Vuelvo de nuevo a la carga. Sigo en NY, con algo de tiempo libre. Aquí estoy en la habitación de mi hotel, en Brooklyn, justo en frente del mar, y con unas fantásticas vistas del Skyline, y del famoso puente. 

Me quedé en el avión, relatando una noche loca en Madrid. 

A principios de la semana siguiente, tenía que ir a Frankfurt, y después de la pésima experiéncia del año anterior, me había autoprohibido el sexo de pago en aquella ciudad. Además en Frankfurt, tengo un buen amigo Theo, el Croata, el único buen recuerdo de aquellos fatídicos días. De Theo ya os he contado algún encuentro. 

Lo hablé con Susana, y decidimos preparar alguna alternativa. Me preparó un pequeño neceser, con juguetes eróticos, con la condición de no poder abrirlo hasta que estuviesemos en situación. Yo ante el riesgo de pasar vergüenza en la cola de seguridad del aeropuerto, decidí facturar la maleta.

Llegué al hotel Jumeirah, como siempre, a eso de las 20.30. Llamé a Theo nada más aterrizar, y me dijo que estaba fuera de la ciudad hasta el miércoles, que entonces nos podríamos ver. Me tocaba apañarmelas sólo, durante dos noches. Buff.

La primera noche, ya le mandé un whatsapp a Susana, nada más empezar a cenar. Me dijo que aún no estaba en casa, pero quedamos en hacer un Facetime a las 22.30 clavadas.

A la hora acordada, recibí su llamada, para mi sorpresa, me llamaba completamente desnuda, y con la compañia de Tete y Ruben, que habían cenado en casa. 

-ha llegado la hora Karlo, abre el neceser. 

Le hice caso absoluto, se trataba de un neceser no muy grande, al abrirlo, encontré unas bolas chinas metálicas, un lubricante superconcentrado como el que usa Roger, y un señor vibrador de esos con una ventosa en la base, para poder fijarlo a algún sitio. Sin decir ni mu, me desnudé, situe la tablet (menos mal que uso un IpadPro, lo puedo ver todo a buen tamaño). 

-antes de nada, coje las bolitas y te las introduces en tu culo. 

Abrí bien las piernas, me mojé el culo con un poquito de aceite, y después de jugar un poco con mis dedos, me metí las dos bolas, dejando la arandela con su cadenita colgando de mi culo. Las condenadas estaban muy frias. 

Permanecí sentado al pie de la cama, a la espera de novedades.

Tete hizo acto de preséncia, con su enorme verga en la mano, se acerco a Susana, que se la cogió rapidamente y se la acercó a su boca. Le pego 4 lametones con su lengua, y se la introdujo en la boca. A pesar de la distáncia, sentía que practicamente el sabor de la polla de Tete en mi boca. 

Me unté un pelín de lubricante en mi polla, y suavemente, empezé a masturbarme. Notaba las pequeñas vibraciones de las bolas en mi culo, y rapidamente me puse palote. 

Susana, mientras, ya había conseguido que la polla de Tete se pusiese como una roca, y ahora daba cuenta de la Ruben, que lo tenía justo al otro lado. La muy cabrona estaba sedienta, y aquellos dos le estaban dando para dar y tomar.

Susana, sin soltar la polla del cubano de la mano, se apartó un poco la Ruben, y me dijo mirando a cámara:

-preparate el vibrador. 

Empezé como un loco a buscar donde coño podía sujetarlo. Tenia un pequeño banco para poner las maletas al lado del escritorio. Era un pelín bajo, pero la única superfície lisa que encontré, a parte del propio escritorio, que logicamente era muy alto. 

Mojé con un pelín de salíba la base de la ventosa, y respetando la pequeña curva del enorme vibrador, lo fije al banco. Entonces le puse un condón (siempre és más fácil de limpiar después) y lo embadurne con bastante aceite lubricante.

