miprimita.com

Mi amigo y semental amigo 83 años

en Gays

Mi amigo y semental amigo 83 años

Antes de nada… muchas gracias, gracias a todos aquellos que seguís mis experiencias, pues realmente son eso… experiencias, quedándose ahora como anécdotas muchas de ellas, aunque mantengo esta rutina o costumbre cada día que puedo.

No me es difícil recordar, pues como olvidar aquellos momentos, más cuando uno tiene algo parecido a la hipermnesia (resumiendo, lo que es, no es más que el poder recordar cosas o fragmentos vivimos). Comenzando por tener flases en mi mente, todo a raíz de alguna experiencia o relacionado, comenzando a recordar todo… mmm.

El jueves pasado me acerque a los aparcamientos del apeadero del Estadio de la Cartuja, deambule de arriba hacia abajo, pues aunque había pero no era de mi agrado, mucho joven, mucho rumano, mucho chapero.

La marca y modelo de un coche llamo mi atención (BMW azul marino), comencé a seguirle, pero este tras darme esquinazo en más de una ocasión, decidid dejarlo. Me quede finalmente situado a un lado detenido, eso sí con el aire acondicionado y la radio puesta, cuando sin darme cuenta un coche se había detenido al lado, levantando la cabeza y era él. Se me quedo mirando fijamente, soltándole yo…

  • “¿Qué me conoces?”.

Contestándome él…

  • “Claro que te conozco, no te voy a reconocer”.
  • “Te vi antes, pero creo que tu no me reconociste a mí”.

Apago el aire acondicionado, apago la radio y apago el motor, salgo de mi coche hasta el suyo, tiempo que este le da tiempo de salir. Me pongo a su lado y a pesar de ser yo alto, no recordaba que él es aún más alto. Comenzamos a conversar, haciéndome saber que me ha visto hasta en dos ocasiones, me hace saber los días y hora, acabando por decirme que ha estado tentado por bajarse e ir a mí encuentro. Mientras miro como habla, condujo mi mano hacia su entrepierna… mmm, dándome cuenta lo dura que esta, alegrándome que supuestamente no haya hecho nada.

Esté, mira a nuestro alrededor, cerciorándose que no hay nadie, acabando por estamparme un beso, continuando por comerme la boca al tiempo que sus manos intentan introducirse por mi camisa… mmm.

Comenzando a pasar coches y curiosos, preguntándome…

  • “Tienes sitio donde podemos estar tranquilo”.

Lógicamente le digo…

  • “Sabes bien que no tengo sitio”.

Pensativo se queda unos minutos, acabando por soltarme…

  • “Sígueme”.

Ambos dentro de nuestros respectivos vehículos nos marchamos, siguiéndole yo y ver que me conduce hacia la explanada de albero, esa que está flanqueada por montículos de arena (pienso... la conozco). Este se detiene cerca del montículo pero por el lado opuesto, entra por una arboleda que da a un camino, camino que se encuentra entre el montículo y la barrera que protege a la vía del tren. Caminamos hacia el fondo, me conduce hasta un claro que está cubierto de árboles, digo claro pues el resto está lleno de hierba y basura. Me hace meterme en uno de estos árboles, pidiéndome…

  • “Quítate la camisa”.

Le hago caso, comienzo a desabotonarme los botones de mi camisa, quitándomela y dejándola sobre una rama. Este me mira y sonríe, soltándome…

  • “Joder, cuanto pelo tienes cabrón”.

Pero eso no le detiene, cuando me abraza contra su cuerpo, besando mi boca, recorriendo mi cuello, oreja, hombros… aaahhh. Yo no pierdo el tiempo, le he bajado la cremallera de su bragueta e introducido mi mano dentro, sacando eso si con su ayuda su miembro, polla de gran dimensión como grosor… mmm. Mi amigo al cual le llamo el Jerezano, cuya edad no compagina por el tamaño o virtud de su miembro, pues le mide cerca de 21 cm por 3.5 / 4.00 cm de diámetro. Es increíble el tamaño de su polla… no dejo de admirarla, cosa que este me pide…

  • “Cómetela ya, no pierdas tiempo”.

