Historias De Chicas

En el bus que las traía al colegio se encontraron Macarena y Michel, se vinieron conversando todo el rato acerca de la semana que se les venia encima, con varias pruebas y trabajos, el único consuelo que tenían era que también se acercaba un fin de semana largo, dado que un lunes era feriado así que ahí al menos esperaban poder descansar un poco. "Oye ¿y la Ángela, pense que se venia contigo?", pregunta Michel, "esa floja esta enferma, le dio gripe o algo, así que no va a venir en toda la semana", le responde Macarena, "se va a escapar de las pruebas al menos", "por ahora, pero después igual va a tener que darlas todas así que al final le va a salir cara la gracia".

Al llegar al colegio se toparon en la entrada con uno de los inspectores, se llama Alberto, es un viejo de casi 50 años y desagradable de presencia, al verlas descaradamente les mira las piernas y cada una de las curvas que claramente se aprecian en sus uniformes. "Ese viejo degenerado" rugía Macarena molesta por tener que aguantar que la mire así, "tranquila, me entere que estos días se va al igual que varios profesores", "¿en serio?" responde Macarena algo sorprendida, "en serio, lo que ocurre es que ese viejo y los profes se van por que no les han subido el sueldo" le dice Michel.

Las clases fueron una verdadera tortura aquel día, empezaron con matemáticas durante casi tres horas seguidas, luego ciencias naturales y mas encima castellano, el ramo con el profe más aburrido de todos, con él tenían clases hasta la hora de salida. Ellas estaban sencillamente hastiadas y no hallaban la hora irse de ahí. A Michel se le ocurrió la brillante idea de escaparse de clases, "no sé, y si nos pillan", "tranquila nadie nos va a pillar, además ese viejo es más pavo ni siquiera se va a dar cuenta". Finalmente Michel convence a la maca.

Durante el ultimo recreo ambas fueron a escondidas a la sala y sacaron sus mochilas, rápidamente se dirigieron al patio a un área donde el muro esta algo descuidado y casi no se ve nadie cerca. Michel fue la primera en saltar, tira su mochila y luego salta ella y la Macarena la sigue. Se fueron corriendo hasta llegar a la esquina y ahí tomaron el bus y se fueron a ver a Ángela.

La pelirroja estaba en su casa enferma con fiebre y muy aburrida, sus amigas la acompañan un rato y le pasan algo de la materia vista en clases y le advierten de las pruebas que se les vienen, pero Ángela esta confiada y tranquila a pesar de todo. Las tres siguen conversando un buen rato y ellas le cuentan a Ángela que se corrieron de clases, Michel le detalla como lo hicieron, "tengan cuidado, ese viejo del Alberto a veces se esconde en una sala del segundo piso para vigilar ese lugar", Macarena y Michel cambian miradas de preocupación, si es cierto lo que dice Ángela ambas están en líos.

Al irse ambas se preocupan, "y que vamos a hacer si nos han pillado" le dice Macarena algo nerviosa, "tranquila, veamos primero que ocurre, a lo mejor no nos han pillado", "más te vale por que yo estoy condicional, si me meto en líos y me echan en mi casa estoy frita". Las dos se quedan pensativas esperando lo mejor para mañana.

Se juntaron afuera del colegio y entraron juntas, en la entrada estaba el inspector que como de costumbre las mira en detalle pero no hace comentario alguno, Macarena respira hondo, "viste, no paso nada" le dice Michel, "cuando termine el día y no ocurra nada hay seré igual de optimista que tú". Las clases transcurrieron lentamente, Macarena era la más nerviosa de las dos, se consiguieron la materia que les faltaba y también las tareas, hasta el momento todo iba con normalidad. Faltaba media hora para salir de clases cuando un secretario entro en la sala y hablo con el profesor de historia, luego llamaron a Michel y a Macarena para que se presentaran en inspectoría inmediatamente, la maca sintió que se le venia el mundo encima, "si me llegan a expulsar ten por seguro que te voy caer a palos", Michel la mira preocupada.

Ambas llegaron a la oficina del inspector. "Esperen un rato, don Alberto ya viene", Macarena estaba sumamente nerviosa, "me van a echar, me van a echar" era lo único que repetía, durante más de media hora estuvieron en la oficina esperándolo, de pronto él entra muy serio y con un par de carpetas en sus manos.

