miprimita.com

El uniforme de tito Diego ,capítulo 21.

en Sexo con maduros

En aquel bloque de viviendas , si se pudiese ver a través de las paredes, como si fuera una casa de muñecas , se podría ver lo siguiente :

En uno de ellos, en un sofá , dormían dos agentes de la Guardia Civil de Tráfico ; uno de ellos , con el pelo blanco y gafas de montura plateada , con los pantalones de servicio y los calzoncillos bajados hasta medio muslo, mostrando sus nobles partes ; algo menos mostraba el otro agente , moreno y de patillas plateadas, con los pantalones abiertos a la altura de la bragueta , ofreciendo a quien quisiese verlos sus slips  , por entre cuya abertura asomaba su relajada polla ; las botas de ambos servidores de la Ley , altas y negras de montar , estaban manchadas de un liquido blanquecino que se estaba empezando a secar , y como los dos estaban tirados en el sofá , con las piernas abiertas, la bota izquierda del uno se cruzaba con la derecha del otro ….y sobre ese cruce de cuero, reposaban las piernas de una joven , desnuda ; los tres mostraban una expresión de absoluta relajación .

En el de arriba , otro uniformado , también dormido ,sobre una cama ;calvo ,con el poco pelo que le quedaba negro , permanecía con su uniforme , pero de una manera bastante curiosa : en la pierna izquierda mostraba una bota de montar negra ,sobre la que se arremolinaba el pantalón bajado, junto a sus calzoncillos ; la pierna derecha, desnuda , se embutía en otra bota visiblemente más grande y ancha ; sobre él, un hombre maduro, con el pelo blanco y todavía oscuro cerca de la nuca, dormía roncando sobre su pecho , portando una camiseta de tirantes celeste claro ; los calzoncillos, del mismo color, reposaban casi a nivel de los tobillos, donde permanecía una calceta en el pie izquierdo, estando el derecho desnudo ….y desnudo estaba su culo , el cual aparecía enmarcado entre las dos piernas del que aún portaba a medias su uniforme .

Y  su culo fue lo primero que vio alguien que ya lo conocía bien , y era nada más y nada menos que la jovencita que había desvirgado esa misma noche ; llegó a casa a recoger unos apuntes que le habían pedido sus compañeras de clase , y entró a su habitación , esperando encontrarla vacía.

Al ver la puerta entornada y llegarle una mezcla de olores muy intensa se extrañó , y pensó en lo perseverante que era el aroma de los cojones de Don Diego, que persistía después de su marcha ; al entrar comprobó, sorprendida ,que el productor de tan delicioso olor aún permanecía allí, boca abajo, con los  calzoncillos bajados , y no por conocido, dejó de admirar aquel fantástico culazo que poseía el oficial de Tráfico ; mientras su vista se adaptaba a la penumbra de la habitación, fue a buscar los apuntes ; pensó en darle un beso a tan magnífica retaguardia, pero le dio lastima despertarle , recordando el maravilloso polvo que le había echado y lo dulce que había sido su primera vez con este maduro tan interesante , y decidió dejarle descansar , seguro que estaba reventado después de haberla follado aquella noche inolvidable .Claro , lo que no sabía ella era que después de su follada, se había tirado a su madre y después al capitán Díaz , cuyo culo también acababa de desvirgar .

Y en el capitán reparó cuando , tras encontrar los apuntes y habiéndose adaptado su vista a la luz que se filtraba por la ventana , advirtió su presencia ; le resultó grotesca la posición en la que estaba , abierto de piernas debajo de Don Diego , con la ropa arrugada sobre la bota izquierda , y la derecha con la pierna desnuda ; un intenso olor a semen le llegó , y calculando la posición de los dos oficiales, llegó a la conclusión de que sus paquetes estaban en contacto íntimo , y no pudo evitar pensar que se habían corrido juntos …y entonces reconoció al capitán, ya que era el padre de una de sus mejores amigas …era Don Félix, dechado de virilidad donde lo hubiere, oficial del Destacamento de Tráfico y Jefe Instructor de la Academia …¡¡¡y estaba acostado con Don Diego, que esa misma noche acababa de terminar con su virginidad …¡¡¡

