientras me comía el cuello.

- Para, no sigas, para... - Cuanto más se lo decía mas cardíaco se ponía, mas me chupaba y comenzó a lamer mis pezones, atrapaba uno entre sus dientes y luego hacía lo mismo con el otro. Dios mío me estaba encantando que lo hiciera, no me sentía bien con eso, era como si estuviera engañando a Thomas. Su lengua recorría todo mi abdomen, me quitó los slips dejando a relucir mi miembro semierecto, me miró con mucha pícardia acompañado de una sonrisa picante, lo agarró y se metió mi miembro en la boca, lo sentí en su garganta.

- Aah - Se me escapó un gemido, que intentaba contener. Siguió chupando, succionando mi miembro, presionando sus labios, haciendo que gimiera de manera continua, mire hacía el cielo, era sencillo ver el azul del cielo acostado en la barca, me sentía como en una nube, me estaba gustando lo que me hacía pero no podía dárselo a entender, me limite a guardar silencio, disfrutando de esas sensaciones que desconocía. Aunque mi boca no hablara, mi cuerpo si, sudaba, mi respiración se agitaba, mi pulso se me aceleraba y no pudo evitar que mi cuerpo vibrara, cada vez que sus dedos se paseaban por mis muslos. Seguió lamiendo mi miembro, mientras comenzó acariciar mi ano con las yemas de sus dedos. Subió hasta mi boca y me morreo, fue una sensación rara notar mi sabor en su boca, pero le respondí a ese morreo que estaba ansiando.

- ¿Te gusta? - Susurró suavemente.

- Si... - Se hizo un silencio mientras nos morreamos, escuchaba los pájaros, el ruido del caudal del agua y nuestras respiraciones. Mis piernas se cruzaban a la altura de su cintura, mis manos recorrían su espalda ancha. Me puse sobre él, le besé los labios, recorrí su pecho imitándole un poco, besé sus abdominales y tiré del elástico de su boxer, dejando salir a un miembro que me asombró, se notaban las venas bien marcadas, un tronco más ancho que la cabeza y el más ancho que había visto. Aunque no tuviera experiencia sexual , si había visto algunos compañeros desnudos. Me lo metí a la boca algo torpe y sin poder abarcar un poco menos de la mitad de ese miembro en mi boca. Comencé a darle lametones y comencé a escuchar sus gemidos, cerré mis ojos sabía que me estaba mirando y no era capaz de mantener esa mirada. Empecé a succionar la cabeza de ese descomunal miembro, mientras lo pajeaba con mis dos manos. Después de un rato así, él me apartó y me puso de espaldas a él, con mis manos apoyadas en el suelo de la barca, abrió mis nalgas con sus grandes manos y comenzó a lamer mi ano. Notaba como su lengua entraba y salía de mi interior mientras, sus dientes se agarraban a la entrada de mi ano.

- Aaaaaah ohhhh mmmmmmmmmmmmm... Ufff - No podía parar de gemir. - No me... Ah... han... mmmmm... follado nunca... Aaahhhh. Se separó de mi - Lo sé.

Continuo lamiéndome y metió un dedo en mi culo, metiendo y sacando el dedo, metió otro más, yo me estremecía, consiguió meter 3 sin problema, cuando puso la cabeza de su miembro en la entrada de mi ano, volví a caer en la cuenta.

- ¡Me vas ha reventar con ese pollón! - Me giró sobre la barca quedando mi espalda sobre el suelo.

- Relájate, sigue como hasta ahora. - Me acariciaba el pecho y el abdomen.

Con cada una de mis piernas a cada lado de su cintura, mis manos acariciando su vientre, su miembro en la entrada de mi ano. Comenzó a penetrarme suave, clave mi dedos en su cadera, notaba como su barra de carne se abría paso en mi ano.

-Aaaaaaargg.... Omar...mmmm

-Así así, mmmm....

Cuando al fin su pelvis se pegó a mi cuerpo dejando aquel mástil hundido en mi interior, me morreo y pasó sus manos por debajo de mis omóplatos, dejándo su miembro dentro de mí, sentía como palpitaba en mi interior, comenzó a dar suaves movimientos circulares. Yo gemía sin creer que esa monstruosidad estuviera dentro de mí.

La comenzó a sacar suave y meterla suave, el ritmo fue aumentando más y más, hasta que se convirtió en una penetración continua, nuestros gemido y sudor se mezclaban, notaba con mi frente y mi cabeza estaba empapada en sudor, nuestros cuerpos pegados, la penetración empezó a ser más intensa, mis gemidos muchos más sonoros, esa barra de carne me tenía emparedado, en aquel momento no lo entendí, sin tocarme comencé a correrme llenando de semen nuestros vientres, sus embestidas eran frenéticas, clave mis uñas en su espalda dejando un hilo enrojecido a su paso y mis dientes en su pecho, tenía a ese macho entre mi piernas haciéndome enloquecer, haciendo que quisiera más y quería marcarlo como mío.

- Aaaaaaah oooooh - Sus gemidos fueron acompañados de su semen que noté en mi interior.

- No la saques, quiero tenerte en mis entrañas. - Al decirle esto Omar se pegó a mi cuerpo, descargó todo su semen dentro de mí, mientras me morreaba bruscamente y me manoseaba de forma bruta. Yo disfrutaba de él, me encantaba tenerle así. Mordí su labio inferior con fuerza mientras nos morreábamos, la sensación de que era mi macho me volvía loco.Acabamos echados sobre la barca desnudos, apoye mi cabeza en su pecho, moviendo mis dedos sobre él, los sonidos de la naturaleza era lo único que escuchaba y el latido de su corazón como bajaba el ritmo poco a poco. Sus grandes manos me agarraban contra él con fuerza. Después de eso nos dimos un baño en el río, nos vestimos y volvimos a complejo rural.

Puse de excusa a Thomas que nos habíamos perdido y que estaba muy cansado. Esa noche no tuve sexo con mi novio. Me quedé durmiendo pensando en cada instante vivido con Omar...