ELECCIONES

El 28 de octubre tuvimos elecciones generales en Argentina, presidente, senadores, diputados, etc. etc. y como estoy inscripta en Capital, con mi viejo domicilio del Barrio Norte me fui a Buenos Aires a votar.

Estas elecciones fueron las más apáticas y menos emocionantes de que tengo memoria. No les voy ha hacer ningún comentario sobre la situación política, las denuncias de irregularidades y la extrañísima situación donde el presidente en funciones pone de candidato a su esposa (este no es el lugar ni el momento).

Y la principal fuerza de la oposición llevaba como candidata a presidente otra mujer. Las dos veteranas, de edad y política (una Senadora, la otra Diputada), las dos abogadas, o sea que –si o si – el próximo presidente que tendríamos será una mujer. Lastima que ninguna de las dos sea (por lo menos que se sepa) less.

Y después de dejar mi equipaje en casa me fui tranqui en el bondi para el Centro a la escuela que me tocaba. Eran como las 3 de la tarde y el día estaba precioso, sol, poco viento temperatura primaveral, bastante gente, en la mesa de votación que me toco había unas 6 mujeres esperando su turno, así y todo en menos de ½ hora había votado y estaba de nuevo en la calle. Tenia toda la tarde libre y sin ninguna obligación hasta las 4 de la tarde del martes, que tenia que volver a viajar.

Así que en plan de descanso me fui para la placita (Ahora le dicen Villa Freud) gozando de la tarde, sobre Charcas - en el boulevard - uno de los boliches había abierto y tenía mesas en la vereda, me senté a tomar un café y a descansar. Mis amigas de Buenos Aires seguro que estaban con sus maridos votando o dando vueltas por allí y yo no había programado nada, solo descansar, cenar en casa y después de las 8 o 9 de la noche ver en la tele como terminaba el escrutinio.

Mientras leía el diario, ya cerca de las 4 y media de la tarde sonó el celular:

La voz de mi amiga "peso pesado" sonaba clara y fuerte en el pequeño monstruo portátil de las comunicaciones…

Seguramente Gra estaría cerca, vive a unas cuadras de aquí así que no muy lejos habría votado… podríamos juntarnos hacia un tiempo que no nos veíamos y la podríamos pasar bien…

Como a los 10 minutos apareció dando vuelta la esquina desde Coronel Díaz la inconfundible figura de Gra. , sus mas de 100 kilos envueltos en un vestido de color blanco, largo hasta casi los tobillos y un chal rojo.

Después de los saludos, besos en la mejilla, etc. Gra depositó su humanidad sobre una silla y la camarera le trajo un grandísimo vaso de jugo de naranja.

Seguimos charlando de intrascendencias, nos tomamos otro café y se hicieron las 6 de la tarde.

La ocurrencia nos hizo reír… pagamos y arrancamos para caminar las 8 cuadras hasta la casa de Graciela…

Así que en lugar de rumbear para lo de Gra, nos fuimos al ALTO PALERMO

Al final, estuvimos como dos horas dando vueltas, me terminé comprando dos conjuntos de tanga y corpiño de los que me gustan, casi transparentes, uno negro y uno rosa, un par de botas (Estaban de oferta), un trajecito de media estación de pantalón (Bien ajustado) y saco, y alguna otra cosita mas, el plástico estaba al rojo… pero los gustos hay que dárselos, Graciela me observó todo el tiempo mientras me probaba la ropa, haciendo comentarios primero jocosos y después de tono bastante subido, tales como "que bien te queda ese corpiño… y con traba adelante… ideal para que te chupen las tetas" o "con quien vas a estrenar esta tanga?? Fijate que no te apriete mucho, sino es complicado para sacártela de apuro para un polvito de parado en el pasillo del hotel" o simplemente: "¡Que lindo culo, a quien se lo vas a dar esta semana!" Todo en voz bajita y a mi oído, y yo tratando de hacerla callar para no pasar papelones con las vendedoras…

En el local donde me compré las botas nos atendió una vendedora de unos 30 y pico de años, bastante bonita y muy atenta. Nos miraba de una forma no diría extraña, pero no era la mirada habitual de una vendedora. Me resultó raro. Uds. saben que en ese tipo de locales los vendedores siempre son muy jóvenes, sobre todo porque los sueldos no son importantes y no es un trabajo habitual para una persona de más de 30. Me quede pensando el tema, pero seguimos de compras.

