Mera Coincidencia

>DoctorSexo: Hola belleza, ¿se puede?

>ZorritaSumisa: Hola…si, si se puede.

>DoctorSexo: que bien, dime, que edad tienes?

>ZorritaSumisa: 24 y tú?

>DoctorSexo: 27, de donde eres?

>ZorritaSumisa: De Caracas, y tu?

>DoctorSexo: Tambien…Que coincidencia…

Coincidencia…si….la vida está llena de coincidencias. O eso es lo que dicen. Yo desde que conocí a "DoctorSexo" por medio de una sala de chat que por cierto (y como adivinaran) se llama "sexo", iba a inclinarme a creer en esa frase como nunca antes. Esa tarde era un poco tediosa. Estaba lloviendo de lo más rico (me fascina la lluvia, me pone caliente) y estaba en mi habitación, con un ligero vestidito semitransparente que apenas y cubre la mitad de mis nalgas. Y como no acostumbro a llevar ropa interior en mi habitación, pues solo esa era la prenda que tenia. Entre en esa sala para ver si me distraía un poco, no me gusta mucho eso de conocer gente por el chat, ya que, en principio, puede ser peligroso, por lo que siempre que entro en una sala de chat es para hacer amigos con quien chatear siempre que esté conectada.

>DoctorSexo: y dime zorrita, cuál es tu nombre?

>ZorritaSumisa: Skarlet…y el tuyo?

>Doctorsexo: Doctorsexo…un placer…

>ZorritaSumisa: no…en serio…cuál es tu nombre real…

>DoctorSexo: mmm te lo diré mas adelante. Dime una cosa zorrita, estas húmeda? Porque para estar en este chat, me imagino que si…

>ZorritaSumisa: si lo estoy…pero deberías decirme tu nombre real.

>DoctorSexo: no te lo diré aun…ya te dije.

No me puse a discutirle más el nombre. Siempre que coincidíamos en esa sala de chat él me llamaba por mi nombre, Skarlet, mientras yo le llamaba Doctor, o DoctorSexo completo. Esa primera vez que chateamos tuvimos una amena charla, cabe destacar que durante las 3 horas y media que estuvimos hablando le lance varias indirectas para ver si me decía su nombre real, pero fue imposible. El me pidió esa primera vez mi correo, para agregarme al msn, pero le dije que se lo daría a cambio de que me dijera su nombre real. El no accedió, por lo que no le di mi correo esa vez. Eso sí, disfrutamos bastante nuestra charla, por lo que acordamos encontrarnos en la misma sala al día siguiente.

>DoctorSexo: Hola zorrita Skarlet, te esperaba.

>ZorritaSumisa: Hola doctor, como estas?

>DoctorSexo: muy bien, y ahora mejor que llegas.

>Zorrita Sumisa: jajaja tu si eres meloso…

Así comenzó la charla del día siguiente. De nuevo intente varias veces sacarle su nombre real, pero sin resultados satisfactorios. Lo que si conseguí fue una buena conversación acerca de nuestros gustos sexuales.

>DoctorSexo: dime Skarlet, que te gusta en el sexo? Te gusta normal, duro, sádico..algún fetichismo…?

>ZorritaSumisa: bueno, soy bisexual, adicta al sexo y a la pornografía. Soy una mujer muy activa en el ámbito sexual y pues, paso casi todo. De hecho, soy como reza mi nick: una zorra sumisa, claro, no siempre, pero si lo soy.

>DoctorSexo: interesante…yo también soy muy activo sexualmente…cuando quieras, y ya que vivimos cerca pues, nos ponemos de acuerdo y veras el por qué las mujeres salen felices y contentas de mi habitación…

>ZorritaSumisa: jajaja muy tentadora tu oferta, pero soy una mujer que no le gusta conocer en persona a los que conoce por el chat. Sorry.

Ese día hablamos de muchísimas otras cosas. Al igual que el día anterior, la charla duro bastante, y accedí a darle mi msn, ya que de verdad era una persona amigable y respetuosa, además de que era dueño de otras cualidades. Ambos nos vimos por fotos, colocándolas en el recuadro del avatar del msn.

