_______La amiga de mi madre______

Hola, me llamo Yanira soy una joven de dieciséis años; soy muy tímida y con poca experiencia sexual. La única experiencia que tengo es la de masturbarme. Siento que soy muy caliente, al menos eso creo. Pues a veces cuando veo una peli romántica o que lleva algunas escenas de sexo, siento que mis pezones se paran, se ponen duros y empiezo a mojar mi braguita.

He pensado en hablar de esto con alguien, quiero contárselo a mi madre mejor que con nadie, pero me da mucha vergüenza, porque ella es muy chapada a la antigua. He tenido conversaciones con amigas que ya han probado el sexo, y la verdad dicen que la primera vez duele mucho, eso me echa para atrás. Cuando alguna cuenta las cosas que hacen con sus novios, yo me pongo a mil, y noto como me sonrojo, pero a la vez me excito mucho y deseo hacerlo también.

Salgo con un chico de mi edad, y alguna vez lo hemos intentado, pero noto dolor y el se corre muy pronto, mientras yo me quedo con la calentura, así que cuando estoy sola me toco y me acaricio sola.

Tengo la fantasía de conocer a alguien mayor que me lleve al límite. Que tenga mucha experiencia y que me enseñe todo lo que es el sexo, y que pueda disfrutar de el; pero no me atrevo. Hay veces que estoy en casa de mi tía, y por la noche la oigo como grita de placer cuando esta con su novio, yo pienso que debe ser muy rico estar con un hombre y ser penetrada, eso me crea ansiedad.

Los imagino en miles de posturas y como se comen uno al otro y se follan sin límites, creo que el novio de mi tía es casado, por que nunca se queda toda la noche, el llega y a veces, he visto como empiezan a tocarse en el salón, como el mete su mano bajo su falda y ella se deja hacer. Entonces lo coge de la mano y se van al dormitorio. Y los imagino dándose placer, Los envidio, he llegado hasta desear ser yo la que este en el lugar de mi tía, y cuando Jhon entra (Jhon es el novio de mi tía), me quedo mirándolo, es un hombre maduro pero muy atractivo, y por los gritos que da mi tía, seguro que sabe hacer feliz a una mujer.

Pero tenía ansias por saber más del sexo, saber como sacar partido de mi cuerpo, y no me atrevía a preguntar a nadie. Un día estaba en casa, y mi madre se reunía con sus amigas a tomar café. Sus amigas son distintas, las veo más desinhibidas, más abiertas a la hora de hablar de sexo, porque a veces las he oído desde mí habitación, y cuentan entre ellas sus experiencias.

Cecil, es amiga de mi madre, y madre a la vez de mi amiga Zoe. Es, o al menos la veo una mujer que sabe disfrutar, que es caliente por lo que oigo, dice que necesita sexo a diario y no tiene límites a la hora de hacerlo. Esa tarde, yo las escuchaba desde mi dormitorio y estaba caliente, empecé a tocarme y a gemir de placer, cuando Cecil abrió la puerta de mi cuarto. Me quede quieta y sentí mis mejillas encendidas de la vergüenza. Cuando Cecil entro, diciéndome- vaya que buen rato estas pasando- yo no supe que contestar, ella se acerco a la cama donde yo me encontraba echada y semidesnuda. Yo le decía que por favor no le dijera nada a mi madre, que no lo volvería a hacer.

Enseguida me tape con la sabana, y ella comenzó a hablarme de sexo, me dijo que no me avergonzara, que no era malo gozar de lo que la naturaleza nos da, y que lo que tenia que hacer es sacar partido de mi cuerpo, dándome todo el que pudiera, que ella lo hacia y era feliz.

Eso me dio cierta confianza, y le conté que tenía mucha curiosidad, pero que me daba vergüenza preguntar a mi madre; entonces ella se acerco a mí y me acaricio la cara dándome un beso en la mejilla. ¿Confías en mí? A lo que yo conteste que si, se levanto de la cama y se dirigió hacía la puerta cerrando esta, se volvió quitándose su blusa y su falda, quedando ante mí en ropa interior.

