EL TONTO DE MI NOVIO ME CANSO
Ni en una película de terror, hubiera pasado lo que a mí, gracias al estúpido de mi novio.
Soy Micaela, tengo 17 años, a punto de cumplir los 18, solo faltan 3 meses. Estoy en el último año de la secundaria, y había dicho a mis amigas que no me pondría de novia hasta mas adelante porque quería divertirme, soy virgen porque quiero, tuve muchas ocasiones pero no encontré con quien debutar, nadie me iba bien.
Maldita la hora de romper lo que dije y ponerme de novia con Omar, todavía me lamento de ser tan estúpida, pero creí estar enamorada y después me di cuenta que lo estaba, pero Omar no se, es tan tonto que no se si tiene capacidad de enamorarse.
Creo ser linda, alta, pelo negro con reflejos rojizos muy largo, ojos verdes, unas tetitas que a pesar de estar en crecimiento se marcan bien, mi cinturita fina resalta una colita bien paradita, bien durita, bien redondita, la parte que amo de mi cuerpo porque sé que casi todos los chicos la aman.
Conocí a Omar en un baile, es lindo, rubio, ojos verdes, alto, parecía una cosa, resultó un terrible boludo.
Al principio todo bien, salíamos a pasear, me llevaba al cine, yo estaba dispuesta a darle mi virginidad pero él no se daba cuenta.
Nos besábamos y cuando yo intentaba tocarle su pene se escondía, me sacaba la mano y se ponía como molesto. Yo no entendía que le pasaba, si era gay, si la tenía muy chiquita, si no se le paraba, mil cosas cruzaban por mi mente.
Lo aguantaba porque lo quería, estaba metida con él, me gustaba.
Pasaron dos meses y nada, solo conseguí que me tocara una teta, le dije que le pasaba, si no lo atraía, y me dijo que no quería apurar las cosas.
Lo peor era que yo me acostumbraba a esto y ya ni lo buscaba, parecíamos buenos amigos a veces.
Para colmo de males, Omar, se puso a hacerse amigo de una pandilla de 4 tipos de terror.
En realidad se juntó con ellos porque les tenía pánico, terror, y hacía lo que ellos le ordenaban, como un corderito, algo que me ponía muy mal.
El que los mandaba era un tal "Lobo", así le decían, un tipo de unos 27 años, negro, con los pelos cortitos y enruladitos, muy alto, vestido siempre con un jean, zapatillas blancas y camisa casi toda abierta, dejando ver su piel bien negra con pelos en el pecho.
Los otros eran estúpidos como Omar, un poco mas vivos, pero idiotas igual.
"Lobo" vivía con su padre, un negro de unos 52 años, y no tenía madre, vivían en una especie de casa de madera que parecía que se venía abajo.
Omar, un día me llevó a una fiesta y allí estaba Lobo con los idiotas al lado. Cuando me vió se sobresaltó y le dijo a Omar sabiendo que yo escuchaba que lo presente. Omar, que hacía todo lo que el otro le decía me presentó.
Lobo, con una tonta excusa lo mandó a Omar a un lado y se quedó solo conmigo. Era repugnante, olía a alcohol y droga, me dijo de entrada "Como podes salir con ese pelotudo?, vos necesitas un hombre en serio, alguien que te desvirgue bien, que te haga gozar y para eso te tiene que doler, vas a gritar de placer y dolor y no te vas a olvidar nunca", lo miré y le dije "No necesito nada, así que te saludo y que te vaya bien, yo se a quien buscar, no necesito tu consejo", pegué media vuelta y me fui.
Cuando lo vi a Omar le conté lo que su amigo me propuso, pero él no dijo nada al principio y ante mi insistencia dijo "Micaela, está jodiendo, vos sos muy dura, dejalo pasar, esta todo bien", lo miré y le dije "Todo bien que me quiera coger?, aparte vos le dijiste que soy virgen, no entiendo, lo dejo pasar, me quiere coger pero lo dejo pasar, buenísimo lo tuyo", me enojé y le dije que me lleve a casa. Con cara de confusión me llevó.
Al otro día vino a pedirme perdón y lo perdoné.
Yo salía un día del colegio, estaba esperando a Omar en una esquina que nos encontrábamos siempre y apareció el Lobo, estaba solo, me vio, se acercó y me dijo "Todavía estas enojadita?, te queda hermoso el conjunto de escolar, con esa pollerita que si te agachas un poco se te ve el culito, lo debes tener tan dulce para chuparlo, debe ser un manjar", ya fastidiosa le dije "Porque no te vas?, no te das cuenta que no te soporto?, sos horrible nene".