Y la Graciela también tarjeteó, se regaló uno de esos vestidos hindúes que se usan ahora, de lino casi transparente, blanco con dibujos en gris y negro, una belleza, ideal para su tamaño…

Ya como a las 8 nos fuimos en taxi para el depto de Graciela, hacia tiempo que no estaba allí… es un PH antiguo, remodelado, recién pintado, amoblada "estilo campo" (Gra es de Chascomus, nació y vivió hasta los 15 años en la estancia del abuelo), con unos hermosos y sólidos muebles de algarrobo macizo

Dejamos los paquetes en el living, yo enfile para el baño y ella para la cocina, encendiendo la TV con el remoto.

Me fui soltando la ropa y ya en el baño me desnudé… este baño es muy especial, primero es grande, como se hacían antes, casi como un dormitorio de los de ahora, segundo en una de las paredes hay un gran espejo donde te podes ver de cuerpo entero, tercero, tiene una bañera hecha a medida, al ras del piso y de bordes bajos no mas de 20 cm. Y del doble de tamaño de las comunes, la dueña de casa la diseñó así para facilitar sus movimientos, además tiene un par de pasamanos en la pared para ayudarse a levantar, aunque también tienen otros usos… un día les voy a contar.-

Así que me miré en el espejo… bien, no estaba tan mal, aunque la pancita… pero mi culo se mantiene y mis tetas no están caídas… todavía estoy para la pelea… en fin, llené la bañera y me sumergí en la tibieza del agua con sales a gozar del descanso.

A los 5 minutos se apareció Graciela, envuelta en una especie de toga negra con un trozo de tarta en la mano:

La cara de Graciela tenía esa expresión libidinosa de una gata en celo, agigantada con la forma erótica en que masticaba la tarta. No había estado en mis planes una noche de sexo, pero… porque no, mi amante "peso pesado" es una fiera en la cama y los orgasmo que me suele provocar son de los mejores que logro con compañeras de cama.

Y mientras ostensiblemente me jabonaba las tetas y la concha lo más eróticamente posible, comenzamos una conversación de profundo contenido filosófico:

Mientras se desarrollaba este filosófico dialogo, Graciela había terminado su tarta, se había desnudado y se estaba haciendo una fenomenal paja con un vibrador sentada en el inodoro.

Después de suspirar unos segundos y lograr un orgasmo, Graciela tomo una toalla, se acercó a la bañera y con un tono cariñoso pero bastante más calmado me dijo:

(Me encanta estar con Graciela, me atiende como los dioses, me mima como mi madre cuando era chica y mas allá del sexo lo paso de maravillas, sin contar que en su casa comer, es comer, no alimentarse…)

Las dos envueltas en toallas cenamos en la cocina un pollo al horno con papas que estaba delicioso, regado con una botellita de Cabernet, mientras en la tele daban los resultados del escrutinio. Las primeras proyecciones daban que ganaba la candidata del gobierno en el país, mientras que en la Capital ganaba la candidata de la oposición… y así terminó la elección (nos enteramos al día siguiente), ganó la Cristina y segunda entro la Elisa…

Como a las 10 de la noche, Gra se levantó, me miró, se sonrió y se fue derechito para el dormitorio sin esperarme. Cuando llegue detrás de ella estaba desnuda en la cama, solo había una lámpara encendida en un rincón, la tele encendida con los ya aburridos resultados electorales con un escrutinio que avanzaba muy lentamente y Gra con el remoto en la mano.

Dispuesta a pasar una noche de placer, solté la toalla y desnuda me acosté apoyando mi cabeza sobre las inmensas tetas de mi amiga, cerré los ojos y me relajé esperando el avance de Graciela, pero no hizo nada, pasaron tres minutos y sentí que el televisor cambiaba de canal, ya no se escuchaba al aburrido periodista leyendo porcentajes y cantidades de votos, sino una música suave y una voz de mujer hablando en francés. Por curiosidad y sorprendida, ya que Graciela había pronosticado una noche de sexo y no de películas en la TV, abrí los ojos. En la pantalla dos mujeres jóvenes, vestidas de fiesta, perfectamente peinadas, enjoyadas y maquilladas, discutían acaloradamente (En francés y sin subtitular) en una gran habitación semi vacía, solo se veía una gran colchoneta y sobre las paredes elementos de un gimnasio. Obviamente no entiendo nada de francés, por lo que no me enteré de que hablaban, pero al minuto se trenzaron a golpes y rodaron por el piso, mejor dicho sobre la colchoneta y comenzaron a arrancarse la ropa, literalmente la arrancaban y los trozos de los vestidos volaron por el aire, lo mismo que las tangas y corpiños mientras se propinaban sonoras bofetadas y se tiraban del pelo como en una perfecta riña callejera. En menos de un minuto ambas estaban desnudas y una de ellas, la que parecía mayor estaba sentada sobre el abdomen de la otra y mientras con una mano sostenía las muñecas de la otra detrás de la cabeza, con la otra se entretenía en darle bofetadas en la cara gritando algo que si bien no entendí, note que eran insultos.

