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La novia ninfómana 3 parte

en Sexo con maduros

La novia ninfómana 3

 

Cris le cuenta a Jordi los inicios de su sexualidad.

Al día siguiente, la vi, estaba como siempre, despampanante, tomamos un café tratando de disimular toda mi inquietud interior y le dije que me habían prestado una peli porno y que, si le apetecía verla conmigo, ella se rio y me dijo que no sabía que me gustaba el porno, pues sí, le dije que de vez en cuando me apetecía, que podíamos ir a su casa y la viéramos mientras me invitaba una cerveza.

“Ok, me hace ilusión la idea de ver una peli porno contigo.” me dijo con una sonrisa.

Por raro que pareciera nunca había entrado a su casa, o más bien nunca me había invitado a pasar, las veces que la acompañaba me despedía con un beso amoroso en la puerta y ya. Tenía un piso lujoso en la zona del Perellonet.

 Esta vez fue diferente, me invitó a pasar y me quedé asombrado del lujo con que vivía, nunca me lo pude imaginar, era un piso bastante grande le calculé unos 150 metros cuadrados, la sala de estar era de un estilo muy moderno toda recubierta en piel, y un gran mueble con todo tipo de electrónica, desde un tv de 60 “hasta lo último en sonido y reproductores de video.

“Bueno, pues aquí tienes, todo lo necesario para ver tu porno, y es más si nos apetece puedo hacer unas palomitas de maíz, (risa)”

-       Pensé en mis adentros que en un momento se le iba a quitar la risa.

-       Bueno, estupendo, tienes un piso maravilloso.

-       Si, algún día te contaré como lo conseguí.

-       Yo por mis adentros pensé que seguramente puteando.

-       Nos sentamos en el sofá y puso el DVD con el video que le había traído, en seguida se sentó a mi lado abrazándome cariñosamente, no bien hubo empezado cuando vi como su preciosa cara se iba descomponiendo y empezaba a palidecer, pero en seguida detuvo el DVD y se paró delante de mí, nunca la había visto de esa manera, estaba calmada pero su cara reflejaba una angustia interior cuando se dirigió a mí con mucho coraje.

-       “Ya veo que me has jugado una broma muy pesada, pero ahora vas a tener que decidir si quieres seguir conmigo tal como soy o nos despedimos para siempre. Si decides lo primero es que me amas y me aceptas como soy como yo te he aceptado como eres. Tú decides mi amor. Antes te voy a decir que ya había decidido contarte como era yo en realidad, únicamente estaba esperando a que maduraras un poco más y no te dejaras guiar con morales estúpidas”

 

Su respuesta me dejó frio, nunca me imaginé que fuera a reaccionar de esa manera, ella al ver mi turbación se acercó, y tomándome en sus brazos me dijo:

“Perdóname Jordi., nunca quise burlarme de ti, yo pensé que algún día disfrutarías viéndome tener sexo con otros. Y pensé que aún disfrutarías más sabiendo que yo sabía que estabas allí viéndolo, sabiendo que yo quería que vieras. Te amo., y nunca haré algo que te haga infeliz... De hecho, si no fueras tan tímido yo haría cosas que te hicieran feliz más allá de tu imaginación. Y créeme, ya tengo idea de que tan extrema es probablemente tu imaginación, mi único deseo es que me disfrutes,”

En ese momento todo mi mundo que imaginé se desmoronó, me había desarmado completamente y la ira que se había adueñado de mí desapareció y en su lugar me sentí inmensamente agradecido por lo que me decía y le aseguré que estaba locamente enamorado de ella

... Oh, Jordi, me haces tan feliz, hay tanto gozo esperando por ti. Mi dinero te comprará todo el placer que esta tierra tan prodiga y toda la imaginación del hombre puede ofrecerte. Y lo que el dinero no pueda comprar, te lo daré yo misma usándome para ello. Un poeta dijo que la tierra era un lugar para amar, y así es. Si solamente eres honesto contigo mismo. Te sacudirás de todas esas reglas chabacanas que la gente pone a tus sentimientos. Debes parar de sentir lo que la gente te haya dicho que debes sentir y empezar a tener conocimiento de lo que genuinamente sientes en la parte más secreta de tu corazón. ¿Por qué no vivir tus emociones, y no las de ellos?”

