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Una tarde fria

en No Consentido

Era una tarde fría

Era una tarde fría, la tristeza rondaba en la mente de él, su persona , deambulaba por las calles, esperaba encontrar alguien que llenara sus ratos de soledad compartir esos momentos en que se encontraba tan vació.

La rutina  le agobiaba se sentía perdido ante tanta gente casi le asustaba volver a casa y encontrarla vacía, era un hombre normal sus deseos eran  los de cualquiera romper la rutina y dar sentido a sus días, a su vida y así un día tras otro pasaba la vida y no hallaba a nadie que pudiera hacerle sentir todo lo que su alma deseaba.

Un día salió del trabajo, se sentía perdido paseaba por el parque, la tarde estaba gris la gente desapareció, el cielo de un azul plomizo no reflejaba.

Ninguna luz, solo alguna farola del parque, que  alumbraba la tenue tristeza de aquel día.

Y el viento soplaba racheado, haciendo que las hojas de los árboles salpicaran las gotas de lluvia, que se posan en ellas, que eran frescas y suaves. Y una de ellas cayo en su cara y al levantar  su cabeza, para  secarla, él vio a una mujer  estaba sentada en un banco de aquel parque  la soledad también se reflejaba en su rostro y sus lagrimas se confundían con las gotas de lluvia caídas.

Era hermosa de lejos, se preguntaba como acercarse a ella pero era muy tímido. Y al verla así, algo dentro de le decía que quería  ir hacia ella, y en un impulso se levanto y se acerco. Notó como ella lo miraba,   al ver como iba en su dirección.

Entonces el claramente vio sus lagrimas, no le hablo solo se sentó a su lado oía sus lamentos y la miraba. Ella se levanto no sin antes mirarlo y ofrecerle una invitación, con esa mirada triste que, a él le llego al alma.

Dentro del  había una excitación plena, que nunca antes sintió así y su corazón  fue mas aprisa. Y en  aquel momento se le aceleraba el ritmo y no fue capaz de hablar. Y sus palabras se ahogaron en su garganta, y todo él  tembló por  unos minutos.

Ella se giró y se fue andando lentamente. Era hermosa de ver así y bajo la gabardina, se presentía un cuerpo estilizado.

Su pelo largo caía  sobre sus hombros, dibujando olas en su espalda, la gabardina solo dejaba ver  bajo ella un pantalón de cuero negro el se imaginaba que llevaría bajo ella.

Sintió tal excitación que se levanto y la siguió no sin antes pensar  en lo que podía pasar si ella se volvía Salió tras ella aprisa para alcanzarla  cuando la tubo a la vista su paso  se hizo lento  pero su corazón estaba tan agitado que  la sensación de ahogo no se iba.

Ella llegó a  un edificio viejo, que era bien alto, de unas cinco plantas, con las paredes que ya estaban viejas y la pintura caída. El aspecto  era oscuro y lúgubre. Pero él entro tras ella y sentía sus pisadas, al subir las escaleras.

Desde abajo, vio como su cuerpo se contoneaba al subir  y apreció más de cerca su hermoso cuerpo.

Ella entra en uno de los apartamentos de la tercera planta cuando él llega vio que había una puerta  entreabierta  se paro frente a ella y miro a trabes de la raja  de la puerta, la cual  le ofrecía un mundo de fantasías  que su mente no pudo  nunca imaginar estaba oscuro el interior, por un momento quiso marcharse  pero algo dentro de el, le impulsaba a entrar  venció sus miedos y entro.

Dentro estaba muy oscuro casi no se veía nada  solo el reflejo de una vela la cual iluminaba tenue el entorno dejando tan solo difuminado el mobiliario de aquel lugar, una ventana bajada, una cama deshecha, y nada mas, cuando sus ojos se acostumbraron a esa oscuridad pudo observar la figura de la mujer , echada sobre una pared  como esperando su llegada, no pudo hablar solo miraba, ella sin mediar palabra  se le acerco, mientras lo hacia, recogía su pelo en una cola alta  la gabardina había desaparecido  dejando ver  la ropa que llevaba puesta el pantalón de cuero negro con algo de metal que el no llegaba a  vislumbrar que era y en la parte superior un top de cuero  negro también muy ajustado con algo que parecían cremalleras y sobre su vientre unas tiras cruzadas que salían de la parte superior de sus hombros hasta rodear su espalda  cortando así su piel.

