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Como Cambió Mi Vida: Capítulo 9

en Grandes Relatos

Capítulo 9: Ani asume el control de las novias de los “Militares” y de mi Hermana

Sin saber cómo, nuestro paseo nos llevó a la misma tienda de los trajes de baño que no me atreví a regalar a mis parientes, que casualmente era la tienda favorita de todas las chicas, pienso que tal vez estaba de moda. Por la hora aún no llegaba toda la afluencia de público, al solo entrar, la dependiente que los había atendido la vez anterior nos reconoció y con una gran sonrisa me saludo diciéndome:

  • Veo que trajo a sus parientes.
  • Claudio: Solo algunas contesté sin sacarla del error, todas han venido a comprar lencería, espero que nos atienda muy bien.
  • Dependiente: Por supuesto, si me permiten sugerirles algunas novedades, quedarán todos felices, vengan conmigo, en esos canastos encontrarán prendas traídas de Brasil a muy buen precio, a jovencitas como ustedes les quedarán muy bien. Cualquier cosa me llaman y después de eso se marchó.
  • Chicas: gracias.
  • Biocha: Miren son casi nada, se me van a ver todas las presas, jajaja.
  • Ani: Así volverás loco a Francisco, jajaja.
  • Montse: Pero son muy pequeñas, no sé si podría ponerme algo así.
  • Ani: No seas tonta, dejaras loco a Juan, te lo aseguro, ¿Qué opinas Claudio?
  • Claudio: Me encantaría poder verlas con eso puesto, jajaja.
  • Ani: Yo te muestro las mías, ¿no sé si ellas querrán lo mismo?

Las chicas empezaron a buscar y elegir lo que querían llevar, mientras yo las miraba bastante aburrido, tanto que comencé a analizarlas, primero cual era la más destapada o desenfadada para vestir, indudablemente Biocha y luego Ani, asimismo, intentaba imaginar ¿cómo serían sus tetas?, claro que las de Ani las conocía de memoria, en el caso de Biocha podía presumir que eran las más grandes, luego comparaba las de Ani con las de Montse; las de esta última las suponía una mezcla de doña Montserrat y Ani, luego les miraba el culito y me preguntaba ¿cómo serían en la cama?, en eso Ani me devolvió a la realidad ya que las tres tomando lo elegido me llamaron para que les diera mi opinión, me quedé a la expectativa luego que las tres se metieron a un probador que era un poco más grande que los comunes, algo así como familiar. Yo las aguardaba aún más aburrido afuera, cuando de pronto Ani se asomó y me dijo:

  • Ven que estamos listas para modelar
  • Claudio: Voy, dije ni corto ni perezoso, estaba autorizado por mi novia.
  • Claudio: Guau están tremendas dije al entrar y verlas con unos conjuntos de sujetadores y bragas mínimos, que apenas lograban mantener las redondeces de las chicas cubiertas y adentro.
  • Biocha: Jejeje, sabía que lo íbamos a impresionar.
  • Ani: Si y tal vez lo logremos calentar también, besándome profundamente.
  • Montse: Pero Ani, nosotras estamos de novias con tus parientes, dijo avergonzada.
  • Biocha: Pero los tontos se fueron de vacaciones dejándonos aquí y no nos verán hasta el fin del verano, porque luego nosotras partiremos agregó.
  • Montse: Eso es cierto, pero exhibirme así delante de Claudio….
  • Ani: Ay no sea tonta, para que vean que soy buena, compartiré mi novio con ustedes, dijo sorprendiéndonos a todos.
  • Montse: ¿Pero que dices Ani? expresó algo alterada.
  • Ani: Eso, que lo puedo compartir siempre que no se aprovechen del pobre que es solo mío.
  • Biocha: Entonces puedo besar a tu novio, dijo sonriendo y mirando a los ojos a Ani.

