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Nosotras, o sea, mi novio y yo (4, FINAL)

en Dominación

Nosotras, O Sea, Mi Novio Y Yo (Parte 4, FINAL)

Hola a todos. Me gustaría empezar nuevamente pidiendo disculpas por la tardanza en publicar esta cuarta (y última) entrega de esta serie. Quiero agradecer a todos por su paciencia en la espera de este relato, y bueno, espero que esta espera les valga la pena y que les guste y disfruten de este capítulo final. Antes de comenzar, me gustaría indicarles a todos los lectores y lectoras que han seguido esta serie (y a los nuevos, más que todo a estos últimos) que lean las tres primeras partes de esta historia, sobre todo el comienzo de la primera, al llegar al final sabrán por qué. Disfruten:

Allí estaba Amanda. La muy estúpida se veía imponente, y aun mas con la pinta que traía: un conjunto todo de látex brillante de pantalón bien pegado a su anatomía (su culazo se veía mejor que nunca enfundado en ellos, y la manera en que se le metía por la raja y demarcaba perfectamente sus preciosas nalgas, se notaba que no llevaba ropa interior) y una camisita de manga larga con guantes, también excesivamente pegados (apuesto que la circulación de la sangre se vería afectada) para completar semejante monumento al culo perfecto, llevaba en sus pies súper preciosos (que dispararon mis resortes fetichistas y de humillación, al verlos por primera vez en mi vida, ya que en la uni siempre llevaba zapatos o botas normalitas) unas tremendas sandalias Stiletto de tacón de aguja negras, y las uñas pintadas del mismo color. La esclava que le lamia los pies era muy afortunada. Por muy estúpida que fuera, y su notable carencia de tetas, era muy atractiva. Lo suficiente para atraer la atención de muchos de los hombres de esa orgia. Su mirada en ese momento se dirigió a mí de manera penetrante y vengativa, y en su boca se marcaba perfectamente una maliciosa sonrisa, de esas que uno pone cuando sabe que tiene agarrado al toro por los cuernos y sabes perfectamente que eres quien lleva toda la ventaja y tienes asegurada la victoria sobre una situación, o un problema. Y yo, al parecer eso era para ella, lo más seguro porque siempre desde que la conocí fui la mejor en muchas cosas de la vida diaria, los estudios, mi forma de ser, mi apariencia.

Pude notar como Rubén, perdón, Marisol, se le quedaba viendo con ganas de brincarle encima, aunque su pene aun estaba fláccido, supongo que por las hormonas que le suministraban. Y esta teoría mía cobro mucha más fuerza, al ver que los pezones de sus nuevas tetas eran los que se ponían erectos. Definitivamente lo estaban convirtiendo en una hembra. Me preguntaba en ese momento si su pensamiento masculino de llevar a cabo una penetración en el culo de Amanda circulaba por su cabeza, o si al contrario, deseaba ser penetrado, o penetrada mejor dicho, por Amanda, con un consolador. ¿Hasta que punto iría esa transformación de mi amado novio? Nuestros amos Miguel y Gina nos llevaron tirando de las cadenas hacia donde estaba el doctor Salazar, junto con, obviamente, Amanda.

-¡¡Caramba Salazar!! ¿Y cuando me presentarías a semejante bombón?

-con calma amigo Miguel, con calma, mira que este no es un bombón cualquiera, su nombre es Amanda, así que más respeto.

-¿tu hablando de respeto Salazar? ¿Y eso?

-amigo Miguel, ella es mi hija…

¿¿¿¿AAAAHHH???? ¿¿¿Amanda Salazar??? ¿¿¿Ese era su apellido??? Obviamente me caía tan mal que apenas y sabía su nombre, además de cosas de su carácter. Esto me dejo totalmente atónita.

-Wow doctor Salazar, disculpe el atrevimiento, no sabía que ella era su hija

-jajaja señor Miguel, no se preocupe –dijo Amanda –al fin y al cabo usted tiene razón, soy toda un bombón…

-Amanda…date un baño de agua fría…

-pero papiiiiiii –dijo con un tonito chocante -soy toda una mujer ya….y quiero que me hagas las tetas.

-negativo hija, tu bien sabes lo que pienso de eso. Sé que me que gano la vida operándole los senos a muchas mujeres, además de otro tipos de operaciones, y de operar a estos animales también –dijo mientras nos señalaba a Marisol y a mí. -pero tú, hija mía, no tienes por qué hacerte ninguna cirugía. Eres la dama más bella de todas aquí.

-pero papiiiii –de nuevo ese tonito chillón que lo dejaba a uno sordo -yo quiero un buen par…no seas malo, compláceme, soy tu única hija…anda papito ¿¿¿siiiiii???

-si me disculpa la intervención doctor Salazar –interrumpió Gina -no es nada malo que una mujer se opere los senos. Míreme a mí no más, usted y yo nos conocemos desde hace mucho tiempo, y a usted más que nadie le gustaron mis senos cuando me los hice. Y yo no soy una cualquiera.

-tiene razón, señorita Gina, pero es mi hija, y no quiero que nadie me la toque.

-¡¡¡¡¡Pero papiiiiii andaaaaa!!!!! Además, no cualquiera me tocara, serás tu…

-no me refería a eso hija, bien sabes que con un aumento de senos te empezaran a llover hombres, y puede incluso haber algún patán por ahí que quiera aprovecharse de ti, y no quiero que eso suceda.

-lo entiendo doctor Salazar –dijo mi amo Miguel –nosotros los hombres somos así en ese aspecto, con las hijas somos celosos. Ya sé que aun no tengo hijas para decirlo con total certeza, pero créanme que lo he imaginado. Y cuando en mi imaginación entra otra figura a conquistar a mi bella hija siento una muy fuerte sensación incomoda. Supongo que es lo que usted siente doctor.

-incomoda es poco amigo Miguel.

-bueno papi, ya verás que después te convenceré. Mientras, ¿podría usted señor Miguel, cederme a las dos perritas que tienen usted y la señorita Gina?

-por supuesto, si su padre lo permite.

-claro, déselas. Eso nunca le ha faltado a mi hija, una buena servidumbre. Seguro se divertirá con este par de putas.

-bueno, pensé que te pondrías celoso por el putito papi…

-jajajaja hija, por esa zorra no me preocupo, con el tratamiento hormonal que le estamos dando, si se le para el pequeño y mísero fideo que tiene por pija, irá directamente a los records guiness. Estamos usando las mejores hormonas para estos casos, 100% efectivas, pero como todos me conocen, saben que el 100% para mí no significa nada, por lo que entre mis colaboradores y yo modificamos genéticamente estas hormonas que elevan sus efectos a un 500% cuando muy poco. Jajajajajajajajajajajajaja

-aquí tiene las correas señorita Amanda –dijo mi amo Miguel, entregándole la correa de Marisol y la mía, inclinándose un poco, como haciendo un gesto de demostración de respeto ante la muy golfa.