"Señoritas tomen asiento, me imagino que saben por que están aquí" les dice él esbozando una tímida sonrisa en el rostro, ellas se hacen las desentendidas y le responden que no. "Me imagino entonces que ustedes no fueron las que se escaparon ayer de clases", ambas se quedaron calladas. "Para ser que sí, le pedí al profesor de castellano que pasara lista tras el recreo y justamente ustedes no aparecen, ¿podrían explicarme por que?", "es que teníamos que hacer a esa hora" le responde Michel, "era algo urgente" agrega la maca.

Él inspector las queda mirando fijamente a las dos, "en realidad no les creo ni una palabra, normalmente ya les habría entregado una notificación y en su caso señorita Macarena usted ya habría sido expulsada", la maca baja la vista sabe que esta en muy serios problemas, "¿y que se lo ha impedido?" le pregunta la maca. Alberto se pone de pie y camina alrededor de ambas, "como saben en estos días yo me voy de este colegio y me gustaría que ustedes hicieran algo por mí o mejor dicho por ustedes mismas", y apoya sus manos en los hombros de Michel, la negra se sorprende. "Será algo entretenido y si ustedes hacen lo que les pido me olvidare de todo este asunto", Macarena y Michel saben bien hacia donde se dirige esta conversación, "¿y que se supone que debemos hacer para que usted olvide este asunto?", le pregunta la maca, Alberto la mira y le dice "follen entre ustedes dos".

Macarena y Michel se quedan impactadas por tal solicitud, "si usted cree que vamos a hacer eso solo por complacer a un viejo degenerado y miserable como usted esta muy equivocado" ruge Michel que esta furiosa, "puede irse al mismísimo infierno si cree que le vamos a dar el gusto, además lo vamos a acusar que nos esta acosando" le dice Macarena y con Michel se ponen de pie para irse de ahí. "En ese caso, señorita Macarena voy a enviar una carta a su casa para solicitar la presencia de sus padres aquí y notificarles de su expulsión por escaparse de clases y le aseguro además que su informe de conducta saldrá tan malo que si consigue entrar en un convento será un milagro y en su caso señorita Michel manchare de tal manera su hoja de vida que podrá olvidarse de la beca a la cual esta postulando, además con los amigos que tengo por ahí no me costara nada hacer correr la voz acerca de dos alumnas que se ofrecieron a un inspector para no ser castigadas, ustedes eligen", Macarena lo mira llena de furia, "no se atrevería a tanto", "por que no, es mi palabra contra la de ustedes, y les aseguro que yo no voy a perder, o aceptan el trato que les ofrezco o arreglamos esto de otra forma con una expulsada y otra sin beca y con antecedentes manchados, en otras palabras o nos vamos por la vía fácil o la difícil, ustedes eligen señoritas", Macarena y Michel se miran entre ellas, saben que aunque les duela admitirlo llevan las de perder, "¿y que nos garantiza que usted no nos va a seguir molestando después?", le pregunta la negra, "yo me voy lejos de aquí así que se podrán olvidar de mí fácilmente". Luego de pensarlo y aunque de mala manera ceden ante este chantaje a fin de evitarse problemas mayores.

"Ahora que ya estamos de acuerdo pueden ponerse cómodas, un espectáculo como este no se ve todos los días" les dice a ambas mientras él cierra la puerta para no ser molestados. Macarena y Michel se quitan sus chaquetas y se quedan solo con sus uniformes. Alberto se sienta en su silla y toma palco. "Que mierda quiere ahora", le dice Macarena muy seria, "no mucho, solo comiencen a besarse", le responde él con toda normalidad. Ellas se abrazan y se dan un beso algo frío al principio mientras Alberto se acaricia su paquete, poco a poco ellas se van calentando y Michel le mete su lengua en la boca a la maca y ella le responde a su amiga agarrándole el culo. Durante varios minutos se besaron así, se acarician entre ellas y Michel le sube un poco el jumper a la maca para sentir sus suaves nalgas. "Macarena mete tu mano debajo del jumper y tómale los pechos, déjaselos al aire", ella le obedece y le abre el jumper desde atrás deslizando sus manos sobre los impresionantes pechos de Michel, Macarena la besa en el cuello y se lo va bajando, lentamente le abre su blusa y comienzan a asomarse en medio de los gemidos de Michel. Al dejárselos al descubierto Macarena se los empieza a lamer, le va metiendo mano debajo del jumper frotándole su coño, la negra también le empieza a quitar el jumper a la maca. Al cabo de un rato ambas se habían quitado sus uniformes quedándose solo con sus blusas y su ropa interior, en el piso de la oficina se besaban y se acariciaban sus hermosos cuerpos mientras Alberto las observa.