Ani asintió con la cabeza y Biocha ante tal autorización se me acercó besándome sin ningún tapujo, abriendo su boca para intercambiar nuestras lenguas; apenas pude reaccionar de la sorpresa, tomándola por su abundante culo, casi totalmente desnudo al vestir una tanga muy tanga, para atraerla hacia mí, pensando que la loca de mi novia quería escandalizarlas con mi actuación. Con todo descaro y sin cortarme en lo absoluto la pegué a mí, con la intención de que sintiera mi verga que ya formaba una carpa en mi pantalón. Montse nos miraba atónita pegada a uno de los lados del probador, mientras Ani sonreía al verme su novio morreaba a la exuberante Biocha.

  • Ani: Ahora le toca a Montse.
  • Montse: Pero yo no sé si pueda, tengo novio y no creo que esto le gustaría.
  • Biocha: No se lo diremos, no seas gallina, te aseguro que besa muy bien.
  • Ani: Si vamos, el es un estupendo besador.

Me acerqué a la frágil Montse y la besé con igual pasión que besé a su madre doña Montserrat, tomándole el culito que a diferencia de su progenitora era más reducido pero igualmente bien formado. Montse al principio intentó mantener la distancia y su boca cerrada ante mi lengua invasora, pero prontamente se vio superada por mi fogosidad y los comentarios de las otras dos chicas, lo que finalmente no solo permitió que mi lengua entrara, si no que también, mi verga dura como el acero se apoyara en su pubis; suspirando profundamente cuando me refregaba por sobre la rajita de su coñito que tapaba la diminuta tanga, tanto que se le humedeció y se le pegó a los labios mayores.

  • Ani: Bien niños, deténganse, jejeje… que debemos probarnos otro conjunto, así que sal un momento y regresa cuando te llamemos.
  • Biocha: Si te tendremos una nueva sorpresa dijo.
  • Claudio: ¿No puedo quedarme?
  • Biocha: No, en los desfiles de moda el público no entra a los vestidores, sal….
  • Claudio: Okey, salgo

Miré las caras de las chicas, Ani estaba divertida al ver que las otras dos estaban bajo su control, Bicha por su parte estaba colorada y con los ojos brillantes de deseo, en cambio Montse se notaba avergonzada pero aún así podía notar su calentura, salí como lo pidieron; al rato me llamaron y volví a entrar y como en un “deja bu” presencié como volvía a repetirse la escena anterior, con la diferencia que al entrar ahora pude ver a las chicas en esas diminutas tenidas que en esta ocasión, destacaban las areolas claramente notorias a través de la diminuta tela, las de Ani, ya las conocía, eran grandes y de un rosa pálido, las de Biocha también de una tonalidad y tamaño similar pero apuntando hacia abajo, y las de Montse pequeñas y de un tono algo más oscuro, en eso pensé que eran diferentes a las de su madre, pero indudablemente el espectáculo hacían que me maravillase de lo hermosas y bien dotadas que eran.

  • Ani: ¿Y qué te parecemos?
  • Claudio: Se ven preciosas, se les nota los pezones y la rajita de la concha, dije sintiéndome muy caliente.
  • Biocha: ¿Cuál te gusta más?
  • Claudio: Las tres son bellamente apetecibles.
  • Biocha: Te preguntaba por el conjunto no por nosotras. jajaja
  • Claudio: Preciosos también.
  • Ani: Mmm que diplomático y como estamos de culo dijo girándose.
  • Claudio: Uf, que les puedo decir, se ven preciosas, cada una en su estilo.
  • Biocha: Ani: tu novio quiere estar en paz con Dios y con el Diablo.
  • Ani: ¿Cuál es Dios y cuál el Diablo?
  • Biocha: La inocente Montse es la Diosa y nosotras el Diablo, jajaja.