Se sentó en la otra cama, estupefacta y divertida a la vez …vaya , vaya con Don Diego ; no le extrañaba que semejante ejemplar de macho encandilase a hombres y mujeres, pero precisamente a  Don Félix , que para ella había sido muchas veces objeto de veneración y excitación, cuando lo veía con aquel uniforme tan ajustado y tan elegante ; recordaba con especial agrado el magnífico culo que siempre ofrecía debajo del ajustado pantalón, que por un lado lo criticaba ( parecía un bailarín o un torero , como le gustaba meterse con su amiga) , pero en el fondo le encantaba ver como se dibujaban aquellos glúteos bajo la verde tela …y sus bragas se mojaban al darse la vuelta y mostrarle la deliciosa protusion que mostraba orgulloso entre sus piernas, el muy cabronazo ….

Recordaba en concreto una tarde en la que estaban estudiando ella y su amiga , y Don Félix llegó , vestido con su flamante uniforme , tras terminar su turno de tarde  ; se acercó a la mesa donde estaban ellas, y se apostó justo al lado , pegado a su lado .

-          ¿ qué estudiáis, niñas? – preguntó, mirando a los libros que tenían abiertos.

-          Pues Historia, Don Félix- le dijo ella, enseñándole el libro .

-          Aah, eso está bien …- y se acercó a mirar el contenido.

Al hacerlo, se agachó , y ella aprovechó para dirigir una mirada al tremendo paquete  que se dibujaba justo al lado de ella, advirtiendo un esplendido dibujo de sus varoniles atributos bajo la elástica tela, ya que se apreciaban sin duda dos  bultos, uno de ellos pegado sobre el cristal de la mesa, que le parecía una patata con dos protuberancias , y que sin duda debía corresponder a sus huevos , y otro justo encima, más redondito y como respingón, que seguro ocultaba la polla; el rato que Don Félix parecía prestar atención a la lección de Historia le pareció una deliciosa eternidad ; ella notaba sus bragas comenzando a empaparse.

Ella tenia la pata de la mesa justo en su entrepierna , y no pudo resistir la tentación de restregarse directamente el coño con ella , mientras seguía teniendo aquella maravillosa visión; y entonces  se incorporó, se puso de firmes y proyectó aquella maravilla hacia adelante.

-          Muy bien , eso es lo que hay que hacer , estudiar …-dijo ,mientras ella miraba embobada el reflejo del paquetón en el cristal de la mesa .

Y justo en ese instante , que la madera rozaba su clítoris, sintió un orgasmo que la hizo temblar de pies a cabeza ; como había coincidido el ponerse de firmes con su orgasmo ,tuvo la sensación de que había sido el propio Don Félix quien le había rozado aquella zona tan sensible; tuvo que hacer un tremendo esfuerzo para disimularlo  , haciendo como si estuviese a punto de estornudar .Parecía que tanto su amiga , como  su padre no se apercibieron de su placentero éxtasis  ; el objeto de su placer salió de la habitación , ofreciéndole ahora una estampa deliciosa de su tremendo culo moviéndose a cada paso , mientras hacía sonar el cuero de la suela de sus botas.

Y a la tarde siguiente, Don Félix volvió a saludarlas , sólo que esta vez, estaba ella sola, ya que su amiga había salido a hacer fotocopias; se fue acercando  ,mientras la miraba a través de sus gafas ; ella tuvo que disimular cómo su respiración comenzaba a acelerarse , a la vez que sus bragas comenzaban ya a empaparse …

Y es que allí apareció de nuevo aquel enorme paquete bajo el pantalón de servicio , moviéndose a cada paso , que parecía que el propio Don Félix moviese a voluntad para hacerlo todavía más apetitoso ; las botas sonaban a cada paso, remarcando el vaivén de aquella protusión, ora a la derecha, ora a la izquierda.

En ese momento, se deslizó del libro una foto del Penthouse, que hacia un rato habían estado viendo muertas de risa ella y su amiga, en la que se veía un tio en pelotas sobre una tía , mostrando su culo ; se habían reído de lo peludo que lo tenía y de la cara de placer que mostraba la fulana que parecía disfrutarlo.