Quise ponerme en cuclillas, cuando este me detuvo y me pidió que me bajara los pantalones, cuando fui a bajármelo, apareció el primer mirón. Joven, no tendría mucho más de veinticinco años, rápidamente mi amigo se guardó su pollón, yo quise ponerme la camisa, pero él no me dejo, diciéndome…

  • “No te la pongas”.
  • “Mira ya se ha ido”.

Aprovechando mi cinturón colgando, tira del cinturón… acabando por sacármelo, bajo mis pantalones y el mis calzoncillos. Comienza a magrear mis nalgas, pellizcándomelas, sabiendo que me duelen… aaahhh, finalizando por intentar introducirme su dedo índice, pero la falta de dilatación por mi parte se lo impide. Soltándome…

  • “Llevas vaselina encima”.

Viendo lo bien que me conoce, asiento con la cabeza al tiempo que el con su mano la pide, tras darle el bote. El jerezano son dos de sus dedos los que impregna, siendo el pulgar el que comienza a introducírmelo… aaahhh (joder). Sus dedos son pollas, pues los diez centímetros de uno de ellos, me hacen estremecer… ooohhh. Acabando este por pedirme…

  • “Venga, cómemela ya”.

Me pongo en cuclillas y tras tomarla con mi mano derecha, comienzo primero a lamerla entera, desde su glande hasta sus enormes genitales, mi amigo no deja de jadear. Llegándome a preguntar…

  • “Alguna vez se han meado en ti”.

Mi rostro lo dice todo (Nooooo). Continúo chupándosela, lamiendo su tronco, comenzando a introducírmela poco a poco dentro de mi boca, llegando a tener arcadas por la dificultad. Pero como cabezota que me reconozco, no desfallezco y continuo, introduciéndomela finalmente dentro de mí boca. Soltándome este…

  • “Joder, no vez”.
  • “Yo sabía que podías metértela entera”.
  • “Menuda boquita tienes, mi vida”.
  • “Seguro que te ha pasado la campanilla, pues estabas rojo”.

Un ruido nos alarma, guardándosela mi amigo nuevamente, mientras yo intento taparme con mis ropas como puedo. Ahora es un hombre de no más de cuarenta años, hombre que nos indica que desea participar y que mi amigo niega. Tras marcharse este, comento la posibilidad de buscarnos otro sitio, pero mi amigo se niega, pidiéndome…

  • “Venga, agáchate y cómetela un poco más”.
  • “Me gusta ver como desaparece entera dentro de tu boca”.

Vuelvo a colocarme en cuclillas y nuevamente al pilón, aprovechando la posición para untarme vaselina en mi orificio anal… mmm. Las prisas comienzan a florecer en él, pues con malas maneras me hace levantar, inclinándome hacia delante, colocarse detrás de mí, buscando con sus dedos de su mano izquierda mi orificio al tiempo que con su mano derecha, conduce su polla. Tras dar con él, me suelta…

  • “Ya te han follado, cabrón”.
  • “Te han dejado el coñito, lleno de leche”.

Rápidamente le contesto, sacándole de su error…

  • “Nadie aun me ha follado, tú vas a ser el primero”.
  • “Esto no es semen, esto es vaselina”.

Contesto, enseñándole nueva el frasco que llevo que antes precisamente le enseñe. Coloca su glande en la entrada de mi coñito, como le gusta llamarlo, comienza a empujar a modo de poder introducirse… aaahhh. El dolor es para ambos, pidiéndome que le eche vaselina en su polla, cosa que hago, colocándome nuevamente y los nervios no solo le hacen mella, pues comienza a perder la erección. Pidiéndome…

  • “Mira como esta, cómemela un poco”.

Me arrodillo y tras cogérsela, me la llevo a la boca, dándole la mejor de las mamadas, dándole tanto placer que él es quien me detiene, pues desea follarme y no correrse en mi boca. Me incorporo, me inclino hacia delante, apoyándome en esta ocasión sobre una rama, veo nuevamente la dificultad de mi amigo. Miro de un lado hacia el otro, no viendo a nadie y en el caso que lo hubiera, como que me importa poco. Me descalzo, quedándome con los ejecutivos, cosa que a mi amigo le gusta y me sugiere…

  • “Porque no te vienes con medias de ligas”.
  • ”Quiero vértelas puestas, quiero follarte como la puta que eres”.