Entonces me acerqué a Ani y besándola con pasión comencé a tocarla por su cola, luego en las tetas para finalmente chupárselas por sobre el diminuto sujetador; luego me giré hacia Biocha e hice lo mismo, ella lo aceptó sin decir nada mientras miraba a Ani, la que le tomó el culo y se lo amasaba mientras yo disfrutaba de los melones de la osada chica, teniendo como mudo testigo a Montse, mi calentura aumentó al máximo, dejándome llevar por la pasión, tomé la mano de Ani y se la puse en una de las tetas que no estaba ocupada por mi boca y mi novia comenzó a excitar sus pezones a dos dedos. Antes de llegar a mayores terminé mi comida de tetas con la exuberante descendiente de italianos, ella se giró en dirección a Montse y la tomó entre sus Brazos comenzando a morrearla sin que ella opusiera resistencia, Ani y yo nos miramos sorprendidos, Biocha ni se preocupó de nosotros hasta que tomando las tetas de Montse se las comenzó a chupar con fruición como si quisiera comérselas, mirándonos de reojo, Montse a su vez suspiraba mientras mantenía los ojos cerrados.

  • Ani: Bien niños, deténganse nuevamente, que tenemos que probarnos otro conjunto, repitiéndome lo anterior por lo que salí del probador.
  • Montse: Alcancé a escuchar que Montse les decía: Ani, Biocha no debemos seguir haciendo esto, no es correcto que nos morree Claudio, aunque no estén nuestros novios.
  • Biocha: No sea aburrida, no estamos casadas, ni muertas, la vida es para disfrutarla y me parece que disfrutaste los besos de Claudio.
  • Montse: Si pero no está bien.
  • Ani: Mira Montse, si yo acepto que Biocha que es la novia de mi hermano se morree con mi novio, creo que no hay problema que lo haga contigo, todo esto es sin compromisos, dijo con ánimos de continuar la fiesta

Al igual que la vez anterior, las Chicas volvieron a llamarme, para mostrar su última elección, si la anterior no dejaba casi nada a la imaginación, esta era aún más provocadora que la anterior si cabe, siendo transparencias de tan reducido tamaño, que dejaban ver los contornos de las areolas y los erectos pezones asomaban por unos agujeros finamente bordados, en cuanto a los culos, sus nalgas estaban totalmente expuestas y por delante, se les notaba claramente los Monte de Venus con las rajitas como impresas en el fino género traslúcidos. Lo primero que hice fue besar a mi novia marreándola y acariciándole su espectacular culo, creo que en forma de agradecimiento de la oportunidad brindada, acerqué mi boca a los erectos pezones que asomaban por los agujeros de los diminutos géneros que apenas podían contener tanta maravilla y comencé a besarlos y lamerlos.

La siguiente chica fue nuevamente fue Biocha a la que seguí con el mismo procedimiento hasta que sus suspiros y agitada respiración hicieron que le desabrochara el sujetador y le chupé las tetas directamente mientas se la amasaba intentando abarcarlas con mis manos en toda su inmensidad, miré la cara de mi novia, la que me miraba con deleite y signos de satisfacción ante el poder que había descubierto sobre ellas y que ejercía a través de mí. Al pasar a la segunda teta de Biocha miré a Montse que tenía una mirada entre atónita y de deseo contenido:

  • Ani: Cómeles las tetas a Montse, mira el tamaño de pezones que tiene de lo caliente que está.
  • Montse: No, no debemos dijo tapándose sus tremendos pezones que sobresalían como dos centímetros por los agujeros del sujetador.
  • Claudio: No tengas miedo, lo que pase aquí quedará aquí y no te haré nada que tú no quieras.
  • Ani: Tranquila Montse, seré más suave que Biocha.

Ella me miraba con aires de pavor al saber que lo haría, la escena fue como en cámara lenta, le saqué sus manos y liberé sus tetas del sujetador, luego me acerqué y besándola le tomé de su breve pero duro culito pegándola hacia mí, consciente de lo nerviosa que estaba comencé acariciándola por toda su espalda para calmarla, luego bajé mi cabeza y procedí besar las grandes tetas en especial los tremendos pitones que tenía por pezones, todo ello impropio de una chica tan delgada, en eso actuó Ani libando una imaginaria leche de tan lindas tetas de Montse, ella cerró los ojos y se dejó hacer, mi novia luego le amasaba el culo mientras Biocha y yo mirábamos la candente escena lésbica y sonreíamos cómplices. Nuevamente Ani intervino cerrando la sesión de morreos con las novias de nuestros parientes. Estábamos tan calientes que mi amada novia se agachó y sacándome la verga del pantalón sin cortarse ni un pelo, en presencia de las otras chicas, comenzó a darme una mamada, tanto Montse como Biocha miraban con los ojos desorbitados y con claros signos de deseo, Ani mirándolas les dijo:

  • No podemos dejarlo así con su amiguito tieso.
  • Biocha: Jajaja, ¿puedo?, se agachó tomado mi dura verga para iniciar una mamada bastante más experta que la de Ani.
  • Claudio: Mmm, que maravilla, así me voy aliviar rápidamente.
  • Ani: ¿Montse no te apetece probar la verga de mi novio? le preguntó a la ya más que nerviosa Montse, diría horrorizada.
  • Montse: Pero es que yo no hago esas cosas, nunca lo he hecho.
  • Biocha: Está muy buena y siempre hay una primera vez, te podemos enseñar contraatacó.
  • Montse: Pero mi novio…
  • Ani: Al diablo con tu novio que debe andar cogiendo a cualquier zorra que encontrará en su viaje, anda aprende a mamar…

Continuaron las insistencias, ante lo cual Montse se puso de rodillas frente a mí, aún dudando de proceder, pero Biocha le puso mi verga en sus manos mientras ella la miraba como hipnotizada, la misma Biocha le acercó su cara hasta que involuntariamente me besó la punta de mi amiguito, ella aún no convencida luego de recibir la verga que amablemente le extendió Biocha, abrió la boca y se la metió todo lo que pudo sin moverla o moverse, las otras chicas le fueron dando instrucciones hasta que me logró conmoverme, tanto que prontamente comencé a boquear y les avisé que me correría.

  • Biocha: Tírale tu lechita en las tetas.
  • Ani: Si, queremos verla enlechada
  • Montse: Mmghh….no que asco….mmm
  • Claudio: No, mejor hínquense las tres por que se las tiraré en las tetas a todas.

Apenas estaban hincadas cuando saqué mi verga de la boca de Montse y comencé a bañar sus tetas, no lo podía creer lo putas que eran, mi abundante leche le cayó a las tres chicas, comenzando a deslizarse por las divinas tetas. De pronto Biocha les pasó la lengua por las tetas pringadas a sus dos amigas y se la tragó, su cara dejaba traslucir que le gustó lo que hacía, parecía que mi leche recién derramada era lo mejor del mundo por lo que les dije:

  • Claudio: Chicas ahora una en cada teta de Biocha, las quiero muy limpias

Ninguna contestó pero me miraron con cara de zorras calientes por lo que tomándole las tatas a Biocha se las ofrecí a las chicas, la que con cara de no querer y querer, comenzaron una faena que terminaron rápidamente sin demostrar asco alguno. Estaba tan excitado y salido que me hinqué a su lado, para luego besarlas con pasión, nuevamente sentí el extraño sabor ocre de mi corrida cuando pasé mi lengua por cada una de sus bocas, después de esta escena demasiado caliente e impúdica, ellas se vistieron en silencio, aun que sus caras delataban que estaban muy, pero muy calientes. Finalmente salí a esperarlas mientras se componían, la dependienta me miraba desde un rincón cercano, mis chicas salieron diciendo que terminamos las compras, la dependiente continuó con las miradas llenas de suspicacia, creo que no olvidaría por un tiempo las caras del grupo, especialmente la mía, podría apostar que ella nos espió, pues su sonrisa al despedirse de mi diciéndome vuelve pronto era de una verdadera zorra. Terminadas las compras, nos despedimos acordando salir el próximo viernes a bailar conmigo a lo que Ani le dijo que también invitarían a Isabel, dando a entender que podría haber algo que ellas no sabían aún.