-          Pero, ¿ qué estabais mirando? – preguntó de pronto, cambiando el tono de su voz.

-          Na…nada ….Don Félix , estamos con la Historia…- dijo ella, asustada.

-          Eso que acabas de hacer no es propio de una buena estudiante ….menudas historias …ya te daré yo historia .Ven aquí – y se sentó en una silla .

Estaba muy serio y la miraba con intensidad a través de sus gafas ,que siempre le habían parecido de culo de vaso ; en ese instante le traspasaba con aquella mirada, y no podía negarse a obedecerle, así que se aproximó, con una mezcla de miedo y excitación .

-          Ponte encima , creo que te has ganado unos buenos azotes…

-          Pero Don Félix, le prometo que …

-          Nada de promesas, ven aquí ….- dijo , señalando sus piernas, embutidas en aquellos pantalones y aquellas botas tan negras y brillantes .

Y , obediente, se echó sobre los fuertes muslos de Don Félix, notando su musculatura , y sintiendo la suavidad de su paquete justo a su costado , muy cerca de su teta izquierda .Ella creía que iba a correrse en cualquier momento .

-          Ahora verás, desvergonzada….- y , sin más dilación, le subió la falda y dejó al aire su culo , con las bragas puestas ; le pegó un primer tortacito, que ella recibió con sumo agrado , y tuvo que contenerse para no reírse de puro gozo.

-          Veo que te hace gracia …ahora verás – y siguió dándole palmadas – toma y toma, niña mala – y ella juraría que al lado izquierdo, la polla de Don Félix crecía y aumentaba de consistencia , rozando su teta.

Ella sentía cada palmada como si llegase directamente a su coño, y sin poder evitarlo, se corrió , sintiendo un orgasmo como nunca lo había sentido antes , a pesar de las muchas veces que se había masturbado ( y muchas de ellas , pensando en Don Félix precisamente , como la tarde anterior en la mesa )

-          Ahhhh….ohhhhh- intentó disimular como si le doliese, muerta de gusto .

-          Bueno, veo que ya tienes bastante – dijo Don Félix, bastante enfadado – para que aprendas.

Ella se levantó y miró a Don Félix, el cual mostraba una cara de plena satisfacción tras haberla sometido a aquella humillación….solo que no sabía lo placentera que había sido para ella .

Vuelta al presente, volvió a sentirse muy turbada ante la presencia de Don Félix entregado de aquella manera a Don Diego, y le resultó muy divertida la escena, y de nuevo le excitaba sobremanera el poder de la virilidad del comandante , hasta el extremo de hacer caer la resistencia de alguien tan macho como el capitán …

Decidió acariciar el culo de Don Diego, a modo de felicitación por haberlo hecho , y este gesto provocó que el admirado comandante se despertase, cayendo aún medio dormido al lado de Don Félix ; ella volvió a quedarse asombrada al ofrecerle a su vista la magnificencia de sus varoniles atributos , ….pero se quedó aun más asombrada al ver por vez primera los del capitán .

Menuda polla se gastaba el padre de su amiga ; no era como la de Don Diego , pero no desmerecía en absoluto , acompañada de aquel par de huevos , que aunque tampoco llegaban a la magnitud de los de su compañero , casaban espléndidamente con su polla y la negra mata de vello que rodeaba todo ; las blancas ingles servían de marco para aquella maravilla, donde comenzaban aquel par de muslos musculosos , seguidos de unas cuadradas rodillas , las cuales se embutían ya en las negras botas ; de su torso , expuesto al tener la camisa desabrochada, le llamó la atención la humedad que resbalaba desde su ombligo , y que no era otra cosa que su propio semen , ya que la polla había quedado echada sobre su vientre , y aun rezumaba un resto del néctar que había eyaculado previamente  ; advirtió que la camisilla de Don Diego estaba también empapada de la misma sustancia  . Reparó entonces en su culo , que ofrecía al estar echado con las piernas abiertas, advirtiendo que de su rajita, que se apreciaba perfectamente desde donde acababa precisamente el magnífico escroto ,salía otra humedad que empapaba la sábana, y era el semen de Don Diego que , tras licuarse en sus interioridades, salía afuera, siendo prueba de su entrega al comandante .

