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Mi madrastra no me ve como su hija V

en Lésbicos

Alejandra Pov

He tratado de darle su espacio, tal vez la culpa fue mía por no darme a respetar y ofrecerme como si solo fuera un trozo de carne. Sin embargo, es muy difícil hacerlo, cuando lo único que quiero es estar entre sus piernas o conversar como amigas, pero aun no puede ser, debo seguir buscando la mejor estrategia.

̅            Tardaste mucho- hable, cuando deje de divagar y visualice a mi prostituta favorita.

̅            Lo siento, había mucho tráfico- susurro con pena

̅            Olvídalo, vamos que tengo prisa.

Bárbara era una jovencita que podría pasar por cualquier muchacha común y corriente, nadie sabría a lo que se dedica. Hoy iremos a cenar, al ser una de mis favoritas tiene sus méritos. Y pensaran porque sales con una chica así, puedes ser vista  por algún conocido de Carlos, pero ya no importa, puse las cartas en la mesa y decidimos que cada quien haga con sus vidas lo que quiera, ahora solo compartíamos casa, nada más.

Cuando llegamos al restaurante que elegí y entramos, todos miraron a mi acompañante no era para menos, tenía un vestido color negro ceñido a su cuerpo, cabello suelto lacio y sedoso, y un aroma exquisito. Sin duda es mi mejor amante.

Estábamos comiendo tranquilamente, hasta que enfoque a dos mesas adelante a Daniela con aquella secretaria pelirroja, sentí como mis entrañas se retorcieron, pero no podía hacer absolutamente nada, aun no.

̅            Le gusta mucho esa señorita- escuche hablar a Bárbara. Fije mi vista en ella antes de responder.

̅            No te importa, termina de comer pronto- gruñí. No tiene por qué saber lo que me pasa con mi hijastra.

̅            ¿Tienes familia?- indague. No podía negar la curiosidad que me provocaba.

̅            No. Soy huérfana- respondió. Ahora tenía sentido el porqué de su forma de vida

̅             No lo sabía, lo siento mucho- exprese. Ella solo asintió

Me levante y fui al baño, dejándola sola por un momento.

Hice mis necesidades, y me dirigí al lavamanos, lo que no espere era encontrar a Daniela arrimada a la puerta de la entrada.

̅            Hola, querida madrastra. Te estas divirtiendo- insinuó con un gran sonrisa en su rostro. Maldita sonrisa

̅            Hola, lo mismo diría por ti- le devolví la sonrisa. No tenía ganas de discutir con ella. Termine de retocarme mis labios, pero cuando intente salir a lado de mi hijastra me tomó del brazo.

̅            ¿Quién es esa tipa?- pregunto

̅            Es algo que a ti no te interesa- respondí intentando soltarme, pero ejerció más presión

̅            Me interesa, porque al que engañas es a mi padre- vocifero

̅            Carlos sabe todo lo que hago, no engaño a nadie, y si me haces el favor, me sueltas que tengo a alguien esperándome.

Intente nuevamente soltarme pero no pude. Camino hasta uno de los cubículos sin soltarme y me metió en el.

̅            ¿Qué crees que haces?- hable disgustada, por su forma de tratarme

̅            No sé lo que hago- menciono, antes de tomar mi rostro y plantarme un beso.

Forcejee al inicio pero duro muy poco, me deje llevar por lo que estaba sintiendo, había extrañado sus labios, aunque era un beso con fiereza, algo agresivo no podía quejarme, su lengua jugó con la mía, yo solo emitía gemidos de placer, no me importaba ser escuchaba por quien entrara al baño, solo quería disfrutar del momento. Levanto mi pierna y empezó a acariciarla, subía su mano hasta el inicio de mi trasero y lo bajaba, quería que llegara a más.

̅            Hazme tuya- gemí

̅            Repítelo- ronroneo

̅            Hazme tuya- repetí desesperada.

Me pegó a su cuerpo, y habló a mi oído

̅            Deja a esa niña tonta y nos encontramos en casa- mordió mi lóbulo derecho antes de salir.

Respire profundo, me acomode un poco el vestido, lleve mi mano a mis bragas y ya estaban humedecidas. Es lo que provoca Daniela Villaseñor.

Regrese a la mesa, Bárbara me miró con curiosidad

̅            Nos vamos- fue lo único que pronuncie

Mire a donde se encontraba Daniela pero ya no estaban, sonreí, debe estar yendo a casa.

Como no quería esperar más, envié a mi acompañante en un taxi, quería llegar pronto a casa.

̅            No vendrá conmigo- pregunto inocentemente

̅            No, niña. Tengo cosas por resolver. Adiós

La vi marcharse, y yo me apresure  para llegar a casa. 

Estando en ella, subí a mi habitación me desnude completamente y me cubrí solo con el albornoz. Me dirigí a su habitación, como siempre Carlos no estaba en casa.

