Un encuentro fugaz en los aseos con una desconocida

Ya estamos en el mes de julio, mes caluroso en Sevilla pero no tanto como otros años, mes que huele a inicio de vacaciones, donde comenzamos a quedarnos de rodríguez, tanto ella como él. Pero es esa época del año en que no sé por qué causa nos volvemos más ardientes, temporada que lo he comprobado año tras año, temporada veraniega que quizás sea por el calor que nos volvemos más calientes, morbosos y con ganas de hacer locuras.

Nunca he negado que he tenido y supongo que como la mayoría encuentros extraños, soy de las pocas personas que miran antes las consecuencias futuras que el disfrute, pues pienso que debemos de aprovechar la vida en el momento y no dejarlo para un futuro. Siempre me han salido situaciones que de una manera u otra acaban en lo mismo, no me considero guapo o un fuera de serie, aunque mí mujer opina que poseo un atractivo diferente, eso sumado a mí forma de ser, pues me considero un galante de los de antes, una persona con rasgos de Don Juan, cosa que dicen que aún me funciona.

También es verdad que desde cambie mi puesto laboral por completo, puesto que anteriormente lo alternaba con el anterior, pero la situación económica que sufría y la poca estabilidad que transmitía, me hizo decidirme a ser comercial. Puesto que me da alas y autónomo, siendo mi propio jefe y ser yo quien impongo mi horario. Pues sí… desde que tengo este nuevo puesto laboral, puedo decir que las experiencias se han multiplicado, encontrándome situaciones que la verdad son poco creíbles para algunos, pero cuando les pasan a los incrédulos son lo no va más”.

Bueno no me enrollare más, contároslo mi última experiencia. Mirad el pasado martes día nueve del presente mes de julio, tras un agotador día de trabajo y sofocante calor, acabe mi jornada partida de trabajo, no deseando ir a mí casa a almorzar por aprovechar el tiempo. Por lo que tras salir de la oficina a eso de las dos y media del mediodía, decidid acerque al Outlet que hay en Centro Comercial Hipercor de San Juan de Aznalfarache, donde tras bichear un poco acabe por comprarme un par de camisas, un pantalón y unos zapatos. Mirando la hora y no sabiendo bien a donde ir a almorzar, subí la rampa hasta acceder a la zona del Hipercor y tiendas Corti, donde pude ver algunas cosas hasta acabar en la zona de los ordenadores.

Tras llevarme la información de algunos portátiles gracias a los vendedores, donde me aconsejo tanto de unos como de otros, acabe por agradecerle la información y como tenía hambre, me acerque a la zona “Food court” o zona de servicios de comida rápida. Zona donde tenía en mente comer en los “100 montaditos”, pero tras ver la cola a lo lejos me hizo retractarme. Cuando entre por ese pasillo que esta franqueado entre una franquicia de comida italiana y la zona de comer, zona que se me fui la vista al ver a una tremenda rubia de blanco, rubia que por estar rodeada por dos niños pequeños di por echo casada y madre, pero aun así esta tremenda... mmm. Era una mujer rubia cuyo vestido blanco, apenas podía ocultar esos enormes pechos que casi se le salían por su escote, mujer de tremendo culo y aun mejores piernas torneadas, mujer que nada más verla se me puso dura... uuuffff!!.

Pero mi atenta mirada al final fue captada por esta mujer al apartar la mirada de su marido, mirada que tuve que apartar aunque ella con pícara sonrisa socarrona no la aparto precisamente de mí. Yo camine en dirección al Burguer King donde elegí comer, quedándome en la cola no tan larga a la espera que me tocará, momento en que me giré para ver en que mesa me iba a sentar, pasando precisamente en ese momento una mujer que hizo que mis ojos se clavaran en ella. Mujer que iba con paso decidida hacía los baños, fijándome no en ese tremendo trasero que poseía… cuyo vestido finísimo de color blanco con pequeños lunares, no solo se lo marcaba sino que marcaba su silueta… uuummm!!. Pero también me fije en sus cabellos largos de color negro, mujer a la cual no pude evitar decirle...