>DoctorSexo: Wow Skarlet, de verdad eres toda una hembra preciosa. Eres tal cual te describiste la vez anterior que charlamos. Tienes unos labios muy provocativos, y una carita preciosa, unas curvas de muerte…mírame nada mas esa cola que te gastas…y qué decir del par de senos que posees. Son impresionantes, no te creo que sean naturales.

>Skarlet (Ndr: Como ahora estamos en el msn, mi nick es mi nombre): jijijiji gracias por los halagos, y bueno, de verdad son naturales…

>DoctorSexo: Tal vez si me los muestras en persona, podría comprobarlo ;)

>Skarlet: jajajajaja bueno…ya sabes cómo soy con eso de conocer en persona a la gente del chat…

>DoctorSexo: si…una lástima…es que sabes, si te viera por la calle creo que te diría para ir a un hotel, estas rebuena mamita.

>Skarlet: jijijiji bueno, con lo calentona que soy seguro te diría que sí, y dejaría cualquier cosa que esté haciendo solo por un acoston contigo, ya que no estás nada mal…bueno corazón, me iré a dormir, debo despertar temprano para ir a trabajar, y no quiero estar en la hora pico en el metro. Los vagones vienen full, ya sabes como es.

>DoctorSexo: cierto…bueno, hablamos mañana zorrita, un beso.

>Skarlet: Bye, besos.

Cerré el Messenger y me acosté a dormir, un poco intrigada por este personaje, "DoctorSexo". Sabía mucho de él, pero a la vez nada. Sabía sus gustos, su platillo favorito, su canción favorita…pero no sabía su nombre real, ni en donde trabajaba (aunque, por las fotos que vi en su msn, siempre iba de traje, tenía un aire ejecutivo, por lo que asumí que trabajaba en un buen cargo en una buena empresa) y bueno, en las fotos se veía muy buenmozo, tenia lentes, pero en lugar de afearlo, lo hacían ver más interesante e inteligente, con un cuerpo muy bien cuidado. Y para que vean lo tanto que me gusto, que solo verlo por esa noche y por fotos provoco que me hiciera un buen dedo antes de cerrar los ojos.

Así continúo nuestra cyberamistad. Como por dos meses más o menos estuve siempre intentando conocer más de él, sin muchos resultados. Lo más que descubrí es que trabajaba en el campo de la publicidad. Pero ni siquiera su nombre. "DoctorSexo" seguía siendo un gran enigma para mí.

Un buen día, me desperté tarde para ir al trabajo. Yo sufro de lo que llaman Hipersexualidad, (lo que para mí es una forma más actual de decir ninfomanía) aunque yo considero que no tanto, ya que logro controlarme. En fin, al sufrir de eso, a diario me despierto excitada, y si me despierto tarde, no tengo la oportunidad de saciarme con mis manos así que eso se ve reflejado en mi conducta (mas que todo en mi forma de vestir y maquillarme, paso a verme muy insinuante, muy atrevida, vamos, muy puta) aunque gracias a que logro controlarme tampoco soy tan descarada o descuidada. Ese día, como no pude darme placer por lo tarde que iba, vestí como siempre mi uniforme, pero de la manera en que les acabo de describir. La falda más ajustada con un ruedo más arriba de lo normal, a medio muslo (lo normal en el trabajo es llevarla por las rodillas o un poco más arriba), me puse la blusa más ajustada y trate (como siempre en estos casos) de arreglar el escote de manera que muestre bastante de mis senos, a veces (este día fue una de las excepciones) me pongo medias a medio muslo, de manera que mi falda corta deje ver un poco la costura del ligero. Pero este día (como ya mencione) no las vestí. Me puse el saco mas ceñido a mi cintura que tenia, y por ultimo un buen par de sandalias de vestir negras con un tacón de vértigo. El maquillaje, en estos casos de calentura, es muy escandaloso, aunque tampoco sin rayar mucho en lo vulgar. Una vez lista, Salí de mi hogar, para dirigirme hacia mi trabajo, y como siempre cuando voy tarde, voy de manera apresurada.