Ella se acercó, lo miro,  solo el silencio y el sonido del aire que soplaba fuera y la respiración entrecortada  de ellos  lo rompían. Le quito la chaqueta, él temblaba notaba como su interior  se agitaba ante tan hermosa mujer quiso tocarla pero ella de un manotazo le retira las manos. Siguió desnudándolo lentamente le desabotono la camisa le quito el cinturón y se lo echo a su hombro pasándolo antes alrededor de su cuello desabotona el pantalón y la cremallera y el pantalón cayo al suelo lo cogió por los hombros lo giro  solo le dejo puesta la corbata  y lo dejo caer sobre la cama él estaba asustado y muy excitado aquella mujer  sembraba misterio, todo ello era una caja de sorpresas y se dejo llevar, cerro sus ojos por un momento sintiendo distintas sensaciones y todas ellas llenas de deseo, la pasión era intensa  ella se sentó encima del a horcajadas cogió el cinturón y le ato las manos por las muñecas y posteriormente al cabecero de la cama que era de hierro forjado, el sintió el frió del acero y un escalofrió le recorrió el cuerpo ella lo miraba sabiendo que aquello le gustaba y respondía a sus deseos después le quito la corbata y le ato un pie a la cama y después el otro con uno de sus cordones y por ultimo lo amordazo con un pañuelo que había en la mesilla de noche estaba indefenso ante aquella misteriosa mujer  a su merced  pero era tal su excitación que se dejo llevar  por esos intensos momentos, el aire le faltaba, la respiración entrecortada, jadeaba  y su poya  estaba muy dura la sentía erguida  dura  y deseando  ser  descubierta por ella.

Ella la sentía bajo su culo sentía como latía pidiendo vida él notaba en ella el peso de su cuerpo y algo frió  en su   pantalón  algo de metal q arañaba su pene se miraban  solo sus miradas hablaban no necesitaban palabras  sus ojos hablaban por ellos, ella se levanto  se puso de pie en la cama mostrando su cuerpo  se abrió una cremallera que llevaba en el top dejando ver su pezón derecho que se mostraba erguido, ante el  se arrodillo y se lo dio a probar y el cómo un niño hambriento devoraba tan exquisito manjar lo devoro y lo mordió  ella se incorporo y abrió la otra cremallera y le dio a probar el izquierdo  la cabeza de el alternaba de uno en otro y su cuerpo atado quería  saltar  se contraía, saltaba de la cama por probar todo lo demás ella sabiendo su deseo se retiró, él jadeaba como un loco tiraba de sus ataduras, la cama chirriaba  fue la música de fondo para tal encuentro y entonces ella abrió una tercera cremallera la que arañaba su pene  estaba en la costura del pantalón

