Para no perder el hilo conductor puse un párrafo del capítulo anterior... Intentaré mantener la primera persona, espero no cometer nuevamente el fallo, aquí cambio a primera persona:

Regresé al cuarto cuando Ani se encontraba en el baño cambiándose, por lo que me cambié en el cuarto, aún podía notar el olor a sexo en el ambiente, lo que motivó que me recordara como había perdido su virginidad con tía Silvia, mi “amiguito” volvió a asomar y levantar una significativa carpa en su pijama, cuando de pronto se abre la puerta y sale Ani del baño, tuve que girarme para ocultar mi erección.

• Veo que estamos contentos, ¿fue acaso la función doble o es que me espiaste?
• Tal vez las dos cosas
• Bueno lávate los dientes para que nos acostemos dijo Ani.
• No creo que sea conveniente estar juntos en mi actual estado, dije sinceramente.
• Tranquilo, no te tengo miedo y se cómo controlarte pardillo, dijo sonriendo.
• Insisto que sería mejor que me acueste en mi cama yendo a lavarme los dientes.
• Me da miedo y frio estar abajo sola.
• ¿Miedo de qué?
• De que entre alguien y quiera aprovecharse de mi, dijo con toda sinceridad.
• Pero si estoy yo arriba de ti.
• Pero igual....

Capítulo 5: Dos Pardillos Sin Control

Nos acostamos, yo pegado al muro pues Ani le gustaba estar cerca del baño, ella me pidió que la abrazara y me empezó a comentar lo buena y excitante que encontró la función que fuimos a ver, empecé a calentarme rememorando todo lo vivido, mi verga se puso dura y tiesa como una barra de acero, pero a diferencia de otras veces, sin más miramientos se la puse en el culo, ella ex-profeso se echó para atrás, pienso que quería sentirla entre sus cachetes y el inicio de su rajita,…!Ani también estaba excitada¡…al haberme liberado de mi virginidad y timidez hace solo unas pocas horas quité todo freno moral posible, le tomé las tetas con ambas manos simulando el coito, ambos comenzamos a agitar nuestra respiración, Ani se estiró y apagó la luz, aproveché para bajarle los pantaloncillos del pijama, ella quiso decir no o eso pensé, pero la tomé por la cintura y le acomodé mi verga que ya tenía libre, comencé a pasarla por la rajita sin intentar metérsela, ella solo gemía, volví a tomarle las tetas liberándolas de su encierro y comenzó a estimular los pezones que prontamente se volvieron duros como garbanzos.

Ani giró su cabeza para besarme, ambos nos encontramos iniciando un caliente beso francés, comencé a bajar un poco con la intención de meterle mi verga, pero ella me dijo:

• Hay primito, no podemos, soy virgen y no tomo ninguna precaución.
• Pero solo la puntita, nada más.
• Esa frase en la actualidad no la cree nadie y menos yo, pero te propongo algo que puede ser satisfactorio para los dos, girándose completamente para encararme.
• ¿Qué sería?, le dije mientras me dirigía a chuparle las tetas por primera vez.
• Una vez una amiga me explicó como se hace un 69, creo que eso nos dejará contentos y relajados.
• ¿¡En serio!!??
• Sí, en serio, estoy muy caliente y quiero relajarme.
• Si estás tan segura hagámoslo.
• Yo arriba y tu abajo, pues tu verga es muy grande y quiero poder respirar dijo riéndose de su ocurrencia

Rápidamente nos colocamos en posición, siendo ella la que se metió mi verga en la boca sin mayor dilación, acomodé la almohada para comenzar mi primera comida de coño, el sabor no me agradó, pero pensé que valía la pena el sacrificio, de pronto descubrí el clítoris de Ani y se lo lamí sin compasión, aproveché de sobarle el culo y las tetas las cuales me tenían loco con su roce contra mi estómago, si bien Ani no tiene experiencia en hacer mamadas, tiene el instinto y me lame el tronco de la verga, intenta tragársela toda pero no puede, en fin se esmera en darme placer, yo tampoco tengo mucha experiencia, pero los cuentos de colegio más mi imaginación hacen que le meta mi lengua lo más adentro posible de su vagina, sumando a el ataque mis dedos índice y medio, en un momento se me ocurre masajearle el ojete del culo, sin dejar de estar sumergiendo con mi boca en su monte de Venus, ambos estamos desenfrenados, pasan unos breves minutos y siento que estoy a punto de estallar en un orgasmo, pero creo que ambos estamos en lo mismo, lo noto por los mutuos gemidos y suspiros…. De pronto ella se sumerge en un gran orgasmo que le impide seguir mamando mi verga, comienza a gemir y gritar sin control.

• ¡Aahhh!!!,….¡me corro, me corro!,….sigue así, ¡sigue!
• Calla que nos van a escuchar de los otros departamentos, le digo asustado
• Mmhh…..dale, dale, …..¡me corroooo!!! dice casi como un susurro

Ani cae derrengada sobre mi, sin fuerzas pero aun tomada de mi verga, pese a la poca luz que entra por la ventana la veo sudorosa y casi exánime., me comienzo a preocupar, pienso que Ani se desmayó o le dio un ataque de algo, lo que no sabía hasta ese minuto que Ani es multiorgásmica y que su orgasmo no fue uno si no una riada de ellos.