Me monte en el bus para que me lleve hasta la estación de metro más cercana (trabajo al otro lado de la ciudad por eso debo agarrar siempre 8 autobuses, 5 taxis, 4 ferris y dos aviones para llegar jijijiji). Como es muy normal, todas las miradas de los hombres se centraron en mí. Las mujeres me veían más bien en forma de reproche, aunque una que otra me veía con una mirada de "hambre" como la de los hombres. Obviamente, los manoseos no se hicieron esperar, y siempre da la casualidad que por culpa de que el bus "acelero de pronto" se me vienen encima varias manos. Esto, cuando ando caliente como esta vez, en lugar de molestarme, me gusta, pero en lugar de saciarme, me calienta aun mas. Es obvio que soy, como bien dicen por ahí, una "pendeja" más…

Llegue a la estación del metro, me apresure en comprar el ticket y bajar al andén de espera de trenes, pero, como ya pudieron haber imaginado, era hora pico, por lo que el metro estaba prácticamente imposible, abarrotado de gente. Como es normal en estas horas, los empujones para entrar y salir del tren son numerosos y fuertes, y bueno, los manoseos pasaron a convertirse en magreos cada mes más descarados. Estaba a punto de estallar de excitación, quería saciarme. Poco falto para que me hiciera un dedo ahí toda aprisionada entre el gentío que estaba dentro del vagón.

Después de un largo tramo en metro, llegamos a la estación Plaza Venezuela, donde actualmente convergen 3 de las 4 rutas o líneas del metro, (aquí reciben ese nombre), por lo que es la estación más concurrida, la que se abarrota con más facilidad, ya que es una estación de transferencia. Como ya dije, por la hora que era, había más gente que en la final de un mundial de futbol. Ya al llegar allí me resigne a que sin importar lo que hiciera, llegaría tarde, por lo que me pegue a una de las columnas a esperar a que la afluencia de gente baje un poco. No tenía por qué calarme tropezones y empujones, aunque los manoseos los iba a extrañar.

Después de media hora de espera más o menos, oigo que una voz me susurra al oído:

-Vaya vaya…que casualidad…

Voltee para ver quién era, y la sorpresa que me lleve fue muy grande al ver que era nada más y nada menos que la persona más enigmática de mi vida: DoctorSexo.

-Holaaaa pero…¿Tu? ¿Aquí?

-Hola Skarlet. Supe que eras tú a lo lejos, definitivamente tu belleza sobresale de entre las demás personas. Eres más hermosa en persona que por fotos, y por lo que veo, estas con ganas…

El sabía todo sobre mí, él como mi conducta y mi manera de vestir cambiaba por las ganas de tirar, etc.

-Jijiji bueno, ya tu sabes cómo soy cuando no me hago un dedo…

-Si, lo sé…dime, ¿qué haces aquí a esta hora?

-Es que me desperté tarde, y bueno, ya me resigne a llegar tarde al trabajo.

-Mmmm bueno, yo estoy en las mismas…¿qué te parece, si nos resignamos a mas? Mmmm no se, resignémonos a no llegar al trabajo…¿Te apetece una taza de café?

"Me apetece una taza pero de café con leche…pero con tu lechita de güebo" pensé para mis adentros…estaba tan caliente que creo que poco me falto para carbonizarme. En fin, acepte su propuesta, y salimos de la estación para dirigirnos a una panadería, donde nos tomamos un café caliente. El clima estaba nublado, y hacia un poco de frio, con una brisa que anunciaba una lluvia deliciosa. Pero eso lejos de enfriarme, me calentaba de más. Estaba mojada, sentía mi hilo empapado. Pero bueno, decidí distraerme un poco en saber más de DoctorSexo. Hablamos de distintos temas, hasta que el me dice:

-Oye, ¿Y eso que no te gusta conocer a las personas del Messenger en persona? Estas de un rico único, en serio.

-Bueno, es un poco peligroso sabes, además, tengo muchos secretos los cuales los cuento por msn, mas no me puedo dar el lujo de contarlos a la gente que conozco en persona, podría suceder algo y yo saldría perjudicada. Solo dos personas cercanas a mi conocen mis secretos, y bueno, son personas en las que confío ciegamente y sé que no me quedaran mal.

-Bueno, no te preocupes que conmigo todo está bien guardado.