Amanda tiro de las correas, llevándonos a mí y a Marisol lejos del grupo, a un sitio afuera del galpón en que se llevaba a cabo la orgia. Nos alejamos un poco por un caminito que quedaba en la parte trasera de dicho galpón, que se adentraba en unos matorrales. Antes de salir de galpón, nuestra ama Amanda (debía llamarla y pensar con respecto a ella así, como ama) nos ato los brazos y las piernas de manera que nuestros pies quedaran pegados a nuestras nalgas y nuestras manos pegadas a nuestros hombros, para así caminar en cuatro patas pero con nuestros codos y nuestras rodillas, haciendo que estas sean las únicas partes de nuestra anatomía que tuviesen contacto con el suelo. La posición era incomoda, y no se a mi marido Marisol, pero a mí al poco tiempo me comenzaron a doler las extremidades debido al doblez, sin mencionar sus respectivas zonas de los codos y las rodillas. Bueno, nos fuimos adentrando en los matorrales por el caminito, el cual estaba alumbrado de manera muy tenue por pequeñas lámparas colgando en los arboles. Caminamos hasta llegar a un claro no muy grande, con un poste en el centro, el cual aportaba mas iluminación que las bombillas que alumbraban el camino. Allí, nuestra ama Amanda se sentó en un banquillo, de los varios que allí había, con nosotras, o sea, mi novio y yo, delante de ella.

-¿chicos, pero que les hicieron? ¿Por qué están aquí? ¿Qué ocurrió? –nos dijo Amanda, para mi sorpresa. Se le notaba preocupación en la cara, estaba preocupada por mi novio y por mí. No pude evitar sentir un rayo de esperanza atravesar mi corazón. Un rayo que me ayudaría a escapar de todo esto, un rayo que me devolvería a mi vida…a mi triste y aburrida vida, la cual, para ser sinceros, no deseaba ya. Había tomado una decisión, pero no pude evitar sentir nostalgia por todo aquello que había abandonado. Entonces por mi cabeza se cruzo la pregunta del millón de dólares "¿Qué hago? ¿Sigo con mi nueva vida, o vuelvo a la anterior?" Ahora que se me presentaba esa oportunidad, me volvía a confundir. Ya me había adaptado a la vida de perra sumisa. "¿Pero, y si escapo y chantajeo a Miguel, diciéndole que acepto mi vida de perra sumisa, pero poniendo mis condiciones, como un horario, algo más de respeto, menos dolor?" No nos engañemos, disfrutaba de todo aquello…una parte de mi no deseaba volver. La otra, si.

-¿Están bien? ¡¡Debemos salir de aquí, los tres!!

-espera Amanda, yo me siento algo confundida –le dije –me gusta mi nueva vida…creo que no aceptare salir…

-¿¿¡¡QUE!!?? –dijo mi Rubén, alzando la voz en un tono de sorpresa. –¿¿QUE TE OCURRE MI CIELO?? ¡¡¡DEBEMOS SALIR DE AQUÍ YA!!! ¡¡¡MIENTRAS NO SEA TARDE!!! ¿¿POR QUE DESEAS QUEDARTE??

-amor, lo siento, pero con ellos estoy llevando a cabo mi mayor fantasía sexual, el ser una puta esclava, sin valor para ellos. Me gusta, y además me satisfacen, mucho más que tu, y perdóname que te lo diga así secamente. Quiero que me comprendas corazón, esto es lo mío.

Amanda nos interrumpe -¡¡deja de ser estúpida Skarlet!! ¡¡¡Te trataran mal!!! ¡¡¡Debes regresar, tu familia está muy entristecida llorando tu perdida!!! ¡¡¡Debes volver!!! ¡¡¡Aquí no tienes futuro, los tratos serán malos, te lo digo yo, que tengo experiencia como hija de uno de los mayores amos!!! ¡¡¡Los tratan horrible, Skarlet, debes salir de aquí!!! ¡¡¡Tu vida normal tiene un futuro muchísimo mejor, el cual no vale la pena dejar por un simple capricho sexual!!!

Amanda tenía razón. A mi mente se me vinieron las imágenes de mis familiares, todos preocupados, llorando mi perdida. Se me venían imágenes de mi propia imaginación, donde me veía graduada de mi carrera de contaduría, trabajando para la mejor empresa, ganando bastante dinero…imágenes en las cuales yo me casaba con mi novio Rubén, en una iglesia, la más bella de todas las bodas. Se me vinieron a mi mente las imágenes ahora de cómo sería mi futuro si me quedaba. De seguro las cosas no serian tan bien como las pintaba mi parte más fetichista y sexual…chupando y chupando pijas y conchas... un estado físico deplorable, seguramente por la mala alimentación que podría recibir. Una vulgar y mediocre persona, sin conocimiento alguno. Me excitaba, pero no era el futuro que deseaba en realidad… ¿o sí?

En que dilema me encontraba. Ahora mi parte puritana se imponía. Con facilidad y rapidez. Tal vez esta vida de sumisa no era lo que estaba deseando de verdad, sino que me convencí poco a poco para afrontar el gran lio en el que me había metido. "Si, seguramente es eso", pensé para mis adentros. Mi cara fue de alegría, de esperanza. La cara de mi Rubén también expresaba lo mismo. Y la cara de Amanda, que ya no me parecía una estúpida, sino mi heroína, era de felicidad. Todo volvería a ser como antes, o tal vez mejor.

-hagámoslo, ¿qué hacemos? –dije yo.

-así se habla. Vámonos de este sitio, por aquí, síganme –dijo Amanda.

Una vez desatados, y después de esperar un pequeñísimo lapso de tiempo para reacostumbrarnos a caminar normalmente debido a la posición en que estábamos, la seguimos por entre los matorrales, llevándonos hacia un lago.

-rápido –dijo Amanda -súbanse al bote, necesito que remen por mí, tengo mis muñecas lastimadas.

-¿por qué las tienes así, que te paso? –pregunto Rubén

-por el hecho de que no quiero ser como mi padre. No deseo esto, el tratar a la gente como animales. Mi padre me castiga muy fuerte si me opongo a eso. Siempre me dice que somos superiores, clase alta. El último castigo fue hace una semana, y fíjense lo fuerte que fue, que aun me duelen mucho las muñecas. Me imagino que la condición de ustedes debe ser peor, pero yo de verdad no puedo remar, me duelen muchísimo.

-¿y entonces por qué te referiste a nosotros como animales en frente de ellos, no solo a nosotros sino que además trataste a unos cuantos más de la misma manera? –le pregunte yo.

-por disimular. No podre soportar otro castigo en mucho tiempo, por lo que era mejor guardar apariencias. Pero al menos tendré la satisfacción de que sacare a alguien de ese infierno.

Comenzamos a remar. Rubén en un remo y yo en otro. Amanda con una linterna que alumbraba bastante el camino nos guiaba. Fue cuando Amanda saco un celular, marco un número, y hablo:

-prepara la camioneta, llevo a unos amigos a bordo, debemos ayudarlos a escapar ya. Ok. Listo. Nos vemos en la orilla.