Don Diego abrió los ojos y se incorporó , asustado , al verla a ella , la cual rápidamente le hizo un gesto para que no hablase , mientras sonreía ; el abusado oficial se dejó llevar, mientras pesaba en que nueva situación se encontraba , allí , prácticamente desnudo , a merced de la misma universitaria que se había tirado la noche pasada , para posteriormente pasarse por su entrepierna a la madre y anfitriona , y finalmente follarse a su superior , el cual ahora dormitaba , inocente , ofreciendo sus partes privadas a esa misma universitaria….era un circulo la mar de vicioso y excitante , y su polla de nuevo respondió con un leve respingo , que provocó un delicioso movimiento de subida y bajada que no pasó desapercibido para ella ,mirándola con admiración y deleite ;su coño estaba otra vez empapado , recordando la esplendida  penetración que la había prodigado , y a la vez, por la observación de la magnífica polla de Don Félix  , imaginando que fuese el padre de su amiga quien la penetrase con aquel portentoso instrumento .

Y decidió atacar sin más dilación aquel paquetón  que reposaba bajo el vientre de Don Félix , aplicando , no sin cierto temor reverencial por tratarse de quien se trataba , su mano sobre el enorme escroto del oficial ; el capitán se despertó, creyendo que era Don Diego quien volvía a las andadas, y gimió de gusto , mientras se desperezaba y de esa manera, estirando las piernas, proyectaba aún más sus cojones para que se los acariciase a placer ; ella , la notar la contundencia de sus testículos a través de la suave piel , y cómo el ofrecido servidor de la Ley respondía a su caricia , decidió agarrarlos bien agarrados.

-          Jooooder, que me va a hacer daño ….- dijo Don Félix, creyendo que se dirigía a su compañero, el cual observaba ,divertido, la escena.

Ella entonces soltó la presa y decidió acariciar con sus dedos aquel magnifico par de huevos, y fue entonces cuando Don Félix se percató que no era Don Diego quien estaba efectuando aquellos impúdicos tocamientos , ya que percibió las cosquillas que le prodigaban unas uñas largas y femeninas , y abrió los ojos .

Al principio sintió un enorme placer al ver a una jovencita que se afanaba en hacerle cosquillas en sus huevos, lo que además le provocaba un gustazo impresionante , y su polla respondió con un rápido movimiento de empalme, despegándose de su pringado vientre   , demostrando además a Don Diego , al que descubrió mirando las maniobras ,que era tan macho hasta después de haberse dejado follar por él ; la joven , que hasta ese momento estaba ensimismada viendo cómo se erizaba el vello del escroto de Don Félix ante sus caricias, levantó la cabeza al advertir la súbita erección ; la polla del capitán ,que había vuelto a caer sobre su ombligo , tras alcanzar de nuevo un considerable tamaño , volvió a elevarse con una nueva sacudida , ya que Don Félix se sintió terriblemente excitado, a la vez que enfadado,  al advertir que la muchacha que le estaba sobando los huevos era una de las mejores amigas de su hija .

Y para colmo , la susodicha , ante la nueva elevación de su polla cual obelisco , la atrapó con la mano, con firmeza y delicadeza a la vez, mientras miraba , desafiante , a Don Félix .

-          Pe….pero …quien…qué …..- no sabía que decir, balbuceando, rojo como un tomate, de ira y de excitación.

Y es que se sentía lleno de vergüenza , al encontrarle la amiga de su hija en estas condiciones , especialmente porque ésta en concreto nunca le había caído bien ….y ahora lo había visto medio desnudo, acostado al lado de Don Diego, y encima le estaba cogiendo la polla ….y además es que le gustaba una barbaridad , y eso le hacia sentirse lleno de rabia por no poder controlar sus impulsos .

-          Vamos, Don Félix, no se enfade , que hace muchos años que nos conocemos …- y se sintió muy poderosa teniéndole cogido por la polla y los huevos, viendo como el intentaba resistirse , luchando contra sus instintos.

Don Diego miraba divertido e intrigado a la vez a aquella pareja que parecía conocerse , por lo que se atrevió a preguntar :

-          ¿ os conocéis de algo? –dijo, mientras miraba al atribulado Don Félix y a su divertida captora .