• "Vaya pedazo de hembra, quien pudiera cogerte y hacerte aullar de placer".

Rápidamente caí en mi torpeza, no demostrando en ese momento mis cualidades de caballero, mostrándome como bruto y cuya vista se apartó de sus nalgas. Vista que ascendí con rapidez hacia su rostro, rostro que esta giro en ese mismo momento, cuya mirada me maldecía por mis palabras. Esta se detuvo y se quedó en la entrada al pasillo que se accede a los baños, pensé en que me soltaría alguna grosería que la verdad me lo merecería, pues la verdad para ser sincero... me pase dos pueblos.

Después pensé en los motivos por el cual esta se había quedado detenida en la entrada a los baños, girando mi cabeza en dirección hacia su acompañante, acompañante que estaba más atento al móvil que otra cosa. Tras escasos minutos volví a fijar mi vista en esa mujer, impaciente y con cara de malos amigos, ansiosa e intranquila. Mujer que tras unos minutos de espera, acabo por mirarme con desfachatez y provocación, mirándome al tiempo que se mordía el mentón… uuummmm!!, mirada que termino con una sonrisa y para mí eso es una invitación.

No pensándomelo dos veces y camine en su dirección, eso sí aunque intranquilo por donde estaba, pues no deseaba tampoco una escena, siendo yo usado como muestra de atención hacia su acompañante. Pero mujer al verme decidido caminar hacia ella, dio un par de pasos hacia atrás hasta adentrarse en el pasillo hacia los baños. Tras colocarme delante suya y cuando fui a decirle algo, esta me interrumpió con una pregunta…

• “¿De verdad te parezco un pedazo de hembra?”.

Son momentos en que uno se debe de mostrar decidido y frio, respondiéndole…

• “Claro que sí, cualquier hombre se sentiría orgulloso de poderte coger, poseerte, satisfacerte hacerte aullar de placer”.

Ella ríe modestamente, mientras no dejamos de mirarnos con deseo, acabando por soltarme...

• "Pues a ver si es verdad y no queda en humo”.

• “Debe de ser rápido, mi marido esta esperándome en la mesa".

Y sin esperar a escuchar mi respuesta, me tomo del brazo y tirando de mí me condujo hacia los aseos de caballeros, donde me cerciore primero que estuvieran vacíos, metiéndonos en la última cabina al tiempo que esta me decía…

• “Nada de besos.

Callo y asiento, momento en que acerco decidido con la intención de besar su cuello, siendo ella la que posa sus labios con los míos a pesar de que minutos antes dijo “nada de besos”. Comenzando a besarnos con pasión y frenesí… uuummm!!, mientras la abrazo pegándola hacia mi cuerpo, manos que desciende ambas hacia sus nalgas, oprimiéndolas con fuerza hacia mi pelvis y hacerle notar mi estado de excitación, cosa que ella separando sus labios de los míos y con sonrisa picarona me suelta...

• "Y eso es por mí causa… uuummm!!, me gusta que aun haga yo ese efecto en los hombres”.

• “Sabes, me gusta que en el sexo me doblegue, quiero que mí macho si así lo desea, me insulte o me azote… mmm!!”.

Momento en que dirijo mi mano izquierda hacia su cuello al tiempo que con la derecha, comienza a magrear sus nalgas y soltarle un azote… aaahhh!!. Ella tampoco pierde el tiempo, nerviosa intenta sacar mi polla fuera de mis pantalones, comenzando por bajarme la cremallera e introducir su mano dentro, pero viendo que le es imposible. Comienza por soltar el cinturón, desabotonar el botón de mi pantalón y tirar un poco de este hacia abajo, tirando de mis calzoncillos hacia abajo al tiempo que su otra mano, saca por fin mi miembro fuera… uuummm!!. Soltándome…

• “Uuummm!!... que dura esta”.

Comenzando a deslizar su mano a lo largo de mi tronco venoso, vuelve a soltarme…

• “Que gruesa y venosa es... mmm!!, no es tan grande como la de mi marido pero me gusta mucho… uuummm!!”.