Lobo riéndose me dijo "Sos rebelde, me encantan así, averigua si con 24x6, bien negra sigo siendo horrible?, toda adentro de tus agujeritos vírgenes". No aguanté mas, pegué media vuelta y me fui.
Me fui pensando que si me dijo la verdad, cosa que no tenía porque mentirme, tenía una cosa enorme, pero enseguida me olvidé.
Esa noche le volví a contar a Omar lo que me pasó con Lobo, y otra vez se hizo el boludo, haciendo que le grite y casi lo hago llorar. Otra vez me dio lástima y lo deje ahí.
Pasaban los día y Omar seguía siendo ya como un hermano mio, yo lo tenía que besar pero yo no lo iba a coger a él, eso tenía que salir de Omar, algo que no sucedía.
Un día después de mucho, le agarré el pene y lo saqué. Ahí me di cuenta de lo que le pasaba a Omar, era muy chiquito y yo comparé con lo que me dijo el negro y éste era el opuesto. Uno gigante y este miniatura.
Decidí no joderlo mas, me imagine que tenía un complejo grande y no lo molesté mas.
Seguí saliendo con Omar, pero lo mínimo que le pedía era que le diga a Lobo que no me moleste mas, algo que nunca hizo. Omar veía a Lobo y temblaba.
Un día estaba saliendo del colegio y cuando di la vuelta en la esquina, me los encuentro de frente a Lobo con su padre. Era otro negro carbón como él, gigante, pelado con un arito en la nariz y un tatuaje de una víbora en el brazo, gordo, con cuatro dientes que le faltaban, y una cara de depravado como la de el hijo, se pararon frente a mi y lobo le dijo "Que te parece mi futura novia?", el padre respondió "hermosa, divina, espero que sepas compartir", ambos se mataron de risa y yo seguí caminando sin darles bola.
Ni le dije a Omar, era absurdo, no hacía nada.
Yo estuve un tiempo que no salí por los exámenes y vi poco a Omar. Un día vino a casa con la cara llena de moretones "Que te pasó?", le pregunté y me dijo que se cayó, pero yo me di cuenta que le pegaron, le pregunté mil veces si fue Lobo y al final me dijo que si, que él le dijo que no se meta conmigo y le dio una paliza.
Cerré los ojos y pensé que esto ya no tenía arreglo, después de la paliza que le dieron iba a quedar mas cobarde que antes. Pensé en cortar todo pero yo lo quería a pesar de cómo era.
Mi casa está en una zona muy tranquila y una noche yo estaba en mi dormitorio, hacía mucho calor y yo estaba escuchando música mientras arreglaba un poco las cosas tiradas ahí. Mi ventana da a la calle, pero de noche nunca hay nadie. Yo tenía mucho calor, por eso me saque los jeans y me quedé con una tanga negra con lunares blancos y la remera.
Después de un rato de acomodar, se me dio por asomarme a la ventana y mi sorpresa fue mayúscula cuando los vi a Lobo y al padre en la vereda de enfrente mirándome, se reían y hacían gestos de que vaya. Cerré volando la ventana y me metí en la cama, tenía vergüenza, miedo, todo junto.
Al otro día a la salida del colegio, Lobo me siguió 3 cuadras diciéndome que le regale la tanga para chuparla y olerla, que tenía un culo espectacular, que me quería poner su negra pija en el culo y la concha y barbaridades de todo tipo.
Yo no le contestaba, solo quería irme de ahí, y lo conseguí cuando me encontré con el padre de una amiga y Lobo se fue.
Yo tenía miedo a esto pero presentía que terminaría mal , mal para mi por supuesto.
Mi miedo llegó al máximo cuando un día atiendo el teléfono de casa y escucho la voz del padre de Lobo que me dice " Hola chiquita, que paso que tardaste tanto en atender?, estabas cagando en el baño linda?, debe ser hermoso verte cagar, y sobre todo taparte el culito con un buen tapón hasta el fondo", escuche que Lobo se reía atrás, y corté dejándolo descolgado por si volvían a hablar.
Mas tarde llamé a Omar y le dije como se atrevió a darles mi número de teléfono, le dije que era un cobarde, una rata que no sabía defender lo que tenía y que seguro le dieron dos sopapos para sacarle mi teléfono. Omar se puso a llorar y le corté también, ya me estaba cansando de él y lo peor, le estaba empezando a tomar bronca de verlo tan estúpido.
Y llegó el día en que exploté, fue el colmo y dije basta.