"Crucen sus piernas y frótense sus coños uno contra el otro", Michel y Macarena le hacen caso, la negra se carga con todo sobre la maca, sus ardientes coños entran en contacto y sus gemidos son muy intensos, Macarena se acaricia sus pezones mientras Michel se hace sentir sobre ella, "dale negrita, con más fuerza, con más fuerza" le dice en medio de sus gemidos. Michel mete sus dedos entre ambas y le acaricia el clítoris a la maca que se estremece por completo. "Ahora sepárense un poco solamente y cierren sus ojos, les tengo una sorpresa", ella se miran con cara de interrogación, pero sin otro remedio deben obedecer. De su maletín Alberto saca un juguete para ellas, un consolador doble bastante grande, lo acomoda entre ambas y les comienza a enterar un extremo a cada una, ellas se sorprenden al sentirlo, Alberto lo agita de lado a lado metiéndoselo alternativamente a una y a la otra, Michel no deja de frotarse sus pechos indicando lo caliente que esta, Macarena no lo hace nada mal tampoco tocándose su clítoris mientras Alberto las coge con aquel juguete, la maca mueve sus caderas cargándose contra Michel para metérselo mejor aun, "ustedes dos son unas verdaderas putas cuando se ponen a coger". Macarena a pesar de todo esta sumamente excitada, Alberto saca su polla que esta bien dura y tras pajearse un rato la toma y se la mete en la boca a la maca, al principio ella pone algo de resistencia al verse sorprendida pero poco a poco le toma el ritmo y se la empieza a mamar, Alberto se la mete hasta el fondo de su garganta mientras agita con más fuerza aun el consolador.

Al ver como esta la maca Michel decide unirse también y se recuesta sobre su amiga apoyando sus pechos sobre los de ella, ambas saborean aquel grueso miembro y Alberto se lo pone en la boca a Michel, la negra le pasa su lengua por su roja cabeza y junto a la maca le hacen una gran mamada. Macarena se pone encima del escritorio separando sus piernas, Michel hunde su lengua en el coño de la maca que se retuerce al sentir a la negra lamiéndole su clítoris y su coño, para hacerla gozar más Michel se lo hace con los dedos dándole con todo. Entonces Michel siente como le separan sus nalgas y una lengua se desliza entre ellas, Alberto decide darle duro a la negrita gozando de su muy mojado sexo, con sus dedos le va dando en su coño al tiempo que con la punta de su lengua se lo va abriendo y eso le encanta a Michel. Macarena toma del pelo a la negra y la carga contra su sexo para que no deje de lamerlo, Michel decide usar el juguete que el inspector les había pasado y se lo mete bien adentro a la maca. Alberto coge su verga que ya más dura y tiesa no puede estar y la mete en el coño de Michel, un profundo quejido soltó la negra mientras Alberto la penetra, ella recibe aquella polla y él la toma de las caderas y la empieza a bombear. Michel gime descontrolada mientras la follan, sus pechos se agita y ella con más ganas aun le devora el coño a la maca, que disfruta del consolador metido en su coño. Alberto la coge a la negra, casi hasta dejarla sin aliento, hacia tiempo que tenia ganas de cogerse a ambas y ahora no va a desaprovechar esta oportunidad. Michel descaradamente se carga contra él incitándolo a que no pare de cogerla, ahora a ella ni a la maca le importa que esto sea un chantaje, solo quieren follar.

"Móntate sobre tu amiga" le ordena a la negra, Alberto coge las piernas a la maca y las apoya en sus hombros, Michel le mete el consolador en la boca y luego la maca siente como le llega su turno de ser follada, Alberto la sujeta de sus muslos mientras le da con toda su fuerza, la chica de mal carácter ahora se deja follar. Michel le lame sus tetas y con sus dedos le frota el clítoris, luego le mete el consolador en la boca y ella se le monta encima para meterse la otra punta en su coño, ellas tienen un concierto de ardientes gemidos en aquella oficina. Michel le ofrece sus pechos a Alberto que ansiosamente se los devora sin dejar de follar a la maca que sujeta el consolador entre sus manos y su boca para seguir dándole a la negra.

