El cielo es tan azul que no me queda la imagen de otra cosa que admirar, lo miro y lo contemplo absorta, me dejo llevar por la quietud del momento, apenas es el mediodía, me encuentro hoy en mi día libre y decidí pasarlo tumbada sobre el césped, pero ¿Cómo llegue aquí?
Dejen les cuento .
Me desperté muy de madrugada, tenía planeado hacer algo muy diferente hoy así que me arregle de una manera muy sencilla, me maquille poco y vine al rancho de mis padrinos, dispuesta a pasar todo el día, con ellos. Disfrute viendo como ordeñan a las vacas, me encanto ver a los becerrillos jugar junto a su madre, brincaban y retostaban felices porque tomaron su leche ... después los ayude a preparar el desayuno, mmmm degustamos unos ricios huevos rancheros, deliciosos y muy picantes, después cada uno fue a hacer sus labores personales, mientras que yo me vine a este lugar solitario, me tumbe bajo la sombra de un árbol, y estoy admirando el cielo.... es tan azul,, tan profundo que solo de verlo me envuelve, me penetra... siento que nada mas me importa, de pronto quiero ser una con el todo
Es una sensación de placer tan cálida Siento como se expande a cada célula de mi cuerpo.... el calor sube de tono, pero no me lastima, no me quema... al contrario me hace sentir un placer inmenso indescriptible....me siento tan relajada, todo mi cuerpo esta flojo, luego me concentro en mis músculos, siento como algunos están tensos muy tensos, pero trato de ver el nudo que los atormenta, unos tejidos están rígidos, los veo los siento, su tensión se debe a tantos nervios y tensiones acumulados en la semana, por el estrés En ese momento, me concentro en el musculo, me convierto en ese musculo y lo destenso, lo aflojo, en ese instante no hay tirantez ni nada que me incomode, lo mismo hago con cada uno de mis músculos y mis nervios,
mi relajación sigue creciendo, sigue acumulándose, ahora me siento parte del césped, siento su frescura, se alimenta a cada mañana del rocío que les regala el amanecer, es su principal alimento... su fuente de vida junto con el sol, el sol, mmmm el sol... estoy envuelta en sus rayos, su calor casi desprende mi alma de mi cuerpo, siento que viajo, que subo, me elevo por los aires, veo a lo lejos el rancho de mis padrinos, su animales, las casitas que están cercanas...
Pero me sigo elevando cada vez mas alto, el calor del sol se hace cada vez más fuerte, más intenso, más agradable, hasta que de pronto me envuelve su calor, su cuerpo solar se une al mío.... me siento penetrada, desavenida con el... son tantas sus llamas, su poder, se cuela a mí misma, se introduce en mi ser, rompiendo mi piel, atravesando mis músculos, ahora se cuela por mis venas, recorriéndome toda,
He dejado de ser yo, he dejado de ser, piel y musculo, ahora me siento parte del fuego, parte del sol....toda me siento estremecer, soy incandescente, soy pasión, soy un huracán, el fuego del sol ha consumido todo lo que había en mí, Es tanto el frenesí que siento, que creo no poder aguantar, ahhhhhhhh creo que no estoy soportando nada y me estoy desvaneciendo, que suave manera de partir, a manos del sol
¿Continuara?
nota: esta es una metáfora completa que lleva guardada candencia