dejando así su sexo  a la vista, él con ojos de deseo la miraba, ella se incorpora y se sentó sobre su cara refregándole su sexo húmedo y chorreante de  flujo,  de  deseo, él lo lamió  metió su lengua en el ano ensalivo todo los recovecos de ese paraíso mientras notaba como su pene destilaba gotitas de placer, oyó gemidos por parte de ella y sintió como una fuerte sacudida la impulso a moverse de manera lasciva y provocante, metió su lengua en la vagina y siguió lamiendo el néctar de  aquella mujer que por momentos estaba delirando de placer se oyó un grito y ella cayo hacia delante, tubo su primer orgasmo, beso al hombre en su vientre y le soltó una pierna la derecha, dejando que tuviera un poco de movimiento , por un momento le hablo le dijo con voz entrecortada  que no debía correrse que si lo hacia le dejaría allí atado y se iría, el se asusto y tubo que contenerse, la miraba sabiendo lo que quería  ella  se volvió hacia él y le beso dulcemente en la mejilla y volvió a  desatarle  una mano, la cogió y la puso en su pecho el cual él apretó sintiéndolo duro y firme  elevado por el deseo de ser estrujados con la mano que tenia libre pinzo sus  pezones y con fuerza se los retorció escuchando gemidos de placer en su boca se puso a cuatro patas sobre él y le dejo que le tocara el culo el lo acaricio lo separo con su mano libre y se quito la corbata que le amordazaba  su boca seca empezó a lubricarse trago saliva, mientras sus manos se iban adentrando a través de la  abertura del pantalón de ella notaba como la humedad de su vulva caía por sus muslos, eso lo excito aun más y siguió  metió sus dedos en el ano de la chica y noto como todo él  deseaba ser penetrado cogió sus dedos y los ensalivo le moja la entrada y metió dos dedos en él, ella gemía como una loca se movía adelante y atrás  gozando del segundo orgasmo, los gritos ahora rompían los chirridos de la cama como  si fuera una sinfonía, al compás de su música ella se movía cayo encima de su pene el cual lamió con gusto, pensó que se merecía  un pequeño detalle por su parte después de hacerle gozar dos veces y le desato el otro pie, con su lengua recorrió sus testículos los lamió los sorbió y hasta los mordió provocando un grito de dolor en el, pero fue un dolor   agradable, con sus uñas ella arañaba su culo  provocando en el tal deseo  que su mente no alcanzaba a razonar  solo sentía, se dejaba llevar por el deseo de aquella mujer.

Después ella se volvió y  le desato la otra mano dando así permiso para ser libre, el se levanto le cogió la cara  le beso la boca el beso fue correspondido fue un beso hondo sus lenguas se reconocían por primera vez recorrían sus encías sus dientes su fuego  interior

después él recorrió con su lengua su cuello  y  jugo con su oreja, lamió el lóbulo de ellas y absorbió su oído provocando en ella un escalofrió de placer, gemía necesitaba mas  y él estaba a rabiar su pene iba a explotar pero no quería hacerlo no quería llegar era tal el placer que sentía que no quería que llegase a su fin deseaba que aquello durase eternamente, pero su ansia de poseer a aquella mujer era tan grande que no pudo contenerse la cogió la  puso boca abajo y a cuatro patas, ella gemía y gemía de placer algo que nunca sintió y se dejo llevar por aquel hombre desconocido para ella pero añorado en su corazón desde siempre

Él metió dos dedos en su vagina  llenándola de sensaciones, de  gozos, los movía dentro de ella, ya se contraía  su placer iba en aumento  él lo sabia pero no quería que llegara quería hacerla rabiar y desearlo mas, saco los dedos  cogió su pene en la mano y lo restregó por su vulva masturbándola con el  ya no podía mas  era tal el deseo que de un golpe se la metió dentro ahora el grito fue unánime los dos estaban sudados  temblando  la cogió por la cintura con una mano con la otra sus  pechos  y empezó a moverse como un loco  hasta alcanzar el orgasmo tan deseado, los dos cayeron extasiados de placer sus sexos chorreaban , sus flujos se mezclaban y sus cuerpos  cayeron en un largo  letargo de  vida  que les llevaría  a una conclusión para siempre, ella le dijo rompiendo el  silencio, yo era tu ama  y tú mi esclavo  pero has conseguido que ahora sea yo tu sumisa  tu esclava me has dado tanto que  dependeré de ti de tu persona  lo miro y  le sonrió, con esa dulce sonrisa que da la complicidad  entre dos, él respondió no se trata de esclavitud si no de ser  de amar de dar y entregar  y ser  en nosotros como queremos ser, se en mi  por que yo seré en ti  y así nos amaremos cuando quieras con la libertad de ser como quieras, ser libre o esclava  todo dependerá de lo que sientas Ella se levanto se vistió  con su gabardina  y salió, el quedo pensativo y feliz  por fin  rompió su rutina  y encontró un ser  que sabia le daría a sus días ese punto de vida que deseaba.

Desde entonces va todos los días al parque esperando una nueva invitación  una nueva mirada, un nuevo amanecer  juntos.

 

Fin

Evelyn45

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