Yo para esos momentos había dejado sus nalgas y había puesto toda mi atención en sus senos, comenzando por acariciárselos y magreárselos por encima de su vestido… uuuffff!!. Tras desabotonar los botones de su vestido, botones que estaban en la parte delantera y aunque parecían que eran decoración de este, en verdad era en parte, pues tras ir desabotonando botón por botón hasta llegar al vientre al tiempo que besaba cuello y oreja… mmm!!, ella no dejaba de masturbarme… ooohhh!!. Continuando por soltar los corchetes del sujetador y dejarlos libres, comenzando a amasar con mi mano derecha uno de sus senos… al tiempo que mi boca chupaba y besaba el otro… uuummm!!. Ella comenzó a gemir tímidamente, gemir por las caricias que le estaba proporcionando mi mano izquierda al deslizarse desde su pubis hasta el orificio de su culito… aaahhh!!. Ella gemía muy bajo... más diría que eran suspiros.

Su mano la deslizaba a lo largo de mi tronco hasta mis genitales... uuuffff!!, jugueteaba con mis testículos… ooohhh!!. Mientras alternaba los besos desde sus senos hasta su cuello, lamia y mordía… aaahhh!!, mordía con suavidad sin intención de dejarle marcas... uuummm!!. Descendí mis labios al tiempo que tiraba de su vestido hacia arriba, deslice mis labios por su vientre hasta su pubis… uuummm!!, continuando por sus braguitas empapadas debido por la excitación hacia sus mulos... ooohhh!!, siendo ella la que separaba estos… uuuhhh!!.

Continúe primero por echar hacia un lado la tela de sus braguitas de encajes, lamiendo su vulva y chupando sus labios vaginales… ooohhh!!, acabando por quitársela e introduciéndomela en el bolsillo. Dedicándome por entero a chupar su vulva… lamí y absorbí mientras ella se convulsionaba de placer… ooohhh!!, debía de gustarle mis manera pues coloco una de sus manos en mi nuca, mano que oprimía mi nuca contra su entrepierna... uuummm!!. Acabe por ayudarme inicialmente con un dedo, jugueteando con ese pequeño botoncito que no es otro que su punto G, disfrutando ambos del placer y sin tiempo para introducirle un segundo dedo, cuando ella me dice…

• "Méteme dos dedos que estoy muy caliente... ooohhhh!!".

Acabando por hacerlo al tiempo que ella introducía su mano derecha entre mi rostro y su pelvis, comenzando ella a hacerse un dedo al tiempo que chupaba sus labios vaginales y la penetraba con dos de mis dedos... ooohhhh!!, siendo en pocos minutos entre convulsiones obtuvo ella su primer orgasmo… uuuffff!!.  Orgasmo que trague con gusto a pesar de los tirones que ella me daba a mis cabellos, tirones por intentar apartarme y tras conseguirlo me hizo levantar, empujándome hacia atrás hasta hacerme sentar sobre la taza del wc. Bajándome los pantalones y calzoncillo por mis piernas hasta mis tobillos, acabo optando por descalzarme y quitarme tanto pantalones como calzoncillos. Luego tomo mi miembro con su mano derecha al tiempo que se lo introducía en su polla... uuuffff!!, mientras con la izquierda magreaba mis testículos y perineo… mmm!!, llegando incluso a deslizar la yema de uno de sus dedos cerca de mi orificio anal. Pero en un par de ocasiones, tuve que advertirle que tuviera cuidado pues sus dicentes pues rozaban mi tronco, pudiendo comprobar que no tenía mucha experiencia a pesar de las ganas que ponía… uuummm!!, siendo ella la que tras sacársela me decía...

• "Es que la tienes muy gorda".

Volviendo a la faena, lamiendo mi glande y deslizando su lengua por mi tronco hasta mis genitales, ascendiendo por mis marcadas e hinchadas venas con sus labios hasta mi glande... uuuffff!!. Dejaba caer una gota de saliva de su boca, gota que esta descendía por mi tronco y que esta tras introducirse nuevamente mi miembro… uuuffff!!, perseguía esta gota hasta que las arcadas y nauseas le impedía continuar… aaahhh!!. No pudiendo aguantar más, cogí y la detuve, tirando de ella hasta hacerla levantar, soltándole…

• “Uuuffff!!, para puta que quiero follarte”.