“Oh, yo sé que no es fácil al principio” siguió diciendo. “Puedo entender un poco que tan avergonzado te sientes. Ella se acarició a si misma a través de su blusa de seda, se estaba poniendo intensamente excitada. Metió su mano en la blusa y empezó a pellizcarse los pezones. “Quiero que las veas ¡y también que mires mi coño” Cris deslizó su otra mano bajo su falda. Su voz se volvió más gutural “Mira ahora tengo mis dedos en el coño., Dios estoy tan húmeda ¡Si quieres me recuesto y me subo la falda para que veas como me acaricio, por el tiempo que quieras, ¡Me hare correrme yo misma para que veas” ¡Ella me tomó de la muñeca cuando yo empezaba a huir, y gentilmente me empujó en el sofá! “OK, mi adorado e inocente amor, Seré buena”” Pero recuerda cuando estés en la cama en la noche preguntándote lo que hubiera podido ser, como sentarte y mirar, mientras te masturbas, recuerda que estoy esperando por ti cuando quieras tenerlo. Todo un universo de placer erótico está esperando por ti cuando tú quieras, todo lo que necesitas hacer es pedir.”

“Solo piensa, mi amor, que para el resto de tu vida podrás usarme de cualquier forma que desees. Todos esos pasajes húmedos y especiales de mi cuerpo están a tu servicio. ¡Inclusive mi coño que podrás usar sin ninguna protección! ¡Todo lo que quieras probar, no importa que tan sucio, no importa que tan pervertido, solo tienes que pedírmelo y lo hare!, en tan solo unos días, estarás chupando mis pezones y lamiendo mi coño, follaras mi coño y follaras mi boca y follaras mi culo”. Ella tomo de nuevo su muñeca y lo detuvo. “Si, también mi culo; y, lo que, es más, te encantará, de la misma manera que me encanta a mí. No te mientas a ti mismo Jordi., es algo que te puedes engañar, Que seas tímido y que te avergüence que esté hablándote de esta manera es correcto, es natural. Pero sé cándido en esa parte de ti mismo en donde nadie sabe que estás pensando. Si puedes ser honesto contigo mismo, entonces podrás tener todo el milagro de este extraño y especial universo que te estoy ofreciendo. Ese mundo que la gente persigue sin encontrarlo y que de pronto se encuentran con que es demasiado tarde, y que ya están viejos.

“Así, podrás estar en este paraíso, podrás disfrutar follando mi culo. Y podrás admitir cuanto regocijo te dan los usos que me podrás dar. Me podrás mostrar a tus compañeros de escuela, y si quieres, me los follaré. ¡NO TE CONMOCIONES!, admite que hay algo dentro de ti que te emociona imaginar viendo cómo se follan a tu novia! Yo serviré a tus amigos, puedes incluso intercambiarme para que te ayuden a follar a sus hermanas, y tantas otras cosas…Podemos arreglar para que me espíes en el elaborado ritual de un hombre seduciéndome, también que mires como hago el amor con otras mujeres, o llevarme algún vagabundo, el más sucio que encuentres para ver como hago las cosas más bizarras y sucias con él, me veras lamiendo su asquerosa verga y limpiando la suciedad de su culo con mi lengua y …. Y verás a hombres azotándome, y descubrirás que tú también quisieras azotarme, y me azotarás, y gozarás viendo como disfruto que me azoten, y que después de ser azotada estoy aún más sexi...

¿Quieres saber cómo fueron mis inicios en volverme la mujer completa que soy?