-          Joder, que si la conozco- dijo Don Félix , hecho una furia- es una amiga de mi hija, que siempre me ha parecido una gilipollas …

-          Don Félix, por favor, no diga esas palabrotas ….siempre nos regañaba a nosotras cuando decíamos algo así …y más de una vez me dio algún azote en mi culito .Así que ahora se lo voy a dar yo ….- y le dio un pequeño toque con sus dedos en el expuesto periné del capitán, sonando como un cachete , mientras soltaba su polla , que de nuevo se movió con un hermoso salto, cada vez más tiesa y grande ; el prepucio ya se estaba retrayendo y su glande comenzaba a asomar , rosado como una flor.

-          ¡ Auuu ¡ ¡ Eres una desvergonzada¡ - dijo Don Félix, que parecía iba a reventar de lo rojo que estaba, a la vez que comenzaba a jadear.

-          ¿ Desvergonzada , yo?-dijo ella, desafiante – Pues a ver si es capaz de levantarse de aquí …- y apartó sus manos de los expuestos atributos de Don Félix .

Don Diego terció, divertido y también bastante excitado por la situación , mientras sonreía de forma picara:

-          Me parece que los dos estáis locos por acostarse el uno con el otro ….-

Don Félix le miró, con más rabia si cabía, y ella , sorprendida ante su intervención , para luego mirar a Don Félix ,arrobada.

-          Ay , Don Félix ,Don Diego tiene razón…no sabe la de veces que me he masturbado pensando en usted….cuando le veía con ese uniforme, esos pantalones tan ceñidos, esas botas …- y le acarició la de la pierna izquierda, sugerente – y cómo me ponía cuando me regañaba , con esa voz ….ayyy ¡¡¡

Don Félix la miró a través de sus gruesas gafas , con la boca abierta y la polla , en pleno éxtasis, mostró en toda su gloria el escondido glande , y comenzó a dar sacudidas porque más no podía empalmarse.

-          No me digas ….con la de veces que yo he soñado en darte una buena lección , con esa pose de decente ….¡¡de darte un buen pollazo en el higo ¡¡

-          Ay, Don Félix, no me diga eso que me corro aquí mismo ….- dijo ella, ofreciéndose solicita , desabrochándose la blusa y dejando al aire sus tetas, cuyos pezones estaban ya como dos pitones .

Don Félix no dudó en agarrarle las tetas , lo que provocó que ella diera un gritito de puro gusto , al notar las manazas del capitán abarcar sus durísimos pezones ; el capitán comenzó a masajearlos a placer, con la palma de sus manos, para luego tomarlos entre la punta de sus dedos , dándoles pellizquitos que ella recibió con alborozo .

-          Aaaayyyy , Don Félix , por Dios, que me da algo ….oooohhhhh ¡¡¡¡¡- decía ella, con la cabeza echada hacia atrás de puro éxtasis .

-          Ahora verás de lo que es capaz Don Félix, condenada ….- dijo el capitán, incorporándose y metiéndose el pezón izquierdo en su boca .

-          Ay, ay , ay …..por Dios, qué malo es usted , Don Félix ….- dijo ella, mientras sentía la lengua del oficial lamiendo y recorriendo su sensible piel , jugando a succionarle, dejando por un instante que la saliva se evaporase para provocarle una intensa sensación de frío , que inmediatamente desaparecía al englobarlo de nuevo con su húmeda y caliente lengua ; la alternancia del frio y el calor le provocó un intenso y curioso orgasmo que no pudo disimular.

-          Ah…oh….Dios….Dios….Don Félix ….- musitaba entre jadeos .

-          Eres una calentorra de primera …- le dijo el oficial, sonriendo y atacando sin piedad la otra teta – ya sabia yo que eras capaz de correrte solo tocándote las tetas…- y engulló el pezón , dándole un pequeño mordisco .

-          Joder, Don Félix, a ver quien es capaz …..de ….no …..correrse si es usted….quien le come las tetas a …una ….servidora…..ohhhhh….ahhhh – gemia ella sin parar , con los ojos cerrados.

-          Asi me gusta – le dijo Don Félix, entre lametón y lametón- tratándome con respeto, que soy capitán …y el padre de tu amiga .