-¿Tan bien guardado como tu nombre real? Porque si es así creo que te daré hasta dinero para que me lo guardes, si lo guardas como tu nombre pues puedo estar segura.

-Jajajaja ¿de verdad quieres saberlo? Porque si es así, primero me tendrás que dar otra cosa a cambio…

-A ver, dime cual –le dije en tono meloso, con una sonrisa picara.

-Mmmmm bueno, eso podríamos negociarlo en un lugar un poco mas intimo…cerca de aquí queda la calle de los hoteles (Ndr: es una calle de Caracas conformada por puros hoteles casi en su totalidad)

Entendí la indirecta muy fácilmente. El sabía que yo estaba con ganas de follar, debido a mi ropa, mi maquillaje, el tono rojizo claro de mi pecho, etc…accedí sin más, quería saber su nombre al menos…y sobre todo, saciar mis ganas de polla.

Llegamos caminando a uno de los tantos hoteles de dicha calle, pedimos la habitación (pude notar como el encargado no me quitaba la mirada de encima), DoctorSexo pago y subimos en ascensor hasta el 6to piso, donde quedaba nuestra habitación. Al momento de llegar a la puerta, yo ya tenía la blusa totalmente desabotonada, y mis sostenes estaban en las manos de mi macho de turno. Mis tetas estaban al aire libre, y eran magreadas deliciosamente por una de sus manos expertas mientras que con la otra me inspeccionaba el culo por encima de la falda.

-Uy Skarlet…estas divina, tienes una cola muy… -en ese momento le puse mi dedo índice en sus labios, impidiéndole completar la frase.

-A las niñas malas no se les habla con cortesía, se les habla con firmeza y rudo, con groserías y con el nombre correcto de las partes corporales… -le dije en tono pícaro. El entendió perfectamente lo que quise decir, por lo que apretó más fuerte mi culo y mis tetas, haciéndome soltar un gemido suave, pero de esos que excitan.

-Creo que ya te entendí, de verdad eres una zorra en toda regla…sé cómo tratar a los especímenes como tu…en fin, como te iba diciendo, tienes un culo muy rico, y tus tetas de verdad son naturales, y hermosísimas, con lo grandes y la poca caída que tienen parecen operadas…

Abrió la puerta de la habitación, tomándome por la cintura y empujándome un poco fuerte hacia adentro. Una vez DoctorSexo cerró la puerta, me le lance encima como una loba hambrienta, tomando su rostro con mis manos y plantándole un buen beso con lengua, al que él respondió de una manera tan enérgica como la mía. Mientras nuestras lenguas jugaban en el espacio cerrado formado por nuestras bocas, el bajo sus manos de nuevo hacia mi falda, desabrochándola con mucha facilidad, y dejando que cayera a mis pies. Una vez sentí la falda abajo, decidí llevarlo poco a poco a la cama, jalándolo con mis manos en su rostro aun, sin darle tiempo a su boca de separarse de la mía, y terminando de zafarme la falda para que no se enredara en mis pies.

Una vez sentí el borde de la cama detrás de mis piernas, nos di la vuelta y bajando las manos de su rostro a su pecho, lo empuje sobre esta. El aun seguía vestido, pero eso no impedía que su miembro se notara a través del pantalón. Yo estaba con mi saco de ejecutiva puesto y debajo la blusa, ambas prendas estaban abiertas de par en par, dejando al desnudo todo mi torso y mis dos tetazas, las cuales pedían a gritos su boca, y tenía mi hilo puesto, tapando (aunque de manera un poco deficiente) el objeto del deseo para los hombres.