El colegio organizó un baile en un salón, era el sábado a la noche, tanto me había hablado Omar para que fuéramos, para que le diera otra oportunidad que acepté.
Esa noche me puse una tanga blanca con rayitas finitas azules, un corpiñito azul, y un vestido minifalda negro con detalles rosas muy cortito, me arreglé bien el pelo, me miré al espejo y estaba linda, muy linda.
Entre al salón con Omar, y había mucha gente, luego de saludar a compañeras nos sentamos en una sillón cerca de la pista de baile, pedí un trago con alcohol a pesar que no tomaba casi alcohol, y al rato fuimos a bailar.
Vi después de un par de piezas que estaba Lobo parado con sus amigotes mirándome , no se como fue si no es del colegio.
Le dije a Omar que ni siquiera miró a donde estaba. Nos fuimos a sentar y Lobo seguía mirándome. Yo le decía a Omar que no quería estar allí, que la presencia de Lobo me molestaba, que nos fuéramos a otro lado. Pero él no decía nada, solo que nos quedáramos un rato mas. Y me cansé, le dije que me tenía podrida, que no lo soportaba mas, que jamás pansaría en salir con alguien como él, que maldito la hora que lo elegí para salir.
Omar quedó congelado escuchándome, me levanté y fui a caminar por ahí y veo a Lobo venir con una sonrisa, bien depravado.
Me dijo si quería bailar, y le dije que sí, me tomó de la mano y fuimos a la pista.
Quería que Omar nos viera, por eso me acomodé cerca de donde estaba sentado y nos pusimos a bailar.
Omar estaba pálido cuando me vio con Lobo, y yo movía a propósito mi culo para todos lados dejando ver mi tanga. Lobo estaba loco, tenía cara de quererme comer ahí mismo.
Llegaron los lentos y Lobo me tomó de la cintura y yo puse mis manos rodeando su cuello.
Me apretó muy fuerte contra él haciéndome notar su dura pija apoyada en mi vagina. Yo estaba con mucha bronca y no me di cuenta que me estaba metiendo en algo terrible.
Bailábamos y a medida que yo me movía la pija de él se notaba mas, hasta que sentí que empezó a besar mi cuello chupándolo de tal manera que yo sabía que me estaba marcando.
Por reflejo le apreté el cuello a lo que se puso peor.
Una mano de él bajo a una nalga mía y empezó a masajearla, mientras despacio levantaba mi pollerita, lo quise frenar con una mano pero me dijo "No amor, déjame tocar bien ahí, estoy muy caliente como para parar, no intentes pararme mas porque soy capaz de cualquier cosa". Me dieron miedo sus palabras y allí me di cuenta que ya estaba metida en un baile muy jodido.
Volvió a ponerme la mano en la nalga y a levantar la pollera hasta que tuvo mi culo solamente cubierto por la tanga. Con esa mano me sostenía la pollera arriba y con la otra me la apoyó en el culo. Lo manoseo un rato y me dijo que nos fuéramos a sentar a los sillones de arriba.
Me tomó de la mano y lo seguí, cuando pasé por al lado de Omar, vi que se le caían unas lágrimas.
Apenas nos sentamos me abrazó y me tiró contra él. En la posición que estaba le pollera se levantó toda y él me puso de nuevo la mano en el culo y me bajó un poquito la tanga dejando el culo al aire libre.
Me toco un rato el agujero y cuando me metió un dedo grité un poco, entonces me llevó mi mano a su bulto. Me hizo acariciarle el bulto y después sacó la pija afuera y la puso en mi mano.
Estaba muy oscuro allí pero igual pude ver que había dicho la verdad , era larga y gruesa, negra como el carbón y la cabeza parecía estallar de tan hinchada.
Me tocó un rato la vagina y mis tetas y cuando vio que yo también le apretaba la pija con mi mano me dijo "Vamos a casa a pasar el fin de semana. Llamá a tu casa y decile que vas a lo de una amiga Mañana a la noche volves".
Me tomó de la mano, salimos, fuimos a un teléfomo, le dije a mis padres que me iba a dormir a lo de una amiga sabiendo que ellos no llamarían, y fuimos a la casa de Lobo.
Apenas entramos a esa casa toda despintada, con las maderas algunas rotas, cerró la puerta y apareció el padre con una botella de vino. Ahí si me asuste mucho y le dije que me quería ir, pero Lobo me agarró de la mano y me dijo "No amor, vamos a darte cariños los dos, vas a estar muy bien, ahora tomate un vasito de vino que te va a hacer bien".