Tras quitarme los vaqueros, continuo con los calzoncillos, quedándome prácticamente desnudo a falta de los ejecutivos… mmm. Este se pone nuevamente detrás, siendo yo ahora quien tras cogérsela, comienzo a restregar su glande por mi orificio… mmm. Soy yo quien retrocede… aaahhh, sintiendo como me entra su glande dentro… ooohhh, soltándolo y apoyarme en la rama. Tomando el timón mi amigo y comenzar a embestirme, sintiendo como soy duramente penetrado por mi semental… ooohhh. Comenzando este a soltarme entre delirios de placer…

  • “Quiero follarte todos los días… ooohhh”.
  • “Quiero que te vengas conmigo, te compare un piso donde estarás solo para mí… mmm”.
  • “Quiero que seas solo mi puta, solo te quiero para mí, te pagare si es lo que deseas… aaahhh”.
  • “Te vestirás de puta para mí. Te quitare todo este pelo que tienes cabrón… ooohhh”.

Desde mi posición veo a varios mirones, todos seguros de unirse a la fiesta, pero callo por no estropearle el momento a mi semental, semental que lleva destrozándome mi coñito durante diez minutos… ooohhh. Me coge de mi nuca y me hace volver la cara, comenzando a besarme… mordiéndome el labio. Me duele todo, pues las embestidas son brutales, creo que se escucha las embestidas desde el mismo Estadio… uuuffff. Acabando por anunciarme su corrida, cosa que hace al tiempo que me muerde el hombro… aaayyy, siento como se diluye su corrida por mis piernas a pesar de tener su polla en mi coñito, siento como esta pierde su flamante erección… mmm.

Como una servicial zorra, le ayudo a limpiar su miembro, mientras continuo desnudo. Mi viejo amigo y semental, guarda su polla y se marcha, dejándome allí desnudo aun, dejándome en verdad a los lobos, no esperando si quiera a que me ponga al menos los calzoncillos… mmm. Cosa que ni me los pongo, pues me visto a la carrera mientras veo como estos se acerca, ya no solo los veo sino escucho como me silban y me piden mis favores.

Cuando salgo a la explanada, veo un Renault Clio blanco acercarse, bajando de su interior otro viejo amigo, amigo que me enseña el interior de una bolsa de deporte, observando que dentro de esta… esta su porra (defensa)… mmm. Soltándome…

  • “Vámonos a algún sitio, mira cómo está la porra, tócala, veras lo dura y caliente que esta. La tengo deseosa de follar un coñito… mmm“.

Este precisamente de polla… tiene más bien poca, pero de demostrar y dar dolor… sabe mucho. Él es un maduro que se proporciona placer, follándome ya sea con la porra como con sus dedos, llegándome a introducir hasta cuatro de ellos… ooohhh. Le gusta morder y pellizcar mis pezones hasta escucharme pedir perdón… mmm, le encanta proporcionarme dolor… mmm. Creo que mejor lo dejare para otra ocasión… mmm.

Bueno aquí finaliza esta experiencia, una anécdota más de mi vida ajetreada de sexo, no quejándome demasiado de cuando no follo fuera, pues para eso está mi mujer, para romperle el culo todas las veces que se deja… mmm.

Espero que os haya gustado tanto como a mí. Espero vuestros comentarios, pero por favor… no me seáis muy crueles. Sé de sobra que me gusta recibir como la zorra sumisa que soy, pero aun siendo sumiso me va probar cosas nuevas, moviéndome por el morbo y la curiosidad. Mi email es (lógicamente va todo junto):  Jhosua 1974 @ Gmail . com