Tras decirle esa lindeza, insulto que esta le gusto, la gire hacia la pared, quedando ella frente a esos azulejos verdosos y de espalda a mí. Viendo la posible incomodidad, acabe por girarla hasta situarla sobre la taza del wc, pudiéndose esta sujetar a la cisterna y levantar una de sus piernas para mayor comodidad. Luego tire de su vestido hacía arriba, no teniendo la intención de quitárselo, sino dejárselo bajo sus mamas, separe sus muslos y deslice mi glande por entre sus encharcados labios vaginales. Soltándome ella...

• "Ponte un preservativo, no deseo quedarme preñada".

Respondiéndole...

• "No te preocupes… haces unos años me quite ese problema".

No habiendo mucha más conversación tras la primera embestida, sujetándose ella sobre la cisterna, mordiendo su vestido a modo de poder acallar sus gritos de placer... aaahhhh!!. Llevado por el momento, acabe por incorporarla un poco al compás de mis fuertes embestidas, soltando ella gemidos aunque no alarmantes pero su audibles... aaahhh!!... aaahhh!!... aaahhhh!!. Acabándola por oírle decirme...

• "Fóllame cabrón... uuuffff!!, hazme tuya... uuummmm!!, trátame como tu puta... aaahhh!!".

No sé porque... pero aquello me puso aún más, acabe por soltarle una serie de sonoras palmadas en las nalgas al tiempo que tiraba de sus brazos hacia arriba, obligándola a flexionar su cuerpo un poco más entre jadeos... ooohhhh!!. Mi mano derecha sobre su hombro derecha ejercía la fuerza para de tirar de ella hacía mí al tiempo de mis brutales embestidas... aaahhhh!!, mientras con la izquierda magreaba sus senos y pellizcaba con fuerza sus pezones... aaahhh!!, penetrándola con fuerza e insultándola... uuuffff!!. Pero baje el ritmo y no porque iba a venirme, sino porque pensé que quizás pudiera lastimarla. Pero coge esta y viéndome bajar el ritmo al tiempo, quizás no fuera solo porque mis manos dejaron sus hombros para aferrarse a su cintura, sino por la ímpetu, cogió esta y acabo por soltarme en esos momentos...

• "No pares cabrón... aaahhhh!!, ahora no pares... ooohhhh!!".

Comenzando nuevamente a acelerar el ritmo dándole fuerte embestidas, llegando incluso en un momento y llevado por el momento, cogí y tras coger su melena la hice una cola y comencé a tirar de ella hacía mí, mientras con la otra comencé a darle fuertes palmadas... ooohhhh!!. Acelerando mi ritmo al compás de sus gemidos, sintiendo como el breve me podría correr si seguía con el mismo compa. Pero es ella quien de forma involuntaria se ayudó nuevamente, quizás sea porque está acostumbrada a hacerlo y ya lo hace de forma involuntaria las demás… ooohhh!!, forma que acelera su orgasmo, casi sollozando y con respiración ahogada me suelta...

• "Tu aun no te ha venido, pero si creía que ya te habías corrido".

Entre besos, le hice ver que estaba en las puertas, explicándole que si no se hubiera detenido hubiera descargado pues estaba a punto, no deje de darle magreos, caricias y besos por no disminuir el estado de excitación… uuummm!!. Sin palabra alguna, me hace sentar sobre la taza del wc, siendo ella la que se sienta sobre mí, colocando una pierna a cada lado de la mía al tiempo que ella misma se introduce mi glande... uuummmm!!. Comenzando ella a moverse como toda una amazona, mientras la besaba o comía sus pechos... mis manos acaricia su cuerpo, deteniéndome sobre todo en su orificio anal, dejándome aunque muy regañadientes a jugar con su orificio... uuuffff!!, llegándole a introducir uno de mis dedos y follarla con él, no durando yo no más de cinco minutos cuando comienzo a descargar dentro de ella entre convulsiones... ooohhhh!!. No deteniendo las embestidas a pesar de que ella me dice...