Con mi cara un poco seria, pero a la vez seductora, me le quede viendo fijamente a los ojos, momento en el que el intento ponerse de pie nuevamente, pero yo se lo impedí inclinándome un poco y pasando la punta de mi lengua por mis labios entreabiertos, poniéndole una mano en el pecho y empujándolo de nuevo hacia la cama, le guiñe un ojo y esta vez, jugando con ambos dedos índices en dos mechones de mi cabello me volví a poner derecha, para tomar mi saco y, moviéndome sensualmente, quitármelo. Me amarre la parte baja de mi blusa por debajo de mis tetas, siempre cuidando de hacer movimientos sensuales con todo mi cuerpo, contoneando mis caderas. El rostro de DoctorSexo no podía denotar más excitación y deseo. Pase mis dedos pulgares a cada extremo de mi hilo, y jugando unos cuantos segundos con la liga, me lo baje, enganchándolo con mi pie derecho y lanzándoselo a la cara, cual puta stripper. Él lo tomo, lo olio profundamente, y a juzgar por su expresión, le fascino el aroma. Yo me aleje un poco más de la cama, siempre moviéndome de manera sensual, contoneando todo mi cuerpo. Me coloque a 4 patas, momento en el que el se sentó derecho en la cama, y yo con mi mirada más de puta, mas de perra en celo, comencé a gatear hasta llegar hasta sus piernas, y, apoyándome en sus rodillas, posar mi rostro de manera delicada en su paquete, para besarlo, oler esa zona, acariciarlo con mi rostro por sobre el pantalón. En ese momento el se desabrocho la camisa, cosa que aproveche para así poder besar su ombligo, su abdomen, e ir subiendo a punta de besos por su pecho hasta llegar a su boca, mientras mis manos le desabrochaban el cinturón y el pantalón.

Una vez desabrochado, no lo baje, sino que aparte el bóxer y ahí salió a relucir su tieso güebo, yo lo vi maravillada, le calcule entre 19 y 21 centímetros más o menos. Me le acerque poco a poco, su glande brillaba de liquido preseminal, y lo que hice fue recorrer toda su extensión con un delicado roce de mis labios, para una vez llegar a la base, sacar la lengua y volver a repetir la operación pero de abajo a arriba y esta vez ensalivándolo con mi lengua hasta antes de llegar al glande. Luego, lo tome con amor y cariño y lo acaricie con mi rostro. Durante este proceso, no pare de sentir como su herramienta daba respingos sin cesar. Cuando pude, le lance una mirada de reojo a la cara de DoctorSexo, quien estaba "viéndome" con los ojos entreabiertos, y la boca abierta, tomando grandes bocanadas de aire que hacían inflar su pecho, para después soltarlo lentamente.

Era rico sentir la suavidad de la piel de su miembro por todo mi rostro. No pare de sonreír en ningún momento, pero era una sonrisa sensual, de satisfacción pero a su vez de ganas. Como cuando alguien te regala algo que tu quieres y deseas tanto y cuando lo tienes en tus manos, no puedes dejar de admirarlo y sentirte feliz de que lo tienes, pero a la vez no ves la hora de comenzar a usarlo.

Y bueno, estaba ahí, de rodillas entre las piernas de mi macho de turno, del enigmático personaje "DoctorSexo" solo con la blusa puesta pero amarrada por debajo de mis tetas. Me puse a una distancia cortita de la punta de su glande, y comencé a respirarle a esa distancia, quería que sintiera la proximidad de mi boca pero por la respiración. Pude notar como daba aun más respingos sin parar, lo volvía loco. El me vio con cara de "puta que esperas, chupamelooooo" y yo solo le conteste a su expresión con una sonrisa picara. Tenía su polla entre mis manos, y solo le sonreía. Me tomo por el cabello, haciendo una coleta, y me dirigió hasta su pene, el cual en ese momento solté, para tragarlo todo, como supuse que quería, y como efectivamente me obligo a hacer. Mi nariz llego hasta su pubis, le hice una "garganta profunda" y cuando no podía meter más, saque mi lengua para chuparle las bolas. Al hacer esto, sentía dentro de mi boca como su verga respingaba otra vez. Luego comenzó a follarme la boca, poco a poco en un principio, dirigiendo siempre mis movimientos por medio de mi cabello. A medida que pasaban los minutos, fue aumentando la agresividad, como si mi boca fuera un culo o una cuquita, y me hizo moverme hasta más no poder al tiempo que el bombeaba con fuerza. Cuando se canso, me lo saco de la boca, aunque su verga seguía conectada a mis labios por varios hilillos de mi babita. El colchón quedo empapado por un charco de mi saliva.

-Que buena boca tienes Skarlet. Eres una mamagüebos estupenda, ya me imagino que debes tener bastante práctica.