Me acosté en su cama, tome una almohada y percibí su aroma, me extasiaba su olor.

Pasó la primera hora y  no llegaba, pensé que pudo ser el tráfico. Paso otra hora y no habían señales de ella, la llame pero no tomo las llamadas; a la tercera hora me di por vencida, me había engañado, no vendría, me levante para salir de aquella habitación cuando la vi entrar, muy sonriente.

̅             Madrastra, que gusto verte- hablo en tono de burla

Tenía mucha ira contenida, pero no le daría el gusto de explotar, pensé salir, pero me detuvo.

̅            Suéltame – gruñí

̅            No, tu viniste por algo y yo te lo voy a dar

̅            Hueles a prostituta barata- recrimine

̅            Usa el mismo perfume que tu amante- me aprisionó entre sus brazos

̅            A que juegas, quieres humillarme- hable forcejeando por soltarme

̅            Solo quiero tenerte en mi cama- me empujo a ella, caí acostada abriéndose por completo el albornoz

̅            Vaya, ya estabas preparada – se repasó los labios con su lengua. Trate de incorporarme pero se acostó encima mío. No pude hacer nada para detenerla, empezó a devorarse mis labios, su lengua exploro mi cavidad bucal, me arrancaba gemidos, era brusca pero me gustaba.

Sus besos bajaron por mi cuello, mordiendo cada parte de el, mientras sus manos jugaban con mis senos, mis gemido estaban inundando el lugar. Se apodero de uno con su boca, succionaba deliciosamente, lo mordía sin piedad, sentía como me mojaba, no podía estar quieta, la quería abajo.

̅             No me castigues mas- lloriqueé, mi vagina necesitaba atención

̅            Con calma- susurro

Bajo por mi vientre, dejando lamidas en el trayecto, se detuvo en mi clítoris, movió su lengua circularmente, eleve mi espalda.

Dios, que rico

Abrió mis labios inferiores y pasó su lengua por toda mi hendidura

̅            Eres deliciosa, madrastra- murmullo

Pose mis manos en su cabellera para que no se moviera de ese lugar, tomo entre sus dientes mi botoncito estirándolo sin delicadeza,  aullé de dolor mezclado con placer por su ferocidad.

̅            Te quiero dentro por una puta vez- exigí

Abrí mis piernas más, cuando sentí que ahondo sus falanges en mi centro que tan necesitado estaba, me penetraba profundo sin dejar de jugar con mi botón, empuje mis caderas para adelante necesitaba más, hundió otro dedo y ataco salvajemente, agarre con vehemencia su cabello, iba a explotar. Mi vientre quemada, mientras mi cuerpo se tensaba, estaba por correrme, expulse el aire contenido y sentí como explotaba. Respiraba entrecortaba, fue intenso, cuanto extrañe tener la boca de mi hijastra entre mis piernas, ella seguía lamiendo mi vulva, lo cual avivaba mi excitación nuevamente.

Subió y volvió apoderarse de mis labios, la abrace fuerte, no entendía que pasaba pero tenía unas ganas incontrolables de llorar, me derrumbaba por una joven que solo juega conmigo.

No seas idiota es lo que siempre has querido. Mi subconsciente recriminada mi absurdo comportamiento.

̅            ¿Qué te pasa?- pregunto Daniela, cuando se dio cuenta que no seguía su beso

̅            Nada, tonterías mías. Mejor sigamos- me ubique encima de ella, para continuar. Sin embargo, ella me empujo al costado.

̅            Estoy cansada-hablo sin ganas

̅            Por qué no me dejas tenerte. Por qué puedes estar con todas y conmigo no. Es porque soy la esposa de tu padre. Me vas a volver loca Daniela, yo, yo…- calle, iba arruinar todo, no podía confesar que vivo obsesionada por ella desde hace años, que todo lo que he hecho es por estar cerca suyo, creería que estoy loca.

̅            ¿Yo? Por qué no continuas- pregunto

̅            Olvídalo, regresare a mi cuarto. Buenas noches- me levante y salí de ese lugar, lo que menos quería era que me vea llorar. Parezco una niña estúpida llorando por una jovencita, puedo tener a la mujer que quiera y derramo lagrimas por Daniela, que lo único que quiere es mi cuerpo cuando se le antoje.

Daniela Pov         

Comienzo a odiar el comportamiento de mi madrastra, es como si hubiera desaparecido para ella, no pasa en casa, mi padre tampoco, no entiendo su matrimonio. Extraño sus ojos azules devorando mi cuerpo, sus provocaciones.

Mierda, debo sacarla de mi cabeza  

̅            En que estará pensando- escuche, preste atención y vi a la pelirroja de mi secretaria

̅            En devorarme tu coño- mentí, con una sonrisa coqueta

̅            Eso tiene solución- coqueteo. Se acercó a mi sillón y se sentó a horcajadas. Fue a besarme pero evite su beso

̅            Estamos en horario laboral, cuando salgamos te espero en el estacionamiento- por ahora no tenía ganas de estar con ella, en mi mente todavía rondaba la imagen de otra persona.  