-¿a quién llamabas? –pregunto Rubén.

-a un amigo que sabe por lo que paso y que nos ayudara a salir de aquí.

-no veo la hora de denunciar a esta gente por lo que nos han hecho, en especial a mí, que me implantaron estas groserías de senos. Ahora me costara mucho quitarlas, y ver a mi familia a la cara.

-no te preocupes Rubén, haremos que mi padre te las quite, para que cumpla parte de la gran sentencia que le impondrá la ley de seguro.

-me alegro. Oye, ¿no te preocupa que tu padre caiga en la cárcel?

-claro que me preocupa, pero prefiero que sea así antes de que siga haciéndole daño a más personas inocentes.

Continuamos remando hacia la dirección en que Amanda nos guiaba. Me gusto mucho la noticia de que la transformación de mi novio era reversible. Duramos un buen rato en el pequeño bote, Rubén y yo estábamos totalmente sudados debido al calor agobiante y al esfuerzo físico que estábamos haciendo. Y al notar esto instintivamente me comencé a excitar, ya que me sentía terriblemente sensual con mi cuerpo así, abrillantado por la transpiración, una delicia. Definitivamente me debía olvidar de todo. El convencimiento al que me había sometido a mi misma era tan fuerte que a pesar de saber que iba a librarme de estos bastardos, aun mis respuestas hacia ciertas cosas o situaciones, como el del sudor anteriormente mencionado, fueran las de una puta gratuita. Eso o de verdad era una puta gratuita. Continuamos remando y ya por fin se veía un muelle. Al alcanzarlo, fuimos recibidos por un hombre, de tez blanca, ojos azules, cabello amarillo, muy agraciado de cara, mas no de cuerpo, el cual era muy normal.

-rápido, por aquí, suban a la parte trasera de la camioneta y métanse en las cajas, será la única manera de salir de aquí sin que se levanten sospechas, el lugar está plenamente vigilado por policías que están a favor de ese abominable club –nos dijo el hombre, señalándonos una camioneta pick up negra estacionada a muy corta distancia. Corrimos Rubén y yo hacia ella, metiéndonos en las cajas, las cuales eran de madera, una madera gruesa, con unos cuantos orificios en la parte superior, y de forma irregular. No me di cuenta de mi Rubén, pero yo me metí en la caja de rodillas con el culo en pompa, pegando mis senos y mi cabeza al suelo, introduciendo mis brazos estirados en unos compartimientos, supongo hechos para eso. La forma irregular de la caja me obligaba a permanecer en esta posición.

-se que es dura la posición en la que deben estar, pero estas cajas están hechas así para disimular, ya que al verlas "por encimita" parecen varias cajas de distintos tamaños, cuando en realidad, es una sola. –dijo el hombre.

Las cajas fueron cerradas con clavos de manera rápida. Supongo que también por disimular. Al ratito nos pusimos en marcha. La posición era realmente incomoda, el cuerpo al poco tiempo comenzó a dolerme, y, al ser también una comprometedora posición, mi parte puta no pudo evitar excitarse. Sentía como avanzábamos y frenábamos, de nuevo, al igual que siempre que eh viajado en esta historia, sin ver nada. Sentía el aire fluir por los agujeros que estaban en la parte superior de la caja. Un buen rato estuve en esa situación cuando sentí que comenzábamos a detenernos. Al ratito, oí como alguien pegaba gritos en otro idioma, el cual no conocía. No era ingles, de eso estaba segura, y mucho menos español. Al tiempo que oía los gritos, también se oía algo mecánico, una maquina. Sentí como si algo embistiera suavemente la camioneta. Luego nada. Al parecer pasamos un rato en ese mismo sitio, antes de nuevo ponernos en marcha. Otro rato larguísimo, todo mi cuerpo estaba entumecido por la incómoda posición. Y el éxtasis a mil. Sentía como por mi vagina y mis piernas chorreaban flujo vaginal. "soy una verdadera golfa" pensé para mis adentros.

La camioneta se detuvo. Sentí cuando se bajaron los que iban delante, al escuchar los dos portazos. Luego sentí que comenzaron a forzar la tapa. "se conseguirán con mi mejor rostro" pensé chistosamente, imaginando la cara que pondría la persona que estaba abriendo la caja al ver mi culo y mi cuquita en todo su esplendor…

Terminaron de abrirla. Lo que vino a continuación me dejo súper atontada: sentí un gran pinchazo en mi nalga derecha. Uno doloroso. Me inyectaron con algo. Me intente salir de la caja, pero me empujaban por el culo hacia adentro de manera que no pudiera salir. Forcejee unos pocos segundos, ya que lo que sea que me hayan administrado con la inyección comenzó a surtir efecto, dejándome, como dije anteriormente, atontada, floja, indefensa. Apenas y podía pensar, mi cerebro apenas y podía interpretar las imágenes que captaban mis ojos. Y estas eran, muy pero muy confusas…recuerdo ver mientras me sacaban entre dos hombres de la caja, a Amanda, parada en frente de lo que sería una gran mansión. Se veía altiva, con una sonrisa maliciosa en su rostro. Y su mirada, tajante, de mujer victoriosa. "¿Qué pasa, donde estoy?" Fue lo único que pensé, y no sabría decir si lo llegue a balbucear, de lo drogada que estaba. Otra cosa que note fue que, en la camioneta, solo estaba mi caja. ¿Y mi Rubén? Llegue a preguntarme antes de, de manera inesperada, ponerse todo oscuro.

Un balde de agua helada cayó en mi cuerpo desnudo, haciendo que despertara de manera sobresaltada. Me sentía descansada, supuse inmediatamente que lo que hicieron fue dormirme. Y vaya manera de despertarme. Ojee hacia todos lados, ya que, como pude notar instantes después de semejante baldazo de agua, estaba atada a cada esquina de la camilla en la que me encontraba. Al echar el vistazo a mí alrededor vi a Amanda de nuevo. Tenía el balde en la mano. Y, para mi sorpresa, solo llevaba puesto un bellísimo traje de domina (no tapaba mucho la verdad), el cual consistía en una especie de tanguita de cuero, el cual solo llevaba dos correas de cuero las cuales quedaban encajadas en las ingles, dejando su vulva y su culo al desnudo, a los costados llevaba unido por medio de aros otros arneses de cuero, los cuales rodeaban su torso de manera entrelazada hasta los pequeños senos. Estos a su vez, estaban rodeados por arneses en sus bases, lo que hacía que se medio sobresalieran un poco por lo apretados que estaban, por lo menos se le veía algo de tetas a la zorra, ya que, como dije antes, no tiene nada más que un par de pechitos. Para completar llevaba guantes que llegaban a su antebrazo, de cuero también, al igual que sus botas de medio muslo. Me fije bien en sus acompañantes, y me sorprendí de ver a Delta 8, y dos de sus compañeros (¿no saben quién es Delta 8? Lean los capítulos anteriores…) y además, estaba una mujer en cuatro patas, desnuda y descalza, con la cabeza totalmente tapada por una máscara de látex la cual quedaba perfectamente ajustada a sus facciones, pero apenas tenía dos hoyos en la parte de la nariz (solo por las fosas nasales), para que pudiera respirar un poco. Se podía apreciar también que llevaba la cabeza rapada, ya que no se notaban cabellos sobresaliendo de dicha mascara y por lo ajustada que quedaba no se notaba ninguna irregularidad en la cabeza, lo que me hizo llegar a esa conclusión. Tenía un collar de perro en su cuello, del cual pendía una cadena que llevaba Sigma 5, uno del grupo de Delta 8. Además y por lo poco que pude apreciar de ella, estaba tatuada a la altura de su culo, mas no llegue a ver como era el tatuaje. Junto a Sigma 5 estaba Omega 4. Y si, el olor a concha se notaba en el lugar, Amanda estaba húmeda…y qué decir de los Güebos de Delta 8, Omega 4 y Sigma 5, los cuales se veían a través de sus pantalones, grandes y tiesos.

