miprimita.com

Resopón nocturno

en Hetero: General

Lenguas… jadeos… algo se cuela en mi entrepierna y hace cosquillitas allí, chiribitas extrañas que me hacen sudar y sonreír… la imagen se hace algo más nítida, es un hombre… no le veo la cara, pero sé quién es. Abre la boca y una lengua inmensa sale de ella y se introduce en mi sexo, haciéndome temblar de gozo, qué dulce siento, sigue… sigue…

Un estremecimiento de placer más fuerte, y parpadeo. Estoy jadeando, hace frío y sin embargo estoy sudando. Me cuesta un poco ubicarme, todo está oscuro, pero enseguida se me escapa la risa, ¡vaya sueño húmedo! Repasemos, soy Viola, profesora de Música y Artes plásticas, Cristóbal duerme a mi lado y yo acabo de tener un sueño erótico como no los tenía desde los dieciséis, de hecho me he despertado por la sensación de mi mano presionando mi sexo, tengo las bragas metidas en mi rajita, y cuando las saco, un feroz cosquilleo me hace temblar… ¡mmmmmmmh….! Están empapadas, y yo… yo tengo muchas ganas de jugar.

Mientras mis ojos se acostumbran a la penumbra, me despojo de las bragas, su roce en mis muslos me tortura dulcemente, y puedo ver la cara de mi amante, con expresión de total placidez en medio de su sueño. Le acerco mi prenda húmeda a la nariz, y de repente sonríe dormido. Cuando le alejo las bragas, estira un poco el cuello, buscando otra vez el olor, y se me escapa la risa cuando se la acerco otra vez y él gime en sueños. No me extrañaría que estuviese presentando armas… a ver… Con cuidado de no despertarle, meto la mano bajo las mantas y tanteo en busca de su soldadito… mmmh, sí, aquí está. No está aún erecto del todo, pero sí bastante contento… Sé que Tóbal está muy cansado, yo misma lo estoy también por culpa de todo el jaleo con el día de la Orientación Profesional, pero si mañana le digo que me desperté a las cuatro de la mañana con ganas de sexo y preferí masturbarme para no despertarle, me mata, y con razón. De modo que me acurruco frente a él, y mientras le empiezo a acariciar despacito el miembro, le beso suavemente por la cara, su gran nariz…

Sus labios se abren y cierran, como si besase el aire, y se le escapa un gemidito, hasta que finalmente el placer le hace abrir perezosamente los ojos. Me mira y me sonríe. Enseguida nota algo, mira hacia abajo, y aún en la oscuridad, ve perfectamente el movimiento rítmico de mi brazo acariciándole. De nuevo me mira a mí y sonríe más, con picardía, y lleva su mano a mi sexo. Tan pronto lo toca, una expresión de agradable sorpresa aparece en su rostro.

-¿Quién ha sido una niña traviesa? ¿Parece que hemos tenido malos pensamientos….? – sonríe, hablando muy bajito, mientras pasa a acariciar más intensamente, mi clítoris está empapado y tan pronto lo roza, tiemblo de pies a cabeza, se me escapa un gemido, ¡qué escalofríos…! Yo misma acelero mis caricias en su polla, con una mano le agarro el tronco y lo froto de arriba abajo, con la otra le masajeo las pelotitas, juego con ellas, hago cosquillas en sus muslos… a Tóbal se le escapan los gemidos y sus caderas se mueven solas. Su dedo corazón ya se ha perdido en el interior de mi sexo, lo saca y mete sin ninguna prisa, mientras con el pulgar me sigue frotando la perlita, qué gusto me da… estamos tan cerca que los dos jadeamos en la cara del otro, me parece tan excitante… mi mano está mojada de su líquido preseminal, y él debe tener la suya empapada hasta la muñeca de mis jugos. Intento mantener los ojos abiertos, Tóbal jadea mirándome y pone unas caras de placer tan tiernas que no quiero perderme ni una, se estremece entre mis manos… no aguanto más, quiero tenerle dentro…