Me incorporé un poco para ver mejor, la película se estaba poniendo densa e interesante:

En la pantalla la triunfadora de la pelea, había logrado dominar totalmente a su victima, que se revolvía bajo el cuerpo de la otra, tirando patadas al aire e intentando morder a su rival, todo en el medio de un infernal griterío de insultos –obviamente en francés - hasta que un certero puñetazo la noqueo.

Aprovechando esta situación de inferioridad de su rival, la arrastró cerca de la pared donde con unas sogas que sacó de un cajón ató sus manos y la sujetó, con los brazos levantados a las barras de trepar de la pared, de frente a las barras, sujetando sus piernas abiertas a las barras inferiores con los trozos de vestidos que estaban esparcidos por el piso. Con una de las tangas la amordazó, mientras la víctima ya se estaba recuperando y había empezado a gritar nuevamente. Siguiendo la lógica de las películas de este tipo, yo calculé que ahora vendría alguna forma de violación o tal vez una sesión de latigazos o cosa por el estilo:

Mientras me acariciaba el pelo y luego bajando se entretuvo en unos eróticos masajes en mis tetas y unos suaves besuqueos en mi cabeza. Yo me había acomodado semi sentada en la cama, recostando mi cabeza sobre las tetas de Graciela y ella pasó sus manos hacia adelante abrazándome delicadamente y sujetando mis tetas suavemente, jugando con sus gorditos dedos con mis pezones, que entre el manoseo y la película se me estaban poniendo duros y excitados.

En la pantalla, la cámara se alejó y dejo ver, además de la pareja de luchadoras desnudas; la vencida atada a la pared y la vencedora parada con las piernas abiertas mostrando una concha perfectamente depilada con unos hermosos labios vaginales y una par de tetas que – a las claras – no tenían siliconas; a una figura de espaldas, claramente un hombre por su vestimenta, también de gala o fiesta.

-Que hija de puta… se la preparó al cafisho… comenté

-Si… ahora se la culea, seguro… dijo Graciela

Pero el nuevo personaje comenzó a hablar (obviamente en francés) pero con voz claramente de mujer y aparecieron los subtítulos: "Joana, te ganaste el derecho de ser mi esposa" "gracias mi amor" "Parece que pelearon duro" "Si la puta de Marie creía tener derecho a ser ella tu esposa por los años que lleva sirviéndote como esclava" "Que tonta, ella fue y será siempre una esclava". Y la recién llegada tomo a Joana abrazándola fuertemente y hundiendo su lengua en la boca de su pareja se trenzaron en un largo beso. La cámara fue girando lentamente y se pudo ver que la recién llegada era un hermosa pelirroja, vestida de hombre, pese a lo cual se adivinaba debajo un formidable cuerpo, ya que el saco y la camisa estaban levantados por un par de voluminosos pechos, que mientras duró el beso quedaron al descubierto por obra de las hábiles manos de Joana, que sin dejar de besar a su conquistado "esposo" la fue desnudando lentamente mientras acariciaba su cuerpo. La derrotada Marie, desde su cautiverio en la pared había vuelto la cabeza y miraba la escena, sin poder hablar y se notaban las lagrimas que caían de sus ojos y terminaban de correr su maquillaje, ya bastante deteriorado por la pelea.

"Mi amor, dame un gusto" pidió Joana mientras terminaba de desnudar a su conquistado que resultó ser un hembron de aquellos, "haceme el amor delante de ella, para humillarla aun mas y después la podes echar a la calle, como una perra" "No, no la voy a echar… seguramente ella estará feliz de ser el trapo de piso que siempre fue conmigo, pero ahora también de mi esposa y seguro que vos le vas a encontrar alguna utilidad" "puede ser.. Contestó sonriendo Joana" Mientras se desarrollaba este dialogo Joana y su "marido" se habían acercado al la victima que seguía llorando y casi a su lado volvieron a besarse, mientras Joana recibía tres dedos de su "esposo" dentro de su concha revolviéndose de placer.