Don Diego miraba , divertido y excitado, como las tetas de la universitaria estaban ya brillantes de la saliva de Don Félix , provocando que incluso a veces un hilillo de la misma se extendiese desde el pezón hasta la lengua del capitán ; ella parecía haber entrado en una especie de meseta , y los orgasmos se sucedían ante las maniobras del oficial ; los propios huevos de Don Diego empezaron a protestar , doliéndole, porque su polla otra vez estaba como un junco ,inevitable ante aquel delicioso espectáculo que le estaban ofreciendo su superior y aquella inexperta joven que en menos de 12 horas había pasado de ser virgen a perder la virginidad con él, y ahora a disfrutar de una buena comida de tetas por parte de Don Félix .

-          Don Félix ….ahora quiero que me folle ….

El capitán paró en seco sus lametones y se la quedó mirando , a través de sus gafas de gruesos cristales , embobado .Ella notó como su coño, ya húmedo ante la situación, chorreaba ante aquella mirada .

-          Si , Don Félix, me he estado reservando toda para usted ….- y se llevó la mano a sus empapadas bragas .

Don Félix focalizó su atención en la entrepierna de la joven, lo que ella aprovechó para mirar a Don Diego y sonreir con picardía , llevándose el dedo índice a su boca para indicarle que no hablase.

Efectivamente , el sorprendido comandante se quedó de una pieza , al oírla ofrecerse como si fuese virgen , cuando la noche pasada se la había beneficiado , siendo la primera vez que era penetrada por un hombre ; este giro lo volvió loco de interés y de gusto , poniendo toda su atención en cómo iba a hacer tal cosa .

Y lo que hizo ella fue dirigir la mano del capitán hasta posicionarla sobre su húmeda prenda, de modo que una vez allí, la apretó sobre la tela; Don Félix se volvió loco de deseo al percibir su palpitante vulva bajo la fina seda , e intentó introducir el dedo ; la tela se mostró firme , y ella aprovechó ese momento para confundirle .

-          Ay  , ay …..uy , Don Félix, creo que ya …no soy virgen …..esos dedos ….ufff – dijo, mordiéndose el labio inferior .

-          Ahora verás si dejas de ser virgen, desvergonzada ….- y , de un tirón, le arrancó las bragas, dejando su indefenso coño al aire y a merced de los manejos de Don Félix , el cual no perdia el tiempo y ya estaba separando  con sus dedos su vulva .

Ella solo podía suspirar al notar la experta mano del padre de su amiga manipular su entrepierna, mientras le miraba arrobada , con la boca entreabierta ; Don Félix se acercó y comenzó a besarle apasionadamente , metiéndole la lengua , mientras sus dedos seguían jugando alrededor de su vagina , explorando su entrada .

Dejó de besarla y la miró , sonriendo .

-          Ya veo que en este chochito todavía no ha entrado nada que no hayan sido mis dedos hace un momento ….está listo para algo más…- y la atrajo hacia si, echándose sobre ella y rodeándose de sus piernas alrededor de su cintura .

La polla de Don Félix , empalmada al máximo, emergió entre sus piernas ante la maniobra , y se detuvo un momento , para que ella pudiese admirarla …y por supuesto, para que Don Diego viese que , a pesar de haberle follado hacia un rato, era tan macho como capaz de desvirgar a una universitaria inexperta .

-          Ay, Don Félix, tenga cuidado , que me da miedo ….- dijo ella, mostrando  admiración y respeto ante la virilidad en erección del oficial .

Don Félix no dijo nada, solo se acercó y , con un golpe de cadera, restregó su miembro entre las piernas de ella, posicionando la polla justo a la entrada de su vagina .

Ella notó perfectamente la punta de la polla de Don Félix al igual que la noche anterior la de Don Diego, de modo que exclamó :

-          Uf, Don Félix, me siendo como clavada ….¡¡ay, qué gusto, por Dios ¡¡¡

-          Pues ahora verás …..- y dio otro pequeño empujón , de modo que le metió el glande en su totalidad .