No vi cuando le pusieron droga al vino, lo tomé y me volvieron a servir mientras ellos se drogaban adelante mío.
Al rato empecé a sentir como un mareo y me parecía que estaba flotando. Me volvieron a servir el vaso lleno y me dijeron que lo tome todo.
Ya estaba muy mareada, casi me caigo de la silla, y escuché que el padre de Lobo le dijo " Bueno, ya está preparadita, dale un vasito mas para reforzar el efecto y vamos a empezar".
El siguiente vaso me lo dio en la boca porque yo ni podía agarrarlo, cuando lo tomé todo, me levantaron y me sostuvieron.
Lobo se puso atrás mío y empezó a levantarme el vestido, cuando lo levantó todo, lo sostenía y me apoyó su pija sobre la tanga y le dijo al padre que el primer polvo por el culo era de él.
El padre se rió y se puso adelante mío, me tomó la boca con una mano y me empezó a besar metiéndome la lengua muy al fondo. Yo estaba en otro mundo, totalmente ida, y ahora sacó la pija el padre tomándome la mano para que se la agarre.
Tenía otra terrible pija, larga y un poco mas gruesa que la del hijo, negrísima y muy cabezona.
Me empujó de la cabeza para abajo haciéndome agachar para que se la chupe. Yo estaba agachada casi ni equilibrio pero me tenían y empecé a chupar ese monstruo largo, mientras de atrás Lobo me corría la tanga a un costado y me apoyó la cabeza de su pija en el agujero del culo.
Supuse que se había lubricado porque cuando empujó entró la cabeza provocándome un dolor atroz.
El padre me tenía de adelante, muy fuerte paro las piernas se me doblaron y casi voy al piso. Lobo sacó la cabeza y le dijo al padre que así no podía, que fuéramos a la cama.
Me llevaron a la cama y me desnudaron, les dije con la voz que casi no me salía que tenía ganas de ir al baño. Me llevaron y me sentaron en el inodoro. Yo hice todo porque esa metida de la cabeza en mi culo me dejó la sensación de que me descomponía. Ellos miraban como yo hacía riéndose, cuando les dije que terminé me limpiaron y me llevaron otra vez a la cama.
Allí se acostó uno a cada lado mío y Lobo empezó a chuparme la vagina y el culo mientras el padre me chupaba las tetas, me obligaron a que con cada mano agarrara sus pijas e hiciera movimientos como si los masturbara.
Me pusieron de costado y Lobo se puso atrás mío y me apuntó otra vez la cabeza de la pija al culo mientras el padre me tenía de adelante. Otra vez la cabeza de la pija de Lobo se enterró en mi culo y yo pegue un terrible grito sin aguantar el dolor.
Esta vez no la sacó porque yo estaba bien trabada por el padre que me decía que me quede tranquila y que me afloje.
La pija se empezó a meter y yo gritaba por el dolor que me provocaba ese desvirgue tan terrible.
El padre con una mano me tocaba la vagina mientras que le decía a Lobo que la siga metiendo, que me la entierre toda.
Lobo siguió metiendo la pija y yo tenía la sensación de que me hacía encima, de que estaba siendo penetrada por un caño durísimo.
Lobo me dijo que ya había entrado mas de la mitad y yo no aguantaba mas, lloraba del dolor y me quería salir de ahí pero no podía moverme.
Por fin para él me la puso toda, sentí sus grandes huevos chocar contra mis nalgas y el padre le dijo que la tenga ahí adentro.
Yo intentaba retorcerme, hacer algo pero me agarraron mas fuerte diciéndome que me quede quieta que sino era peor. Un rato largo estuve así clavada, sentí algo en mis labios, abrí los ojos y era la cabeza de la pija del padre que me decía que mientras el hijo me rompía el culo se la chupe.
No podía ni abrir la boca del dolor y ahora Lobo se empezó a mover adentro de mi culo metiendo y sacando y yo sentía que la cabeza me raspaba en cada movimiento.
El padre seguía dejando la pija en mi boca pero yo no podía hacer lo que él quería. Lobo ahora aceleró el movimiento y sentía el taladro romper las paredes de mi culo para tener un movimiento mas rápido.
Ya le estaba dando a mucha velocidad y mi culo parecía que se salía para afuera, era tremendo el dolor en cada embate y no me podía acostumbrar a él.
Paso un largo rato y mi culo seguía siendo desvirgado por una gran pija, empecé a abrir un poco la boca y el padre enseguida me metió su pija adentro.