-Hago siempre lo que puedo cariño…Ven, vamos a desnudarte todito, quiero darme una ducha contigo.

Le termine de quitar toda la ropa y nos metimos a bañar. Yo me quede con la blusa puesta, la desate y la abotone normalmente, y me quite las sandalias. Abrimos la llave del agua caliente y la pusimos tibiecita nivelándola con el agua fría. Yo me metí primero, empapándome toda, y la blusa, al ser blanca, se transparento bastante, haciendo que DoctorSexo se quedara afuera de la ducha atónito, viendo como mi par de tetas se notaban a través de la blusa. Note como mientras me veía su hermosa herramienta daba señales de estar a punto de estallar.

No soporto las ganas y entro también a la ducha, masajeándose el güebo con la mano derecha. Yo lo recibí tomando su mano izquierda y posándola sobre unos de me senos por encima de la blusa empapada mientras que la mano derecha se la apartaba de su aparato para llevármela a la boca y lamerle la palma, para acto seguido chupar los dedos. El aroma de su polla en su mano era divino, y el sabor único. Deje de darle atención a su mano para ponerme de espaldas a él, toda empapada por el agua de la regadera, y recostarme en su cuerpo, con sus manos en las mías y llevándolas por debajo de mi blusa hasta mis tetas, para pasearlas por ellas, por lo que el aprovechaba el recorrido que mis manos le guiaban para amasarlas y magrearlas a placer, haciéndome soltar un delicioso gemido. Me le pegue un poco más, recostando mi cabeza sobre su hombro derecho mientras el besaba mi cuello, lo lamia e incluso algún suave mordisco me dio, lo que me excitaba y aumentaba mi calentura en grandes medidas.

Me separe un poco para, sin que el quitara las manos de mis tetas, quitarme la blusa, mientras contoneaba mi culo para intentar ser lo más sensual posible, la tire al suelo de la ducha, sin importarme en lo mas mínimo que quedara como si fuera un coleto. El me volvió a pegar a su cuerpo, aprovechando sus manos en mis pechos. Sentí su hermosa verga entre mis nalgas, lo que provoco que no detuviera el contoneo rico que yo le estaba haciendo con el culo. Estuvimos un rato así, hasta que él no se aguanto y me penetro el culo de una buena vez.

-Mmmm estas apretadita, todo un sueño de mujer…

Comenzó el rico mete y saca por mi agujerito trasero, me dolía un poco, pero como me fascinaba y me calentaba sobremanera. Eh sido fanática del sexo anal toda la vida, tanto, que uno de mis lemas es "si cuando me haces el amor, no me cojes por el culo, entonces no me cojiste" así de sencillo. Todo hombre que me pasa por sus armas tiene que hacerme sexo anal, para que goce y me haga gozar como nunca.

Continuo con sus embestidas, las cuales comenzaban a aumentar en velocidad y rudeza poco a poco, hasta que el sonido de mis nalgas, estrellándose contra su cuerpo, fuera tan alto como para imaginarme que desde afuera de la habitación se debía estar oyendo claramente. Me sujeto por mis codos, momento que aproveche para inclinarme un poco, sin flexionar las piernas. Sentía como con cada embestida mi cuquita se iba encharcando cada vez más, y me suplicaba un poco de atención, la cual era muy difícil darle ya que sus manos estaban ocupadas tomándome por los brazos, y al tenerlos un poco hacia atrás por mi inclinación, yo no alcanzaba a "consolarla". Me deje hacer un buen rato, con la rica agua tibiecita cayéndome encima, y recorriendo todo mi cuerpo, desde mi cabeza hasta mis pies. Sin dejar de penetrarme, me soltó los brazos, y tomo el jabón, y comenzó a enjabonarnos a los dos, pero prestando especial atención en enjabonar mi pubis y mi cuca, haciéndome estallar en un delicioso orgasmo.

Pero aun seguía caliente, después de ese intenso orgasmo, quería más, necesitaba su güebo entrando en mí por un buen rato, y él lo seguía haciendo. Dejo de embestirme, pero sin sacar su polla de mi culo, ante lo que me empecé a mover yo, meneando mis caderas, en forma circular, y hacia adelante y hacia atrás. El continúo enjabonando su cuerpo, mientras mi tarea era simplemente darle placer.

