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Secretos Revelados

en Sexo con maduras

«SECRETOS Y SUEÑOS REVELADOS»

Los sueños eróticos de ellos al fin se hacen realidad cuando poseen a aquella escultural y perfecta mujer llena de cualidades, atributos, belleza, y demás secretos revelados.

 

Ella caminaba por una Avenida importante ¿cuál era? No importaba ¿a dónde iba? Mucho menos. Caminaba con su ya clásica posición sensual, con el pecho en alto, la cara enseñando un fino mentón, y con su enorme culo hacia arriba. Llevaba su erótico traje ejecutivo, que se ajustaba a su perfeccionista cuerpo divino. Sus senos eran enormes, voluminosos, perfectamente redondos. Sus piernas eran gruesas acompañadas de una belleza incomparable. Su hermoso cabello castaño claro caía eróticamente sobre sus hombros, un secreto revelado. Su cara era divina en un sin fin de definiciones, sus ojos grandes y claros, y unas pestañas de princesa. Su boca era delgada y sensual, sabrosa a primera vista. Y me quedaría sin palabras al describir su culo. Sabroso a primera vista, erótico, voluminoso: un sin fin de cualidades juntas en una sola visión. Una visión excitante.

Caminaba rumbo a su departamento. Su abrigo de ejecutiva lo llevaba al hombro, y su maletín lo cargaba con un brazo, desnudo por la falta del abrigo. Su minifalda dejaba ver a las indescriptibles y maravillosas piernas que tenía, envueltas en unas excitantes medias y adornadas con unas zapatillas negras. Su cuerpo delgado pero alto, con aquellas descripciones acerca de tantas cualidades y maravillas juntas, hacían, superficialmente, a la mujer perfecta.

Esa mujer perfecta recargaba su cuerpo en la perilla de la puerta cuando entró a su departamento. Una sombra la sorprendió mientras le apuntaba con un arma.

----Cierre la puerta ---ordenó la sombra.

La mujer, sorprendida y atemorizada, cerró lentamente la puerta.

----No se mueva ---advirtió el desconocido –--o le dispararé.

----¿Quién es? ---dijo la mujer, horrorizada.

El desconocido se le acercó a la mujer y la obligó a sentarse en la cama. La mujer trató de adivinar la identidad de la sombra en la oscuridad, y reconoció a uno de sus alumnos de la clase de inglés. El chico sonrió.

----Profesora, vengo a darme un regalo. Un auto regalo

----¿Qué?

La mujer sollozaba. Miró el arma, al sujeto y a la cara de ambición y lujuria que tenía y se imaginó, en cierto sentido, lo peor. Tardó en percatarse que había otras dos sombras, que la miraban de arriba abajo.

----Quítese la ropa ---ordenaron

----¿Qué? ---la mujer sollozó.

----Ahora ---Kite le puso el cañón del arma en sus senos, grandes y bonitos.

La profesora de inglés se empezó a quitar la ropa lentamente y con lágrimas en los ojos, mientras los demás observaban. Kite no dejaba de apuntar.

----No intente nada profesora, o le dispararé.

----¿Qué quieren? ---dijo mientras dejaba su torso desnudo, dejando ver unos hermosos senos.

----Todos tenemos sueños, ¿correcto? Y hay que hacer hasta lo imposible por cumplirlos, y usted en parte nos enseñó eso. Digamos que mis amigos y yo tenemos sueños y venimos a cumplirlos. ---dijo Kite con una sonrisa.

La mujer se desnudó y miró como Moonligth y Moonwalk se desnudaban. Dejaron ver sus escuálidos cuerpos y sus vergas duras y en alto, rojas por la excitación. Kite se sentó en un banco y aún no dejaba de apuntar. Con ayuda, ella se desnudó por completo. Su cuerpo era aún más hermoso despojado de cualquier prenda. Y aunque no dejaba de llorar, lucía un gesto de lividez.

----No sabe cuando la deseamos, profesora---dijo Moonligth mientras le besaba con pasión los senos, mientras Moonwalk se excitaba las piernas de la hermosa profesora. Traten de imaginar el cuadro de una cama con una hermosa mujer y dos hombres que tratan de excitarla.

----Que sea rápido ---ordenó Kite.

Moonligth se le puso encima y como un animal le pasó la lengua y la llenó de besos por todo el cuerpo. Y parecían caricias y besos que mataban. Ella, por naturaleza y temor, abrió las piernas. Notó que sus pezones estaban rojos y que su vagina estaba húmeda: otro secreto revelado.

Moonligth la penetró suavemente, como obedeciendo las órdenes de aberración de ella. No se comportaba como un verdadero violador, aunque lo era. Empezó a subir y a bajar mientras jadeaba del placer que le proporcionaba poseer a aquella belleza, y ella se apretaba la boca para tal vez no soltar algún gemido de la excitación. Mirando el cuadro, Kite se preguntó si en realidad ella sufría en el acto.

Ella al cabo de un rato lo rodeó con sus piernas y se dejó llevar por la pasión. Los sollozos se convirtieron en gemidos y esos en gritos de placer. Le arañaba y le apretaba la espalda del placer que la dominaba, además de ese frenético Moonligth que la cogía con vigor. Ella tuvo su primer orgasmo al moverse como una loca, y gritó como nunca. Y Moonligth todavía no terminaba su trabajo.