Mas de Jhosua

Salí a correr y acabé siendo violado

Las costumbres de las vecinitas

Locuras de un adolescente

Nostalgia del Cine X

Un hostal de mala muerte

La bocazas y el cabrón

El ligue de una discoteca

Un encuentro fugaz en los aseos con una desconocid

Las experiencias más intensas no se planifican

Una agenda aún más apretada

Una agenda apretada

Lo que me paso por trajeado

Tener un mirón con derecho me pone

Lunes agradecido, un día lluvioso

Una tarde para ser infiel

La hija de mi compañero

Oferta de trabajo con relación y convivencia con 2

La niñata II

Deseoso de morbo, acabas por tragar

Una chica muy diferente

Un viaje placentero (re-subido)

Tragón

La niñata

Ayudando a limpiar un piso a mí compañero

Cansado de luchar acabas cediendo

Cuando un gesto o un acto te marcan

Una propuesta de trabajo II

Una propuesta de trabajo I

Refuerzo emocional fraternal II

No pretendes pero acaba sucediendo

Refuerzo emocional fraternal

Buscando solo la amistad de una divorciada

El curso muy bien aprovechado

Cuando intentas no ir de calientapollas...

Comunidad de buenas vecinas e infieles

A raíz de una exploración rectal

Algo fortuito e inesperado

Una pequeña orgia en los aseos subterráneo

Un desliz en una noche de verano

Tras follar con mi mujer, fui follado en los aseos

Morbiux: adicto al sexo

Mis ardientes vecinas

Alba, nacida a raíz de ese cine X

Miradas furtivas a una vecina acaba en confusión

Dormitorios compartidos de aquella pensión

Descubriéndome a mí mismo en un Cine X (II)

Una manera de perder el tiempo en un cine (I)

Nunca la edad debe de ser un impedimento

Jhosua1974… una vida dedicada al sexo I

Las Bodas de Oro

El desayuno

De urgencia en la consulta

Cuando me dejo el coche tirado

Cansada de su monótona vida sexual I

Compartido por no tener sitio

Frustrada e Insatisfecha

Un rapidín en los aseos de un Supermercado

Buscaba regalo para Reyes

Pasivo curioso y ahora Rodríguez… busca macho

La Mercería

Mi buena obra del día

Mi vecina de enfrente

Con la complicidad del dependiente

Cabrón, cuantos pelos tienes

Detallando a mi mujer por un polvo

Sexo no tan consentido en el Sex Shop

La penitencia

Disfrutando de Mí un amigo en el Sex Shop

Aparentemente día de playa

Sexo a cambio de confesiones sobre mi mujer

Las enseñanzas de una limpiadora a un jovencito

Aquella limpiadora de los servicios públicos

Esos largos paseos por la playa (II)

No siempre es lo que cuentan de un negro

Largos paseos por la playa

Aprovechando el fin de semana, no solo para pintar

Mi amigo... El Jerezano

Saciando a la zorra que hay en mí

Venir de Vacaciones y besar el Santo

Besar el Santo

No siempre es el último antes de las vacaciones

Muchos tiburones en tan poca pecera

Día caluroso, coches detenidos y picado x la mosca

Cine X. La segundad vez (21 años) por hormigueo...

Callas no por vergüenza sino por placer y el morbo

Callas no por satisfacción, sino por vergüenza

Tiempo de perros (con compañía)

Sorprendido por mi vecino con el amante perfecto

Un sorprendentemente trió

Cine X. Mi primera vez (18 años) por curiosidad...

Depilación integral con final Feliz

Recordando a raíz de un flash

No hay día que no desee, tener una polla en mí

Tarde de paseo

La escapada

Martes Santos. Martes de Pasión

Condición: Curioso. Faceta: su Nena

Algo imprevisto en Ikea

No fui forzado, ni sometido, ni violado

Condición: Curioso. Faceta: Moldeable

Condición: Curioso. Faceta: Sumiso

Condición sexual: Curioso

El inicio de mi Condición sexual

Los servicios de Estación de Santa Justa

Por una mirada indiscreta II

El biberón

Por una mirada indiscreta

El mañanero

Aquel aseo del Centro Comercial

El probador

Infiel por culpa de un cabreo

Mi última vez a la sauna Nordik

Un sorprendentemente trió

Ultimando las compras de reyes

Haciendo tiempo

Cuando vas de sorpresa en sorpresa