Mientras, de refilón, Susana seguía con la polla de Tete entre sus labios, y ahora Ruben le comia el coño. En primera fila tenia el culo de Ruben en pompa, y Susana con una pierna por encima, comiendo aquella riquísima polla.

Susana se incorporo, y me dijo:

-te veo bien cariño, ahora sígueme.

Como si lo tuviesen hablado, Tete se sentó en el sofá, y Susana, de espaldas a el se sentó encima. Su sediento coño se comio aquella enorme polla en un periquete. Y haciendo largos recorridos, empezó a cabalgarla. 

Me dispuse a hacer lo propio. Me levanté, con mi dura polla entre las manos, me quité las bolas chinas, y me acerqué al vibrador. Entonces, me agarré a el con una mano, mientras con la otra me apoyaba para no metermelo de golpe y hacerme daño. 

Me fui introdujendo aquella enorme polla de color carne, no muy gruesa al principio, pero si muy larga y gorda al final. En un principio pensé que no pasaría de media, y en tres o cuatro intentos y tras añadir un poco más de lubricante en la zona de la base, mi culo se la tragó toda. Encontes, me apoyé con las dos manos atrás, y fui cabalgandola, notando como se deslizaba a través de las paredes de mi culo. El placer era brutal. Mientras, Susana, seguía follada por aquella tremenda polla, gimiendo como una loca, y sudando como si jugara un partido de tenis.

Rubén por su parte, estaba sentado al lado de ellos, mirando a camara y masturbándose. El cabrón la tenia bien dura también.

Como me sentía bastante cómodo en la postura, decidí agarrarme la polla con una mano, y pajearme a la vez que seguía enculado por el vibrador.

Entonces Susana, cambió de postura. Tete se tumbo en el sofá, y Susana también encima suyo, fue Rubén el que se le acerco por detrás y se la metío por el culo. Como le gusta a Susana que se la follen por delante y por detrás. No tiene vicio la tia....

Gemia como una posesa. Yo aflojé el ritmo de autoenculada, para darle mas caña a mi paja. Me dejé apoyar para tenerla toda metida dentro, y darle más a mi polla. 

Al rato, Rubén se corrió dentro del culo de mi mujer, entonces Susana se "desempaló" y se puso de rodillas para comerle la polla al cubano.

-vas bien cariño?-me preguntaba-veo que escogí un buen tamaño de polla para ti....

Yo solo atinaba a decir "Si Si Si"

Se giro hacia el miembro, que es casi tan largo como su cara, y hacia desaparecer todo lo que podía dentro de su boca. 

Yo seguía con mi super paja, cuando Tete, se levantó, y se acercó a la cámara con su empinadísima polla entre las manos, se corrio delante del Pc de Susana, recogiendo su propia corrida con una mano, y supongo que manchando algo por los alrededores. 

Susana apareció rauda y veloz, y le lamio toda la mano, y la polla, mirándome a camára. Entonces Ruben se le acercó y se morrearon. 

Yo a tope, al final me corrí, intentando hacerlo en mi mano, y sin quitarme la verga del culo. Entonces, si, me levanté y me acerqué a cámara. Me pasé la mano por la boca, y me tragué mi propia corrida.

La verdad, la experiéncia fue genial, el morbo de la cámara, mi mujer follada por todas partes, yo con una polla (aunque falsa) dentro de mi...no me podia quejar.

Al dia siguiente, tenía reunión en un Banco alemán a primera hora, y con un importante fabricante de coches después de comer, así que dia completo.

Llegué al hotel a eso de las 19.30 cansado, y con un cabreo importante, pues la reunión con el fabricante fue un desastre.

Al llegar a la habitación me di cuenta que por la mañana, me había dejado el vibrador encima del banco, y la botellita de lubricante al lado. Menos mal que por la noche le había quitado el condón, pero todo y con eso, seguro que la chica del servicio de habitaciones flipo por un tuvo.

Me di una ducha, y como todo no podían ser malas notícias, al salir de la ducha, había recibidio un whatsapp de Theo, que ya estaba en la ciudad.