Ellas le pidieron a Alberto que se botara en el piso, luego de hacerle una deliciosa mamada entre ambas Michel se le monta encima, recibiendo toda su verga en su sexo, la maca le pone su coño en la boca y Alberto se encarga de ambas a la vez. Ellas se besan y acarician apasionadamente mientras el inspector las folla, Macarena puede sentir deslizando su lengua en su coño mientras Michel siente su polla recorriéndola por dentro, Alberto la toma de las caderas y la hace cabalgar sobre su polla. Después ellas hicieron un furioso 69 en el piso, Michel se puso encima de la maca, fue entonces cuando la negra sintió como él le abría su culo y por ahí se la empezó a enterrar, Macarena no dejaba de lamerle su coño y Alberto se la fue metiendo con más fuerza cada vez, tomándola firmemente de las caderas comenzó a follarla por su lindo culo, Michel sentía un placer enorme con una polla bien metida entre sus nalgas y la lengua de su amiga lamiendo su sexo, Alberto parecía que la iba a partir en dos por lo fuerte que la coge.

"Es tu turno princesa" le dice él a la maca. Alberto se recuesta en el piso con su polla erecta como si fuera un mástil, "quiero mi verga bien metida en tu culo" le dice Alberto con una gran sonrisa en su rostro. Michel le abre las nalgas a la maca y la folla con sus dedos, luego ella se pone sobre él dándole la espalda, Macarena se va dejando caer sobre él, al sentir como se abre su culo ella empieza a soltar profundos quejidos mientras la gruesa polla de Alberto se va enterrando en su estrecho culo, Macarena comienza a cabalgarle encima. Michel la besaba mientras con sus dedos la folla en su coño, Alberto la recuesta sobre él y le sigue dando por su culo, Macarena se retuerce y se agita sobre el miembro de Alberto. "Ya maca, ahora te voy a dar", Michel coge el consolador y le mete un extremo a la maca en su húmedo coño, ellas cruzan sus piernas entre sí y la negra se mete el otro extremo. Ambas se follan mutuamente, Alberto le da con especial fuerza a la maca, Michel no lo hacia nada mal y los gemidos y quejidos de ambas llenan la oficina, Macarena es la más excitada ya no da más y de pronto Alberto le lleno su culo de cálido semen. Él saca su polla y Michel la pone entre sus impresionantes pechos, ella le hace un paja con ellas hasta hacerlo acabar nuevamente. Entre Macarena y Michel se la mamaron hasta sacarle todo.

Tranquilamente Alberto se arregla como si nada hubiera pasado, "si quieren pueden llevarse el juguete, es un regalo para unas excepcionales alumnas", "déjese de estupideces de una vez", le dice Michel mientras se viste. Alberto recoge las citaciones de ambas y las rompe, "bueno ustedes cumplieron con su parte del trato, ahora yo cumplo con la mía, pueden irse señoritas", "gracias, algo más" le pregunta Macarena en tono sarcástico, "sí una ultima cosa ahora que lo menciona", Michel y Macarena de inmediato le ponen una cara de enojo, "denle saludos a la señorita Ángela, fue una verdadera pena que no nos pudiera acompañar esta tarde", "realmente usted es un verdadero degenerado" le dice Macarena molesta por su comentario. Alberto se ríe y cuando ellas se van retirando comenta, "es que la señorita Ángela es muy talentosa".

Al salir del colegio se van a visitar a Ángela nuevamente, la pelirroja esta mucho mejor y espera volver a clases el próximo lunes. La acompañaron un rato y Ángela las nota bastante serias y algo agitadas, ahí Michel decide contarle lo ocurrido, Ángela se ríe a carcajadas, "¿y que gracia le vez?" le pregunta la maca algo molesta, "es que ustedes pagaron el noviciado, a mi también me sorprendió y fueron dos veces" responde Ángela con una sonrisa, "no lo hace nada mal verdad" agrega la pelirroja.