Yo siempre fui una chica de las que llaman calienta pollas, me gustaba ver como los chicos de mi clase o los hombres mayores se regocijaban viendo mi cuerpo tan sexi que desarrollé desde muy temprana edad, …En ese entonces vivía con mis padres en un edificio de apartamentos en una zona no muy privilegiada como esta… En la azotea vivía un viejo que era el portero del edificio y que a la postre se convirtió en mi preceptor del arte de la sexualidad Todos los días subía, escondiéndome para verlo a través de la ventana de su covacha, yo sabía a qué horas él se sentaba en su sillón frente a la TV a ver películas porno y luego se sacaba su polla que me parecía enorme y empezaba a masturbarse, yo mientras tanto también lo hacía acariciándome con el dedo mi rajita. Un día cuando subí me lo encontré fuera de su casa y me llamó para decirme que, si lo ayudaba a buscar una aguja que se le había caído en su sala, ya que no tenía buena la vista, yo pasé a su casa y el aprovechó para tocarme disimuladamente diciéndome lo bonita que estaba y que ya tenía un cuerpecito de señorita, yo le sonreí pícaramente y el aprovechó para tocarme el culo y me preguntó si se lo enseñaba, yo le dije que sí pero que no le dijera a nadie. Ese fue el principio, cada día me metía mano y me tocaba el ano y el coño cosa que me hacía gozar como nunca, después me pregunto que si me habían besado ese culo que tenía tan apetecible, yo le dije que no, que mis compañeros eran unos tontos, cosa que aprovecho y me dijo que le dejara besarlo, yo accedí casi de inmediato, y así empezó una serie de toqueteos y besuqueos que me hacían derretir, un día me dijo que si yo quería el me enseñaría a gozar por el culo como una señorita. Y yo naturalmente acepté, me dijo que primero tendría que acostumbrar mi culito para que no me doliera y después iba a gozar mucho, yo, aunque temerosa le dije que sí, pero que como seria eso, él me dijo que todos los días tendría que ir para que me metiera una velita cada vez más grande hasta que ya no me doliera y entonces podría dar placer a los hombres como mujercita sin temor de quedar preñada. Así pasaron varios días en que me metía una vela por la mañana antes de ir a la escuela y tenía que pasar en la tarde a enseñarle que la vela seguía en su lugar, después le pedí que me dejara tocar su miembro, y pasamos a lo que llamó enseñanza del arte de la felatio que toda señorita debe saber. Después de varias semanas me convertí en una experta en el arte de la mamada y además me metía velas cada vez más gordas que a mí me gustaba. Fue entonces cuando ocurrió el accidente fatal de mis padres y tuve que mudarme a vivir con unos tíos que actuaron como mis tutores, ya no volví a ver al viejo portero, pero todavía lo recuerdo con cariño pues fue mi primer amante.

 

 

 

 

 

. Sin embargo, las enseñanzas de Don Jacinto (así se llamaba el viejo portero) hicieron de mí una jovencita libre de prejuicios, y a los escasos doce años era ya toda una experta en mamadas, fui famosa en la escuela como Cris la mamadora, y yo estaba orgullosa de ese mote. A los trece años ya me habían tirado todos mis compañeros de grupo y algunos otros de cursos más avanzados.

En esa época estaba muy recortada económicamente por mis tutores, pues no lo sabes, pero eran muy estrictos con relación a mis gastos, así que, cuando tenía apenas trece años, ya era toda una mujer en cuanto a desarrollo sexual y con un  cuerpo muy desarrollado que daba envidia a muchachas  tres o cuatro años mayores que yo, me gustaba la ropa de marca y otros gustos que no me podía dar, así que una vez, recién entrada en la secundaria, necesitaba dinero, mucho dinero, así que me vendí yo misma a un club de millonarios degenerados (de un grupo sado-masoquista) por una semana. Tuve que hacer todo lo que ellos quisieran. Absolutamente todo (Pausa) Parte del tiempo estaba con cadenas. (Pausa). Esa semana fue fantástica y fue mi descubrimiento de mi verdadero Yo

Hice de todo, desde dejar que usaran todos mis orificios para la satisfacción de sus más oscuros deseos hasta dejarme azotar para placer de alguno de ellos. (Pausa)…incluso usar diferentes objetos o anguilas o babosas que metían en mi culo o vagina mientras observaban masturbándose… Así es como conocí a Walter. Era un hombre adorable y se enamoró de mí, y yo de él, déjame describirlo, tenía como sesenta años, delgado y muy elegante y con un sentido muy especial del erotismo y la habilidad para dar placer y conocer las debilidades de su pareja, pero sobre todo para sacar a flote todos los vicios que tenemos ocultos  en nuestra maravillosa naturaleza para dar y recibir placer, … así entonces a la semana siguiente me envió una nota para una cita, yo accedí de inmediato, me ordenó ir vestida únicamente con un chubasquero y sin nada de ropa interior

 

El trayecto hasta su casa fue infierno maravilloso. Sentía que todo el mundo me observaba, me dio por pensar que sabían que iba desnuda bajo el chubasquero, que por su color llamaba la atención más de lo deseado. Cualquier movimiento acentuaba mis sospechas. Me sentía muy húmeda, el miedo y la vergüenza se había transformado en euforia, ya estaba segura que era capaz de realizar cualquier cosa que se me ordenara.