Rapidamente lo llamé, y quedamos en el centro comercial donde nos veíamos siempre.

-nos vemos a las 20.30, como te va?-me preguntó. 

-me va genial, acabo de salir de la ducha, así que llegaré puntual.

Diez minutos tarde, se presentó Theo. Nos saludamos con un fuerte abrazo, hacía 4 meses que no nos veíamos, y nos sentamos a tomar una pinta de cerveza.

Theo me contó que tenía un amigo o "follamigo" como lo llamaríamos aquí. Un chico de su país que trabajaba en la recepción de otro hotel cercano al suyo. Le había contado de lo que iba nuestra relación, y el chico li decía que queria conocerme. 

Hablámos durante un buen rato, incluso le conté la experiéncia de la noche anterior. El se reia, y me decía que seguía siendo un vicioso.

-hay cosas que no cambian-le contesté yo-te molaria que esta noche llamásemos a Susana?

Esbozó una evidente sonrisa, y asintió con la cabeza.

-a Miro (su amigo, se llama Miroslav) seguro que le encanta la idea.

Theo y Susana se conocen de cuando ella vino a buscarme después del incidente con el travesti.

Al poco ratito, apareció Miro, un tio con más pinta de nórdico que de Croata, rubio, muy alto y corpulento, y a diferéncia de Theo, un pelín fondón.

Nos presentamos, nos pedimos otras pintas, y acto seguido la cena.

Justo cuando nos la traían, y después de explicarle sin muchos detalles a Miro lo que queríamos hacer, le mandé un Whastapp a Susana diciéndole:

"Buenas cariño, esta noche repetimos, a eso de las 11.30. ¿Como te va? Te advierto, que esta vez vamos a cambiar las papeletas"

En medio segundo me contestó:"me parece genial. Con quien estás?"

Le contesté, y me dijo "yo también te sorprenderé". 

En ese momento, me invadió el morbo, y le eché un vistazo rápido al Facebook y a Instagram para ver si podia averiguar algo. La intuición me decia que seria Roger y Sandra, y la ilusión era que estaba con Vanesa, a la que hacía mucho que no veiamos. 

Miré en el perfil de Instagram, y off course, era ella. Por la mañana había colgado un selfie en el aeropuerto de bcn, con el comentario "home sweet home".

Total ,que acabamos la cena, y pedímos una copa. A eso de las once de la noche, nos fuímos para mi hotel, que esta a una calle del restaurante.

Subímos a la habitación (Theo lo hizo por la entrada de personal, para ser algo más discreto), y como siempre, pedí una botella de wisky para entrar en calor.

Theo y Miro eran, como decía antes, follamigos, mi colega era completamente activo, y Miro, por su parte justo todo lo contrario. Theo era más bien Bisexual, al igual que yo. A Miro, según nos había explicado, no le enutsiamaba en exceso el sexo con mujeres.

Nada más llegar, y pedir la botella de wisky, me di una ducha. 

Al salir con la toalla enrollada, justo recibí la llamada de las chicas. Active la tablet, y les pedí a los chicos que se apartaran.

-Buenas noches cariño!-me decia mi mujer. Estaba sóla, vestida con un picardias-como estás??

-después de la fiestecita de ayer, estoy a tope mi amor-le contestaba yo entre carcajadas.

-ya sabes quien dormirá en casa hoy?

-me lo puedo imaginar....

Entonces apareció Vanessa en pantalla. Hasta Theo solto un "joder" o algo asi (lo dijo en su idioma). Llevaba unos leggins negros, zapatos de tacón, y una blusa ancha. Y sus increibles labios rojos.

-hola preciosa!-le dije sorprendido pese a que estaba seguro de que sería ella. 

-alo mon amour-me contestó ella. Cuando habla en francés todavía me pongo más cachondo.

Hablámos durante un par de minutos, hasta que me puse de pie:

-bueno, pues yo tampoco estoy solo!!-les dije-mirad quien a venido.