-Buenos días putita –dijo Amanda. -hora de levantarse, tienes muuuucho trabajo. Es hora de que nos des placer.

-eres una perra maldita Amanda, pensé que nos dejarías ir, ¿donde está Rubén?

Esto lo dije de manera serena, aunque la verdad me hubiera gustado gritarle. Definitivamente estaba en un punto en el cual me sentía feliz de que me haya traicionado la perra de Amanda, ya que mi nueva vida de puta esclava me gustaba más que la que iba a recuperar, y además, estaba molesta con su traición, lo que me hizo decirle esas obscenidades a mi AMA. Amanda, sin poner cara de molestia por lo que dije, tomo un bastón, metiéndolo en mi cuquita, y presionando un botón, me lanzo una buena descarga eléctrica, no muy fuerte, pero si me hizo sufrir. Pegue un fuerte alarido.

-¡¡¡¡¡¡AAAAAAHHHHHHHHHHHH!!!!!!!

-puta, puta puta…definitivamente no se qué hacer contigo. Esas palabras no se le dice a un ser superior. Pero para que veas que no soy tan mala, solo te diré que MARSOL se fue de viaje. No me interesa para nada el putito de tu novio, solo me importabas tu, solo deseaba tenerte a mis pies. Ya es hora de que me pagues unas cuantas humillaciones que me debes…me caíste mal desde el primer día en que te vi. Te trate un poco de manera hipócrita para ver como eras, por si acaso mis primeras impresiones estaban erradas. Pero no, siempre fuiste una hija de puta altanera, pensabas que eras mejor que todos, que eras la ultima coca cola del desierto. Eres una perra desgraciada Skarlet, y pues bueno, agradéceme que te usare como mi tapete viviente hasta que me harte de ti. No será tan malo, veo que naciste puta, y que te gusta ser dominada. Y a mí me dará placer utilizarte a mi antojo. No te preguntare si quieres o no, tu opinión aquí no cuenta, te quedas aquí y punto, a mis pies, y obedeciéndome a mí y a quien yo quiera. Eres mía perra, así que prepárate. Supongo que ya conoces a mis amigos Delta 8, Sigma 5 y Omega 4. Yo fui la que les dio tus datos a este grupo, no fue difícil hacerte un seguimiento, ya que, querida, déjame decirte que ese hotel al que tú y la puta Marisol iban con tanta frecuencia, es propiedad de mi padre. El piso donde queda la habitación que visitaron y donde fueron capturados, tiene ese uso, precisamente. Siempre les daban la habitación 53, ¿recuerdas?, pues bueno, esa habitación tiene muchas cámaras. Si zorra, tenemos una infinidad de videos filmados donde tú y la puta de tu marido son los protagonistas. Y no te preocupes perrita, ya eres toda una actriz porno. Todos tus videos están de forma gratuita en el internet. Tu familia está indignada contigo, incluso se mudaron de donde vivían, no soportaron tanta humillación, todos en la urbanización los veían con malos ojos. Fíjate que ya ni se preocupan por ti, dicen que es mejor así, que no vuelvas. Todos en la universidad también te conocen en tu nueva vida, vieron incluso los videos que te filmo el grupo de Delta 8, donde dices que eres una perra, etc, etc…muchos quieren verte para joderte de la manera en que les provoque. Incluso las chicas, más que todo las que trataste mal, con altanería. Hasta los profesores desean enseñarte un par de cosillas nuevas. ¿Te imaginas la cosa cuando vaya mañana a la universidad a decir que soy tu dueña? Tranquila perrita, pasaras por las manos de toda la universidad. Te lo aseguro. Pero primero, hay que hacer el control de calidad. Mis amigos aquí presentes me dicen que eres una tremenda puta, que tus huecos sirven para mucho.

-eso es cierto –interrumpió Delta 8 –sus agujeros son una delicia. De hecho, nos gusto mucho esta perra que nos encargaste emputecer, es la que más se le parece en cuanto a los agujeros de todas las que hemos probado. Las tetas se las operamos, se las pusimos más grandes incluso, unas talla 110, tal como las pediste Amanda. Jajaja es divertido pegarles.

-pues bien, ya ustedes saben que me gustan muchísimo sus cosos –dice Amanda –así que recuerden que yo también quiero mi ración. Pero primero, Skarlet, vamos a calentar ¿te parece?

Dicho esto último se acerco a mí. Con todo lo que mi ama Amanda me dijo me excite sobremanera. El saber que soy despreciada por todos y a la vez deseada para darme mi merecido hizo que mi cuca se transformara en un mar de flujos. De nuevo era la puta Skarlet, esclava sexual de mis amos. Ya no me importaba más nada que satisfacer necesidades de otros. Aunque me dio mucho dolor oír lo de mi familia, aun así me excito el saber que ni siquiera cuento con ellos para sentir algún tipo de afecto. El saber que solo sirvo para dar placer y ser despreciada, un ser inferior sin derechos, solo con deberes, me puso a mil. No hay vuelta atrás. Soy menos que una puta, y punto.