Frente a la boca del metro había una casa de estilo colonial de 3 pisos de altura y un pequeño jardín detrás de una valla. Me abrió la puerta, el hall de la casa era de mármol con unos muebles antiguos, se oían voces que salían de una sala continua, no estábamos solos, el mundo se me vino encima, un montón de dudas aparecieron, ¿me habría equivocado al leer la nota?, estaba nerviosa, la angustia crecía en mí. Me beso en la mejilla y me hizo pasar a una salita, decorada con lacas chinas, el mobiliario también era chino y salvo un sillón parecido a un trono solo había cojines en el suelo, unas vigas de madera sobresalían del artesonado del techo, y de ellas me pareció ver colgadas unas argollas de hierro. Me pidió el chubasquero, mi duda interna era muy grande quería obedecer y quitármelo, pero pensaba en las voces si me veían desnuda me moriría de vergüenza, y eso parece ser lo que quería él.

La segunda vez que me lo pidió, me lo quité y se lo di. Se quedó mirando mi vestuario o más bien mi desnudez. Su rostro seguía inescrutable, no sé si le gustaba o no lo que veía. Me vendó los ojos con un pañuelo de seda negro, se llevó mi chubasquero y me dejo desnuda en medio de la salita inmersa en un mar de dudas............

 

 

Debió pasar una hora más o menos y seguía sola en la habitación ya no se oían voces, no sé si se habían ido o estaban todos callados tampoco podía ver que sucedía. Un escalofrío recorrió mi cuerpo, notaba el miedo todavía no sabía por qué, mis pensamientos mi calenturienta imaginación, no lo sé. De repente el sonido de una voz cálida me tranquilizó, era él, me cogió de la mano con suavidad me llevo junto al sillón, me hizo poner de rodillas y él se sentó recuerdo sus palabras “hoy es un día muy importante, sé por qué has venido y tú también lo sabes, si decides quedarte no saldrás de aquí en una semana, serás castigada sin motivo y aprenderás a obedecerme. Hay que forjar tu carácter. Si no estás segura puedes irte ahora mismo”. Mis miedos no se habían disipado, aun creía que había más gente, su tono paternalista me hacía sentir segura. Todo mi ser bullía de excitación, ahora era capaz de aguantar cualquier infierno, La primera noche recibí un fuerte castigo, me azoto los muslos, las nalgas y los riñones, con un látigo primero y con una vara más tarde, notaba su aliento en mi mejilla cada vez que se acercaba y eso era suficiente para darme valor y aguantar..........

........Me llevo a un cuarto pequeño, contiguo a la sala china, parecía la celda de un monasterio, una cama de barrotes de bronce, un pequeño armario y un reclinatorio, en la pared de enfrente una puerta que luego averigüe que era un cuarto de baño, no tenía ventanas al exterior. Esperaba de pie en medio de no sé cómo llamarlo, tanto lujo en un sitio y esto tan austero, oí el ruido del agua al caer un perfume suave y   agradable empezaba a inundar mi nuevo aposento, mis  muslos y nalgas me dolían, no me atrevía a mirarme ni a tocarme, se  puso delante de mí, no había perdido la compostura ,su cara seguía igual, su traje inmaculado, me ordenó quitarme los zapatos, el liguero y las medias, totalmente desnuda me guío a la estancia contigua, era muy amplia, mayor que la habitación, todo de mármol, suelo y paredes, el techo de espejo reflejaba mi cuerpo, en medio una gran bañera redonda también de mármol se llenaba de agua y espuma, el calor que desprendía llegaba hasta mí, detrás de la bañera un espejo con dos lavabos delante, a la izquierda un retrete y frente a él un bidé. La forma de guiarme, suave, me hacía dudar, tan frío y cruel hace unos momentos y tan cálido y cariñoso ahora. Me sumergí en el agua, al rozar la zona afectada por los azotes sentí un escalofrío, como si otro latigazo acabara de estrellarse contra mi cuerpo. Me explicó que era causante a la esencia de hierbas que había en el agua, me harían sentir bien, me relajarían y reducirían las zonas inflamadas. Frotó mi espalda con suavidad y pasión, mi excitación estaba por las nubes, pensaba en tenerle dentro, salí fuera de la bañera, una inmensa y suave toalla recubrió mi cuerpo con una agradable caricia, el me secó, salió fuera y me dejo sola, estaba segura de que lo hizo para darme un poco de intimidad, aproveche para hacer mis necesidades, me apresure, si volvía y me veía así..., me ruboricé solo de pensarlo. Salí al cuartucho, había preparado unas muñequeras y unas tobilleras que había sujetado a la cama. Me dijo que dormiría todas las noches atada. Me tumbé de espaldas y me ató en cruz. Todavía tenía esperanza de que utilizara mi cuerpo, no mi cuerpo, a mí entera. Apagó la luz y se marchó. Esa noche el orgasmo no fue físico ni tan siquiera me rozó, mi cabeza empezó a elucubrar y todas mis fantasías surgieron sin ningún esfuerzo. No sé cuántas veces me penetró y me utilizó, esa noche mi placer fue inmenso….