Entonces Miro y Theo hicieron acto de preséncia ante la cámara. Las dos saludaron a Theo, pués lo recordaban, y le comentaban lo contentas que estaban de verse en otra situación y contexto completamente diferente. 

Mientras hablaban, Miro, que no entraba mucho en la conversación, ni corto ni perezoso me quitó la toalla, dejándome en bolas.

-vaya!!! Vamos por faena-dijo una de las chicas. 

Me senté al pié de la cama, y el chico, con hambre, se arrodilló delante mio, y abriéndome las piernas se metio mi flacida polla entre los labios. Le pegaba lametones, y con sus dedos, jugaba con mis dedos y mi ano. 

Theo, se desnudó rapidamente, y arrodillándose en la cama, me acerco su polla para que diera cuenta de ella. Me la acerqué a la boca, y jugando con mi lengua, empezé a masturbarlo. 

Decidí levantarme, un momento, pues quería ser el amo de la situación.

Abrí el neceser, y saqué los juguetes de la noche anterior. Coloqué el vibrador en el mismo sitio. Cogí las bolas chinas, y le dije a Theo:

-ven aquí, hoy te haré tocar el cielo

-me das miedo con eso en la mano. Es para mi?

-claro que es para ti-Miro se reia detrás mío, y las chicas igual, pues lo oían todo perfectamente.

-no me va mucho lo de jugar con mi culo-me dijo más serio.

-tu confia en mi-seguí yo, sin darle mucha opción-en un rato me pedirás que te folle, y sino, en cualquier caso, te pegarás la mejor corrida de tu vida.

El pobre, se resignó, y me hizo caso. Lo puse a cuatro patas en la cama, bien espatarrado, de manera que su culo quedaba perfectamente a la vista para la cámara. Las chicas, se habían sentado en el sofá y se estaban tocando sus clitoris.

Le separé bien las nalgas al novato, y empezé a lamerle el ojete. El tio al principio no decía ni mu, pero cuando empeze a jugar con un dedo, a la vez que le lamia los huevos y el ano, empezó a soltar pequeños gemidos. Con otra mano, lo masturbaba en la medida de lo que podía. 

Miro, se le puso enfrente, bien espatarrado. Theo empezó a comerle la polla, y me fue muy bien, pues estaba algo tenso, y se relajo.

Abrí la botella de lubricante, y untándome bien dos dedos, le lubrique bien todo el ojete, y metiéndo uno de ellos toda la entrada del ano. El tio soltaba pequeños gemidos, pero estaba totalmente concentrado en la mamada que le hacía a su colega.

Cogí las bolas, y con la primera, empezé a jugar primero con su ano. Al principio lo contraía pues las bolas estaban muy frias. Al ratito, ya se acostumbro a su temperatura, y dejo de contraer el ojete. Lubriqué un poco una de las bolas, y toda la zona, y dejándola pasar por su ano, presioné con un poco de fuerza, y se metió sola dentro. El soltó un pequeño grito de dolor, pero se relajo. Seguí estimulándole mucho la zona (me acuerdo que es algo que he aprendido de Roger, el primer hombre que me folló, y disfrute casi más con la estimulación que con su polla cuando me folló). Cuando vi que estaba un poco distraido con su amigo, volví a repetir la operación con la segunda bola. Soltó una pequeña exclamación, pero siguio con su mamada. 

Me acerqúe por el lado de la cama, y le susurré

-que tal?

-bien, noto algo dentro de mi, pero nada más.

-tu relajate, y olvidate de ellas-le expliqué yo....

Le sequé con una toalla todo los restos de lubricantes que tenia por su culo, con la esperanza que no se caiese ninguna bola. 

Se puso de pie, y me avalanzé directo hacia su polla, que estaba casi empalmada. 

Me agarró por la cabeza, y empezó a follarme la boca con fuerza. Casi me ahoga. El tio pegaba unos gemidos brutales, sin duda, las bolas hacían su efecto. Era gracioso verle el culo con la correa y la arandela colgando. 