Ella, alucinada, se desplomó en la cama, ya que de un momento a otro la penetró de pie, sobre la pared. La volvió a dominar estando ella abierta de piernas y Moonwalk apareció. Mientras Moonligth hacía su enérgico trabajo, Moonwalk apareció en una vista torcida: la miraba parado, con su enorme trozo en su cara.

----Cómetelo –--ordenó Moonwalk.

Ella titubeó pero lentamente se lo introdujo en la boca. Moonwalk lo empezó a disfrutar, como aquella diva ---y al parecer ahora ninfa ---hacía una buena y energética mamada. Y tal vez Moonwalk no estaba muy bien proporcionado, pero su trozo en la boca de ella servía para omitir los fuertes sonidos de placer que ella daba mientras Moonligth aún la poseía.

Él estaba a punto de acabar cuando se separó. Obedeciendo órdenes, ella se puso en la posición del «perrito» mientras daba una súper mamada al jadeando Moonwalk. Ella pasaba su lengua por toda el área, dejando brillar las pelotas del afortunado por la saliva. Se lo metió todo a la boca mientras con su lengua y labios hacían un estupendo trabajo. Con la mano en la base, y su boca recorriéndolo todo, y con un erótico movimiento en su cabeza de atrás hacia delante, hacían una maravilla de mamada.

De pronto, algo la embistió por detrás. Un recuperado Moonligth la penetró por su cuevita, dulce y húmeda, y ella se volvió loca. El placer era mutuo y ella contuvo un segundo y tercer orgasmo. Las embestidas traseras eran tremendas y los tres jadeaban del placer. Moonwalk no avisó cuando se derramó. Ella escupió el poco semen que no logró tragar pero más potentes chorros de semen la bañaron en su cara, sorprendiéndola. Nunca había visto tanta leche saliendo al mismo tiempo. Sus senos, su pecho, su cara, sus hombros y parte de su cabello, terminaron totalmente bañados de rico semen joven.

Moonligth la empezó a tomar fuertemente por las caderas y la embestía con muchísima más fuerza. Ella gritaba, pidió que pararan, que ya no aguantaba más, pero él no cesó, creando una excitante escena. Ella empezó a sollozar como en un principio, pero ahora era por una palabra lujuriosa y deliciosamente de practicar: placer.

El supuesto martirio de ella terminó cuando Moonligth descargó sus «sueños». Terminó dentro de ella, y ella se desplomó alucinada en la cama, agotada. Moonligth se dejó caer en el suelo, notablemente satisfecho. Ella aún gemía, tal vez todavía sentía el placer que le daba Moonligth mientras la cogía por detrás, o el sabor de la verga de Moonwalk. Kite pasó el arma a Moonligth.

Kite entró desnudo a la cama y le dio un buen sexo oral. Ella lucía agotada, pero lo empezó a disfrutar. Cuando tuvo un casi imposible cuarto orgasmo, ella demostró su gratitud y de la misma manera que la hizo gozar, ahora ella lo hizo gozar a él, dándola una salvaje mamada.

----Tiene usted un diez de calificación en el área de labores en la cama, profesora ---dijo Kite mientras ponía los ojos en blanco, muerto del placer que esa boquita le daba.

Ella a veces se lo sacaba todo y le besaba en las ingles, en las pelotas, pasaba su lengua por todas partes.

----Me encanta tu vara Kite, me vuelven loca los tres ---se lo volvió a meter todo y hacer esa estupenda, salvaje y sabrosa mamada.

----Mámalo todo, chúpalo bien, que te va a entrar por el culo ---el casi se viene ---no te vaya a doler…

Y como así fue, ella se recargó en la cabecera de la cama mientras levantaba su enorme y delicioso culo, dándoselo a un afortunado Kite, que lo acarició y pasó lengua hasta por las sombras. Ella gemía gracias a las caricias orales de Kite.

Con su lengua, humedeció por completo aquel bonito orificio y sin pensarlo siquiera, la penetró por completo; sus pelotas toparon con su vagina y sus manos fuertemente la jalaba hacía él. Ella soltó un grito ensordecedor lleno de placer y dolor, pero disfrutó las siguientes embestidas tan salvajes y lujuriosas que Kite le daba. Ella tuvo que morder algo para no dejar ir todo el placer en gemidos, y arañaba las paredes. Kite gemía y jadeaba como un animal, los dos gemían y jadeaban como animales. Ella hacía para atrás su enorme culo mientras él la embestía con salvajismo. La tomó de las tetas, y con violencia la jaló hacia así. El placer llegó a la cima de la montaña de pasiones y él de deslechó dentro de ella, y ella se volvió aún más loca.

----Oh, sí Kite, tu lechita. Calientita y rica…Oh Kite, mi amor…

Kite se desplomó junto con ella, encima de ella, mientras aún jadeaban. Se les reunieron los otros dos espectadores y que disfrutaron del placer que les dio esa preciosa ninfa, llena de cualidades y tributos. Y así, un secreto revelado lució entre una noche llena de «sueños realizados»

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