Amanda se coloco sobre mi cara, agachándose para que yo le chupara el coño, cosa que hice sin contemplaciones. Nunca pensé que me gustaría tanto comerme a besos un órgano femenino, a pesar de que, como eh dicho anteriormente en los otros episodios de esta historia, me atraen las mujeres, pero solo con fines sexuales. Y esta tremenda conchita era toda una delicia, un poquito amarga, pero riquísima, suavecita, depilada casi totalmente, solo con un pequeño triangulito de vellos cortitos en su pubis. Se nota que le gustaba mantenerlo arregladito. Metía mi lengua por toda esa rajita rosadita, haciéndola entrar lo más posible por sus labios vaginales, moviéndola como si fuera una serpiente, atrapando sus flujos para sacarlos, saborearlos, tragarlos y de nuevo volver a entrar por mas. Amanda se movía suavemente sobre mi cara, estando agachada y aferrada a los tubos del armazón de la cama, lo hacía de manera circular, luego cambiaba para hacerlo de adelante hacia atrás, y por último se movía de arriba abajo. Estuvimos un rato en esas, yo esposada y abierta, y ella disfrutando de mi lengua en su rica cuquita. De repente, sentí como algo extraño se abría paso en mi entrepierna, para forzadamente situarse en mi cosita indefensa. Por la fricción que sentí deduje que sería algo de plástico, aunque el tamaño debía ser descomunal, ya que no entraba en mi cosita, mas bien, se estrellaba contra toda la zona, restregándose por completo. mi ama Amanda se levanto para voltearse, o sea, para que le chupara ahora su maravilloso culo. Fue ahí cuando pude aprovechar para observar que había debajo entre mis piernas. Y lo que vi fue a la chica, bueno, la cabeza de la chica restregándose por completo en mi vulva. Estaba de rodillas con el culo en pompa sobre la cama, con las manos abriendo sus nalgas tatuadas. Delta 8 la estaba sodomizando, al tiempo que con su pie enfundado en una especie de bota de combate (o sea, de esas que usan los soldados) presionaba la cabeza de la chica en mi intimidad, restregándola por completo. sentía como su nariz estaba en toda mi vulva, ya que lograba sentir el aire de esta al respirar. La obligaban a olerme el coño. También pude apreciar en su espalda una enorme flor amarilla tatuada, en el centro estaba escrito "soy Lía, la puta".

Más no pude apreciar debido a que ahora mi ama Amanda estaba sentada con su orto en mis labios. Que acolchaditas tenía las nalgas, una verdadera delicia el comerse el ano de mi ama. Definitivamente me sentía privilegiada de poder besarle el culo a Amanda, uno de los culos más codiciados en la universidad a la que asistía. Muchos me decían que el culo de Amanda estaba muy pero muy apetecible, pero siempre me elegían a mí por ser más bonita, más tetona y además de que mi culo era muy parecido al de ella. Ahora ya no lo veía así. Un culo como ese no existía por dos, eso era muy pero muy seguro. Amanda se movía en mi boca, yo le lamia el huequito de su culazo, intentando meter la lengua en el. Como me hubiera gustado el no estar esposada para poder tocarlo y nalguearlo. Sin duda, ese era el mejor culo del mundo.

Estuvimos un buen rato así. Los gemidos de Amanda se me antojaban deliciosos, como música para mis oídos. Y para los de los demás también. Eran los únicos que se sentía, como si una soprano estuviera cantando y todo el mundo prestándole atención. Bueno, los míos eran ahogados por su anatomía, por lo que no se oían. Y los de la otra chica brasilera que estaban sodomizando no se oían tampoco, supuse que por lo ajustado de la máscara. Amanda ahora en esta posición no se aferraba de ningún tubo, sino de mis tetas, las cuales amasaba de manera un poco brusca y salvaje, pellizcándome los pezones con fuerza, lo que me producía bastante dolor y a la vez placer. También les daba palmadas fuertes. En uno de esos momentos sentí que uno de los hombres allí presentes se subió a la cama, se bajo el cierre del pantalón, y se coloco al lado de Amanda. Justo en ese momento, no se escucharon más sus bellos gemidos, y unos minutos después, comencé a sentir como gotas de algún líquido caían sobre mis tetas y escurrían sobre la piel de Amanda hasta mi boca. No era leche de macho, ese sabor es inconfundible para mí, que soy adicta a ese elixir. Sabía un poco extraño, y estaba frio, hasta que di en el clavo: era saliva. La baba de Amanda que estaba mamándole la polla a uno de los chicos de Delta 8.

Luego de un tiempo, Amanda se levanto, ocupando su lugar Sigma 5, que era a quien Amanda estaba mamando. Sigma 5 se sentó en mi, bajándose los pantalones, obligándome a chuparle el culo también, mientras Amanda se sentaba en el, o al menos eso supuse, ya que sentí más peso sobre mí, y luego sentí un movimiento rítmico sobre él. Se la estaba empalando el muy suertudo. Muchos darían todo por estar en su posición. Solo imagínense al mejor culo del mundo en sus penes y a la mujer más puta y guarra lamiéndoles el culo. Cuidado, chicos lectores, no manchen la pantalla.

Me di cuenta de algo interesante estando en esa posición. Amanda eyaculaba bastante cantidad de flujo vaginal, y llegaba a los orgasmos con muchísima facilidad…me pregunte si seria falta de sexo en su vida o es que es una mujer con suerte. Dado que es una afiliada al "club" que me empedeció hasta decir basta, pues pensé que la segunda respuesta era la más factible. En fin, duramos unos 20 minutos en esa posición (el negro Sigma 5 tenía mucho aguante) hasta que Amanda se puso de pie, parándose en mi estomago para acortarme la reparación, lo que me hizo ponerme muy pero muy nerviosa. Sigma 5 se puso de pie y apuntando su glande a mi cara comenzó a descargar toda su leche, que, como ya eh dicho en anteriores oportunidades, venia en gran abundancia, cayendo gran parte en mi cara, y en mi cabello. Tanto fue que me cayo bastante en los ojos, lo que me impedía ver. Pero ya no estaba pendiente de ese rico elixir, ni de la puta que delta 8 estaba restregando en mi conchita, ni de nada que no fuera el volver a respirar. Podía, pero muy a duras penas. Luego de sentir que sigma 5 se bajaba de la cama (no podía ver) sentí un gran alivio al notar que Amanda se bajaba de mi barriga, volviendo a respirar de manera muy agitada. Luego, comienzo a sentir de nuevo una ola de excitación, ocasionada por la pobre chica que Delta 8 tenía entre mis piernas. Otra confirmación más de que las putas a mi lado son seres humanos decentes, en comparación con el animal en que me había convertido. Solo soy un trozo de carne sin voluntad para el placer de otros. Y me gustaba.

Después de este factor, o sea, la chica en mi cuquita restregando su cara enmascarada en mi de manera brusca y fuerte gracias a Delta 8, se le sumo otro factor más humillante aun, una tremenda lluvia dorada, que, al caer en mis ojos y medio limpiar esa zona, me permitió ver con claridad a los autores: Sigma 5 y Amanda. Ambos al mismo tiempo orinándome en la cara.

-abre la boca perra tragaleche, traga todo lo que puedas, que lo que no, te tocara lamerlo del colchón. Por cierto, dormirás en el de ahora en adelante, por lo que si te molesta el olor a orina en el colchón, pues de malas niña, te lo calas. –me dijo mi ama.