Ese segundo día, vino al cuartucho, encendió la luz, iba perfectamente vestido con traje azul y corbata de tonos rojos y dorados, traía una bandeja con zumo, café y leche y unas pastas. Soltó mis ataduras y masajeó mis tobillos y muñecas, me hizo levantar y me acompañó al cuarto de baño, este viaje no se marchó, se quedó mirando como hacía mis necesidades, no había visto una puerta en el rincón, era una ducha.

Abrió los grifos y el agua comenzó a correr, me duché y él me secó con suavidad y dedicación. Volvimos al cuarto donde desayuné, al terminar me acompañó hasta la salita china. Me dijo que esas tres estancias era a todo lo que podía aspirar en esa semana, la única que tenía ventanas al exterior, las tenía tapadas con unos gruesos cortinajes de terciopelo negro, nada de luz se filtraba del exterior. No sabía si era de día de noche, o que hora podía ser, ningún reloj me aclaraba mi incertidumbre. Me ató a las argollas que pendían del artesonado, las conocería bien, en días futuros serían una cita ineludible para mí. Una vez sujeta de pies y manos en forma de X comenzó a azotarme, lo hizo con una banda goma de unos 10cm. de anchura.

Comenzó por la parte trasera de mis muslos por encima de mis rodillas subiendo hasta mis riñones entreteniéndose más tiempo en mis nalgas. Los golpes eran secos y muy fuertes, las gomas se adaptaban perfectamente a mi cuerpo y el golpe era en toda su dimensión no en un punto concreto. La parte delantera tampoco se libró de los golpes, fueron menos en número y en intensidad principalmente en pechos y muslos, quede extenuada. Antes de soltarme aplicó una pomada por mi zona afectada que mitigó la calentura y el escozor. Me tendió en los cojines del suelo, me dijo que tenía ir a trabajar. Sabía perfectamente que no me levantaría hasta su regreso. Antes de salir me cubrió con una suave tela, no hacía frío, pero la agradecí. A su regreso se sentó en el sillón a mi lado. Me hizo poner frente a él arrodillada sentada sobre mis talones con las rodillas muy separadas. Hablamos largo tiempo acerca de la sumisión, me aclaró dudas y temores y me dijo lo que ahora hablaba al teléfono.

- A partir de  ahora tu cuerpo me pertenece solo yo o los que yo designe te tocaran con  objeto de producirte placer...Te entregarás a cualquiera que yo escoja y harás para mi todas las perversidades que nunca te has atrevido a hacer con él solo objeto de darme el placer visual, Te arrojaré a hombres sucios y perversos que no hayan descargado sus huevos en semanas y te entregaras a ellos como la más puta de las hembras y gozarás sabiendo que me masturbo observando.-