Se sentó de nuevo a mi lado, y me dijo mira soy una mujer todo mi cuerpo es un pozo de placer, no hay zona de el que no haya sido explorada, si te fijas bien soy igual que tu, y tu también tienes un cuerpo hermoso, retiro la sabana, yo también quede en ropa interior. Me dijo que no me avergonzara, que me relajara, que me iba a mostrar y a comparar con ella.

Cecil tiene un cuerpo hermoso y eso que ha tenido dos hijos, su pechos siguen firmes y son grandes, sus pezones son gruesos y grandes y su vientre aun sigue liso, su piel es tersa y suave me fije en todo eso, mientras ella seguía hablándome.

Mira compara tus pechos con los míos, como ves son mas pequeños, pero seguro que son muy sensibles, me dejas tocarlos a lo que yo asentí, sentí sus manos sobre ellos, delicadamente, me rozo y me dijo que le hiciera lo mismo. Empecé a gemir nada más tocármelos y me gusto el tocárselos a ella, las tenias más blandas que las mías, después me dijo, mira ahora baja la mano hacía el vientre, aprieta ahí nota como late por dentro se convulsiona, y si pones la mano sobre mi concha veras como late; lo hice y ciertamente así lo sentí.

Además, estaba muy mojada al igual que yo, el notar que a otra persona le pasaba lo que a mi me tranquilizo, y le conté lo que me pasaba con mi novio, me dijo que me buscara otro mejor, que ese no merecía mis favores, que me buscara otro con mas experiencia, que para la primera vez era mejor.

Y me dijo ahora explora mi sexo, pasa tus dedos por el, nota las rugosidades, las diferentes formas, y compara las mías, me toque, desplace mis dedos entre mis labios gruesos y finosy resbale por ellos notando cada detalle, en ese momento no estaba excitada, solo descubría cosas, pero cuando me dijo que le tocara el suyo, ella empezó a gemir, diciéndome toca aquí, aprieta mas, mientras cogia mis senos y pasaba sus dedos entre mis pezones, ahí si me excite, y empecé a gemir, ella al verme así me dijo ¿te han lamido alguna vez?, a lo que conteste que no, quieres sentirlo me dijo, yo asentí con la cabeza entre excitada y avergonzada.

Ella bajo hacia mi concha y allí sentí la mas dulce sensación, a su vez metió un dedo en la boca el meñique, lo ensalivó y me lo introdujo con mucho cuidado. Su cabeza quedaba entre mis abiertas piernas y sentí como sin darme cuenta levantaba mi pelvis y contraía mi culo, era algo instintivo, que me hizo llegar aun orgasmo muy intenso algo que nunca había sentido.

Note como las paredes de mi vagina, se contraían apretando su meñique y note como mi vientre se convulsionaba, mi corazón quería salirse del pecho y me faltaba la respiración. Me dijo has tenido un orgasmo, eso no es malo es placer, el que sea yo la que te lo haya proporcionado no quiere decir que seas lesbiana, el placer esta en todo tu cuerpo, estas echa para sentir, solo que debes dar con las personas adecuadas, que te sepan llevar y sepan darte todo lo que te mereces.

Me beso, se vistió y salio de mi habitación, dejándome un sabor dulce en mi boca, y enmi mente.

Pensé mucho sobre lo que me dijo, tanto que al siguiente día, la llame a su casa, y hablamos sobre lo sucedido; me dijo que su marido era un hombre muy abierto y que disfrutaban juntos de experiencias varias, que si quería perder mi virginidad contara con los dos, que me lo pensara y que me invitaba un fin de semana en su casa que sus hijos se iban de acampada. Me dijo que le había gustado mucho enseñarme y que mi sexo la había puesto a mil, tanto que se abalanzo sobre su marido nada más llegar a su casa pero que en realidad solo pensaba en mí.

He hablado con mi madre le he dicho que este fin de semana me iré a casa de Zoe pero ella, no sabe que en realidad no estará, estarán sus padres y estoy dispuesta a sentir y a investigar.

Pero esa historia se las contare otro día.

Evelyn45