Llegue a tener varios orgasmos durante el corto tiempo que duro la lluvia dorada, (o adorada, por mi) además de que la chica en mi cosita estaba causándome bastante éxtasis y morbo. Delta 8 se canso de sodomizarla, por lo que le saco la enorme polla del culo, y tomando su cadena, la bajo de la cama cual perra obediente. Note que siempre caminaba de rodillas, jamás de pie. Era una puta bien entrenada, fue lo que me imagine. Al ver claramente su culo tatuado, vi que en cada nalga decía "Güebos duros aquí" y a las frases le seguían flechas que apuntaban hacia su agujerito anal, el cual, después de haber recibido la enorme polla morcillona de Delta 8, se veía no muy dilatado. Ya entendí lo que quisieron decir al mencionar el parecido de nuestros agujeros.

Delta 8 se acostó en el suelo, situando a la esclava sobre él, y empalándola por la concha. Omega 4 fue directamente a su culo, penetrándola al mismo tiempo que delta 8 y comenzando al unísono un fuerte vaivén en los agujeros de Lía, la pobre chica. Debo admitir que se propasaron de más con esta pobre mujer, ya que las tetas eran demasiado grandes para su cuerpo. Mientras la estaban empalando entre los dos salvajes, le daban cachetadas y lepes, de manera no muy seguida lo que hacía que cada manotazo le cayera de sorpresa. Sigma 5 se unió a la fiesta, poniendo su pene a la altura de su cara, subiéndole un poco la máscara, dejando su boca al descubierto. Lo que vi me atemorizo sobremanera, pero a la vez me dio mucho morbo: la chica no tenía dientes. Se los quitaron todos. Amanda noto mi temor al darme cuenta, y, mientras disfrutaba de la escena de pie en el colchón de mi nueva cama, alzo un pie y lo metió en mi boca, para pulir su bota, y a la vez decirme de manera burlona:

-¿Qué pasa perrita? ¿Te da miedito que hagamos eso contigo? Si supieras que no es lo único que le hicieron. Supongo que notaste que camina de rodillas. Pues bien, le reventaron las articulaciones del área para que no volviera a caminar con sus pies nunca más. Para que siempre este de rodillas, o en cuatro patas, como la perra que es. Te preguntaras por que tanto odio…bien, tengo un primo, ella era su novia. La muy perra le monto cachos y mi primo quedo totalmente destrozado por ello, ya que el de verdad la amaba. Dada su depresión y su rabia, al atraparla in fraganti, tomo su carro y se fue del sitio, conduciendo como loco, lo que ocasiono que en la autopista perdiera el control de su automóvil y se estrellara, quedando paralitico. Me dio muchísimo dolor esa noticia, y cuando supe lo que había pasado pues…decidí tomar cartas en el asunto. Mi amigo Delta 8 la secuestro, y la llevaron a Brasil, donde la tostaron un poco bajo el sol y le hicieron las atrocidades que ves, por supuesto por orden mía. Ahora la trajeron para entregársela a mi primo, por supuesto, no sin antes recibir lo que más le gusta: sexo duro y a granel. Jajajaja así que ya sabes, no me hagas enfadar perrita, mira que estoy a punto de hacerte lo mismo…

Me dio mucho miedo el comentario. Pero a la vez no me preocupe mucho por la amenaza ya que desde hace rato que estoy clara con respecto a mis metas: obedecer fiel y ciegamente a mis amos en TODO.

Sigma 5 se corrió de nuevo por segunda vez, pero esta vez en la boca de Lía. Le dijo que no se tragara la leche, que la mantuviera en su boca, que pobre de ella si lo hacía. Le puso la máscara nuevamente tapando su boca. Casi al mismo tiempo Omega 4 y Delta 8 acabaron cada uno en sus respectivos agujeros. Luego tomaron la cadena, llevando a la puta en cuatro patas hasta mí. Amanda saco su bota de mi boca, subieron a la puta Lía a la cama, poniéndola de rodillas en mi boca, y la hicieron botar toda la lechita depositada en cada uno de sus agujeros. Estaba espesa y mezclada con sus fluidos, y aun así me gusto mucho. Luego la hicieron escupirme en la boca toda la corrida que ella guardaba en la suya, quitándole la máscara ajustada. Efectivamente, estaba calva, como lo había supuesto hace rato ya. Además, en la frente tenia tatuada la frase "Mamo güebo y cuca". Era una chica atractiva, y eso que estaba muy destruida (sin los dientes, tatuada, y con una mirada triste y resignada). Bueno, quien la manda a montarle cachos a un ser superior como lo es un hombre (salió a florecer mi lado machista, así me pongo cuando estoy excitada). Una vez depositada toda la mezcla de fluidos en mi boca, mi ama Amanda me escupió también en ella, luego me percate que Delta 8 me estaba filmando, quería filmarme mientras me tragaba la mezcla completa.

Viendo a la cámara, puse mi mejor cara de puta sin licencia, y comencé a jugar un ratito con todos esos fluidos en mi boca, con mi lengua, para luego, tragarla toda, y poner cara de cerda satisfecha.

De repente, ocurrió algo que me hizo pensar que estaba loca. Comencé a ver todo borroso. Y oí la voz de mi hermana menor, que me decía "Skarlet, levántate que debes ir a la universidad." Esta sensación extraña duro poco. Ya que de repente volví a ver todo negro. Y me sentía consciente. Desperté bastante somnolienta, me sentía como fuera de la realidad. Estaba en mi habitación, en mi casa. Tocaban la puerta, y mi hermana menor me decía de nuevo "Skarlet, párate vas a llegar tarde, papa y mama ya se fueron a trabajar." A lo que respondí con muchísima flojera "dame unos minutos más" de repente, volví a caer rendida en mi cama. Todo negro de nuevo.

Ah pasado un año desde que me hice esclava de Amanda. Ahora todo era distinto. Lo disfrutaba como nunca. Era divino ser sometida por ella y por muchas otras personas a quienes ella me dejaba a su disposición. Durante todo el año estuve haciendo porno duro para los ingresos de la familia de Amanda (o al menos una pequeña parte de sus ingresos). Rubén, perdón, Marisol, nunca volví a saber de él. Hasta un día que mi ama me pone en mi casita para perros (si, mi habitación de toda la vida de ahora en adelante) un pequeño DVD, de esos que son transportables con pantalla que funcionan a batería. Introdujo un disco que llevaba por título "Marisol".

Lo que vi a continuación, me dejo, feliz, alegre. Se veía a Marisol ya sin pene (con una conchota que hasta a mi me proco ir y devorarla a chupetones) y con unas tetas un poco más grandes que la última vez que las vi. Sus rasgos faciales también fueron cambiados, de manera que se veía más mujer. Claro, aquellos que la conocieron cuando era "hombre" la veían ahorita y podrían reconocer que era Rubén, aunque con un poco de dificultad. Aquel que la viera por primera vez diría "wow, que ricura" se nota que mi amo, el Dr. Salazar, sabe hacer MUY bien su trabajo. Bueno, en fin, se veía a Marisol, siendo, digamos, humillada, por unos negros que hablaban en un muy extraño idioma, y ella al no entender lo que querían decir, estos la castigaban con latigazos. Se le veía haciendo trabajos forzados, levantando y picando piedras que se veían de gran peso, luego la ponían a correr en círculos, obligándola a ir cada vez más rápido a punta de latigazos. Se notaba el placer en su cara al ser humillada, cosa que me hizo alegrar, ya que se dio cuenta que no le quedaba de otra más que gozar de los tratos que sus amos le dieran. Al terminar de correr, quedo totalmente sudada y agotada, y la pusieron (así, sin darle descanso) a complacer a una buena cantidad de negros (conté unos 12…) en donde ella era la que hacia todo, me refiero a que era ella quien hacia todos los movimientos, mientras que los machos se quedaban estáticos, fumando un cigarrillos, insultándola, apagando esos cigarrillos en su cuerpo (especialmente en su culo, operado también). En fin, termino como la guarra que debía ser en un principio, sin quejaderas ni nada.