Yo le prometí que así sería y ahora había  fallado. Ese día me ató a una mesa estrecha larga y un poco alta, con mis rodillas flexionadas mis piernas quedaban colgadas, todo el cuerpo sobre la madera, me mantenía pegado a ella una correa a la altura de la parte superior de mi espalda, en esa posición mis nalgas y mi sexo quedaban al aire, mis brazos los ató a lo largo de las patas delanteras. Por primera vez en esa visita, vi la herramienta de mi Amo, la metió en mi boca, estaba henchida de placer, por fin había decidido ofrecerme algo suyo, me afané en la mamada dificultada por la posición, solo tenía el juego del cuello, después me folló largo rato por el culo. Nunca en la vida había disfrutado tanto. Me soltó, comí un poco de fruta y permitió que me aseara y volvió a atarme en la cama. Metió un consolador en mi ano, me extrañó el cablecito que salía de él. Me besó en la boca, un beso profundo. Apagó la luz y se marchó, me dejó sumida en mis pensamientos.......Regresó pasadas dos horas, se acercó a mí y musitó a mi lado. ¿Recuerdas lo que te dije de entregarte a otros hombres para satisfacerme viéndote cómo te tratan como la peor de las putas? Le dije que sí que lo haría gozar viéndome hacer las peores cosas. Enseguida se dirigió a la puerta y llamo a alguien, no lo podía creer, era un hombre de unos cincuenta años fornido y sucio, parecía un vagabundo, pero con una cara perversa que se ocultaba tras una barba desaliñada. El olor llegaba mezcla de alcohol y sudor. Recuerdo perfectamente cómo se dirigió a mi señalándome y diciéndole.” Esta es la puta de que te hable. Cumple tu trabajo, si me satisface lo que vea te pagaré bien”. Se sentó en un sillón y prendió las cámaras de video que se escondían en todos los rincones de la habitación preparándose a observar y a masturbarse por mí. -Me acerque al hombre y me arrodille ante él. pude ver la cara de satisfacción de mi amo y eso me hizo representar mi papel lo mejor que podía. Lo desnudé besándole y pasando la lengua por su sucio estomago cual si fuera mi amante. Se sentó en la orilla de la cama y ya desnudo comencé a recorrer mi lengua por cada lugar de su prominente vientre hasta llegar a su verga exageradamente grande pero todavía flácida y con la piel cubriéndole todo el glande ..Miré de reojo como mi amo se regocijaba masturbándose ..levante la piel descubriendo el glande que empezaba a tomar otras dimensiones, tenía un anillo amarillento de semen reseco mezclado con orina de varios días, su olor impregnaba la habitación mientras desaparecía en mi boca. El hombre me agarró de la nuca y empujó salvajemente, sentí que me atravesaba la garganta, pero soporté y empecé a lamer de arriba abajo hasta sus testículos. De repente lanzó un fuerte grito y metiéndola otra vez en mi boca descargó un torrente de semen en mi garganta, volví la cabeza para que viera como lo tragaba y pude ver a Walter como eyaculaba sobre el piso, me abalancé para lamerlo, pero me detuvo.” déjame ya me diste placer, ¿Quieres darme más? Le contesté que sí. Se levantó y acercándose al hombre le empezó a decir algo en voz tan baja que no pude escuchar. Solo pude ver la sonrisa perversa de aquel hombre cuando le decía otras cosas a Walter que él asentía.” Cris, regreso en uno o dos días, atiende bien a nuestro huésped ya miraré los videos para ver que tan bien lo atendiste”. Me dejó a solas con ese hombre ,en esos dos días no hubo cosa alguna que no me  hiciera hacer con él o con los amigos que llevó y a los cuales me vendió .Después supe que cuando me dejó sola con el vagabundo  salió en busca de los hombres que le había recomendado por lo bajo el vagabundo cuando le susurró sus planes de perversión, ,se encaminó a los muelles hacia la calle del bar que le mencionó...cuando vio a los dos negros que le ofrecieron droga en un callejón del barrio chino, inmediatamente supuso que eran ellos, los hombres ideales capaces de todas las perversiones, vulgares y sucios...Recuerdo muy bien sus expresiones cuando me vieron amarrada a las argollas, desnuda y azotada por el vagabundo...

- para mí ese video fue la prueba de mi entrega absoluta a Walter. Me dijo que lo llevaría a todas partes para masturbarse viéndome…Recuerdo muy bien que después de haberme dejado con aquel hombre este me amarró a la cama y comenzó a azotarme, así estaba cuando entraron aquellos hombres, me alarmé, pero en seguida me sentí segura pensando en que Walter no permitiría que me hicieran daño. Siempre tuve la certeza de estar vigilada. Me sentí el objeto de su placer y deseaba ser usada de todas las formas por aquellos infames para satisfacer a mi amo no presente...me esmeré siendo toda ternura ante aquellos brutos, mi cuerpo fue el receptáculo de todos sus deseos aún los más viles, penetraron todos mis orificios, recorrí todos sus cuerpos sin dejar un solo lugar que no probaran mis labios, mi boca lamió todos sus sucios orificios, bebí lo mismo su semen que su orina. Durante 10 o 12 horas me usaron como quisieron, lo mismo besaba y lamía sus pies que los orines que habían regado en el suelo con toda intención para que yo los recogiera o sus culos con restos de mierda después de haber usado el retrete. Me sentía sucia y al mismo tiempo deseaba que Walter me viera así, deseaba ser la puta que satisficiera todas sus morbosidades mientras se masturbaba viéndome como hacia todas esas perversidades.