Estuvimos así otro buen rato. Yo moviéndome para él, mientras se duchaba tranquilo. Una vez quitado el jabón de nuestros cuerpos, y sin dejar de ser penetrada por el culo, salimos de la ducha, pero él me detuvo delante del espejo del baño, y allí, me empezó a embestir de nuevo, tomándome de nuevo por los codos y haciendo que me inclinara esta vez un poco más. Yo me veía por el espejo, veía mi cuerpo responder a tales embestidas, a ese rudo mete y saca al que me tenia sometida, veía como mis tetas se bamboleaban de arriba abajo, bailando al ritmo de la música que el director de esta orquesta de dos personas imponía. La saco de mi culo, y, sin ayuda de ningún tipo, la cuadro en la entrada de mi ardiente vagina.

-Como se nota que te está gustando chiquita…Tu cuquita esta hirviendo y apenas y la estoy rozando.

Dicho esto me penetro de un solo golpe, arrancándome un grito que muy lejos de ser por dolor, era por placer.

-Woooow, es increíble que siendo una ninfómana, y habiéndome dicho que con tus novios anteriores hayas tirado sin cesar, estés así de estrecha, así de apretadita. Eres una delicia Skarlet, me siento afortunado de estar aquí.

-Aaahhhhh mételo, mételo todito, no te detengas, estoy así para ti, para tu placer corazón, dame con fuerzaaaaahhhhhh

Al momento de yo decir estas palabras el me fue metiendo la polla cada vez más adentro. Yo continuaba viendo mi cara en el espejo, y mi expresión era de placer en su estado más puro. Por fin estaba siendo llenada, me estaban dando lo que mi cuerpo a gritos pedía desde que me desperté esa mañana. Que sensación tan placentera. Me soltó los brazos para tomarme de mis tetas y ponerme derecha, totalmente pegada a él. Yo comencé un suave movimiento de mis caderas, mientras que tomaba su cabeza y acariciaba su cabello por detrás de mí. El comenzó un duro pero delicioso magreo en mis melones, excitándome cada vez más, y haciéndome estar cerca del orgasmo. De vez en cuando el dejaba libre una de mis tetas y con esa mano recorría el resto de mi pecho, mi abdomen, visitaba mi clítoris por un ratito cortito, y alcanzaba a sobarme los muslos.

Me saco del baño para, dejando de penetrarme, empujarme a la cama, poniéndome yo boca arriba con mis piernas bien abiertas y con mi conchita suplicando ser penetrada de nuevo, cosa que él hizo, pero esta vez metiéndolo todo de golpe, hasta el fondo. Esa sola embestida me hizo gritar como una loca mientras mi cuerpo convulsionaba en un orgasmo aun más brutal que el que tuve en la ducha. Mientras yo convulsionaba, el comenzaba de nuevo un muy brusco mete y saca en mi cuca, haciéndome gritar como una loca, sin que me importara lo mas mínimo ser escuchada por personas ajenas a lo que acontecía en la habitación.

Estuvimos un buen rato en esa posición, yo me agarraba las tetas con una mano mientras la otra jugaba en mi clítoris. El me mantenía sujeta por mis pies descalzos, controlando la abertura de mis piernas a su antojo. Tuve una serie de orgasmos deliciosos y fuertes durante todo el rato que estuvimos en esa posición, era como un sueño. Luego comenzó, en la misma posición, a meterlo y sacarlo completo de mi cuquita, para luego hacer lo mismo en mi culo, intercalando ambos agujeros. Luego de un corto periodo de tiempo haciendo eso, se quedo dándole más caña a mi culo. Por lo que veo le gusto bastante ese hoyito. A medida que volvía a darme embestidas en el culo, el me besaba los pies, en ocasiones chupaba mis deditos. Este gesto me encendió sobremanera. Para mí no hay nada más humillante que besarle los pies a alguien, y a la vez no hay nada que me haga sentir más segura, mas excitada, y con cierto aire de superioridad además de sentirme súper adorada y querida como nunca como el que me besen los pies. Ambos gestos me gustan, como ya dije anteriormente, me gusta ser dominada, me gusta jugar rudo en la cama, ser sometida, usada, humillada. Pero no siempre. También me gusta el sexo romántico, con amor, o también cuando simplemente se trata de sexo y ya. Este momento era una liga de esos dos últimos casos. Se notaba cierto amor y cariño en cada acción que doctorsexo llevaba a cabo en mi cuerpo, pero a la vez esto no dejaba de ser un simple acoston. Perdón, un tremendo acoston, ya que de simple NO TENIA NADA.