-El día que te trajimos a mi mansión –me comenta Amanda –hice un trato con unos hombres alemanes, en el cual ellos me pedían que te vendiera a ti y a tu "noviecita". Yo obviamente les dije que solo vendería a Marisol, ya que tú eras mi trofeo. A cambio les di otra esclava. Esa misma noche cuando te ilusione con tu "escape" fuimos a un puerto donde Marisol fue entregada en su caja. La muy pobre no se podía mover cuando la desempacaron, ya que duro gran parte del viaje allí metida, salvo cuando debía satisfacer a machos. Mi padre fue invitado a Alemania para terminar los tratamientos y volverla una autentica puta, como le eres tú. Este video fue filmado en Camerún, donde estos alemanes fueron a buscar mercancía en la corresponsal de Miguel que queda en ese país. Bueno, ya basta de tanta cháchara, ven, que los nuevos estudiantes de la universidad quieren conocerte.

Mi ama Amanda jalo de la cadena (que casi siempre llevaba puesta en mi cuello, como buena perra), llevándome hacia el garaje de su gran mansión. Me ordenaron meterme en un cajón, cosa que hice sin rechistar. Apenas y cabía en ese cajón de madera, el cual fue cerrado con una tapa, dejándome totalmente a oscuras. No sé cuanto duro el viaje, ya que, como ser inferior incluso a las partículas de polvo, ya había perdido noción del tiempo. No me importaba nada, solamente obedecer y proporcionar placer a mis amos. No era más que un simple trozo de carne al servicio de otros.

Al llegar a la universidad yo estaba dormida. Hacia muchísimo calor. Recuerdo oír la voz de Amanda, pero un poco distorsionada, diciéndome

-despierta mija, que llegaras tardísimo a la universidad…

-¿AH?

Desperté y estaba en mi habitación, mi hermana menor estaba dentro, y yo, totalmente sudada, arropada, y con mi mano derecha en mi sexo.

-Skarlet, despierta, debes ir a la universidad, apresúrate, que se te hará tardísimo para tu clase de las 10 de la mañana

-ya voy, ya voy…dame unos segunditos mas…

-Ningunos segundos más ni nada señorita, ¡¡¡¡¡apresúrate que son las 9:15!!!!!

Al decirme esto me levante volando. "no puede ser, la hora que es y yo soñando con pajaritos preñados…y aun estoy excitada y no acabo…que fastidio" el no acabar me dejo de mal humor. Había sido todo un sueño. Y esto aumento mucho mi enfado. Era mi mejor fantasía, lo mejor que había soñado en mi vida, y solo fue eso, un simple sueño…

Revise el celular, y tenía un mensajito de Rubén, mi novio, el cual decía "buenos días mi vida, hoy amanecí con muchas ganas de tu cuerpo, ¿te parece si vamos al hotel después de tu clase de las 10?" mensaje al cual conteste que si, ya que este éxtasis que tenia encima por mi sueño tenía que calmarlo de alguna manera, así fuera con una tarde de sexo normalito con mi novio.

Desayune rapidísimo, y baje volando por las calles de la urbanización, para tratar de no llegar tarde a la clase. Era la clase más aburrida, pero soy una alumna muy eficiente, por lo que debía ir y llegar temprano. Cosa que, extrañamente acompañada con una sensación de deja vu, no logre, sentándome de ultima, cuando siempre me siento en la primera fila por llegar temprano. Esta vez llegue 20 minutos tarde.

Era una mañana calurosa. La profe impartía su materia, como siempre, de manera aburrida, por lo que me distraje un poco con mi mente, con mi lado sexual y salvaje, un lado que siempre eh mantenido celosamente oculto para el mundo, menos para mi novio. Pensaba también en lo que había soñado, no podía sacarme ese sueño húmedo de la cabeza. Mientras mis ojos veían en la pizarra puros números, las imágenes que había en mi cabeza eran las de mi sueño. Recordando como habíamos quedado mi novio y yo de degradados en ese mundo fantástico, el cual deseaba que fuera realidad…por mi cabeza pasaban imágenes a manera de continuación de mi sueño, me imaginaba a Amanda, dándome caña junto con su padre.

-Vamos zorra, mueve el culo, me estoy aburriendo.

-eso hago amo, ahhhh siii que grande y rico lo tiene…mmmmmm (comencé a chuparle el clítoris a mi ama Amanda)

-y de seguir a ese ritmo no lograras tenerlo así por mucho tiempo idiota, muévete más.

- vamos puta, te conviene darle placer a mi papi, de lo contrario yo misma te arrancare los dientes como a la puta Lía. Ah, y mueve mejor tu lengua, mi cuquita demanda atención.

La posición que teníamos (yo en cuatro, Amanda sentada en una silla con mi boca en su conchita deliciosa, y su padre metiéndomela por el culo) le permitió a mi amo darme una sonora y dolorosa nalgada.

-aaaayyyyy!!!

-si en cinco minutos no te lleno el culo de leche recibirás 300 como la que te acabo de dar, MUEVETE!!!

Acelere mis movimientos. En la posición en la que estaba era difícil moverme, pero gracias al año que tuve de entrenamiento en mi sueño, era capaz de mover mis caderas independientemente, de manera deliciosa para el que me este penetrando. Esto me permitía mantener mi cara metida entre las piernas de Amanda, dándole atención a toda su divina conchita.

-te queda un minuto zorra….59, 58, 57, 56, 55……………………..

-ahhhh si, así…ahhh que rico….(gritaba Amanda)

-………54, 53, 52, 51, 50, 49, 48, 47, 46……………….

-aaaaaffff af, aj, si puedo, si puedo hacerle acabar en ese tiempo aaaaaaaaahhh (pensaba yo, al no poder hablar por tener la boca ocupada en otros menesteres)

-………..45, 44, 43…….o 48 mil?

-¿Cómo?

Cerré los ojos tres segundos y volví a abrirlos…

-la respuesta a la operación del ejercicio de la pizarra Skarlet…¿da 43 o 48000 Dólares?

-¡¡¡43 segundos!!!!