• ¿Estás bien Ani?... ¿Te pasa algo?
• Si…estoy bien, no quise gritar pero me salió del alma….nunca pensé que esto fuera así...tan…intenso, fue como una avalancha.
• Estas segura que estas bien.
• Si mi amor,...estoy bien, pero tu todavía estas tieso, se le salió a Ani.
• Sí, pero no importa.
• A mí me importa, te voy a ayudar déjamelo a mí. Comenzó a pajearme la verga acomodándose para le pudiese comer las tetas, pese a lo sensible que se encuentra.

Le chupo con deleite las preciosas tetas, que maravilla de tetas, tengo un fugaz recuerdo de las tetas de su madre, me excito aún más si se puede, el morbo aumenta mi rigidez, comienzo a sentir la llegada  del postergado orgasmo, mientras Ani me pajea, le digo:

• Hay que rico Ani, sigue así que me corro,… ¡me corro!
• ¿Qué hago con tu leche?, dime… no quiero manchar la cama.
• Trágatela,…trágatela.
• Nunca lo he hecho… ¿y si no me gusta?
• No lo sé, ahora lo descubrirás,…me corro, me corro, dale….dale.

Ani algo dubitativa se volvió hacia mi afiebrada verga, de pronto me corrí soltando siete lechazos consecutivos, con distinta intensidad, unos cayeron en la cara otros en la boca y el cuello. Ani se tragó parte de la carga, demostrando asco por el sabor ocre de mi simiente y me dijo

• ¡Uaghh que asco!, arrugando la cara
• No puede ser tan malo, dije
• Tú no la probaste, alegó Ani.
• Pero probé tu flujo Vaginal, que no es para nada sabroso, contraataqué.
• Bueno intercambiemos sabores dijo ella.
• ¿Estás bromeando?
• No, solo emparejando las cosas
• Bueno como lo hacemos.
• Yo guardaré el tuyo en mi boca y nos besamos y tú haces lo mismo con el mío.
• Ok acepto, ella juntó lo caído en su cara y me limpió la verga juntando los restos y procedió a besarme con lengua.
• Ahhgg, tienes razón no es muy bueno. Ahora te toca a ti, me agaché para pasar la lengua por su coñito, notando que se le erizaron los vellitos del cuerpo y gimió.

Acto seguido con el extraño sabor en la boca la besé traspasando los restos de su flujo vaginal, el que se mezcló con el sabor a mi leche, ella también reaccionó con asco, por lo que ambos nos reímos diciendo

• Jajaja ¡Qué cochino somos!!!
• Sí pero eres una deliciosa cochina, tenemos que ir a lavarnos la boca.
• Gracias tú también eres un delicios cochino, puagh….jajajaja.
• Sí y piensa que con las mismas boquitas besamos a nuestras madres.
• No sea ridículo, yo nunca besaría a mi madre con la boca enlechada.
• Aún no…..pero tal vez.
• Eres un degenerado….como se te ocurre.
• Solo es broma, no lo haremos

Luego de lavarnos la boca, nos dormimos abrazados hasta avanzada la mañana, como de costumbre me desperté con la verga erecta, pero a diferencia de las veces anteriores, me giré hacia mi bella prima pasándosela por la rajita, la bella durmiente inicialmente se sobresaltó por la incursión, pero prontamente cayó en mi juego y empezamos a acariciarnos y besarnos, no era fácil pues ella me daba la espalda, al poco andar dada la incomodidad, Ani se giró y posicionó mi erecta verga entre sus piernas por sobre su pantaloncillo, creo que para nuevamente sentir mi dureza, mientras le chupaba las tetas con fruición y le amasaba el culo, desviando ocasionalmente mis manos a su Monte de Venus, la temperatura ya estaba demasiado alta por lo que le bajé el pantaloncillo, pero Ani me detuvo:

• Si seguimos así me lo vas a meter y correremos el riesgo de que me embaraces
• ¡Es que es tan rico!!
• Sí, pero yo no quiero quedar embarazada antes de ingresar a la universidad y tú tampoco, me encantaría pero no podemos
• ¿Cuándo podremos?
• Mira Claudito corazón, hoy a alguna hora puedes comprar unos condones y en la noche me entrego a ti.
• En serio,…estás segura
• Segurísima, no sabes lo caliente que me pones, no puedo resistirme a ti y ya no aguanto más tus caricias, lo único en que pienso es que me la metas.
• Entiendo, para mí también es difícil.
• Qué bueno que entiendas, será mejor que vayamos a ducharnos para que se baje nuestra calentura.

Nos metimos en la estrecha ducha del cuarto de servicio, era inevitable que nos tocáramos, además lo que el agua tibia no fue solución al problema, comencé a acariciarla por completo hasta que ella me pidió que me calmara, de ahí en adelante me aguanté manteniéndome solo con besos y algunas caricias con la esperanza de que en la noche todo cambiaría.

En el desayuno nos encontramos con el resto de la familia, me bajó una sensación de culpa y vergüenza al momento de saludar a todas sus “parientas”, pero rápidamente continué como si todo fuera normal conversando trivialidades. La charla siguió hasta que todas acordaron salir a pasear por la pequeña ciudad con solo la excepción de tía María, que se quedaría a cocinar el almuerzo y la cena de la noche, se me ocurrió que era la oportunidad para desembarazarme del resto de las mujeres para ir a comprar los condones que necesitaba.

• Yo me quedo para ayudar a tía María e ir a comprar lo que haga falta
• Si buena idea dijo Ani, apoyando lo dicho.
• Hay gracias corazón dijo tía María.
• Bueno nosotras salimos después de dejar todo ordenado dijo Silvia mirando con cara de sospecha mi actitud.