Las motivaciones que hacen actuar a Germán, Frasco y Mamen son variadas, pero tienen puntos comunes. Germán es timorato, lo demuestran varios hechos, tales como que le escamoteen esa gran cantidad de dinero y no sepa cómo actuar, que tenga que recurrir a Frasco, que le de vergüenza contar lo sucedido con Mamen, que le de miedo liarse con la tía, etc.
Lo que tienen en común los tres personajes es desde luego su pulsión sexual. Mamen claramente es un animal erótico, lo que sucede con ella es que ha de mantener cierto estatus de señora decente. Sin embargo difícilmente disimula su deseo. Todo ello lo causa la relación con su marido y con el modo de vivir de él, una persona que se despreocupa tanto de deudas como de su mujer.
Frasco es un indeseable, pero es necesario en materia sexual porque de lejos se ve que tiene oficio en ello y más de uno que quiero gozar depende de él. Domina la situación en todo momento. Lo que no sabe Germán es que Frasco lleva tiempo queriendo follarse a su esposa. Lo conseguirá. Entre tanto nuestros tres protagonistas se reúnen de vez en cuando para montar un trío.