Ya en la noche, luego de la cena, mientras recogíamos los platos y ordenábamos todo, se da inicio oficialmente al rol de sexo familiar, todas estaban ansiosas, tanto que le dijeron a mi madre que no hiciera nada más, ya que yo tenía que darle duro. Como saben Julia era la primera en el rol y por ende en ser beneficiada por ese nuevo ordenamiento de las obligaciones caseras. Es así que nuevamente disfruté del curvilíneo cuerpo de mi progenitora, desde el momento en todas en la cocina dieron el vamos de mi placentera tarea, me acerqué a mamá y tomándola por detrás comencé a acariciar cada una de sus curvas mientras ella algo cortada por el sorpresivo asalto me decía que fuésemos al cuarto primero, pero ya al salir de la cocina mamá tenía sus tetas al aire, en la entrada del cuarto de Dani que era el lugar para tal tarea ya la tenía con su falda levantada y con las bragas abajo mientras las otra reían y lanzaban puyas que ponían roja como tomate a mi progenitora, una vez dentro de la recámara sin decir agua va, la ensarté y a lo largo de toda la noche pude arrancarle varios orgasmos, los cuales gritó sin mucha contención, debo decir que la penetré por todos sus agujeros hasta quedarnos dormidos de cansancio, claro que no hay que olvidar todas las actividades diarias, pero creo que el ser “tirada” y “culeada” por mí contribuyó en gran medida a su agotamiento. Al otro día nos levantamos como de costumbre, yo con mucho sueño, haciéndonos el ánimo para desayunar.

  • Todas: ¿Cómo les ha ido todo?
  • Julia Pero que curiosas, jejeje, solo puedo decirles que me tiró y culeó bien tirada y culeada, cosa que nadie nunca pensó escuchar de mi muy seria madre.
  • Dani: Pero mujer, que estas hecha una puta, jajaja, arrancando risas y chanzas por parte de las chicas.
  • Isa: Recuerda que hoy es mi día pardillo, cuidadito de estar malgastando tus energías, dijo con una pícara sonrisa extraña en ella.
  • Claudio: Lo sé y no te preocupes Isa que donde te pille te voy a dar duro.
  • Isa: Recuerda que aún soy virgen, dijo sonrojándose.
  • Claudio: Si mi corazón, es un decir.  

Las mayores fueron a su trabajo, obviamente mamá de muy buen humor, para nosotros el resto del día fue tranquilo, o sea no pasó gran cosa, siguiendo las actividades como era habituales, fuimos a la piscina de la casa jugamos a lo típico, acaricié a las dos con total relajo, creo que si yo estaba caliente, ellas estaban aún más. Claro que durante nuestros juegos de la piscina, Isabel, se preocupó de rozarse conmigo aún más de lo habitual, ambos éramos una tetera, cosa que notó Ani:

  • Veo que mi primita está ansiosa de que se la tiren y culeen, utilizando estos vocablos que ya se estaban incorporando al círculo familiar y que le causaban gracia a mis parientes
  • Isa: Sip, ya quiero estar con él, pues no hay otra cosa en que pueda pensar y creo que cada minuto estoy más ansiosa.
  • Ani: ¿Por qué no le dices que lo hagan ahora y se van al cuarto de mamá y se relajan viendo televisión? dice cerrando un ojo
  • Isa: ¿Pero y tú?
  • Ani: Ya me tocó y se ve que tu estas tan ansiosa como caliente, anda, ve para que te de tu merecido, jajajaja
  • Isabel: Tienes razón, voy a prepararme ya te llamo me dice.