En medio de un gemidito tierno, me arrimo más a él y le abrazo con una pierna, para dejarle camino. Apenas me ve acercarme, sabe que va a comenzar lo mejor y asiente con la cabeza, dando golpes de cadera, buscando a la desesperada mi calor, quita sus manos de mi sexo y las lleva a mis nalgas para empujarme de ellas y ensartarme. Lo abrazo y nos besamos, mientras no dejamos de subir las mantas, es muy divertido hacerlo tan arropaditos, tan calentitos… Su miembro se frota contra mi vagina temblorosa, como si quisiera hacerse desear, y cada roce es un estremecimiento de placer delicioso, un escalofrío de gusto verdaderamente enloquecedor… hasta que Tóbal apunta bien y entra… muy ligeramente, sólo la puntita…. ¡tengo que morderme los labios para no gritar, es buenísimo, por favor, más, más, te lo ruego, hasta el fondooo…! Mi compañero se ríe, tan excitado y deseoso como yo, disfrutando de mis ansias, y se deja deslizar a mi interior, muy, muy despacio… él mismo gime como si se le escapara el alma, pero no acelera, se mete dentro de mí milímetro a milímetro, saboreando la dulce sensación… mmmmmh…. Mi pierna con la que le abrazo se convulsiona y tiembla, intentando atraerle de golpe, pero logro aguantar, es tan bueno, tan torturador…

Finalmente, le noto por entero. No puedo dejar de sonreír, y mi cuerpo tiembla solo, mis caderas no pueden parar quietas, tienen que moverse, y Tóbal está en la misma situación. Me abraza y me agarra del culo y empezamos a movernos, encontrándonos y separándonos, aaaaaaaaaaaah…. Estoy sudando como una loca, qué maravilla, qué calor tan bueno… me encanta cómo se desliza dentro y fuera de mí, con lo cachonda que estoy no voy a aguantar nada, de hecho… de hechooo…. Ooooh, no puedo evitarlo, es demasiado bueno…. El placer me sube en olitas desde mi sexo hasta la nuca, y estoy empezando a sentir el picorcito… esas cosquillas deliciosas que empiezan dentro de mi vagina, y cada vez que su pene me frota ahí, me produce más y más gustito, hasta que no aguante más y estalle… lo que parece que me va a pasar muy pronto.

-Tóbal… mmmme…. Me voy a correeer…. – susurro con una vocecita, como si me fuera a desmayar, y mi compañero me susurra algo como "adelante", pero no llego a estar segura porque me lo dice jadeando. El placer me gana terreno, empiezo a tiritar y me siento dulcemente vencida cuando por fin el picor se hace insoportable y exploto de placer, se me escapan grititos, le aprieto contra mí, los golpes eléctricos de gusto me recorren todo el cuerpo y hacen que mi vagina se contraiga, abrazando su polla deliciosa que tanto placer me produce, mmmmmmmmmmmmh….. haaaaaaaah, qué bien me siento ahora…

Tóbal está acelerando, verme llegar le excita muchísimo, y tan pronto me repongo un poco del orgasmo, empiezo a moverme yo también, dispuesta a exprimirle, le aprieto dentro de mí mientras le cubro de besos por la cara, saco la lengua llamando a la suya, y él me corresponde y nos acariciamos mutuamente, me encanta lamerle la lengua… su mano en mis nalgas me aprieta y se crispa, sus jadeos se hacen más intensos, y de pronto cierra los ojos y echa hacia atrás la cabeza, temblando…

-Ooooh, sí, mi niño, córrete, mi niño, échamelo todo…. – susurro sin saber bien ni lo que digo, sólo sé que me parece tan hermoso verle cómo goza, mmmh… siento su descarga en su interior, y un poquito se escurre por fuera, me hace cosquillas, y está tan calentito…

Por fin me deslizo boca arriba en la cama, abrazándole contra mi pecho, me siento empapada cuando sale de mí, empapada y caliente, tengo la sensación de que mi coñito suelta vapor, como en una sauna. Recuperamos la respiración lentamente, acariciándonos y besándonos.

-Viola… no sé qué te ha hecho tener sueños húmedos, pero… sea lo que sea, no te prives de tenerlos si tienen este final. – me susurra antes de besarme intensamente, metiéndome la lengua hasta la campanilla…

Mas de Dita

Luna de miel y sorpresas.

Mucho amor propio, y más amor ajeno.

Chantaje matrimonial

Amores que matan, I

Amores que matan, II

Miguel y yo.

Turbulento verano, II (final)

Turbulento verano.

Con piel de cordero

Examen muy caliente

Demasiados secretos

Mentira sobre mentira

Un día en la piscina

Mi propia confesión

Padre, marido y amante, ¿no tienes bastante?

Más especial Navidad

Especial Navidad.

Desnuda para tí

La gata bajo la mesa de madera.

Travesuras en el coche.

Amar es todo un arte.

Entramos en calor avivando la llama

Hermano contra hermano.