• "Pero te has corrido ya... no!!".

Y teniendo que explicarle…

• “Yo soy de esos que a veces la primera erección le dura hasta dos orgasmos, aunque a veces y como a todos necesito descansar diez minutos para reponerme”.

Ella mientras me escuchaba, se levantó como pudo, pues decía que le dolía las piernas. Mirándome me soltó...

• "Pues siento muchísimo dejarte así, pero sabes bien que debo irme, no puedo seguir aunque quisiera... uuummm!!".

Cogió bastante papel higiénico y comenzó a limpiarse, recogiendo todo el semen que pudo, mientras yo le ayudaba a colocarse el sujetador, subirle el vestido y abotonar los botones de este. Ayudándome ella a arreglarme, volviendo a tener el mismo problema que antes pero en esta ocasión al revés, pues si antes deseaba sacar mi miembro fuera del pantalón, ahora era al contrario. Entre risas acabo por sentarse en la taza del wc, mirándome cogió y se la volvió a meter en la boca otra vez, comenzando a chupármela mejor que la vez anterior, magreando mis genitales e incluso en esta ocasión se los metió en la boca, no dejando de decir ahora…

• “Te gusta… uuummm!!, mucho mejor ahora… no soy de las que la chupan… uuuffff!!. Pero el chupar los genitales y esta parte… res el primero y único… uuummm!!”.

Deje que me chupara la parte entre los genitales y el inicio del culo… o sea el perineo… uuummm!!. Acabando por colocar mi mano sobre su nuca, oprimiendo la palma de mi mano al tiempo que con la otra acariciaba sus cabellos. No dejando que se apartara, mientras en mis pensamientos deseaba correrme, cosa que facilite y descargue en toda su totalidad dentro de su boca, sintiendo como esta deseaba apartarse. Pues quizás su deseo era que me corriera pero no precisamente en su boca… aaahhh!!, tras varios trallazos en el fondo de su boca a pesar de la lucha por retirarse, acabo por resignarse y eso que la solté. Pero ella continúo chupándomela, succionando hasta no dejarme gota alguna, levantándose y acabando por morrearme. Quedándose sorprendida y soltarme..

• “Sabes pensé que te daría asco después de haberme comido tu polla y tener el sabor de semen… eeehhh!!”.

• “Sabes… también pensé que sabría asquerosamente, pero la verdad no sabe a nada… lo que son las cosas”.

Ella volviéndose a limpiar, cogió y me dijo…

• “Mira si puedo salir, quisiera limpiarme un poco antes de presentarme ante mi marido, debo de quitarme el olor a semen”.

Cogí y salí primero, quedándome en la puerta de acceso al baño de caballero, mientras ella se aseaba y se presentaba bien. Tras avisarle que podía salir ya, antes de que ella se marchara cogió y me dio un par de piquitos al tiempo que yo le dije...

• "Si deseas repetirlo, te espero el martes que viene aquí a la misma hora".

No hubo intercambio de móviles ni nada parecido, no penséis que hubiera sido lo lógico, pues esto ha sido algo fugaz y no programado. Cuando ella pudo salir de los baños de hombres, salió evidentemente apresurada, mientras yo espere unos minutos en salir, luego me dirigí hacia al Burguer King y tras pedir algo, acabe por sentarme en una mesa que estaba a metros de ella. Mientras devoraba mi hamburguesa, la veía conversar entre risas con su pareja como si nada hubiera ocurrido.

Para seros sinceros, no creo que ella vuelva, no os digo que coincidamos en otro lugar, pero esto no creo que se vuelva a repetir, lo ocurrido ha sido eso una espontaneidad por parte de ambos, un momento de locura por su parte que deseaba con su pareja y que finalmente lo ha aprovechado con un desconocido, sabiendo perfectamente que esto se quedara en eso. Bueno os dejo, espero que os haya gustado tanto como a mí, os invito a que me lo hagáis saber si os apetece a mí email… Jhosua1974@Gmail.com