Continuamos en nuestra faena por un largo rato más, en el cual perdí la cuenta de las veces que me corrí. Pero claro, todo tiene su fin, y el de este delicioso rato sexual, estaba cerca, a juzgar por las expresiones del cuerpo y en la cara de mi amante de turno. Poco a poco fue penetrando más duro, con mayor velocidad en mi culo. Hasta que, cuando yo supuse que estaba muy cerca el tan ansiado orgasmo de mi macho, de un movimiento rápido con mis piernas lo aparte un poco, haciendo que el dejara de penetrarme, y, con mucha sensualidad y dulzura, le hice el clásico gesto de llamarlo con el dedo índice, mientras le decía:

-Tu coso no se va de esta habitación sin que mis senos le den cariño.

El entendió perfectamente, y colocándose sobre mí, puso su verga en el provocativo valle formado por las dos montañas de mi pecho. Lo aprisione fuertemente con mis tetas, aunque con cierto toque de delicadeza, y comencé a hacerle una buena paja con ellas, moviéndolas de arriba a abajo. La expresión de su rostro era hermosa. Poco a poco comencé a sentir un fuerte temblor en él, y con un fuertísimo rugido, acabo en mis senos, en manera un poco abundante y fuerte, lo que hizo que parte de su exquisito elixir fuera a parar a mi cuello y mi barbilla.

Se tiro a un lado de la cama. Yo quede jugando un ratito con su semen, regándolo por las partes donde cayó como si fuera una crema para la piel, o un bloqueador solar. Mientras lo hacia el posó una de sus manos en mi cara y me dio un delicioso beso con lengua. Nos quedamos un rato viéndonos. No hablábamos, solo nos veíamos y nos acariciábamos. Estábamos súper agotados. El comenzó a acariciar mi cabello, de manera lenta y muy sensible y rica. Y al igual que le pasa a muchas personas, ese gesto me hizo entrar en un delicioso estado de relajación que acabo con tumbarme dormida en la cama después de un buen rato.

Al momento de despertar, un poco atontada, vi la hora encendiendo el televisor. Apenas eran las 11:45 de la mañana.

-¿Doctorsexo? –Llame, para ver si estaba en el baño, pero la puerta estaba abierta, y no salió nadie.

Mire alrededor. Estaba sola. Fue entonces cuando me percate que había una nota enrollada entre mis pechos, la cual decía:

"Coincidencias como la de hoy deberían repetirse. Eres magnifica. Espero hayas disfrutado tanto como yo. Con amor, Fernando, Tu doctor sexual."

No pude evitar una sonrisa. "Si disfrute tanto como tú, yo creo que mas" dije para mis adentros. Me levante de la cama, me di un buen baño, me arregle como pude solo con el saco, ya que la blusa seguía mojada. Afortunadamente logre que mi saco cubriera todo mi torso, aunque como quedaba muy abierto arriba, le abroche un par de prendedores de mi compañía para que quedara cerrado. Me puse la falda, las sandalias, metí la blusa exprimida en una bolsa, y me retire de la habitación, para entregar las llaves e irme del hotel, tomando un taxi hacia mi casa. Definitivamente esta mera coincidencia es la que mas eh gozado en toda mi vida.

FIN

Espero les haya gustado mi relato. Es la primera vez que escribo para esta categoría, ya que hasta ahora todos mis relatos han sido de "dominación". Disculpen mis errores, se que deben haber un montón de ellos a lo largo de este escrito. Cualquier comentario o sugerencia pueden dejarla en la pagina o bien pueden escribirme a skarletpricet@yahoo.es .

Besos.

Skarlet.