En la pantalla, Joana se había desprendido de su "marido" y la acariciaba. "tenés a tu esclava esperando, creo que tiene ganas de aceptar tu propuesta" "sacale el bozal" Joana se acercó a su victima, le dio una sonora cachetada en las nalgas que quedaron marcadas de un subido tono de rojo y después de pellizcar una de sus tetas retorciéndole los pezones mostrando a la cámara y a su "esposo" su cara de satisfacción, le soltó la mordaza a Marie. "No me dejes Paola, yo te amo desesperadamente" se sentía suplicar "seré tu esclava" y "de ella, pero no me eches" Joana y Paola reían, se besaban y acariciaban, Paola mientras metía sus dedos en la concha de Joana que se retorcía de placer. "Amor aquí tenés a tu nueva esclava esperando ser usada" "Amor, de cualquier forma?" "Es tu esclava" "Si Joana, soy tu esclava" "Mala respuesta, le gritó Joana al oído mientras una sonora bofetada sacudió la cara de la victima" "perdón AMA… soy tu esclava mi AMA" "viste, esa es mi perra, comentó Paola" que comenzó a alejarse de cuadro.

En la pantalla Joana se acercó a su esclava y con el cinturón del pantalón que le había sacado a su "marido" comenzó a azotar a Marie que aceptaba los azotes en silencio, pese a que las lágrimas volvían a correr por sus mejillas. Luego del cuarto azote, volvió a la pantalla Paola, pero ahora equipada con uno de esos consoladores adosados a un arnés en la cintura y sin decir palabra abrazó a su "esposa" por detrás y se lo introdujo en el culo "Te gusta…" "Si mi amor, seguí... cojeme mucho" "pero segui pegandole, es lo mas excitante que hay" y Joana con su "marido" culeandola pegó dos o tres azotes mas sobre la espalada de Marie, hasta que en un grito tuvo un orgasmo espectacular y cayo desmayada sobre la colchoneta, boca arriba y con las piernas abiertas, dejando ver sus labios vaginales abiertos, rojos y totalmente mojados

En la pantalla Paola se acercó a Marie, la desató. Esta cayó también sobre la colchoneta acalambrada por la posición en que había estado y por la paliza recibida y arrastrándose se abrazó a los pies de Paola. Esta la tomó del pelo y llevándola en el aire, puso su cabeza sobre la concha de su "esposa" que había pasado del desmayo al sueño. "Quiero que la hagas acabar con la lengua, como te enseñé, pero en cuatro patas, con el culo para arriba porque te voy a coger" "Si mi amo". La ahora dócil sierva se puso en la posición que le ordenaba su amo y comenzó a comer la concha de la "esposa", mientras el "marido" hundía su pija falsa en la mojada concha de Marie, comenzando un bombeo. La cámara hizo un primer plano de 10 segundos de la cara de Joana que seguía con los ojos cerrados pero demostraba claramente el placer que recibía de la lengua de Marie. Un nuevo primer plano de la cara de ésta que con la lengua acariciaba el clítoris de Joana con una sonrisa libidinosa y por ultimo un primer plano de la cara de Paola con una amplia sonrisa y la saliva corriendo por la comisura de sus labios mientras se acariciaba los mismos con la punta de la lengua.

La cámara comenzó a retirarse de la escena sobre la colchoneta, abarcando gran parte del gimnasio y mostrando a varias parejas de mujeres, todas desnudas que miraban complacidas el espectáculo mientras las que oficiaban de amas, violaban a su esclavas con arneses parecidos, mientras estas, sujetas por collares y cadenas mostraban que no la estaban pasando tan mal. Allí terminó la película, habrá durado unos 12 minutos.-

Y Graciela, delicadamente dio vuelta mi cuerpo, mis pezones que de tan duros me dolían se clavaron en sus tetas, y con un pequeño esfuerzo subió mi boca a la suya y comenzó a besarme, mientras con una sus manos manipulaba un vibrador que había sacado seguramente de debajo de las almohadas y me lo metió en la concha, mientras con la otra metió sus dedos índice y mayor en el culo. Me estaba penetrando por todos mis agujeros. El orgasmo comenzó a bajar desde mi cerebro, pasando por mi lengua, mi cuello, mis tetas, el estomago que se contrajo, hasta estallar gloriosamente en mi útero y vagina. Me dormí abrazada a Graciela después de haberle devuelto las atenciones recibidas cojiendola con el famoso consolador de 20 centímetros y 6 de diámetro…

A, en la TV, cuando terminó la película apareció de nuevo el noticiero y el aburrido locutor seguía dando las cifras del escrutinio. Sin duda fue el "día de las elecciones" mas divertido y/o hermoso de mi ya larga vida política.