Miro se las ingenio, para ponerse entre nosotros, y acercarme también su polla.

Me encanta la sensación de vicio, morbo y placer que me dá tener una en la boca, y otra esperando en la mano. 

-ven colega, voy a follarte-me dijo Theo en tono autoritario

-sientate al pié de la cama, que lo vean las chicas-le contesté yo. 

Me acerqué a la tablet, estaban las dos desnudas, con un pequeño vibrador cada una, masturbando sus clitoris. Lo que hubiese dado yo, por estar entre ellas también.

-Theo follate a mi marido-le dijo Susana que se venia arriba!

No pude evitar quedarme unos segundos mirando aquellos dos pivones masturbarse, jugar con el vibrador, las dos con las piernas abiertas. Incluso hize una captura de imagen con el teclado. Para mi colección. 

Theo me esperaba con el condón enfundado sentado en la cama. 

Miro, se acercó al vibrador que había colocado en el taburete, le enfundó un condón, y se puso algo de lubricante. 

Me acerqué un poco a el, para que me pusiera lubricante. Se untó dos dedos, y me unto bien el ano, y me los metió también para dilatarme. Estaba a 100. Theo me esperaba sin perderme vista. Yo tenía una pierna encima de la cama, y el culo en pompa. 

Desde la tablet se escuchaban los gemidos de las chicas. 

Me acerqué mas a Theo, abriendo bien mis piernas, y mirándo a cámara. Theo busco buscaba con su polla la entrada de mi ano. Al notar su glande en mi ano, me fui sentando poquito a poco sobre el, hasta metermela toda dentro. El croata gemia como un cabrón. Entonces empezé con mis movimientos. Subiendo y bajando, a diferentes ritmos, incluso me la metía toda dentro, y realizaba pequeños movimientos en circulo, con mi culo. El tio se hacía polvo.

Las chicas no perdian detalle, estaban a mil las muy cabronas, de ver aquella enorme polla perderse en mi ojete. 

-ponte a cuatro patas Karlo-me pedá Theo.

Me puse cerca la tablet debajo, para que las chicas vieran directamente mi ano penetrado. Theo se acercó por detrás y me envistió a lo bestia. Mi culo se volvío a engullir su polla dándome un placer indescriptible. Entonces aumento mucho la velocidad de su follada.

-me corro, me corro-me decía.

Me di la vuelta rápida, poniendo mi boca a su disposición para que lo hiciese dentro de mi boca. Se quitó el condón, y me la metío dentrol. Se la chupe durante unos segundos, hasta que noté como me inundaba la boca de leche. La abri aun sin tragarmela, se me escapaba la corrida por la comisura de mis labios. A las chicas les encantó la imagen, no dejaban de gemir y jadear.

Sin previo aviso, noté como algo me envestia por detrás. Miro, había dejado el vibrador, y vino directo a por mi dilatado ojete. El tio tenia la polla mas dura que una estaca. Empezó a follarme duro, y pegarme cachetes en mis nalgas. 

Le pedi con una señal a Theo que se acercara. Le chupe un poquito más la polla, que aun sabía a semen, mientras el otro tio me envestia y me ponia las nalgas rojas.

Con mis dedos, empezé a jugar con el ano de Theo, que aun llevaba las bolas puestas. Le quité una, y se la volví a meter, ahora ya no se quejaba, incluso gemia un poco.

Miro siguió follándome el culo durante un rato, hasta que se corrió en mi espalda. Entre Theo y él jugaron un rato con su corrida.

Entonces me levanté, y me acerqué a la cámara:

-que tal chicas?-les pregunté a ellas que seguian masturbándose.

-no se cuantas veces me he corrido-contestó Vanessa.

-pues ahora viene lo bueno-les dije yo. 

Como Theo no habla nada de español, no entendió una mierda.