Con una pija me estaban rompiendo el culo y con la otra me estaban cogiendo la boca a una velocidad y profundidad tal que me agarraban arcadas y ganas de vomitar.
Parecía una eternidad hasta que Lobo acabó bien adentro de mi culo, y casi enseguida el padre acabó adentro de mi boca. Tenía semen por todos lados y ellos se acostaron uno a cada lado mio mientras yo escupía el semen que me había atragantado.
Estuve allí un buen tiempo fatigada y dolorida, todavía tenía puntadas en el culo que cuando me lo tocaba lo notaba tan abierto que me daba impresión.
No me di cuenta cuando se le empezó a parar de nuevo la pija al padre de Lobo, que se me puso arriba con ese terrible peso. Me aplastó cuando se acomodó para desvirgarme la vagina. Era muy gordo y grandote y no tuve tiempo de decir nada cuando ya sentí su pija que empezaba a abrirse paso en mis labios vaginales.
Quería moverme pero era imposible con esa mole encima mío, y la pija ya estaba rompiendo mi virginidad. Era un dolor terrible el que sentí y descargué gritando, pero la pija ya estaba alojada toda adentro mío y sentía que la vagina me explotaba con eso adentro.
El tipo con su pesadez se empezó a mover gritándome en el oído que no había perdón para mi concha. Y no hubo perdón empezó casi a saltar arriba mío, sentía que tenía un camión sobre mi cuerpo y encima un dolor terrible por la pija que entraba y salía de mi concha para que no hubiera duda que estaba desvirgada.
Lo quise agarrar, me quedaba sin aire, pero no había caso, tenía mucho dolor y ni gritar podía con él encima.
Yo sabía que salía sangre de adentro mío y él también lo que lo ponía mas caliente y me daba peor.
No se cuanto tiempo duró el desvirgue pero fue de terror, ahora Lobo me puso la pija en la boca y al rato los dos acabaron adentro mío.
Quedé echa una piltrafa, destruida , con dolores por todos lados.
Me quedé dormida, y sería las 4 de la madrugada cuando me despertaron. Tenía un dolor terrible de cabeza por la droga que me dieron, y me dijeron que me iban a enseñar algo hermoso.
Lobo se puso boca arriba y el padre me acomodó sobré él, me clavé sola su pija en mi concha y al rato me empecé a mover subiendo y bajando, me la metía hasta el fondo y ambos gemíamos, era placentero hasta ahí, pero sentí que lobo me llevó hasta él, me dio un beso y me retuvo ahí. Sentí que el padre se acomodó atrás mío y Lobo me abrió las nalgas, seguía si darme cuenta hasta que entré en razones cuando sentí que la pija del padre buscaba mi culo y lo encontró.
Grité como nunca, estaba clavada por los dos agujeros al mismo tiempo y se movían los dos juntos.
Era terrible tener las dos pijas adentro mío, era un dolor único, estuvieron casi 45 minutos cogiéndome así y ya acostumbrada empecé a moverme un poco. Se pusieron locos y me clavaban hasta el fondo los dos, rezongaba pero me aguantaba las dos.
Acabaron juntos llenándome los dos agujeros y yo grité cuando sentí tanta leche adentro mío
Al otro día me desperté a las 9 con unas ganas terribles de ir al baño. Cuando estaba sentada haciendo vi que me salía sangre y semen y que estaba muy descompuesta, se abrió la puerta y entró el padre de Lobo con la pija dura como tronco. Mientras yo seguía haciendo me besaba y me puso la pija en la boca para que se la chupara. Me preguntó si terminé y le dije que si, me dijo que me lavara la cola y él bajó la tapa del inodoro sin tirar el botón, me acomodó apoyada contra la pared, me dijo que abra las piernas y me clavó el culo pegando yo un grito cuando la pija entró.
Me estaba dando de parada y Lobo estaba en la puerta riéndose. Cada empujón que me daba era tan fuerte que casi me estrellaba contra la pared, me daba con bronca, a la media hora acabó me llenó el culo de leche y no tuve tiempo ni de darme vuelta que ya tenía la pija de Lobo clavada toda adentro de mi culo de nuevo. Me dio con todo casi una hora y pasó a mi concha dándome un buen rato hasta que acabó de nuevo adentro mío.
Se fueron y me volví a sentar en el inodoro.
Llegué a mi casa echa una porquería, me bañé y seguía saliendo de adentro leche de los dos agujeros.
A Omar lo largué, y cada tanto Lobo y el padre organizan una noche en su casa y me dan.pero ya estoy mas experta y ahora gozamos los tres.
MARCEL MILORD