Después de esa semana me pidió que me mudara con él, estaba feliz con esa nueva vida llena de lujos y lujurias y sobre todo estando al lado del hombre que amaba.

Muchas fueron las noches nos acostábamos desnudos y veíamos esa filmación, gozaba cuando yo le preguntaba que parte le excitaba más, me decía la parte en que aquellos desgraciados meaban en mi boca o en la que se veía como metía la lengua en sus culos y metía un dedo completamente para después sacarlo y meterlo en mi boca.

Después hacíamos el amor en todas formas y gozaba plenamente.

 Cada fin de semana invitaba a diferentes amigos, inclusive parejas con los cuales hacia todo tipo de perversidades que se les ocurría.

Escucha…una noche me llevo a un pequeño puerto de pescadores, me quedé ligeramente atrás mientras Walter discutía con un marinero en el muelle, entonces vi como el hombre le da unos billetes a Walter y regresa hacia mí. “Subirás a ese pequeño barco y pasaras tres días con los marineros. Carecen de mujeres cuando salen de pesca al mar. Obedece sus deseos. Les preguntaré como te has portado cuando regreséis”. Le dije que necesitaría algunas cosas para asearme y entonces él me dijo “No te llevaras nada. y no te lavaras en todo ese tiempo, quiero verte y olerte cuando venga por ti”.

Entonces Walter me abandonó sin más palabras, yo estaba nerviosa y excitada a la vez, me voltee y le susurre que haría de todo y que después le contaría. Él sonrió y se alejó. Me embarque con el capitán y los ocho marineros que estaban de pie en la cubierta, todos ellos eran hombres rudos de diferentes etnias había negros y latinos, me hicieron bajar a un cuarto debajo de la cubierta mientras me tocaban y me decían palabras obscenas que a mí me excitaban. En la obscura bodega había cajas y toneles por todas partes, el nauseabundo olor a pescado podrido invadió mi nariz, allí el capitán me obligó a sentarme en unos sacos sucios y me dijo “Esta es tu cama” aquí permanecerás todo el tiempo, atenderás a mis hombres en todo lo que quieran”, entonces me arranco la falda y me dijo que ahí no la iba a necesitar. En esos tres días me follaban dos o tres veces cada uno, lo que más les gustaba era follarme el culo y la boca. Termine con la vulva y el culo rebosantes de semen, durante esos tres días me alimente casi exclusivamente de semen de los marineros y de algún pedazo de pescado que me dejaban cuando ellos comían y que rociaban de semen o cuando hacían caldo de pescado me pasaban un tazón el cual previamente había sido bautizado con orines de alguno de ellos y que les hacía reír cuando les decía que estaba delicioso, ellos no sabían que a mí me excitaba más cuando era humillada de esa manera. Cuando regrese estaba Walter esperando en el muelle. Me abrazo tiernamente y beso mis labios que despedían el olor a semen seco y orina. Al llegar a casa me dijo que no me bañara todavía, que le contara con detalle lo sucedido en el barco mientras hacíamos el amor con mi cuerpo sucio y apestoso a orines.

Durante varias semanas tuvimos varias aventuras, lo que no se le ocurría a Walter se me ocurría a mí que ya me había convertido en la mujer más pecaminosa y lujuriosa.

Una noche…la recuerdo muy bien. Walter me dijo que me pusiera una falda corta y no llevara bragas. Salimos cerca de media noche hacia uno de los barrios del puerto, allí estaba un billar y me dijo que ahí trabajaba un conocido suyo que había sido su sirviente en alguna época. El local estaba casi vacío, había unos ocho hombres jugando al billar. Walter estaba hablando con el encargado del bar, cuando regresó me dijo que esa noche le iba a servir a la clientela, cada vez que quisieran usar el WC yo los iba a acompañar y los tenía que satisfacer en sus deseos. Se dirigió a los tipos que estaban jugando y les dijo que yo era su esclava sexual y que esa noche iba a ser también la esclava del que quisiera usarla, los hombres aplaudieron y empezaron a decirme obscenidades. William se salió y me dijo que pasaría por mí en dos o tres horas.