Todos en el salón se me quedaron viendo. Estaba con la cara y el pecho rojos, sudada y si….excitada. Los pezones se me marcaban a través de la blusa ya que no llevaba sostén puesto, y notaba como mi cosita estaba humedecida. Mis compañeros me veían con cara de "¿y a esta que bicho le pico?" mientras que mi profesora me veía con cara de aburrimiento y algo de sorpresa. Mi divino sueño se había esfumado. Bienvenida a la matrix.

-obviamente la señorita Skarlet estaba visitando a los hombrecitos verdes de la luna.-dijo mi profesora, haciendo que en mi florezca de nuevo la sensación de deja vu. "Definitivamente esto lo viví…que pasa aquí?" Pensé yo para mis adentros.

-vive allí metida- dijo burlonamente Amanda –cualquiera diría que está pensando en el novio jajajaja

Todos rieron con el comentario de Amanda. Esto me hizo recordarme de algo… "SIII TODO ESTO LO SOÑEEEEE" pensé para mi nuevamente. Recordé todo el principio de mi sueño, el cual todo era casi exactamente lo mismo a lo que estaba viviendo en ese momento. Me pregunte que más se cumpliría…aunque por favor, estamos en el mundo real ahora. Y es muy difícil que un sueño se cumpla. No creo en las premoniciones.

-Bueno, ya se nos acabo el tiempo, pueden retirarse, no olviden traer para la próxima semana los ejercicios de la pagina 15, valen muchos puntos.-dijo la profesora.

Me le acerque a Amanda, disimulando enfado, ya que ahora la veía de manera distinta. Todo lo que soñé influyo en mi comportamiento. Ya no la veía como la niñita estúpida. La veía como un ser superior. Obviamente intente bloquear todo mi sueño, y logre hacerlo, aunque no por completo. La veía con cierto odio ahora, pero su presencia aun infundía en mi devoción, amor, excitación, respeto, adoracion. Pensando en que todo lo soñado solamente fue un sueño y que lo que ahorita se hacía realidad de él se trataba de una GRAN coincidencia, me le acerque a Amanda, quien aun tenía esa estúpida sonrisita, y mirándole como quien dice "por encima del hombro" le dije –al menos mis pechos si me dieron alguien en quien pensar y amar…

La sonrisita se le borro por completo, ese simple comentario fue más que suficiente como para que Amanda pasara el resto del día molesta por la espina de su complejo, el cual, como ya dije al principio, era tener las tetas pequeñas.

En ese momento suena mi teléfono, avisándome que tengo un mensaje de texto. "hola mi princesa, te espero abajo, voy a llevarte a tu trono esta tarde para proclamarte mi reina". De nuevo otra gran coincidencia. Bueno, hora de matar las ganitas con mi novio.

Baje por las escaleras hasta la planta baja de la universidad y en toda la puerta estaba mi novio, galán como siempre, sonriéndoles a las chicas que lo veían desde una de las bancas del lugar. Y las coincidencias seguían. Ya la cosa me estaba EMOCIONANDO.

-hola mi vida, ¿cómo te fue en tu clase?- me preguntó mi novio

-mal, llegue tarde, me senté a lo último, no entendí nada de lo que dio la profesora, y encima me perdí en mis pensamientos lo suficiente como para que la idiota de Amanda hiciera un comentario burlándose de mí. Por si fuera poco, en la entrada de la universidad veo a MI NOVIO coqueteando con unas putas babosas.

-Mi vida yo no estaba coqueteando con nadie…

-¿AH NO? a esas perras rebuscadas estabas sonriéndoles…

-por favor cielo…deja los celos…vamos al hotel si…

Emprendimos nuestra marcha al hotel. Estaba un poco extrañada, ya que hasta las mismas cosas que dije en mi sueño, las repetí aquí, en la realidad. Fue entonces cuando comenzó un pequeño sentimiento a florecer en mí. Era deseo. El deseo de que todo mi sueño se hiciera realidad. En mi sueño en esta parte estaba molesta. Y como quería que sucediera todo lo que soñé, comencé a intentar hacer mi día lo más parecido posible a dicho sueño, por lo que fingí enfado hacia Rubén.

Llegamos al hotel al que íbamos siempre el cual era, obviamente, el mismo de mi sueño. Pedimos una habitación barata como de costumbre, el recepcionista ya nos conocía (como en mi sueño, otra vez). Esta vez, y al contrario que en mi sueño, el recepcionista nos dio el pent-house del edificio, alegando que éramos los clientes numero 8000, por lo cual el dueño le dio la orden de cedernos el pent-house a precio de una habitación normalita. Dicho pent-house quedaba en el último piso (obviamente) por lo que tomamos el ascensor y nos dirigimos allí. Al llegar a las puertas del pent-house comenzamos con lo nuestro, el pasillo estaba muy bien iluminado y totalmente solo (solo estaba esa habitación allí). Rubén me tomo por la cintura y me recostó de la pared devorando mi boca con una pasión inmensa. Luego fue bajando sus manos hasta que tomo mis nalgas, momento en el cual sus labios estaban en mi cuello. Las apretó fuerte, amasándolas, abriéndolas y cerrándolas, se sentía delicioso mientras su boca hacia un muy buen trabajo ahora en mi oreja.

-Hmmm que delicia papi, sigue así…

-Vamos ricura, hora de titularte mi reina.

Mientras me continuaba besando y manoseando abrió la puerta de la habitación, entramos, encendimos la luz, y para nuestra sorpresa, estaba un grupo de 6 personas dentro. No nos movimos, viéndolos, y ellos nos veían a nosotros. Hasta que por detrás siento que toman a Rubén con una llave por el cuello, dejándolo inconsciente. Al voltearme vi a otras dos personas. Los 8, vestidos de negro por completo, comenzaron a reír. Uno de ellos, me pregunto (con una voz inconfundible para mí, era Delta 8):

-y bien perrita, ¿Qué piensas hacer? estas sola ante 8 personas, te recomiendo que te rindas, pero, si lo deseas, puedes dar pelea.

A lo que con gran emoción, devoción y en un gran tono sumiso, feliz de que todo se vaya a hacer realidad, conteste:

-me rindo a sus pies amo. Nosotras estamos deseosas de servirles…

-jajaja vaya, vaya, vaya… que fácil fue este trabajo. Nuestra amiga quedara muy complacida al ver semejante sumisión…¿pero dime puta, una cosa, a que te refieres con nosotras?

Señalando a Rubén en el piso conteste:

-me refiero a nosotras, o sea, mi novio y yo….

FIN

Bueno, muchísimas gracias por leerme y escribirme sus inquietudes y sugerencias a mi correo electrónico (skarletpricet@yahoo.es), espero esta cuarta parte les haya gustado y que hayan disfrutado en pleno la historia completa. Me disculpan los errores, se que deben haber muchos. Me despido de tod@s ustedes, y pues bueno, quiero darles las gracias una vez más por tenerme paciencia en cuanto a mis tardanzas, tomare precauciones para mis próximas historias.

Un beso.

Skarlet