La más dulce tortura es el dolor de corazón.

Haciendo niños... literalmente

Melocotón en almíbar

Melocotón sin almíbar.

La chica nueva y el bedel.

Desahogo

Yo ERA uno de esos amantes...

Quiero y no quiero querer.

Intriga en la Universidad.

Dulce castigo

Ocaso conmigo por primera vez

El hambre con las ganas de comer

Carvallo, eres un artista

Nuestra primera pelea.

Picor ardiente

Zorra con suerte

La culpa fue de los vaqueros

Milady y yo

Llámame amo

Lujuria accidental.

Después del funeral

Belén viviente 2

Belén viviente

El helado no sacia mi Sed

Calla y come, Imbécil

Chica a la espera

Mímame, Irina

Lucha libre en el barro

Mordiscos, 2, final.

Mordiscos, 1

Jugando más a los medicos

Jugando a los médicos

Déjame conocerte, Ocaso.

Vacaciones en familia, ¿qué bien....?

Atracción física... y música.

Vacaciones en familia, ¡qué asco!

Ocaso y yo.

La doctora y el coronel

Déjate puesta la gorra.

Nido de Mariposas

Viviendo de la muerte

De fiesta con las gemelas

Hazme tuya

Pueden pasar muchas cosas en una universidad 3 fin

Pueden pasar muchas cosas en una universidad 2

Pueden pasar muchas cosas en una universidad

Señora, sí...señor II

Señora, sí... señor

Móntame, Vaquero

Cuestión de labia

Papá: me he enamorado

Esto otra vez no, por favor...

El regreso de Imbécil

Estudiar puede ser un delito, 2

Estudiar puede ser un delito, 1

Indecisión

Hoy te enseño yo

Me siento solo, Mariposa.

¡Te cacé, Conejito!

Os presento a Dulce

Mala, egoísta, promiscua.... y la quiero.

De la nieve al fuego

Clases calientes en el internado disciplinario

Virgo y la tentación

Nada en común

Feliz Navidad...

...Y próspero Año Nuevo

Grita, que nadie va a oírte

Jugando en el coche (Obsesión II)

z+z = jacuzzi

Obsesión

Corazón positrónico, 1

Corazón positrónico, 2

Mariposa y yo (8)

Me gusta el strip-poker

Mariposa y yo (7)

We are the champiooooooons...

We are the champiooooooons... 2

We are the champiooooooons... 3, final

Charla feminista

Olvídame, amor mío

Aullidos (2, final)

Aullidos (1)

Haciendo cositas en la excursión

Por culpabilidad

Caricias en la ducha

Jugando a ciegas

A nadie le amarga un... Beto

Sexsomnia

Traición marital cruzada (1)

Traición marital cruzada (2) ¿Final....?

Llámame.

La cómplice oscuridad

Se llama antes de entrar.

Recuerdos de cine, en el cine

Recuerdos de cine, ya en casa

Enséñame a bailar

Hechos el uno para el otro

¿Qué sabes hacer en diez minutos....?

Aquí te pillo, aquí te mato, 2

Feliz cumpleaños, Irina

Aquí te pillo, aquí te mato

El catarro del recién casado

El uro y la cobra

Internado disciplinario para chicas (3)

Fantasía en Elm Street

Noche de bodas muy deseada

Noche de bodas muy deseada (2)

Mariposa y yo (6)

No es lo que parece

Mariposa y yo (5)

Mariposa y yo (4)

Mariposa y yo (3)

Una tarde ¿aburrida? en casa de sus padres.

Enseñando al que no sabe

Mariposa y yo (2)

Mariposa y yo (1)

Internado disciplinario para chicas (2)

Internado disciplinario para chicas.

Argumentos incontestables

Mario y Peach

Buenos días, señor Jameson, III (final)

Buenos días, señor Jameson, II

Buenos días, señor Jameson

Cambio de suerte (2)

Cambio de suerte

Celos

¿Qué me ha pasado?

Creciendo para Nazario, final

El regalo de la Diosa del amor

Ditanieves y los siete mariconchitos (1)

Un encuentro sin nombres

CaperuDita Roja

Creciendo para Nazario

El circo nocturno (2)

El circo nocturno (1)

Quizá un poco demasiado...

El colgante del Lobo (08)

El colgante del Lobo (07)

El colgante del Lobo (06)

El colgante del Lobo (05)

El colgante del Lobo (04)

El colgante del Lobo (03)

El colgante del Lobo (02)

El colgante del Lobo (01)