Ven Theo, que te voy a enseñar algo.

El pobre Theo, se puso a cuatro patas, como sabíendo lo que iba a pasar. 

Jugué un poco con su ano, le quité las bolas, y lo lubrique muy bien. Le introduje un par de dedos. Me puse en pie, y le pedí a Miro que me echara un cable. Se acerco a mi, y mientras me besaba por el cuello y el pecho, me masturbaba. Al final se agachó y me la chupo un poco. En nada mi polla se puso dura. 

Entonces, cambié mis dedos por mi polla, me fui directo a su ojete. Al notar la presencia de mi capullo, el tio soltó un pequeño chillido. Estaba asustado.

-tranquilo cariño, te encantará-le dijo Vanessa en un perfecto inglés.

Theo se miro la cámara, y no soltó la más mínima expresión. Yo que seguia rondando su ojete, sin olvidarme de el lo más mínimo, apreté un poco, agarrándolo por las caderas. El tio cuando notó el capullo dentro, se quedó inmóbil, sin quejarse, como a la expectativa de lo que vendría después. Saqué mi verga, y volví al ataque. Le metí el capullo y un poquito más, ahora si se quejaba un poco. Esta vez acompañe la enculada de un par de leves empujones. La volví a sacar, y otra vez a dentro, igual. 

Miro, se acercó a Theo y le preguntó como estaba, medio susurrándole. Éste no le contestaba. Entonces paré. 

-porqué paras?-me preguntó con un tono ligeramente disgustado.

-no paro, ponte encima de la cama.

Le puse un par de almohadas detrás de los riñones, para levantar un poco su culo. Abrí bien sus piernas, Miro tuvo la precaución de poner bien la tablet para que todo se grabara como és debido. Entonces volví al punto que lo había dejado. Le metí el capullo y un poco más. La saqué. Ahora claramente ya gemia. La volví a meter, otra vez fuera. Lubriqué un poquito más mi polla, y esta vez sí, se la metí hasta dentro. 

Al notarla toda dentro, abrió los ojos, y me miraba con cara de lujuría, como pidiéndome que le metiera más. És lo que hay, mis 19 centímetros de mi cabezona polla no están nada mal para empezar. Entonces empeze a follarlo continuo, sin parar. 

Notaba como las paredes de su culo apretaban, casi estrangulaban mi dura polla. Me moría del gustazo. Seguí follándolo, hasta que noté que me iba a correr. Entonces la saqué, y me fui haciá su boca. Él seguía tumbado boca arriba. Le impedí que se incorporara, y le metí la polla dentro de la boca. Empezé a follársela con dureza. El me apretaba la polla con sus labios, y lamía todo lo que podía. No tardé más de cinco empujones en correrme entre sus labios. El pobre al estar boca arriba casi se ahoga. 

Se tragó hasta la última gota.

-que tal Theo-preguntó Susana desde Barcelona-te ha molado verdad?

-es una puta locura-le contestó él-lo había probado otras veces, y siempre me había echo mucho daño, sin notar ningún placer. Karlo me ha echo tocar el cielo.

-queremos conocerte-continuó Vanessa-a ver si te vienes por aqui alguna vez.

El chico, que era muy discreto, se medio sonrojo.

-siento que quiero más-me decia-quisiera tener una polla en mi culo siempre. Que me has echo?

-sólo te he follado-le contesté yo-si quieres más, aqui tienes el vibrador. 

Me fui a pegarme una ducha rápida, y los deje a los dos en la habitación, ya con la tablet apagada.

Cuando sali de la ducha, me encontré a Theo cabalgando el vibrador del taburete, y Miro, haciendose una paja delante suyo.

-al final será verdad que querías mas polla-dije yo con un amplia sonrisa en la cara.

Me acerqué a él, y mientras el subia y bajaba (no se metía ni medio vibrador), yo empeze a jugar con su polla. Al final me dije que tenia que hacerlo bien, me arrodillé delante suyo, y me metí su polla en la boca. En nada estaba durisima. 