La horas pasaron relativamente rápido, baje y encontré a Virginia esperándome. La llevaría a cenar primero, antes de jugar en cualquier hotel de la ciudad, es muy buena en la cama se lo merece.

Llegamos a un restaurante en el que no había muchas personas, pedí una mesa para dos, sonreía por las idioteces que hablaba la pelirroja, cuando vi entrar a mi madrastra con una tipa.

Mi sonrisa se borró, al ver lo cariñosa que se ponía con aquella muchacha.

¿¡Quién mierda es!?

Ahora intentaba prestar atención a lo que decía mi acompañante pero no podía, seguía pendiente de la otra mesa, vi cómo se levantó de la mesa para ir al baño. Me disculpe de Virginia para ir también al mismo lugar, intento surgirme pero le deje claro que no.

Me recosté en la puerta del baño esperando a que salga. Se sorprendió cuando me vio, mostré una sonrisa coqueta pero intento pasar de largo. La detuve, me fastidiaba mucho su comportamiento, quería que fuera como antes, no pensé y la tome del brazo para arrastrarla a uno de los cubículos. Le arrebate un beso ardiente, necesitaba volver a tenerla, sonreí cuando me pidió que la hiciera mía.

Quedamos en encontrarnos en casa, salí y regrese a mi mesa.

̅            Nos vamos ahora

̅            Tan pronto

Solo asentí, tomo su cartera y salimos del restaurante.

̅            Te llevo a casa- me miro frunciendo el ceño

̅            No iríamos a un hotel

̅            Hoy no- hable

Quería deshacerme de ella pronto, para ir con Daniela.

̅            Sube conmigo a tomar una copa

̅            No- negué

̅            Vamos, solo una, me la debes- hizo puchero, rodé mis ojos y termine aceptando

Subimos a su piso. Me senté en el sofá esperando por la copa de vino.

Lo que no espere, es que saliera totalmente desnuda con dos copas de vino en sus manos. Su cuerpo es exquisito, tiene las medidas perfectas, mi libido subió por los cielos, se sentó a horcajadas, brindándome una copa

̅            Salud- pronuncio sonriente.

Me bebí de un sorbo el vino sin dejar de ver sus grandes tetas, me quitó la copa para ubicarla a un costado. Me acerco una de sus senos y no pude evitar llevármelo a la boca, se mecía en mis piernas mientras me comía su teta, tomo un poco de vino y lo esparció en sus pechos, es una exquisitez. La tome de la cintura y la acosté en el sofá, velozmente me deshice de mi ropa, la bese desesperadamente, aunque pensaba aun en mi madrastra no podía despreciar a esta mujer, sería una locura.    

Penetre su huequito con violencia, así es como le gusta, se escuchaba los lloriqueos que daba, hizo lo mismo y sentí como hundió dos dedos en mí, empecé a moverme en ellos, llevaba un vaivén exquisito. Faltaba poco para correrme, me moví bruscamente buscando explotar, pero retiro sus dedos. La mire con rencor, pero ella sonrió.  Bajo mis caderas para unir nuestros sexos, empezó a moverse de adelante para atrás y gemí; que bien se sentía, comencé también a moverme, cada roce me agitaba por completo, me iba a correr, empezó a moverme a mi ritmo, quería liberarme. Solo se escuchaban los quejidos de las dos por lo que hacíamos, gruñí fuerte y explote.

̅            Quiero beberme tus jugos- ronroneo

Me acosté al otro lado del sofá, y ella gateo hasta a mí para apoderarse de mi coño lleno de mi esencia. Daba grandes lamidas, que lograban volver a excitarme. Recordé que Alejandra me esperaba, pero no pude hacer nada cuando sentí que jugaba con mi botoncito.

Ella puede esperar…       

Después de jugar un poco más, pude regresar a casa; habían pasado algunas horas, subí a mi habitación y me encontré con mi madrastra. Sonreí de lado, me encanta esta mujer. Por su cara podía ver que estaba enojada, y lo comprobé cuando intentó salir, por supuesto que no la deje.

Tenía ganas de su cuerpo, añoraba tener mis dedos dentro de ella. Intento resistirse pero le enseñe quien manda, la hice gemir de placer, es una gatita hermosa un poco huraña pero así me gusta.

Intento tenerme, no obstante, me negué, no puedo permitirlo. Sé que si lo hago, caeré en sus redes, me gusta más de lo debido y caer ante ella no puedo permitírmelo. Me dolía hacerlo, pero es lo mejor, no puedo volver a enamorarme y mucho menos de mi madrastra.

Cuando se calme tendré que hablar para dejar las cosas en claro quiero su cuerpo, solo eso.