Aquí ella ya no tuvo que disimular, sino que se dejo llevar por el tremendo placer que estaba sintiendo ; la polla de Don Félix era diferente a la de Don Diego, más pequeña, pero igual de deliciosa , y al saberse penetrada al fin por aquel macho que siempre había sido su ideal , le provocó de nuevo un orgasmo .

Don Félix, sonriendo triunfal, le fue metiendo poco a poco su polla, hasta llegar al final ,y notar como sus huevos chocaban con el periné de ella .

Ella no se atrevía casi ni a respirar , sintiéndose atravesada por aquel pollón ….¡¡ y era Don Félix , al fin ¡¡¡

-          Que, dime ahora como te sientes mientras  Don Félix te la clava ….dímelo….- le dijo, mientras la miraba sonriendo , sudoroso y congestionado .

-          En ….la pura gloria ….do….Don Félix ….ohhhh …..- dijo ella, jadeando .

-          Pues sólo he comenzado …..- y lentamente , comenzó un rítmico mete-saca que fue aumentando progresivamente de velocidad .

Don Diego miraba absorto el rítmico movimiento del hermoso culo de Don Félix a cada acometida, mientras ella musitaba palabras de cariño hacia el capitán.

-          Don Félix, le quiero, le adoro …..siempre lo he querido ….ahhh ….

Don Félix, que había adquirido un ritmo endiablado , se la seguía clavando mientras la miraba arrobado y sonreía ; acabó derrumbándose sobre ella, mientras se corria a gritos .

-          Te quiero, joder, te quiero….- decía ahora el, entre suspiros y jadeos- Cristina ....

-          Ay, Don Félix, no me diga eso ….

Finalmente se dejó caer sobre ella, exhausto .Pero poco duró el descanso, ya que el sargento Eusebio y el cabo Severiano se habían despertado , vestido y despedido de la sobrina de Don Diego y estaban llamando a la puerta ; Don Diego  y Don Félix se vistieron aprisa y se despidieron de la universitaria , doblemente desvirgada por los oficiales , y los cuatro se marcharon a la academia, dejando a aquellas dos mujeres plenamente satisfechas y muy contentas con aquellos servidores de la Ley .

Ni que decir tiene que aunque Don Diego no pudo desahogarse sexualmente , su polla ( y sus doloridos huevos ) , lo agradecieron , especialmente por lo que se avecinaba y de lo cual el era participe sin saberlo , ya que la satisfecha universitaria estaba maquinando cómo organizar una promesa ; y hemos de puntualizar que el deseado comandante logró, por fin recuperar uno de sus slips, que se le habian caido a la madre de Cristina , en el suelo de aquel dormitorio testigo de tanta lascivia .

Mas de pippilotta

Don Diego en casa de Don Felix - primera parte.

Botazas : el otro lado y la retaguardia.

Cristina y los visitadores, capitulo 14.

Cristina y los visitadores, capítulo 13.

Cristina y los visitadores, capítulo 12.

Botazas : el relax y el perro de Ricky Martin.

Botazas : necesidades fisiológicas .

Botazas : ensoñaciones .

Botazas : en el ascensor .

Cristina y los visitadores . capítulo 11.

Cristina y los visitadores .Capitulo 10.

Cristina y los visitadores .Capitulo 9.

Cristina y los visitadores .Capitulo 8.

Cristina y los visitadores .Capitulo 7.

Cristina y los visitadores, capítulo 6.

Cristina y los visitadores .Capitulo 5.

Cristina y los visitadores .Capitulo 4.

Cristina y los visitadores .Capitulo 3.

Cristina y los visitadores .Capitulo 2.

Cristina y los visitadores .Capitulo 1 .

El uniforme de tito Diego, capitulo 24.

El uniforme de tito Diego, capitulo 23.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 22.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 20.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 19.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 18.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 17.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 16.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 15.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 14.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 13.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 12.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 11.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 10.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 9 .

El uniforme de tito Diego ,capítulo 8 .

El uniforme de tito Diego ,capítulo 7.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 6.

El uniforme de tito Diego ,capítulo 5

El uniforme de tito Diego ,capítulo 4 .

El uniforme de tito Diego ,capítulo 3

El uniforme de tito Diego ,capítulo 2

El uniforme de tito Diego ,capítulo 1