Quedé entre sorprendido y anonadado, como había cambiado mi hermana, ahora era una desvergonzada sedienta de sexo. Pasado un rato Isa me llama, asomando por una ventana mostrándome su “Baby Doll”, que les puedo decir, no era el de la fallida ves anterior, este era un atuendo aún más impresionante, nunca se lo había visto, estaba lindísima y sugerente. Se trataba de un peto blanco transparente, muy ajustado que abultaba sus tetas le llegaba casi al ombligo, estaba asociado a un pantaloncillo corto muy apretado en el que se dibujan sus caderas y marcaba su conchita, también era transparente, ambas piezas estaban llenas de encajes y bordados, armonizando en forma divina con ella, especialmente en donde acaban sus muslos y comienza sus nalgas, asimismo la inusitada transparencia revela una abertura deliciosa por la que asoma la rajita de su coño ligeramente abierto y notoriamente mojado. Su pelo está suelto y muy bien peinado, sus ojos muy bien perfilados, lo mismo que sus labios de color rojo que contrasta con su blanca piel, es una belleza de una armonía inimaginable. Se gira exhibiéndose para que no me pierda detalle de lo hermosa que está para mí, nadie podría decir que mi hermanita había dejado algún detalle al azar. Al seguirla la miro por la espalda que se dibuja con la característica forma de guitarra, suave y tersa, con un coqueto lunar donde se inicia su firme y redondo culo, en el que la tela se pega a su piel pareciendo una fina funda que envuelve el más fino de los manjares. Sus muslos morenos por el sol, se elevan aún más debido a tacones aguja que le hacen ver el culo más respingón que nunca.

  • Estás preciosa Isa
  • Isa: ¿Te gusta? Haciendo un mohín con su boca muy coqueto, sabiendo que se ve irresistible.
  • Claudio: No solo me gusta, estás irresistible Isa, tendría que estar loco para decirte lo contrario.
  • Isa: Tú también me encantas desde siempre, en especial ahora que tu amiguito ha despertado. dice con una tímida sonrisa.
  • Claudio: Gracias sin poder dejar de mirarla y ver que es la personificación de la Diosa Afrodita en la tierra.

Me acerqué eufórico abrazándola por detrás para detenerla antes de entrar al cuarto, la levante como si fuera mi novia en su noche de bodas y entré para depositarla suavemente en la cama, luego tomándola de sus mejillas entre mis manos la besé, con el beso más tierno que ha podido hacer en toda mi vida, ella me contesta con una sonrisa que me deja embrujado, preguntándome ¡cómo alguien puede ser tan bella?

  • ¿Estás excitado? – mientras me vuelve a besar pasando su mano por sobre mi encerrada verga.
  • Claudio: ¡Si y Mucho!!!!...¿y tú?
  • Isa: He estado caliente todo el día, desde que desperté sabiendo que hoy es mi día, me dijo muy bajito para no ser oída por Ani, ya que está segura que nos estaba espiando.
  • Claudio: Yo también, casi no podía esperar este momento. Acostándome a su laso, la volví a besar y comencé a acariciarle el culo y sus caderas, pegándola hacia mi dureza.
  • Isa: ¡Tranquilo!!! que tenemos toda la tarde para nosotros. Por mientras puedes desnudarte para que estemos más parejos.
  • Claudio: Buena idea, sacándome los pantalones perdiendo el equilibrio lo que ocasionó que Isa se ría por lo urgido que estaba,
  • Isa: Parece que el debutante eres tú, jajaja. Hazlo despacio amor mío, recuerda que esa parte es importante hacerla con calma, sin desesperarse.
  • Claudio: Sí corazón, lo intentaré

Tuve que concentrarme con todas mis fuerzas para estar más controlado, volví a besarla, comenzando en sus labios, luego el cuello, continuando con sus tetas, acaricié su rajita por la apertura y le comencé a bajar el pantaloncillo del conjunto lentamente, pero ella me detiene, tomando mi mano para dejarla en la apertura y me apodere de su clítoris, gime y suspira sin cesar, su coñito es un río de flujo, de pronto Isa comienza a mover sus caderas en un vaivén sensual, simulando el coito, toma mi verga y comienza a pajearme, comienzo a elevar mi temperatura, tanto que creo que me correré

  • Isa: Mmm, sácame el peto y chupa mis tetas directamente que me encanta
  • Claudio: A mí también,… toda tú me encanta, le digo mientras comienzo a acariciar con la otra mano su espalda desnuda, lamiendo y chupando los enhiestos pezones.

Notaba cada uno de sus suspiros y gemidos, eran casi como un ronroneo. Seguí deslizando mis manos por sus sinuosas caderas sin dejar de comerle las tetas hasta llegar a su glorioso culo, recreándome en cada centímetro de mi diosa. Con la excitación al máximo, hice que mi hermana se girara para verla de espaldas le bajé sus bragas, finalmente estaba completamente desnuda, su culo es perfecto, sus muslos tonificados y elegantes, ella se gira nuevamente exhibiendo su desnudez por delante y la mojada rajita brilla intensamente.