Noté como unos brazos recorrian mi espalda, hasta llegar a mis nalgas, me las separaba, y me lubricaba un pelin el ano. 

Miro me endiño su polla sin contemplaciones, hasta dentro. Al principio me hizo un poco de daño, pero rapidamente noté como me invadia una sensación de gusto que me subía hasta la boca. Apreté un poco más en mi mamada.Miro me daba mas fuerte, se escuchaban sus piernas chocar contra mis nalgas. 

Theo, con su increible fuerza, se aguantaba sobre las piernas para seguir cabalgando el vibrador, y mantener media polla dentro de mi boca. El sólo subia y bajaba, y yo sólo la apretaba con mis labios, y lamía con mi lengua.

El tio que me daba, me pegaba cachetes en las nalgas. Theo cada vez se metía más vibrador dentro, pero estaba aún lejos de meterselo entero como hacia yo la noche anterior. Al final aflojo sus movimientos, y agarrándome la cabeza para que no me escapara. Yo que soy obediente, me lo tragué todo, otra vez.

Miro siguió enculandome, hasta que de nuevo se corrió dentro de mi ojete.

Nos levantamos, recogí la toalla del suelo. 

-yo me tengo que ir, que mañana madrugo, y si me quedo, creo que nos volveremos a liar-dijo Miro, a la vez que recuperaba sus calzoncillos.

Nos despedimos de él, y yo, me volví a la ducha. 

Al salir, Theo seguía desnudo encima de la cama.

-te importa que me quede a dormir?-me preguntó.

-como tu quieras Theo, aquí eres bienvenido, ya los sabes.

Se levantó, y se fue a la ducha. Yo abrí la cama, y me tumbé encima en pelota picada. 

Me quedé frito en un minuto.

A la mañana siguiente, a eso de las 9 me desperté. Tenía a Theo justo al lado, completamente desnudo. Boca abajo.

Empezé a jugar con su ojete, pasándole la lengua y los dedos. El aún dormido, se dejaba hacer. Le fui lamiendo el ojete, y acariciándolo con los dedos. Empezé a meterle un par de dedos. El seguía boca abajo, algo más despierto. 

-buenos dias-le susurré al oido-levanta un poquito el culo.

El tio lo puso ligeramente en pompa. Le unté el ano en aceite, y le endiñe mi durísima polla. Empezé follándolo despacito, y aumentando el ritmo cada vez más. Como buen polvo mañanero, a los pocos empujones, me estaba corriendo dentro de su culo. 

-asi da gusto despertar-me dijo.

Me deje caer sobre la cama, y acto seguido, se puso en marcha el.

-ahora es mi turno no?.

Yo sin contestarle, abri mis piernas, y las levanté todo lo que pude. 

Se puso en situación, y me la endiño, sin apenas dilatarme. 

Me empujo con fuerza desde el principio. Aquella pedazo de polla entraba y salia de mi culo con suma facilidad. Estuvo un buen rato dándome.

-quiero tu leche otra vez Theo-le suplicaba yo.

Siguió follándome durante un rato, hasta que paro. Primero pensé que se había corrido, pero me la sacó del culo, completamente dura, se quitó el condón, y se acercó a mi boca. 

Se la comí como si fuese mi primera polla. El tio, le molaba agarrarme por la cabeza para que no me escapara. Yo le chupaba la polla, y con el vibrador que andaba por allí encima, jugaba con su ojete. Al final se corrió dentro de mi boca, y alcancé a que todo quedara dentro. Me acerqué a el, y buscando su boca, le solte su propia corrida. El tio se dedico a lamerme la boca, los labios y parte de la cara buscando como un loco restos de su propia corrida.

Desde luego, gran invento lo de tener sexo por Facetime...y si encima consigues grabarlo mejor aun. 

Durante todo el vuelo de vuelta, fui repasando los dos videos que teniá, y estuve durante todo el vuelo empalmado.