Una vez en casa me desnudó y me pidió que le contara todo lo que me hicieron hacer.

Les dije que todos habían usado el servicio, los que pasaban a mear me ordenaban que les sostuviera la verga frente al orinal y después yo les limpiaba con la boca, Me preguntó si alguno había orinado directamente en mi boca, le dije que dos de ellos lo hicieron y que me había tragado hasta la última gota, esto le excitó mucho y me pregunto si alguno había usado el retrete, le dije que sí y le describí como me hincaba frente a él mientras cagaba y mientras me metía su verga en la boca y cuando terminaba se volteaba y le limpiaba la mierda del culo con mi lengua… . , incluso les metía el dedo para limpiarlos bien y luego lo lamia.

Durante esos meses que viví con él los dos sabíamos muy bien nuestros vicios, le sugerí que, ya que le gustaba tanto ver el video que grabó la primera semana, que deberíamos grabar varios DVD con diferentes perversiones, esto le hizo mucha ilusión y así durante casi cuatro meses, grabé decenas de videos, que gozábamos juntos y que también quiero gozar contigo mi amor. Los tengo clasificados por tipo de perversión, tengo una serie con viejos, otra con mendigos, otra con varios hombres y mujeres, incluso también con animales, hay con perros con caballos y burros, y otra serie que mejor la dejamos para el final, cuando tu espíritu acepte cualquier cos que en este momento sea tabú.

 Fue en este periodo cuando una vez llegó con dos amigos Tunecinos, escucha…nunca había conocido a tipos tan degenerados, la primera vez que los vi me sentí un poco aterrorizada, uno de ellos tenía como cincuenta años, estaba medio calvo y lucía una buena barriga, el otro era más o menos de la misma edad aunque era muy delgado y tenía una cara de maldad que daba miedo, ambos tenían pasión por el voyerismo y esto lo sabía Walter por lo que les mostró el video que había sacado en mi primera vez en su casa y que el tenía como su más preciado tesoro y el cual si deseas te mostraré mas tarde,  les encantó ver como una chica tan joven respondiera tan sumisa a todas las perversidades que se le asignaban hacer  y lo convencieron  de llevarme una semana a Túnez, que tenían varios amigos con distintas preferencias sexuales y que sería de gran enseñanza para mí y para deleite de ellos y de él al ver las filmaciones que harían, le decían que unos eran fetichistas de todo lo perverso y lo sucio, otros tenían preferencia por la flagelación y el SM , otros eran amantes del bestialismo, y otros más de otros vicios más extremos como la escatología .Cuando me contó esto Walter, me nació un deseo profundo y morboso como nunca había experimentado, me dijo que iría siempre y cuando estuviera de acuerdo ya que él no podría ir, pero le entusiasmaba la idea de que filmaran todas las aventuras sexuales que pudiera tener, no pude disimular la cara de entusiasmo y deseo y le dije que si eso le daba placer lo haría muy contenta, que deseaba hacer una vez más todas las perversidades que quisieran y darle placer al ver a su puta degradada haciendo de todo. Así me embarque hacia Túnez quince días después, William ya había encargado de que todo tendría que estar filmado y me hizo prometerle que obedecería en todo, haciendo énfasis en todo, repitiéndome que en esas zonas eran muy aficionados al bestialismo, a la escatología y otras perversidades extremas,  me dijo que una vez estando allá no había vuelta atrás, yo le aseguré que estaba ansiosa de experimentar todas las excentricidades sexuales que le satisficieran, y la verdad que Walter gozó muchísimo viendo los siete videos que grabaron en Túnez, durante tres semanas posteriores los veíamos dos o tres veces hasta que vino el desafortunado accidente que acabó con su vida…

Ahora mi adorado Jordi quiero que compartamos esos videos como en su tiempo lo hice con Walter, ven este fin de semana y pasaremos dos días completos haciendo el amor como nunca has experimentado mientras ves mis videos.

 

Continuará.