  • Isa: Te gusta lo que ves pregunta dulcemente
  • Claudio: Estas preciosa, no puedo creer lo bella que eres.
  • Isa: Qué bueno que te guste, porque tu a mi me alucinas dijo con casi un susurro, yo me sentía pletórico de felicidad y deseo

Hice que Isa se sentara en la cama y agachándome me pongo a comerle el coñito, sus abultados labios mayores son una delicia erótica, abro delicadamente su rajita para descubrir su rosado interior y poder meter mi lengua para disfrutar de su excitación, luego de unos minutos que a mi me parecieron solo segundos empezó a convulsionar, gritando mi nombre a los cuatro vientos, creo que tanta tensión y deseos acumulados en todos estos días le pasaron la cuenta, corriéndose entre gemidos y suspiros, mientras yo no la libero de su comida de coño, la sigo chupando y lamiendo a toda velocidad, Isa comienza a retorcerse pidiéndome tregua, se la concedo, irguiéndome para mirar su angelical cara satisfecha de sexo, ella sigue tumbada sobre la cama casi exánime, me recuesto a su lado, ahora sus manos acarician mi cabeza, debo confesar que también estoy algo cansado, su respiración agitada me enciende nuevamente, mi verga esta dura como el acero, la miro y pienso que sin duda ha llegado a un fantástico orgasmo, pero es hora de la verdad.

Nuevamente la miro en todo su esplendor, está preciosa, tendida, completamente desnuda, solo calzada con esos tacones aguja. Isa se corre al centro de la cama y abre sus piernas de par en par; ver sus depilado chochito brillando de humedad, me vuelve loco pero quiero hacer las cosas con calma como ella me pidió, me quedo admirando ese coñito correctamente recortado para la ocasión, me encontraba como hipnotizado por su perfección a lo que se sumaba lo sexy que se muestra con su cuerpo desnudo, me lanzo primero sobre sus pechos y comienzo a lamerlos y chuparlos con total dedicación, poniendo esmero en recorrer cada centímetro de ellos y jugar con cada uno de sus pezones usando mis dedos.

La temperatura de Isa nuevamente está en su máximo, le meto dos dedos en el coñito y aprecio el húmedo ríos que recorre su vagina, ella está mucho más excitada de lo que pensaba y prácticamente me los aprisiona con sus piernas para que me adentre en la profundidades de su ser, su ya inflamado coñito desea perder la virginidad. Me pongo entre sus piernas y mirándola a la cara, veo en primer plano mi verga enfrentando el coñito de mi hermana, su preciado tesoro que estoy por poseer, de reojo miro su rostro y sus ojos azules que brillan llenos de pasión, por lo que inicio una lenta penetración, ella suspira y gime quedamente, siento cada centímetro de su caliente gruta, mi inflamado Glande abre el caminos a una nueva etapa de su vida, por lo que ella suspira y me dice:

  • Lo quiero todo adentro, no me hagas esperar más.
  • Claudio: Se paciente no quiero que te duela, digo mirándola a los ojos que se ven dulces y brillantes de felicidad, miro como mi verga como entra en las profundidades de Isa y le sonrío
  • Isa: Sigue lléname amor mío, me reitera, mmmm.
  • Claudio: Te quiero Isa y le sonrío diciéndole te llenaré como nunca sentirás jamás.
  • Isa: Sí ahhh. Ay mmm

Voy empujando lentamente cuando llego a la mitad de mi verga, Isa cierra los ojos hasta que rompe el alargado silencio y lo convierte en un gemido intenso. Yo sigo con la penetración hasta que los dos nos fundimos en uno solo e iniciamos un suave mete saca sin prisas, pero sin pausas, le pregunto:

  • ¿Te duele?
  • Isa: Ah, ah, mmmm
  • Claudio: ¿Estás bien?
  • Isa: Mmm ahh algo, un poco,… pero es lo mejor del mundo, sigue así me dice entre suspiros, jadeos y gemidos

Pronto nuestra actividad se torna más intensa, prácticamente estamos fundidos en uno como si fuéramos los mejores amantes del mundo, su respiración se agita en cada segundo más y más, símbolo de la inminencia de un orgasmo, Isa tira de de mí y me abraza para que la cubra totalmente con mi cuerpo, yo me sostengo sobre ella para no aplastarla mientras mantengo un frenético mete saca, Isa en su abrazo me besa y recorre mi cuerpo con sus manos como queriendo aprenderlo de memoria, acaricia mi cara con ternura , de pronto me abraza para lanzar un grito de satisfacción clavándome sus las uñas en mis brazos, sin duda tuvo un nuevo y profundo orgasmo, mayor aún que el anterior. Me abraza estrechándome sobre su cuerpo, tras unos segundos de recuperación se da cuenta de que le está faltando el aire y me suelta, por lo que me tiendo a su lado.

  • Isa: Nunca me imaginé que fuese tan bueno, si no te abría violado con anterioridad.
  • Claudio: Antes ni me mirabas, pero gracias por el cumplido
  • Isa: Bueno, ahora te miraré todos los días, jejejeje
  • Claudio: Pero falto yo, así que me la debes.
  • Isa: Espera que me recupere un poco, dijo pegándose a mí.
  • Claudio: No te preocupes soy muy paciente, dije acariciándole sus lindas tetas.

Pasado unos minutos de caricias y besos, Isa se incorporó para ponerse a horcajadas sobre mí, me mira con lujuria y pasó su sexo refregándolo por sobre mi caliente verga, mi amiguito recobra su vitalidad, retomando todo su esplendor, Isa lo toma con delicadeza y se la clava lentamente, gimiendo y suspirando, me sorprende lo resuelta que se ve para pagar su deuda, e inicia un suave vaivén con su pelvis; Yo acaricio las caderas de mi diosa amazona, la que inclina su cuerpo para que le pueda comer las tetas, se las chupo con pasión, jugando con sus pezones que ahora sobresalen enhiestos y duros, se empieza a mover cada vez más rápido, sus caderas parecen de una bailarina exótica, puedo notar como la vagina de Isa se aprieta para que mi barra de carne ardiente no salga de aquel lugar. Yo sigue martillando con la verga su otrora virgen coñito, se nota en sus jadeos como su excitación se eleva más y más, ambos intentamos profundizar nuestro encuentro cada vez que se produce el mete saca, es un ritmo frenético, pero acompasado por ambos, parece que lo hubiesen hecho siempre y por fin mi Isa abre la boca y en un estertóreo gemido anuncia que se correrá en su tercer orgasmo de esta tarde tan especial, Sigo bombeando su coño y alcanzo un orgasmo casi simultaneo, intentando que se prolonguen al máximo para tener nuestro goce lo máximo de tiempo posible.

  • Isa: Ahhh, mmm.. que maravilla amorcito, dijo tumbándose sobre mí, laxa casi sin fuerzas
  • Claudio: Si eso fue de otro mundo le digo tomando su culo con mi verga reducida casi a su mínima expresión pero aún en su coñito.
  • Isa: Deberíamos hacerlo toda la vida y todos los días.
  • Claudio: Toda la vida sí, pero todos los días no creo que podría, dije con sinceridad más que realista.
  • Ani: Si además tienes que tirarnos a todas Isa, dice asomando su cabeza detrás de la puerta del cuarto.
  • Isa: ¿Nos estabas espiando?
  • Ani: No solo iba pasando, dijo con total desvergüenza
  • Isa: ¿Ah y como nos escuchaste?
  • Ani: Es que la puerta estaba algo abierta y los escuché acabar. A propósito, ¿te gustó?
  • Isa: Sí, me encantó. Ahora es mío, déjanos solitos por favor.
  • Ani: Okey me voy, ya será mío después.

Continuará.....

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